Capítulo 8: Tus Mentiras
—Todo empezó años atrás...
Ink
Yo era un humilde pintor de un AU llamado Inktale. —Acabas de empezar a hablar ya te noto nervioso. Como si no supieras lo que dices. Pintor... ¿Qué me escondes?— Yo vivía feliz con mis amigos y mi hermano. Mi vida era como la de cualquier otro Sans.
Pero un día todo aquello se derrumbó, literalmente.
Mi universo fue destruido a causa de una serie de problemas internos de los que nadie sabía nada, lo último que oí fue a Alphys diciendo que había algo que no iba bien, y luego...
Desperté en un espacio de colores cálidos, completamente vacío. —No... Ni siquiera es sobre esto sobre lo que tenías que mentir y lo estás haciendo— Allí descubrí los AU's. Me sentía solo, así que empecé a observarlos.
Con el tiempo mi creatividad se disparó, y empecé a dibujar para llenar aquel espacio vacío.
Entonces un creador vio mis dibujos y se presentó ante mí.
Los creadores no viven en el mismo plano que nosotros, normalmente no podemos comunicarnos entre nosotros, y funciona como un espejo de doble cara, ellos pueden vernos pero nosotros no, sin embargo ese creador en concreto pudo hablarme.
Je, digo creador, pero realmente ella es una mujer. No entendía porque ella podía hablar conmigo, pero me lo explicó.
Se presentó oficialmente como Comyet y me dijo que ella era mi creadora.
Yo... No entendía nada.
Pero poco a poco empecé a ayudar a más gente como ella. Me contó muchas cosas, ¿sabes? Al final acabé entendiendo un poco mejor todo, pero no lo suficiente como para explicártelo, lo siento... —Ink, no me importa, ve al grano— Desde entonces todo era paz. Ya había muchos universos y estaba extremadamente orgulloso del talento de todos los creadores. Eran personas increíbles, amables, pacifistas y amaban a sus creaciones. Les daban felicidad, armonía...
Pero luego llegó ella —Aquí empieza lo interesante—, la autoproclamada Reina de las Pinturas...
Era la primera vez que me topaba con una creadora tan CRUEL, y yo, como un idiota, me presenté como siempre lo hacía.
Me miró con una sonrisa cínica y se puso manos a la obra.
Su primera creación fue Geno, tu tío, una historia increíblemente cruel ante la que yo quedé pasmado.
Y luego... Luego vino Error.
Nuestra relación nunca fue perfecta, pero al principio tampoco nos llevábamos mal.
No hablábamos, eso era todo.
No éramos grandes amigos ni tampoco enemigos.
Éramos solo... Conocidos. —¿En serio?— Y supongo que nuestra relación no necesitaba ir más allá, estábamos bien como estábamos.
Aunque un día empezamos a conocernos mejor y algo me gustó de él.
Supongo que a partir de entonces él empezó a fijarse más en mí y yo más en él. Pero ninguno de los dos teníamos el valor de decirle nada al otro.
Al final fue todo muy... Raro.
Y acabamos juntos, por decirlo así.
Luego descubrimos que nuestros poderes podían mezclarse y decidimos tener a PJ.
A Error no le caía especialmente bien pero... Bueno, tampoco mal.
Éramos una familia rara, pero feliz.
Todo se torció el día que tú nacistes.
Error se marchó para no volver a aparecer.
Y luego PJ hizo lo mismo.
La desaparición de ambos me dolió tanto...
Y luego me di cuenta de que tú también te habías ido...
Estaba solo, de nuevo —¿Sabes que es lo peor? Que esa última frase ha sido más real por sí sola que toda la maraña de engaños que acabas de soltarme
Ink
No lo entiendo.
No sé porque, pero no lo entiendo.
Nada de lo que has dicho tiene sentido, es como una gran maraña de hilos que se desunen en algún punto, la cuestión es saber cuando. Y tú lo has dejado tan claro...
Fue Error.
Error es el nombre que corta los hilos de esta maraña de mentiras, junto a ese nombre todos los hilos se parten y empiezan a aflorar las inconcluencias.
Has fallado en tus malditas mentiras en un intento de crear un cuento de hadas que no existe, ¿verdad?
Por favor, conozco demasiado bien esa alteración de la realidad.
Pero a pesar de eso asiento.
Asiento como si aceptase todo lo que me acabas de decir y a causa de ello suspira y me abrazas suavemente.
Pero no puedo tomarte en serio, no después de esta historia mal narrada.
—¿Puedo dormir contigo? —No lo sé, tengo miedo de lo que puedas llegar a hacer si te digo que sí. Aunque es raro que esa pregunta sea de un padre a su hijo y no al revés.
—Claro. —Creo que es lo mejor. Yo también estoy asustado de todos modos.
Me recuesto en la cama y él se tumba al lado, nos cubre con la sábana y cierra las cuencas, agarrándome y abrazándome de nuevo. Pero no me resisto y dejo que me apriete contra su cálido pecho. Por un momento, una sensación increíble me invade. Me siento protegido por él, me siento tan feliz de poder estar con alguien tan familiar...
¿Es esto lo que todo niño siente cuando los brazos de sus progenitores lo rodean?
—Gracias... Papá
Una sonrisa se esboza en su rostro y yo me acomodo en su pecho. Me gusta esta sensación de calor y comodidad que, gracias a él, estoy experimentando, esto que es amor fraternal y no de otro tipo. Y por más que la sábana que nos cubre a ambos esté tejida de mentiras y lágrimas del color del arcoiris yo sé, muy en el fondo sé, que la persona que ahora me permite acurrucarme en su pecho es mucho más que lo que ese bulto bajo la sábana aparenta, que hay un enorme colchón, mugriento y desolado, creado con la verdad que tus palabras no dicen. Tal vez fuera mejor acostarse sobre la sábana y pensar que algún día ese tal Error vuelva y lo comprenda todo, por alguna razón creo que él es la cerradura de la puerta al corazón de Ink y sus palabras, la llave.
***
Gradient el poeta le llamaron :v
Ok, no me preguntéis por qué pasé de una narración corta y concluyente como la de Ink, a una especie de versos en prosa. O iba muy drogada ese día, o muy inspirada :v
~Umbra03
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro