Joshua miró con asombro la enorme rueda con luces amarillas que giraba alrededor del parque, parecía el sol, y eso lo alegraba, y lo alegraba más ver la enorme sonrisa de Seokmin mientras reía y señalaba los lugares a los que podían ir en su cita. No había mejor lugar en el que tener una cita con Seokmin que este. 

Sonrió recordando la suave melodia y la encantadora voz del chico, la imagen un poco borrosa en su cabeza de su rostro tranquilo y las luces neones mientras cantaba la canción que aparecía en la pantalla. Por un momento cerró los ojos y se sumergió en ese adorable recuerdo.

En ese tiempo aun no tenía sentimientos tan profundos por Seokmin, pero ahora… Joshua daría todo por volver y apreciarlo mejor.

—Joshua…— Escuchó a Seokmin y sintió su calida mano tomar la suya. —¿Estás distraído?

—Estoy pensando— Admitió sonriéndole. —Recordando… 

Seokmin abrió la boca para responder pero después la cerró bajando un poco la cabeza, había un tenue rubor en sus mejillas que lo hacia lucir tímido y como un cachorro. Extendió la otra mano, la que no estaba tomando la de Seokmin, y acarició su cabeza despeinado lo un poco. 

—¡Arruinas mi peinado para citas!

—No lo arruino, estoy mejorandolo. 

Seokmin lo soltó tratando de hacer lo mismo con Joshua, él no lo permitió y huyó corriendo un par de pasos lejos de él, dejando que Seokmin lo siguiera entre quejas y risas. 

El corazón de Joshua se llenó. Fue extraño, de pronto la avalancha de emociones llegó a él golpeándolo en el pecho y haciendo eco en su mente, su sonrisa constante mientras se burlaba del despeinado Seokmin que intentaba atraparlo. Solo podía pensar una cosa en ese momento.

Estaba feliz.

No es que Joshua fuera infeliz antes, sino que esa simple palabra “felicidad” comenzó a tener sentido en su cabeza y a materializarse como la linda y divertida sonrisa de Seokmin, como sus quejas y su voz un poco aguda al gritar, como sus manos, como sus abrazados o sus gestos. Seokmin de pronto adquirió esa palabra y la trajo hasta Joshua.

Felicidad. Amor. 

¿Que tan enamorado estaba de Seokmin en realidad? Si este chico estaba siendo su felicidad ¿Que tanto podía amarlo?

Apenas fue capaz de escuchar concientemente lo que Seokmin decía o de lo que bromeaba al jugar en los establecimientos, Joshua solo no podía dejar de sonreir, incluso con cosas pequeñas como Seokmin fachando un tiro a un pato porque se sintió mal por el pato lo hacia sonreir. 

—No quiero dispararle al pato…— Se quejó Seokmin con el arma de juguete entre sus manos. —Pero si no le disparo no podré conseguir el premio cliché de las series. Eres una caricatura, necesitas ese premio. 

Soltó una carcajada y tomó el arma de sus manos para dispararle al pato, lo tiró en una sola oportunidad y después hizo lo mismo tres veces, dandole más oportunidad a Seokmin de llamarlo caricatura. 

—Bien, ahora no solo soy una caricatura, tambien soy un cliché.— Bromeó mirando entre los premios algo que llamara su atención. —¿Que tal un peluche para concluir el cliché?

—Al menos eres un buen cliché, pensé que el parque de diversiones era un clásico, como en las caricaturas. Por eso te traje, aparte de que no podía pagar nada más caro. 

—Pudimos tener nuestro capítulo de playa.

—¡Cierto! ¡La playa! Ah… y es más barato allí…— Seokmin hizo una mueca después de haber aplaudido. —No estoy diciendo que seas barato, pero soy realista, si quieres salir conmigo esto es lo maximo que puedo ofrecer. 

Seokmin tomó el premio del adolescente encargado y después se lo extendió a Joshua para recalcar su punto. Joshua lo tomó, era un silbato. 

Solo ganaron un silbato. 

—Si quiero salir contigo…— Repitió las palabras de Seokmin mirando con atención el metal. —Acepto el silbato. Pero… ¿Que necesito ofrecerte yo para que aceptes salir conmigo?

No tuvo respuesta por algunos segundos, y el rostro de Seokmin se mantuvo confuso por algunos más, sin embargo, cuando entendió la pregunta de Joshua sus ojos se abrieron con sorpresa y Joshua solo pudo esperar.

