IV
-12:30 A.M -
- Narra Danny -
Estábamos perdidos en otro pueblo de esos, después de haber matado al Sr.Business, que no estoy seguro si esté vivo o no, pero hay probabilidades, si lo encontramos vivo, será nuestro fin.
- ¡Eh mirad, una salida- -dijo mi hermana señalando al final de el pueblo-
- ¡Ya voy! -dije mientras les seguía-
Tenía remordimiento de lo que había ocurrido anteriormente, pero, ya sabía que no podría ir hacia atrás y decirle a Tiger que nos vayamos.
- ¡Despierta tío! ¿Qué cojones te pasa? -me dijo Tiger ya muy cabreado.-
- Nada, estoy bien. -Dije cabizbajo-
- Muy bien. -Dijo Tiger- sigamos.
Me volví a ahogar en mis pensamientos, pues quería arrepentirme de haber matado a ese pobre señor. En eso, de repente me encontré con un vagabundo arrastrándose por el suelo, era el único sobreviviente del pueblo.
- M-muchaa-cho... Ay- -tosía- dme! -volvió a toser, esta vez sangre-
- ¿Señor, está bien? -me acerqué a él y le di la mano-
- Escucha, h-h-hijo, ten cuidado con unos...
En ese momento vino el estúpido de Tiger jodiéndola de nuevo. Esta vez apuntando con un arma al vagabundo.
- ALÉJATE DE ÉL.
- Oye cálmate Tiger. -Me giré- Tan solo es un pobre vagabundo, no creo que nos pueda hacer algo, por una vez de todas, ten un poco de respeto, compañero. Además si estuviera infectado, ya nos habría mordido, asi que baja ese ar-
No me dio tiempo a acabar la frase, pues el vagabundo estaba pálido y me agarró con el brazo del cuello e intentó morderme en el cuello. En ese momento Tiger le disparó una vez a la cabeza y murió. Él tiene armas infinitamente mejores que las nuestras.
-Oh, por Dios.
- Te lo estaba diciendo.
- Pero no tendrías por qué haber venido a la bulla aquí con un puto arma de la 2° guerra mundial.
- Mejor nos vamos de aquí, me entran ganas de con las tonterías que dices, dispararte.
Yo simplemente seguí a Tiger, y andemos un poco más.
- Esa casa parece ser muy rara, esto han tardado años en hacerla. En esas épocas. -Me contó mi hermana-
- No es una casa, listilla, es un establecimiento, pero no sé que tipo. -Dijo el gilipollas-
- Debe de ser un museo. -Repliqué-
- Bien, pues ya que te atreves a decir que es un museo, por qué cojones no entras y lo descubres, ¿eh? Andando. -Tiger se encontraba cabreado, sin razón algunas
- De acuerdo. -Entré, y la puerta se cerró a mi espaldas bruscamente-
Esa construcción era inmensa, totalmente. perfectamente podíamos meter a un puñado de vacas, como Tiger.
Lo primero que vi, lo primero que seguí, una escalera de madera, no muy estable en forma de caracol. Arriba del todo se formaba un gran pasillo, estaba en el desván.
Escuchaba pasos, pesados. Por las tablas caminando, a tal punto de que los pasos se acercaron a una habitación, de aquel extraño desván. No había luz, no podía defenderme, si grito no van a escucharme, y aunque no pueda defenderme, saqué la pistola.
- ¿QUIÉN ANDA AHÍ? -Me dijo el ser sin rostro-
Al menos hablaba en castellano, no balbuceaba como esos zombies, no estaba seguro si era un secuaz de Tiger o un infectado.
El individuo abrió la puerta y se acercó a mi, pero no disparé.
- ¡ALTO AHÍ! - Sentí un revólver apuntándome -
Dio la casualidad de que no llegó a volarme la cabeza, la luz de una ventana rota finalmente chocó con la habitación entera. Yo simplemente, apunté también a la cabeza del aquel ser y di un par de pasos hacia atrás.
- ¿John? - Pude ver la cara de ese individuo apunto de apretar el gatillo -
- ¿Danny? - Perfectamente me reconoció en menos de lo que Tiger tarda en aparecer - Oh, tío, ven aquí, joder...
No tardó en abrazarme.
Él era John.
Un ex-compañero de clase.
El tiene 19 años, lo conocí gracias a que su maestra faltó en clase. Y tuvieron que llevar a los alumnos a la nuestra por algunos segundos. El se sentó al lado mía en clase.
- ¡Casi me vuelas la cabeza, Melón!
En ese momento recordé todo lo que hizo por mi y yo por él.
-FLASHBACK-
Hace tiempo, lo conocí en el día que faltó su debida profesora.
- Siéntense donde quieran. - Dijo mi profesora después de presentarlos. -
En ese momento, vi que un niño de 16 años, justo cuando yo tenía 13 años, de sentó al lado mía. Al principio tenía miedo, era un niño robusto, con muy malas pintas, y creí que me haría la vida imposible.
- H-hola. - Dije cortandome por miedo -
- Hola niño. Se te ve muy preocupado, ¿qué te ocurre?
- N-na-nada es solo que..... - Me cortó -
- No me cuentes. Se a lo que te refieres. Todo el mundo me rechaza.
En ese momento vi la tristeza que se le plantaba en los ojos. Y estaba seguro que si lloraba él, iba a ser imposible de calmarlo, así que aproveché para decirle.
- No te preocupes, a mi igual, todo y todos me rechazan, ¿sabes qué? No lo garantizo del todo, pero estoy seguro e que tú y yo nos vamos a llevar bien.
Vi como la tristeza en su cara iba desapareciendo cada vez que le contaba algo. Entonces, partiendo de ahí, nos hicimos los mejores "amigos".
Cuando los que hacían Bullying pasaban por su lado y le hacían daño, lo primero que hacía era levantarme y recibir yo los golpes.
Llegó un punto en el cual los que hacen Bullying, nos vinieron con armas, y nos amenazaron con no contárselo a nadie. Unos con navaja, otros con escopetas, etc.
Y efectivamente, a los del colegio les daba igual, la sociedad en aquellos tiempos era una mierda. Si te pegaban un tiro, ¡qué más da! Al hospital y arreglado. Así que un día, nos pusimos en contra de todos, y justo cuando ibamos a perder la vida, le dije a John que me ayudara a saltar la valla, y nos la saltamos. El me aupó mientras usaban, los que nos hacían Bullying, fuego. Sí, fuego de armas contra niños que no tienen ni puta idea ni de esgrima. Entonces, John me aupó, salté, me agarré por detrás a la valla y ayudé a John a subir dándole la mano.
Saltamos de gran altura, pero gracias a Dios, el sabía parkour y me enseñó como no partirme las piernas. Nos choquemos el puño, y nos fuimos a casa, sabiendo que nuestros padres nos iban a matar, literal.
Nos dieron una buena regañina, pero nos quedamos felices, de haber unido fuerzas por primera vez, y no haber muerto.
Al día siguiente, nos llegó una carta del instituto diciéndonos que no volveremos jamás, los que hacen Bullying al parecer se inventaron algo raro.
-FIN DEL FLASHBACK-
- 15:18 P.M -
-Narra Danny-
- ¡Casi me vuelas la cabeza melón!
- ¡Lo siento, fue sin querer!
- Ya, ya, bueno ahora que ha pasado todo, hablemos un poco sobre....-
Fui cortado por una bomba que estalló en el edificio y lo tambaleó un poco, a su vez, se escuchaban disparos y hélices de helicóptero.
- Joder tenemos que irnos. -Dije buscando la salida-
- Busca, joder, busca. -Dijo mi ex-compañero de clase-
- ¡Lo estoy haciendo! -Dije apartando palos que bloqueaban puertas-
- ¡Ninguna funciona, tendremos que salir por las escaleras! -Replicó John-
- ¿Estás chalado? -Dije nervioso-
Bajemos las escaleras en forma de caracol, y nos topamos con el suelo en llamas.
- ¡JODER, ESTÁ EN LLAMAS, SIGUE BUSCANDO ALGO! -Dijo ya John apunto de explotar.-
- ¡Que no hay nada, cojones! -Dije de nuevo intentando hacer lo de antes, que resultó ser nulo de nuevo.-
- Bien saldremos por la ventana de la habitación que nos encontramos anteriormente.
- ¿Estás loco? ¡No sé nada de parkour! Me voy a partir la espalda y las dos costillas.
John me agarró de la mano y me dijo:
- Hagámoslo una vez más, recuerda cuando eramos pequeños, no pasó nada, si unimos fuerzas, somos imparables, así que sígueme.
Yo simplemente asentí y fuimos a la habitación abierta, donde nos vimos, le pegamos un hachazo con el hombro a la puerta, nos agarramos de la mano y nos tiramos.
Afortunadamente, no ocurrió nada, vimos el edificio en llamas y que Tiger estaba inmovilizado, al igual que Lyma.
Detrás nuestra, vinieron dos guardias de no sabemos quien y nos dejaron inconscientes con una tabla.
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