Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo #10

BRIAN

Una semana más tarde...

Estábamos todos en mi sala escuchando la radio porque hoy pasarían nuestra canción.

—¿Cuánto falta? Les dijeron que pasaría más o menos a esta hora, ¿no? —pregunto Pepper que estaba parada junto al radio.

—Sí, no ha de tardar —le contesto Keith ansioso y tratando de encender un cigarro.

—Uff, estoy muy emocionada —Lola me sostenía la mano y me dio un ligero apretón.

—Yo cr...

El locutor volvió de comerciales.

—Cállate Charlie —le dijeron todos.

Nos quedamos callados para escucharlo presentar la canción.

—A continuación les pondremos por primera vez "Come On" canción original de Chuck Berry pero que es interpretaba por la nueva banda en la escena, ¡The Rolling Stones!

Empezó a sonar la canción y seguíamos sin decir nada aunque todos estábamos sonriendo por la emoción.

Mick se levantó del piso y se puso a bailar, nos le quedamos viendo extraño pero luego Keith lo acompañó y así lo hicieron todos unos segundos después.

Había agarrado a Lola para bailar y ahora tenía mi mano en su cintura y con la otra le daba una vuelta.

Y gracias a la falda que se había puesto hoy, al hacerlo pude tener una buena vista de sus piernas.

Lola se dio cuenta de la razón por la que había dejado de bailar por unos segundos y se empezó a reír.

Tomó mi mano y me hizo bailar de nuevo.

Su cabello iba de un lado a otro cuando ella movía su cuerpo al ritmo de la música.

Se veía hermosa y sus movimientos me hipnotizaban.

Me di cuenta de que la canción había terminado cuando ahora sus brazos me rodeaban y sentí su respiración en mi cuello.

—Me fascino —me dijo al oído y me dio un beso.

—¡Felicidades! —dijo Pepper arreglándose el cabello y sonriéndonos.

—Sí, ¡les quedo genial! —dijo Lola mientras se separaba de mi.

—Muchas gracias.

Nos dieron abrazos y les agradecimos todos sus cumplidos.

—Bueno, yo creo que esto es algo que debemos celebrar, ¿quién me acompaña a Berny's?

Keith se puso su abrigo y fue a la puerta y los demás lo siguieron.

Nos dirigimos al bar que solo quedaban a unos minutos de mi casa.

Mick y Bill iban unos pasos más adelante.

Pepper, Charlie, y Keith después, y atrás de ellos íbamos Lola y yo.

Ella agarraba mi brazo y la escuchaba hablar aunque me distraía su sonrisa que era linda, o más bien Lola lo era.

Llegamos al lugar y nos sentamos en una mesa del fondo.

Bill, Keith, y Pepper en un lado.

Charlie, Mick, Lola, y yo del otro.

Pedimos cerveza aunque Lola y
Pepper nos dijeron que solo se tomarían una y luego seguirán con refresco.

—Yo creo que deberíamos hacer un brindis —dijo Bill.

—¡Sí! —añadió Charlie.

—Pues claro, lo tenemos merecido —Mick alzó su vaso.

Segundos después lo imitamos y ahora todos sosteníamos nuestros vasos en el aire.

—Un brindis por nosotros —dije mientras veía a cada uno de ellos.

—Y por las chicas lindas —dijo Keith mirando a Lola y a Pepper.

Ellas solo se rieron.

—¡Salud!

Todos chocamos nuestros vasos y tomamos, y también sonreímos victoriosos.

Empezamos a platicar sobre cosas que nos gustaría hacer ya que los Stones tuvieran más reconocimiento y popularidad.

—Pues yo quiero comprar un barco y navegar como un pirata, también necesitaría una sirena —miro a Pepper y ella solo rió tímidamente.

—Keith, ni siquiera pareces uno y lo más importante, aún no tienes un carro.

—Tú tampoco así que no me digas nada, Mick.

—Yo quiero... —comenzó a decir Charlie hasta que lo interrumpió el mesero y nos sirvió otra ronda.