Lo que sea que necesitara Seokmin… Tuvo un escalofrío ante esa frase, como si algo frio le pasara por la espalda hasta llegar a su cuello, como algo que estuviera mal. 

Lo que sea que necesitara… Recordó a Jeonghan. 

¿Porque ahora?

—La montaña rusa…— Dijo Seokmin apuntando al juego, —Vamos a ella. 

Joshua asintió intentando dicipar los recuerdos de Jeonghan. No tenía sentido. 

No podía estar pensando en Jeonghan, ni siquiera pensaba algo malo de él o algo que le pudiera atribuir a su enamoramiento pasado, solo fue el recuerdo que llegó y se asentó en su cabeza como si de una flecha se tratase ¿Porque estaba pensando en Jeonghan? Aunque para ser honestos no era en Jeonghan en lo que estaba pensando, era el recuerdo de lo que lo hacia sentir. La necesidad constante de cuidar de él y cumplir todos sus deseos. Su estomago se apretó con fuerza. 

Él no quería que su amor por Seokmin se tornará como el que tuvo por Jeonghan. No quería volver a ello.

La ansiedad, la tristeza y la desesperación… ¿Ese era su amor por Jeonghan? No, todo eso fue parte del amor que tuvo, una parte oscura que le atribuyó a no ser correspondido, pero… aun si Jeonghan le hubiera correspondido…

Quizás el amor de Joshua estuvo mal.

¿Le haría lo mismo a Seokmin?

¿Porque estaba pensando en eso ahora? Era absurdo, él nunca dudó del amor y aprecio que le tenía a Seokmin desde que lo aceptó ¿Entonces porque ahora se sentía tan inseguro? Incluso cuando se lo confesó… incluso cuando Seokmin aceptó escucharlo ¿Porque ahora? El amor de Joshua…

El amor de Joshua lastimaba.

—¿Estás bien?— La pregunta de Seokmin lo trajo de vuelta. —¿La montaña rusa fue demasiado?

Sacudió su cabeza y miró los ojos abiertos de Seokmin, ya comenzaba atardecer y Joshua apenas estaba notando lo sumido que estuvo en su propia cabeza la mayor parte de la cita. Se sintió culpable, ese tipo de culpa que solía sentir con Jeonghan. Y pensó que lo había superado, pensó que lo que pasó antes ya no podía afectarle ahora, como si hubiera sanado. Pero no lo hizo.

¿Porque siquiera estaba allí? LLevó una mano a su cabeza tratando de aclarar sus pensamientos.

¿Porque se sentía tan mal?

Exhaló una risa y comenzó a negar.

—Lo siento. Solo me distraje.

Seokmin asintió, pero había algo en él que se sintió mal. Joshua lo estaba arruinando. Seokmin se giró aun sosteniendo su mano y dio un paso enfrente, y justo antes de que Joshua pudiera relajarse y decirse a si mismo que el tema había pasado Seokmin se giró de golpe y extendió los brazos atrapando lo por completo entre ellos. 

—¡Sé que estas pensando!— Gritó Seokmin y Joshua abrió los ojos mirando a los lados, la gente comenzaba a irse pero aun había un par de personas alrededor. Aun así no le pidió a Seokmin que lo soltara. —¡Sé como se siente! Yo… Yo tambien me siento mal e inseguro ¡No se porque pienso que vas a engañarme cuando sé que no lo harías!

—¡Nunca te engañaría!

—¡Lo sé!— Seokmin se apartó, sus ojos estaban cerrados y tenía la cara roja. —Lo sé… pero cada que me estoy divirtiendo… pienso en Mingyu. No… No pienso en él, pienso en lo mal que me sentí ¡Y no puedo dejar de pensar que estoy siendo una mala cita y que me dejarás por eso!— Seokmin respiró profundo. —No importa cuanto confíe en ti… no puedo confiar en mi… No dejo de pensar que mereces algo mejor.

Oh. OH. Joshua tomó la mano de Seokmin intentando que abriera los ojos para encararlo, pero Seokmin no los abrió, aunque Joshua se acercó y le pidió que lo hiciera aun así no consiguió nada. 

El corazón de Joshua había comenzado a latir tan fuerte que era doloroso. Porque lo era. Dolía. Dolía saber que a pesar del tiempo no podía deshacerse de lo que fue, que a pesar de intentar dejarlo atrás esto siempre regresaba y de alguna forma arruinaba todo alrededor de Seokmin. 

