𝘃𝗶𝗶. game of survival
chapter vii
game of survival
LOS cinco caminaban entre los contenedores que había en el puerto. Nicole ya no estaba tan ebria, pero un mareo golpeaba su cabeza y las ganas de vomitar no la ayudaban. Pero se aguantaría todo eso con tal de no pasar vergüenza frente a sus amigos.
- Madripoor realmente no le pide nada a Nueva York. - comentó Sam.
- Hacen buenas fiestas. - opinó Zemo - ¿No crees, Nicole?
La nombrada rodó los ojos mientras apuraba un poco el paso, se estaba quedando atrás.
- Con lo que ofrecen por ustedes cada segundo en Madripoor, hace menos probable que escapen. - les explicó Sharon, que los guiaba al lugar en donde encontrarían al científico que recreó el estúpido suero del supersoldado. Nicky se estaba hartando de perseguir pistas, ser buscada por unos malditos carroñeros y aguantar el humor del imbécil de Zemo. Sí, estaba de muy mal humor.
Frenaron de repente - Okey, está aquí. Contenedor 4261; yo vigilaré mientras hablan con Nagel, pero corran, ya no tenemos tiempo.
La rubia les entregó unos audífonos para que estuvieran en contacto permanentemente y se alejó de allí.
Ahora, los cuatro caminaban lentamente hacia el contenedor que su compañera les había indicado y Sam lo abrió. Ricci se asomó por detrás de él como una niña pequeña, y no vio nada. Literalmente, estaba vacío.
- Oye, Sharon, ¿segura de que este es el lugar? - habló Wilson a través del micrófono - Está totalmente vacío.
- Pues sí, debería serlo.
Fueron entrando con precaución al lugar que se encontraba a oscuras. Zemo fue el primero en caminar hasta las paredes mientras se alumbraba con una linterna. Nicole, por otro lado, se apoyó contra otra para descansar un poco. Pero apenas pudo cuando la pared en la que se había recostado se hundió hacia atrás y Zemo la tomó de los brazos para que no cayera.
Nicky había descubierto la entrada secreta por accidente.
Bucky y Sam tomaron sus armas y caminaron hacia ellos. El Barón se apartó hacia un lado y el moreno subió primero, seguido por Zemo y luego Ricci, dejando a Bucky al final.
Cuando llegaron hasta el final de las escaleras, se vieron dentro de un improvisado laboratorio, con música sonando a un alto volumen. Como la italiana no poseía una pistola por haber estado ebria, Barnes la colocó detrás de sí mientras se adentraban en busca de Wilfred Nagel.
Sam se acercó un poco por detrás del tipo cuando lo encontraron, y el susodicho frenó la música y los enfrentó, con un notable miedo en su rostro.
- Doctor Nagel. - habló Falcon.
- ¿Quienes son y qué quieren?
- Recreaste el suero del supersoldado, ¿no?
- Lárguense de mi laboratorio. - le espetó a medida que caminaba hacia otro lado. Pero paró su marcha al cruzar miradas con James, y Wilson aprovechó y lo tomó por un brazo.
- Lo reconoces, ¿verdad? - y luego señaló a otro lado - Él es el Barón Zemo, también has oído de él, ¿cierto?
- ¿Y...ella? - preguntó con miedo.
- No soy una persona de interés en este momento. - le explicó.
- Pareces un doctor bastante listo, - lo empujó el moreno hacia otra punta - así que más vale que empieces a contarnos todo.
- O tal vez una contra...propuesta. - dijo Nagel - Hazme una mejor oferta y te contaré.
- Dama y caballeros... - les susurró Sharon al audífono - tenemos compañía.
Barnes se cansó de tanto intercambio de palabras y movió al científico a una silla, en donde le apuntó con un arma a la sien.
- Todos los caza-recompensas están aquí, salgan.
Bucky disparó a centímetros de la cabeza del hombre, apurándolo y asustando a Sam y Nicole.
- ¡Okey! ...okey. - exclamó el científico, con miedo de que el Soldado del Invierno lo asesinara - Entré al programa del Soldado del Invierno a seguir el trabajo después del fracaso de los sujetos de prueba en Siberia.
Bucky miró a sus compañeros y luego volvió la vista a Nagel, quien siguió hablando.
- Cuando Hydra cayó, fui reclutado por la CIA, la cual había obtenido muestras de un sujeto de prueba americano...- la italiana frunció el ceño y se mordió el labio inferior, cruzando miradas con Wilson y luego con James - con trazos semi-estables del suero en su sistema. Después de mucho trabajo, al fin fui capaz de aislar en su sangre los componentes diversos. Yo era un dios; había hecho lo que ningún científico desde Erskine había logrado hacer. Pero mi suero, iba a ser diferente: sin toscas máquinas o cuerpos modificados, el mío iba a ser más sutil...optimizado...perfecto.
Sam negó lentamente - ¿Y cómo es que jamás oímos hablar de esto?
- Porque...poco antes de poder completar mi trabajo, me desintegré. Y cuando regresé, cinco años más tarde, habían abandonado el programa. Así que sólo vine aquí, el Mediador de Poder con mucho gusto ofreció financiar la recreación de mi labor.
Ricci se cruzó de brazos - ¿Cuántas dosis elaboraste?
- Veinte. - contestó el doctor, sorprendiendo a todos - Karli Morgenthau se las robó todas. No quiero ni imaginar lo que el Mediador ha planeado para esa pobre niña.
- Dinos en dónde está Karli. - demandó el moreno.
- No sé dónde esté ahora, pero me llamó hace un par de días. Quería que salvara a una mujer llamada Donya Madani, la pobre tiene tuberculosis. Es muy común por la sobre-población en los campos de desplazados.
- ¿Y...qué le pasó? - siguió indagando Ricci.
El tipo negó y se encogió de hombros - No es mi vaca, no es mi granja.
La chica miró a Barnes y éste a ella, viendo cómo su rostro expresaba miedo. El pelinegro volteó a ver a Nagel nuevamente, y habló.
- ¿Hay algún suero en el laboratorio? - pero el hombre no respondía, así que Bucky lo apuntó son la pistola otra vez, asustándolo.
- No.
- ¿Ahora qué?
- Chicos, en serio. Ya no hay tiempo. - dijo la voz de Sharon en cuanto ingreso al lugar, junto a ellos.
Y en un descuido de todos, Zemo disparó al pecho de Nagel, matándolo al instante. Nicole abrió su boca con asombro, mientras daba un saltito.
- ¡¿Qué hiciste?! - exclamó, enojada. Sam empujó al Barón contra una pared mientras Carter le quitaba el arma. Nicky corrió a otro lado del improvisado laboratorio y vomitó en uno de los tarros de basura de allí, sintiendo cómo su amigo James le acariciaba la espalda de manera reconfortante, avergonzándola aún más si es que era posible.
- ¡No! - le gritó Wilson a Zemo. La italiana elevó su cabeza, ya completamente aseada y vio con un leve sonrojo al soldado ¿Por qué justo ahora debía estar con ella? ¿Qué tan romántico era eso?
Pero dejó de verlo para enfocarse en algo detrás de él. Un misil golpeó de lleno en e contenedor en el que se encontraban, lanzando a todos hacia atrás. La ojiverde sintió los brazos, el de metal y el natural, de Barnes abrazándola para que ninguno de los dos saliera herido.
Nicole sintió el dolor apropiándose de ella e el instante en el que todo dejó de explotar y los cinco se levantaban del suelo para comenzar a escapar.
- ¿Alguien ha visto a Zemo? - cuestionó Wilson, aún en el suelo. Mientras James ayudaba a Sharon, ella a Sam.
- Vamos, Sam. Ayúdame, pesas como una tonelada. - le recriminó, a medida que lo empujaba hacia arriba desde sus brazos. El hombre le hizo caso, un poco desorientado por el golpe y las llamas invadiendo cada espacio del lugar.
Los cuatro lograron escapar a tiempo de allí, un segundo antes de que todo explotara y cayera hacia abajo. La italiana tomó la pistola que guardaba en uno de sus bolsillos y la cargó, preparada para el ataque.
- ¡Muy bien, esperen mi señal! - les anunció Bucky, pero nadie le hizo caso. Sam disparó a los contrarios y caminó hacia otro lugar, con su castaña amiga siguiéndole el paso.
Se ocultaron bajo el contenedor que había explotado, entre todos los escombros. Ricci disparó dos veces antes de ocultarse nuevamente, estaba segura de haberle dado a uno, pero con las leves náuseas se le hacía un poco difícil. Al rato Sharon se les unió.
- ¡¿Te gusta vivir aquí, Sharon?! - le preguntó Sam, mientras los tres continuaban defendiéndose de las balas.
- ¡No es tan terrible!
- ¡Creí que iríamos a la izquierda! - un Bucky malhumorado apareció, retando a Wilson. Nicole siguió disparando a medida que rodaba los ojos; no otra vez, por favor, pensó.
- ¡Fuiste al otro lado!
- ¡Despejé el camino!
- ¡Yo salí primero, tú me tenías que seguir!
- ¡¿Dónde estamos ahora?!
- ¡Cállense, por un carajo! - les gritó esta vez la rubia. Nicoletta estaba frunciendo su ceño y tomando con fuerza el arma en sus manos, mientras apretaba sus labios. Estos dos la matarían; si ser la terapeuta del soldado ya era molesto, lidiar con Sam y Bucky siendo como niños pequeños lo era aún peor.
Los hombres continuaron gritándose, sin hacerle caso a su compañera. Así que la castaña caminó hacia el fondo, en donde estaban los mejores amigos de Steve Rogers y le dio un puñetazo en la mejilla a Bucky, haciendo que los dos dejaran de gritarse y miraran con confusión y sorpresa a su compañera.
- ¡Todos vamos a morir, pero si no se callan ahora, yo seré quien los mate a ustedes dos! - les advirtió Nicole, antes de que una tubería explotara frente a ellos y matara a un par de sus enemigos. Los cuatro se asomaron a ver qué era lo que sucedía.
Un hombre con máscara atacaba a los caza-recompensas por ellos - Corre. - le indicó James a Nicky, quien tomo del brazo a su amiga, sacándola de allí.
- ¡Vamos, corran!
Corrieron por todo el puerto, entre los contenedores que allí había y protegiéndose de las balas que llegaban a ellos. De repente, alguien apareció por detrás y comenzó a dispararles, por lo que Sharon, quien iba adelante, abrió la puerta de un contenedor aleatorio para que pudieran esconderse allí.
Todos entraron, pero Barnes se quedó para pelear contra su atacante. En cuanto lo desestabilizó, Sam lo tomó de a camisa y lo empujó hacia el interior del contenedor, cerrando la puerta seguidamente.
Los cuatro, con las respiraciones agitadas, esperaron un par de segundos antes de salir por la otra puerta del lugar, encontrándose con un convertible y a Zemo conduciéndolo.
- Súper cargado. - presumió.
- Tú volverás a la cárcel, maníaco. - le aseguró la italiana con sus cejas elevadas. Wilson asintió a lo dicho.
- ¿Quieren encontrar a Karli o no?
- Es verdad, lo necesitamos. Hay tres de nosotros y como veinte de ellos, suban. - lo apoyó el soldado, para luego abrir la puerta del copiloto y sentarse.
- Lindos modales, ¿los aprendiste en los 40'? - le preguntó sarcástica Nicole, haciendo rodar los ojos a Barnes.
- Bien, pero otra idiotez igual a esa y...-
- No me atrevería. - lo interrumpió Zemo al moreno, quien terminó en el asiento detrás de James.
Sharon suspiró - Fue una fantástica reunión.
- Puedes venir con nosotros, Sharon. - le indicó su amiga.
- Ya les dije que no, - y miró a Sam - consígueme el perdón que me prometiste.
- Gracias por todo. - le dijo Wilson antes de que la rubia se fuera caminando en otra dirección. Falcon se acomodó en el auto y miró a la nuca de Barnes - No vas a mover tu asiento, ¿verdad?
- Obvio. - negó el del brazo de metal.
Y Zemo arrancó. Nueva parada: Siberia ¿o tal vez cambiarían el rumbo?
❄️ ◌ ⋅ . ✹ ⋅ * 🚬
y volviiiiii luego de un tiempo sin escribir acá :)
les juro que quería escribir, pero no tenía
inspiración ni tiempo, soo pidoperdon ♡♡
¿cómo están? espero que todo esto
de los libros de hate, auto-hate
y eso no lxs haya afectado mucho
y no deban tomar medidas extremas
y se sientan cómodxs con uds mismxs,
que eso es lo que realmente
importa ;)
¿qué les pareció? diganme porfi
asi veo si debo tomarme un
tiempo para poder inspirarmE
más o qué jskjsk
sinceramente, no sabía si
hacerlo más largo o no, but,
quería dejar lo mejor para los
próximos caps jejej
¡no se olviden de seguirme
en instagram como saturnscart!
ahí subo memes, a veces algún
gráfico si es que tengo tiempo
y adelantos de mis caps o memes de
estos, además de q me ayudarían mucho
❤️ fleurie --
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