Capitulo 9
He llamado a Junnie para que fuera a buscar mis cosas a casa y me las trajera, pero me dijo que no.
¡Me dijo que no!
¿Cómo se supone que voy a estar tantos días sin todas mis prendas de ropa?
Aunque a decir verdad para qué rayos debería traer aquí mis mejores prendas, si solo estaré aquí todo el día. Apenas y podré salir a hacer las compras para la alacena.
Esto es realmente una cárcel. Yo tengo razón y los demás están equivocados.
Sigo demasiado molesto.
Ahora Hoseok está en la casa haciéndole unos masajes en las piernas a Taehyung y por suerte me he librado de él como por lo menos una hora entera.
— ¡Kookito! — me llama Hoseok desde el living.
Mierda... creía que me había librado de esos dos.
—¿Qué quieres? — le digo asomando la cabeza desde el cuarto.
— Te necesito aquí. Ven, ayuda un poco.
Contengo un gruñido en la garganta y salgo a regañadientes del cuarto. Me acerco a ellos. Hoseok tiene el pantalón del pijama de Taehyung arremangado hasta la rodilla.
Sus piernas están llenas de cicatrices.
Suspiro antes de hablar.
— ¿Qué quieres que haga?
Hoseok me mira. Está sentado en un almohadón y le está dando un masaje a la pierna derecha de Tae.
— Necesito que le levantes un poco la pierna, necesito las dos manos para poder hacerle un masaje bien. Tomalo desde arriba de la rodilla, no lo alces mucho, solo un poquito.
Me agacho y le tomo la pierna desde arriba de la rodilla. Hoseok puede hacerle el masaje correctamente.
— ¿Y por qué no te sientas en una silla y le estiras la pierna en vez de pedirme a mí que se la alce?
— Por que si estiro mi pierna me duele desde arriba de la rodilla. — contesta Taehyung — mis muslos todavía funcionan — y me muestra que puede alzar su muslo cinco centímetros, pero como la mitad de la pierna le pesa vuelve a bajarlo — solo puedo estirar mis piernas si estoy en la cama o una superficie blanda.
— ¿Y entonces porqué no lo pones en la cama y le das un masaje ahí?
Hoseok suspira y deja de darle un masaje a Taehyung. Me mira y me sostiene la mirada por varios segundos.
— ¿Qué te ocurre, Jungkook?
— Deberías saber lo que me ocurre.
Hoseok mira a Taehyung. Luego me mira a mi.
—Si no quieres hacer este trabajo deberías irte — me dice Hoseok volviendo a masajear la pierna de Taehyung. — Hay que ser paciente y comprensivo.
— No se diga más.
Dejo a Taehyung y vuelvo a la habitación por mis cosas. Me llevo la mochila y estoy a punto de salir del departamento cuando Hoseok me agarra del brazo, tan fuerte que quiero soltarme.
— El señor Kim me contó que tus padres le advirtieron que eras un malcriado, ¿pero sabes qué? no quise creerle. Y ahora no puedo creer que seas un engreído y que ni siquiera sepas detectar el sarcasmo ¿Cómo te vas a ir así sin más y lo vas a dejar? — pregunta con los dientes apretados. Se acerca un poco a mi y susurra —¿Acaso te funcionan mal los ojos? ¿No ves cómo se encuentra? ¡No te das cuenta que necesita a un amigo? No alguien que lo cuide, un amigo, Jungkook.
— Yo no voy a ser su amigo. No lo conozco. Aparte... ¿acaso él no tiene amigos? Era modelo, de seguro estaba rodeado de mucha gente.
— Su mejor amigo estaba en el avión. — Hoseok niega con la cabeza mirando hacia abajo — Jimin era su único amigo, las demás personas solo se le acercaban por dinero, al igual que su novia. ¿Entiendes que Taehyung no tiene a nadie? Si se muere por una depresión será un gran problema para los que lo conocemos.
— Si se muere no es mi problema. Él no es mi vida, lo conozco hace exactamente un día y antes ni siquiera sabía de su existencia. De hecho, no sé de la existencia de ningún modelo, yo no me muevo por esos ámbitos.
—¿Cómo puedes decir algo así? — Hoseok no deja de mirarme a los ojos. — ¿Cómo puede ser que seas tan... tan...?
— ¿Tan qué? ¿Qué tiene que solo me preocupe por mi vida? ¿Por qué tengo que preocuparme por algún más?
— ¿Y si esto te pasara a ti?
— Preferiría mil veces suicidarme antes que tener una vida de mierda en donde deba molestar a tantas personas. ¿No lo crees lógico? — susurro cruzándome de brazos. — ¿Qué me tengan que vestir y dar de comer? No gracias, si no puedo hacer esas cosas simples prefiero no estar para vivirlo.
Hoseok suspira a lo grande y me mira con enojo.
— Bien. Es domingo, vete a una fiesta o has lo que quieras. — Hoseok me quita la mochila — vete, vamos, Jungkook. Te quiero aquí antes de las doce de la noche.
No hace falta que diga más nada. Salgo del departamento tomando las llaves y bajo del edifico.
Saco mi celular y llamo a Junnie. Tengo que marcarle más de tres veces porque no me contesta.
— Hey, Jun — le digo cuando por fin me toma la llamada — ¿Qué te parece si vamos a una fiesta? Tengo hasta las doce.
— No me digas que dejaste a Taehyung solo. — dice enojado.
— Está con el médico que viene aquí varias veces al día. ¿Vamos a la fiesta? Taehyung estará con él varias horas.
— Prefiero no ir ¿sabes? — dice irónico — ¿Ayer le diste de comer?
— Le di unos sándwiches.
— ¡¿Unos sándwiches?! ¿te volviste loco?
— ¿Por qué?
— Comer unos sándwiches no lo va a llenar. ¿Eres imbécil? Una persona como él debería mantenerse saludable, no comer unos sándwiches, Jungkook. Debes darle proteínas y todas esas cosas. ¡unos sándwiches! — repite en voz alta y debo alejar el celular de mi oído — Jungkook... ¿Por que no dejas de ser un imbécil y haces bien tu trabajo?
— ¿Cuántas veces tendré que repetir que estar ahí es una cárcel? ¿Por qué no vienes tú y te encargas de él, mmm?
—Jungkook, a diferencia de ti yo tengo trabajo que hacer con la agencia de música, estoy de aquí para allá todo el tiempo menos los fines de semana. Estoy ocupado y tengo obligaciones como el adulto en el que me estoy convirtiendo. ¿Cómo puede ser que yo tenga dos años menos que tú y sea más responsable que tú con veintidós años? Deberías madurar de una vez.
—Soy maduro.
— No. No lo eres. Eres un tonto. Eres tan...
Pero YeonJun se corta a la mitad de la frese, solo oigo su respiración molesta al otro lado.
— ¿Tan qué?
— Tan mierda.
Y sin decirme más nada, me corta la llamada.
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