Joshua quería ser suficiente para Seokmin, quería decirle que nada de lo que él hiciera lo haría alejarse. Quería decirle… que era completamente devoto a él. 

Pero tenía miedo de hacer lo mismo que hizo con Jeonghan.

Y entonces Joshua lo soltó. Dio un paso hacia atrás. 

—Seokmin…

—¡Ah!— Seokmin gritó llevándose ambas manos al rostro y alzando la cabeza. —¡Lo odio mucho! ¡Se supone que ya lo supere! ¡Ya pasó mucho tiempo! ¡Wonwoo y Minghao tienen razón pero no puedo…! ¡¿Porque estoy siendo tan malo con esto?!

Joshua se hizo la misma pregunta. No importaba cuanto Hansol y Jun intentaran convencerlo. Joshua era un desastre. Era un desastre como para estar con Seokmin, y aunque se negó a creerlo en un principio ahora podía encararlo. 

Lo mejor era dejarlo.

Joshua tenía que irse antes de que lastimara más a Seokmin. 

Su amor…

—Aun así…— Aun así ¿Que? Se preguntó a si mismo. —Aun así eres mi sol.

Seokmin lo miró entre sus dedos, pero esta vez Joshua no era capaz de mirarlo directamente, prefirió mirar a la rueda de la fortuna que ahora estaba iluminada. Era como el sol. 

—Tambien tengo miedo.— Confesó. —No quiero lastimarte como lo hice con Jeonghan. No quiero sentirme culpable u ocultar lo que siento. Aun así… Eres mi felicidad.— Le sonrió con el corazón apretado y tomó una de sus manos. — Aunque mi corazón este roto aun puede amarte.

Aun así. Con el miedo que sentía, con el constante pensamiento de Jeonghan acechandolo, aun así… Con el corazón en pedazos amaba a Seokmin.

Lo ama. Aunque su amor lastimó a Jeonghan y temía lastimar a Seokmin ¿No era esa la única prueba que necesitaba?

Te amo tanto que no quiero lastimarte. Te amo tanto que tengo miedo a hacerlo. Pero deseo amarte lo suficiente como para superar el miedo. Deseo amarte lo suficiente como para entender que tu podrías amarme tambien.

—Seokmin… Lo único que deseo merecer…— su garganta se cerró lo que le hizo difícil hablar. Aun así lo hizo. —Es a ti. Eres mi sol.

Seokmin se inclinó frente a él y se quedó allí un minuto. Sin decir nada.

—Mi corazón…— Seokmin titubeó. —Yo…— Y ahora tartamudeaba. —Yo no…— Y Seokmin se alzó con una mueca triste, pero al menos ahora estaba mirandolo al rostro. —No puedo decir nada…

Seokmin lloró extendiendo sus brazos para atrapar a Joshua de nuevo. 

—Está…

—Shitengoquearmarmicorazóndenuevoloharéportinomeimportasentirquemerecesalgomejoryointentaresiempresermejorparamerecerteporquemegustas

Joshua comenzó a reírse abrazando tambien a Seokmin. Lo abrazó con fuerza enterrando su rostro en su hombro.

Su corazón latía fuerte…ambos corazones.

La rueda de la fortuna era lenta y Seokmin no era fan de las alturas, él dijo que quería subir pero ahora escondía su rostro en el cuello de Joshua mientras tomaba con fuerza su mano. Y Joshua solo estaba viendo el atardecer atraves de las ventanas, sonreía mientras se inclinaba hacia Seokmin.

—Lo siento… soy un cobarde.— Lloriqueó Seokmin en su hombro. 

—Tambien soy un cobarde.

—Tu si puedes ver las alturas…

—Solo estoy viendo el sol.

Sonrió girando la cabeza hasta Seokmin, su cabello arremolinandose en su mejilla, y Seokmin alzó un poco su rostro para mirarlo con ojos grandes. Su sol. 

Pensó que Seokmin diría algo, pero no lo hizo, el chico solo se inclinó más cerca hasta que sus frentes estuvieron juntas. Y después Seokmin lo besó. Su mano tomándolo con más fuerza mientras que sus labios golpeaban con los de Joshua, la avalancha de emociones corriendo desde su mano hasta su cabeza. 

La rueda de la fortuna era lenta, pero Joshua deseaba que lo fuera aun más. Solo para quedarse así con Seokmin.