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Después de salir de la clínica, Nayeon decidió dejar a Mina en casa de sus padres.

La castaña mira hacia el asiento del pasajero. Mina está mirando por la ventana pero parece como si estuviera aturdida, como si su mente estuviera muy lejos, pensando en cosas. Nayeon toca su hombro y Mina mira a su lado. Estaba sumida en sus pensamientos y no se dio cuenta de que habían llegado a casa de sus padres.

— Gracias Nayeon — dijo Mina mientras se desabrochaba el cinturón de seguridad.

— No es nada, ¿quieres que espere? — Preguntó. No sabía si Mina volvería a su casa o no, pero sus cosas aún estaban allí, así que quizás, ¿volvería?

— No, está bien, esto puede llevar un tiempo así que deberías volver. Además, Jeongyeon me matará si te guardo para mí — Mina intenta hacer una broma para aliviar la preocupación de Nayeon. Y funcionó.

Viendo que Mina todavía puede bromear, significa que está bien.

Mientras Mina y Nayeon se despiden, la puerta principal de la casa de Mina se abre. Pronto se puede ver a una señora muy elegante de unos cuarenta años.

— ¿"Pingüina"? ¿Eres tú? ¿Por qué no me dijiste que venías? — Su madre chilla al ver a su hija. Ella acaba de hablar con Mina, hace solo unas horas pero ella no le dijo que venia. Pero eso no le pareció raro. A Mina le encanta sorprender y gastar bromas. Entonces ella se centra en la persona dentro del coche. Ella piensa mucho como lo sabía, la mujer le parece tan familiar.

— ¡Oh dios! ¿Es Im Nayeon? — Su voz se volvió aguda. Ella conoce a Nayeon, es la mejor amiga de Mina. Durante su época de instituto, Im Nayeon siempre iba a su casa a pasar el rato con Mina. Está acostumbrada a ver a Im Nayeon, pero recuerda que Nayeon desapareció de repente justo después de graduarse en el instituto.

Nayeon sale de su coche para saludar a la madre de Mina y le da un caluroso y apretado abrazo. La castaña quiere a la madre de Mina como si fuera suya y cuando decidió desaparecer, significa que tuvo que cortar la conexión con el resto de la familia de Mina. Esta señora tan cariñosa está incluida. Nayeon se siente culpable pero era necesario en ese momento. Nayeon estaba decidida a dejar ir a Mina y seguir adelante.

— ¡Mocosa desagradecida! ¡Cómo te atreves a desaparecer así! ¿Sabes lo preocupada que estuve? — La madre de Mina golpea el hombro de Nayeon. Nayeon trata de esquivar pero claramente, ella es más rápida.

Ella solo se rió y le dió otro fuerte abrazo. Realmente la echa de menos pero la madre de Mina solo pone los ojos en blanco pero le devuelve el abrazo.

Mientras tanto, Mina se ríe mirando a su madre y a su mejor amiga. Es algo habitual para ella. Al menos, lo era hace 7 años. Cuando Nayeon aún estaba con ella. Se siente nostálgica.

Nayeon entonces explicó que había dejado a Mina y estaba a punto de irse a casa. La madre de Mina insistió en que Nayeon debería quedarse a cenar pero ella cortésmente declinó, diciendo que hay alguien esperándole en casa. Entonces la madre de Mina sonrió y levantó una ceja, ella quiere indagar más pero Nayeon se apresuró a huir diciendo que las presentará en otro momento.

Justo antes de que Nayeon estuviera a punto de entrar en su coche, Mina habla. — ¿Estará bien si continúo quedándome en tu casa? — Preguntó. Los ojos de Nayeon se iluminaron. Está feliz de que Mina vuelva a su casa. — Estaremos esperando — Nayeon no respondió a su pregunta con un 'sí' sino con ese tipo de respuesta. Para Nayeon, Mina no necesita pedirle permiso. Si quiere, puede volver allí cuando quiera. Mina se sintió aliviada, de alguna manera después de escuchar su respuesta.

La nipona solo mira como el coche de Nayeon desaparece de su vista, entonces entra con su madre. Ambas tomaron asiento en la sala de estar.

— Mamá, ¿dónde está papá? — Mina comenzó. — Su madre miró a su marido con una taza de café en la mano y un periódico en la otra. Pone la taza en la mesa y se sienta junto a su mujer, despliega el periódico y empieza a ojear los titulares. Uno parece captar su atención.

— Papá, mamá, hay algo que necesito decirles. Y también necesito un favor de ustedes dos...— Mina respira hondo.

Intenta contarles sobre su crisis matrimonial, pero ¿cómo? ¿Cómo puede decirle a sus padres que quiere divorciarse de su esposa? ¿Cómo puede decirles a sus padres que ella y Chaeyoung ya no funcionan? ¿Cómo puede decirles a sus padres que no quería separarse pero que lo hace porque es lo correcto para Chaeyoung?

Viendo que Mina no continuaba con sus palabras, su padre dobló el periodico y lo puso a un lado. Al ver que Mina parecía tan abatida y al borde del llanto, debe significar que algo grande acaba de suceder o de lo contrario Mina no estaría aquí, pidiendo su ayuda. Mina nunca pide ayuda a menos que no pueda resolverlo por sí misma. Ambos padres intercambian miradas, claramente confundidos y preocupados.

— Necesito que me prometas que no me preguntarás qué está pasando o qué va mal... también necesito que me prometas que lo que estoy a punto de pedirte que hagas, me ayudarás...— Mina suplicó. Había lágrimas rodando por sus mejillas. Ambos padres estaban realmente confundidos por la extraña petición de Mina pero aún así accedieron y prometieron. Están realmente preocupados. No están acostumbrados a ver a Mina así.

— Le pedí el divorcio a Chaeyoung... ¿pueden ayudarme?... envíenle la carta de divorcio....

La voz de Mina suena rota.. tan rota como lo está actualmente su corazón.

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