—Charlie, eso es muy ambicioso —se burlo Bill pero a Charlie le dio igual.

Unas chicas se acercaron a nuestra mesa y el primero que las vio fue Keith.

—Hola chicas.

Las volteamos a ver y ellas se reían nerviosas y se trataban de esconder una detrás de la otra.

—¿Son los Rolling Stones, cierto?

—Sí, los mismos —les contesto Mick sonriéndoles.

—¿Podrían darnos su autógrafo? —le pregunto una chica con cabello castaño.

—Claro —le contesto Bill que ahora le guiñaba un ojo a otra chica pelirroja que le pasaba una libreta y pluma.

Mientras que los chicos les firmaban la libreta y les platicaban, otra de las chicas, una de cabello rubio me tocó el hombro.

—Tu eres el líder, ¿verdad?

—Pues no realmente, creo que todos tenemos el mismo poder en la banda y yo solo trato de que haya orden.

—Yo diría que sí lo eres. Te ves muy autoritario en el escenario —me sonrió y luego añadió rápido— Y muy lindo también.

Le agradecí y me pasaron la libreta y la pluma.

—Espera —agarró la libreta y parte de mi mano y reaccione apartándola pero no tan bruscamente.

—Es que quiero que me hagas una dedicatoria especial —dijo mientras se inclinada y pasaba la hoja a una nueva.

—Oh, está bien, ¿cómo te llamas?

—Pamela —estaba tan cerca que podía oler su perfume y parte de su cabello estaba en mi brazo.

Trate de mirar a Lola rápido y ella parecía estar un poco incómoda pero trataba de disimularlo tomando de su refresco y platicando con Pepper.

Le escribí un agradecimiento y ya cuando estaba acabando de firmar...

—¿Le puedes poner un corazón? —me preguntó mientras me agarraba de los hombros y sentía su respiración en mi oído.

—Aja, aquí tienes —le di la libreta lo más rápido que pude.

—Gracias chicos —dijeron en coro las chicas y se fueron riendo.

—Hasta luego y gracias Brian —me dio un beso en la mejilla y se fue a alcanzar a sus amigas.

Lola veía hacia al frente tratando de evitar mirarme.

Le puse mi brazo en sus hombros y solo me sonrió aún incómoda.

—Encantadoras —dijo Bill con su cigarro en la boca.

El mesero nos trajo otra ronda, pasó una hora y seguíamos tomando y platicando.

Minutos después Pepper nos dijo que se tenía que ir porque tenía que hacer unas cosas.

Lola se ofreció a ir con ella pero Pepper le dijo que se quedase y que se verían luego.

Nos dio dinero por su refresco pero le dijimos que nosotros nos encargábamos.

—Jaja, gracias chicos pero en vez de pagarme el refresco mejor nos llevan con ustedes cuando hagan gira mundial —dijo bromeando.

Lola le dio un codazo y se rió junto con nosotros, se despidió de todos y nos dejó el dinero.

Pasó otra hora y ya no sabia ni en qué ronda íbamos.

—Se siente genial cuando la gente te reconoce —dijo Keith que ahora tenía los ojos algo entrecerrados.

—Y cuando lo hacen chicas guapas mejor —Bill le dio otro trago a su cerveza.

—Imaginen cómo será cuando seamos famosos —dijo Mick arrastrando un poco las palabras.

—Todas las chicas vendrán a nosotros.

—¡Salud! —Keith chocó su vaso con el de Bill.

Los chicos siguieron hablando y empezaron a decir babosadas y chistes malos.

Volteé a ver a Lola que había estado callada por unos segundos pero no estaba, seguramente fue al baño.

Decidí no preocuparme y seguir platicando con mis amigos.

No creo que Lola se haya enojado por lo de hace un rato, solo se puso incómoda y un poco distante porque no esta acostumbraba.

Eso fue lo que pensé y tenía sentido así que no le di más vuelta al asunto.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro