— Te importa si me siento aquí?— Chaeyoung le pregunta a Mina con la sonrisa más encantadora jamás inventada. Mina la mira. Haewon tiene razón, se convierte en un tigrecito cuando sonríe. — ¿Minari?— Chaeyoung preguntó y de repente los ojos de todos le miraron. Podía sentir el calor de su mejilla.

¡Sí!

— No, para nada— le dijo Mina y Chaeyoung finalmente toma asiento. — Tienes buen aspecto, por cierto — le dijo Chaeyoung a Mina. Mina no sabe si Chaeyoung le ha oído o le ha leído la mente.

— Gracias— fue todo lo que pudo decir. Ahora mismo es demasiado tímida. Jeongyeon que se sienta al lado de Chaeyoung, delante de Nayeon mira a Chaeyoung y Mina, produce una pequeña sonrisa pero luego se apaga cuando mira hacia Nayeon que tiene una expresión seria y está mirando a Chaeyoung. Aunque a Chaeyoung no le afecta, está demasiado cautivada por Mina.

Nayeon por otro lado, sabe que Chaeyoung siempre será el punto débil de Mina y lo entiende. Todos tenemos un punto débil por la persona que amamos. Pero Nayeon quiere asegurarse de que Chaeyoung trabaje por esta segunda oportunidad. Se niega a que sea demasiado fácil. Si Chaeyoung quiere recuperar a Mina, necesita probar que la merece.

Ambos padres estaban hablando de algunos asuntos y Lisa, que sabe mucho también se une a su conversación mientras Chaeyoung, Mina, Nayeon y Jeongyeon estaban totalmente al margen. Mina no sabía si era intencionado o no, pero parece que sí.

Se queda mirando el aperitivo que tiene delante. Está nerviosa delante de Chaeyoung de repente. Tal vez la conversación que tuvo con Haewon es la razón de esto. Cuando recuerda todo eso de convertirse en tigrecito, Mina se siente feliz y cautivada. Inconscientemente, sonreía como un idiota.

— ¿Quieres compartir?— Chaeyoung le preguntó de repente.

— ¿Qué?— Mina preguntó de inmediato.

— Estabas sonriendo tan feliz, solo quiero saber que te hizo tan feliz — dijo Chaeyoung.

— Oh, no es nada. Sólo recuerdo la conversación que tuve con una niña ayer. Eso es todo— le dijo Mina.

— Espero que no te haya dicho lo bonita que eres. Odio competir con una niñita — le dice Chaeyoung, entonces Nayeon se burla y Mina mira a Nayeon que le pone los ojos en blanco a Chaeyoung. Jeongyeon toma un sorbo de su champagne. Como se trata de una ocasión, sirven champán y Jeongyeon se alegra de que lo hayan hecho. Ayuda a distraerle de ver el drama que está ocurriendo justo delante de ella. Chaeyoung ignora a Nayeon como si no estuviera allí, lo que enfada a Nayeon aún más. Pero Chaeyoung también se aguanta, se merece el escepticismo.

— ¿Cómo te ha ido el día Minari? Nunca respondes a mis mensajes— Chaeyoung intenta empezar de nuevo.

— Entiende la indirecta. No está interesada — dijo Nayeon.

— ¡Nayeon! — Mina la regaña

— Nayeon, ¿cuál es tu problema?— Chaeyoung es directa

— ¿Quién quiere más?— Jeongyeon se tragó el champán y se levantó. Ya no aguantaba más.

— Oh, yo sí — dijo Lisa y levantó su copa. Jeongyeon se levanta a por más champán y Mina se ofrece a acompañarle. Dejando a Chaeyoung y Nayeon en la mesa. Mirándose a muerte

— Lo siento, no sabía que estarían aquí. Papá no me dijo nada — Mina le dijo a Jeongyeon.

— Está bien— es todo lo que dijo. Jeongyeon ha estado callada últimamente y Mina realmente lo odia. Entonces agarró el brazo de Jeongyeon, suavemente pensó lo que hizo que Jeongyeon se girara para mirarle.

— Jeongyeon, ¿estás bien?— Mina pregunta preocupada.

— ¿Por qué no iba a estarlo?— Jeongyeon le responde.

— Últimamente estás diferente, así que me preguntaba si todo va bien— , le dijo Mina. Hubo un destello de sorpresa en los ojos de Jeongyeon, pero rápidamente giró la cabeza y se aclaró la garganta.

— Todo va bien. No te preocupes— , le tranquilizó Jeongyeon con una pequeña sonrisa.

— Jeongyeon, sé que soy una bebé, pero estoy aquí para ti, ¿vale? Si algo te preocupa...— Antes de que pudiera terminar la frase, Jeongyeon le cortó.

— No lo hay y estoy bien— dijo de nuevo. Pero no está molesta ni enfadada, sólo le dice a Mina que está bien y que no quiere hablar de ello. — Venga, tomemos esto y vámonos. Se preguntarán por qué tardamos tanto— Jeongyeon toma 2 botellas de champán y se va con Mina.

La cena fue perfecta y todos se lo pasaron muy bien, riendo y bromeando. Incluso Jennie se une a la cena por insistencia de la madre de Mina. Chaeyoung intentaba ligar y ser dulce con Mina, lo que hizo que Mina no supiera qué hacer y, por supuesto, Nayeon tuvo que intervenir. A veces Mina sonreía escuchando los comentarios sarcásticos de Jennie y le preocupaba que Chaeyoung pudiera tomarse a pecho el comentario de Nayeon. Y luego está Jennie siendo todo, cómo decirlo, siendo dulce y quizás, sólo quizás, intentando ligar con Mina también. Sin embargo, delante de Chaeyoung.

Pero Mina sigue preocupada por Jeongyeon que, durante toda la cena, no hace más que dar pequeños bocados y beber champán hasta que Mina pierde la cuenta de cuántas copas ha tomado Jeongyeon

Definitivamente, algo va mal.

Pero Jeongyeon insiste en que está bien y Mina no quiere presionar más. Así que pensó que lo mejor sería dejar que Nayeon se ocupara de ella. La cena terminó y mientras todos se metían en el coche, Mina se acercó a su madre para hablar un rato con ella.

Nayeon y Jeongyeon fueron a su coche, pero Jeongyeon pasó de largo, haciendo que Nayeon frunciera las cejas.

— ¿A donde vas? El coche está por aquí— Nayeon le dijo a Jeongyeon pero ella siguió caminando lejos de ella así que Nayeon no tuvo más remedio que ir tras ella.

— Necesito dar un paseo. Ve tú— dijo Jeongyeon.

— ¿A dónde vas tan tarde?— Nayeon preguntó pero Jeongyeon no le respondió. Solo siguió caminando, alejándose de Nayeon. — Bien, vamos, dime a donde vas. Yo te llevaré— dijo Nayeon de nuevo.

— Dije que voy a dar un paseo. No a conducir— . Jeongyeon contestó con voz fuerte.

— ¡Ya está bien! ¿Qué demonios te pasa?— Nayeon prácticamente le grita a Jeongyeon. Estaban un poco lejos de Mina y los demás pero su grito fue un poco fuerte, todos giraron la cabeza.

— Dije que estoy bien, solo necesito dar un paseo— Jeongyeon voltea a ver a Nayeon quien ya está molesta.

— ¿Qué te pasa? Mina tiene razón, estás actuando raro — Nayeon le dice y Jeongyeon solo se burla.

— ¿Tuvo que venir Mina para decirte que no estoy actuando como yo misma? ¿Ya ni siquiera te das cuenta? ¿Eh Nayeon?— Jeongyeon le preguntó atrevidamente. Tal vez fue el champagne, estaba jugando con su cabeza.

— ¿Por qué actúas así?— Pregunta Nayeon. Está asustada por el cambio de comportamiento de Jeongyeon pero no lo demuestra.

— Es el champán, no es nada— Jeongyeon se rasca la nuca y suelta un suspiro. — Ve— Jeongyeon le dijo a Nayeon. Esta vez lo dice en serio. Realmente quiere que Nayeon se vaya y la deje porque tiene miedo de que pueda lastimarla.

Se da la vuelta y empieza a alejarse, más rápido esta vez. Pero Nayeon no se da por vencida, la persigue y la agarra por el brazo pero se estremece cuando Jeongyeon le aparta los brazos, de una forma fuerte y grosera. La mirada en su cara, sus ojos, todo, es diferente. Nayeon está realmente aterrorizada.

— He dicho que te vayas— y dicho esto luego se aleja.