Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

➸ 4


> P.O.V. Natalia <

- ¿Cuándo vienen los embajadores y en qué orden? - exijo al empleado.

- ¿Embajadores? No sé a qué te refieres hermosa... Solo sé que en dos días vienen parejas de distintos países, nada más...

- ¿Dos días? Me estás dando información errónea.

- No preciosa, no. Trabajo aquí... Sé que la cuarta está reservada para toda la gente que va a entrar... Sé todo, todo todito.

Sin venir a cuento se empieza a reír solo y repite "Todo todito". No me puede servir de mucho más este tipo. Le dejo tirado ahí, hablando solo y riendo en bajo. Salgo del baño y me apoyo en el pasillo; no puede ser que me hayan tendido una trampa, dos días son menos horas de preparación, menos tiempo de éxito; y si el guarda no me ha mentido, sé donde se alojan los embajadores. Aunque es menos tiempo de que la KGB se dé cuenta de mi traición y manden a alguien para matarme. He cubierto bien mis movimientos, siguen confiando en mí.

- No era tu tipo - oigo una voz masculina a mi derecha. Es el rubio del bar, quien me mira muy divertido. Mirándole fijamente es bastante atractivo, de profundos ojos oscuros y sonrisa blanca como la nieve. Es físicamente fuerte, pero sin llegar a tener demasiado músculo; posiblemente es un guaperas y poco más. De una forma poco sutil me enseña la tarjeta de su habitación: 071, en el cuarto piso, lo que necesito. Me acomodo y vuelvo a mi papel de mujer coqueta y tonta.

- ¿Y quién es mi tipo?

Pregunto acercándome a él, al mismo tiempo me muerdo el labio inferior. Él traga saliva y ríe nervioso. A los dos minutos estamos dentro del ascensor, esperando a llegar a su habitación en la cuarta planta, besándonos sin parar. Qué fácil es atrapar a un hombre.

Llegamos a su puerta y la abre con prisa; entro yo y después él. Se quita el jersey, dejando ver una camisa gris bastante elegante y se lanza a besarme; nos llevo hasta la silla y me siento. Le mando a desnudarse para mí y así lo hace: en cuanto se quita la camisa veo dos fundas de pistola a sus costados.

- No te preocupes por esto - dice al ver que mi mirada se paraba en sus armas - Soy guardaespaldas, pero hasta pasado mañana no tengo que proteger a nadie.

- ¿A quién proteges en dos días? - pregunto inocentemente mientras él se quita los zapatos y los pantalones.

- A unos alemanes que vienen al hotel, por lo visto hay una reunión de varios países.

Me cuenta que a lo largo de esta semana vienen por parejas pero que él solo sabe a quién protege y ningún país más por seguridad. Menos mal que no lo sabe porque seguro que me lo diría solo por conseguir un polvo.

Se termina de desnudar y sus manos buscan mi cuerpo con urgencia. Estoy valorando seriamente si seguir con esto; hasta dentro de dos días no puedo cumplir mi objetivo. No tengo nada que perder y desestresarme por un rato nunca viene mal. Además necesito estudiar este piso, en cuanto se duerma puedo irme. Unos labios por mi escote me devuelven a realidad de la situación.

Me empiezo a quitar el vestido y él me ayuda desesperado. Decido tomar el control de la acción y le tiro en la cama, siguiéndole yo. Empieza a masajearme las piernas, subiendo poco a poco hasta llegar a la lencería negra de encaje, presta especial atención en mi culo y partes sensibles y se toma su tiempo antes de quitarme la última prenda de ropa que llevo. Pobre iluso, cree que me está haciendo sufrir por la espera, no sabe lo que se le viene encima.

Antes de pueda seguir intentando jugar conmigo, comienzo a moverme lentamente de adelante atrás levemente sobre sus partes sensibles, haciéndole sufrir a él y compruebo en su cara que se muere de impaciencia. Su respiración se entrecorta y su espalda se arquea al notar que me muevo más lento todavía. No aguanta más y se incorpora para besarme urgentemente.

Me rodea con sus brazos y nos da la vuelta en la cama. Apoya su peso en sus brazos y uno de ellos empieza a hacer un trayecto desde mi cuello, bajando lentamente por mi pecho y vientre, hasta llegar a mi zona sur. No espera más y hunde sus dedos en mí, consiguiendo hacerme gemir. Sonríe triunfante y los mueve con energía, como se nota que maneja armas.

Enrosco mis piernas en sus caderas y lo interpreta como que no puedo más. Se coloca encima de mí y cae con fuerza entre mis piernas, hundiéndonos de placer a ambos.


> P.O.V. Clint <

Pensaba que correr por el desierto iba a ser horrible, me equivoqué, es matador. Mi camiseta gris ahora parece negra por todo el sudor que desprendo. No sé si el sombrero me sirve de algo, pero prefiero no quitármelo. A pesar de que he madrugado para correr sin tanto calor, el sol me está matando poco a poco.

Diviso la casa franca de S.H.I.E.L.D. y la rodeo; ahora devuelta al hotel a seguir recopilando información. Este año sin entrenamiento se nota demasiado en mi cuerpo; mi masa muscular ha descendido por el poco alimento que ingiero y el demasiado alcohol que metía en mi cuerpo. Hill me pasó una dieta para engordar y recuperar fuerzas, pero necesito compensarlo con mucho ejercicio que mata. Si a eso le añadimos el sindroma de abstinencia que tengo por no probar una gota de alcohol en varios días se puede decir que no estoy en mis mejores momentos. Tengo que estar al cien por cien para acabar con la misión -o que acaben conmigo- y así poder descansar.

Un ruido a mi alrededor me distrae. Estudio el entorno pero no veo nada, solo la casa y arena. No hay sitio posible de escondite. Recuerdo al italiano, ¿quién era y qué quería en la casa franca? Dudo que vuelva a verle, aunque algo en mí me dice que es importante, que su presencia sigue por aquí. Dijo que buscábamos lo mismo... No creo que sea un enemigo, podría haberme matado pero no lo hizo, ¿por qué? Tampoco puedo denominarle amigo. ¿Quién mierdas eres?

Llego al hotel para ducharme; prácticamente todos están durmiendo a excepción de los trabajadores, quienes me saludan con energía. Me informan que han tenido un problema con el ascensor y que tengo que subir andando. Perfecto.

Pienso seriamente en no subir a mi habitación pero necesito una ducha. Empiezo a subir las escaleras y consigo llegar al primer piso sin morir. Descanso momentáneamente hasta que oigo las puertas del ascensor abrirse. Lo miro extrañado, ¿lo habrán arreglado ya? Salen las mismas personas que estaban el primer día que entré al hotel, el tal señor Iabarazzi creo. Me escondo y activo el amplificador de sonido para oír de que está hablando con un tono muy exasperado.

- ¡Has llegado tarde por una mujer! ¡¿Te das cuenta de qué te estás jugando tu puesto de trabajo?! Me da igual que te hayas dormido, para eso está el despertador.

- Lo siento señor Iabarazzi, nunca volverá a pasar.

- Eso espero, mañana empiezan a venir los embajadores. No te he contratado por tu cara bonita, Jordan. No vuelvas a fallarnos.

Caminan hacia mi posición y me meto a las escaleras de nuevo. ¿Cómo que mañana vienen? Se me acaban de evaporar varios días de preparación física. Menos mal que el arco nunca ha sido un problema. Estoy seguro que Natalia ya lo sabe de una manera u otra. No puedo creer que esto me haya pillado de sorpresa, debería haber investigado por mi cuenta mucho más y no solo fiarme de internet y mi instinto.

Están en juego varias vidas, por favor Clint, concéntrate. Solo tienes que matar a la viuda y todo habrá acabado. ¿Podré matarla? No pude matar al primer ministro griego... No soy quien para decidir quitar la vida o no de alguien, por muchas cosas reprochables e imperdonables que haya hecho. Mi ética me lo prohíbe. Pero por eso mismo mataron a Laura, porque yo desobedecí una orden directa de mi director y no maté a un corrupto que se lo merecía.

Lo prioritario ahora es saber quiénes vienen mañana y cuando, necesito piratear la red del hotel. Creo haber visto un ordenador en recepción; pero no puedo bajar así, sospecharían. Subo rápido hasta mi habitación, me ducho, me cambio y cojo lo necesario para robar información. Bajo casi corriendo hasta el bajo del hotel. Saludo cordialmente y pido usar el ordenador, me dan la clave y su ubicación.

Voy con total normalidad hasta el aparato electrónico, me siento y saco sin ser visto el pendrive que estaba el maletín. Lo enchufo y espero paciente; los cortafuegos del hotel son bastante decentes, pero no son rival para los ingenieros de S.H.I.E.L.D. Al minuto estoy dentro de la red como un empleado más.

Accedo al registro de reservas y compruebo que toda la cuarta planta está ocupada; pero no aparecen nombres como en las demás, sino nombres de países: España, Alemania, Lituania, Suecia... Tampoco veo si están ahora mismo están alojados o no, la habitación está en negro.

Cliqueo dos veces y me sale una advertencia "Acceso denegado. Usuario no autorizado para esta información. Introduzca datos y contraseña". Bufo, esperando a que el pendrive haga su magia; nada ocurre. Deben de haber mejorada la seguridad en esta zona. Tampoco puedo estar infinitamente aquí, sabrán que les están hackeando en menos de dos minutos.

Me restriego la cara con las manos buscando unasolución. Apoyo la frente en el borde de la mesa sin saber qué hacer. Miro elsuelo e identifico un papel detrás de la pata, lo cojo curioso: "USU:TREBRAPRITROBRU // CON: 9528461370" No puede ser, es imposible que sean los datosque necesito. Los tecleo rápidamente y accedo a todo, pero al momento lasalarmas saltan en la pantalla. Tengo que salir antes de que sepan que estánsiendo pirateados. Arranco el USB y compruebo que nadie me vio: solo hay unachica detrás de una mesa alta, la identifico como la chica de raza árabe que viel primer día. ¿Me ayudaría ella? Sin pensármelo dos veces salgo de allí sinmás. Tengo demasiadas cosas en la cabeza como para preocuparme de estas cosas.



HOLAAA, nuevo cap e.e Espero que os guste tanto como a mí... Omitid la parte un poco subida de tono, no se me da bien escribir esas cosas (sorrynotsorry) pero es necesario en la historia ^^ (estoy valorando si hacer una escena hot Clintasha, ya me direís que os parece)

Os love y nos leemos - Ari

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro