capítulo O2.
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El pequeño castañito abrió poco a poco sus ojitos parpadeando varias veces, se sentó en la cama con sus piecitos apenas rosando el frío piso. Estiró sus extremidades bostezando, luego con sus manitas hechas puños talló sus ojitos eliminando cualquier rastro de sueño en ellos.
En medio de todo ello sus comisuras se elevaron ya que desde ese día iba a empezar a ayudar a su lindo hyungie dormilón.
Tomó su celular de la mesita de noche y buscó entre sus contactos el número del alfa, cuando lo encontró llamó, llamó y llamó tantas veces que ya había perdido la cuenta pero no se daría por vencido.
Por otro lado se encontraba el pelinegro, boca abajo, con sus brazos y piernas extendidas, roncando y gruñendo cada que sonaba su molesto celular, pensó que dejaría de timbrar luego de que pasaran unos minutos pero para su suerte volvieron a llamar.
Con mala gana lo tomó y contestó. "¡¿Quién mierda es y que quiere a estas malditas horas?!" gruñó molesto. Una cosa de las que más odiaba era que lo interrumpieran de su 'sueño de belleza' ...O así lo hacía llamar él. Pero vamos, quién en su santo juicio le gustaría eso. Al otro lado de la línea un pequeño omega estaba boquiabierto.
"¡Taehyungie! No digas malas palabritas" Jungkook infló sus mejillas e hizo un puchero en reproche.
El mayor abrió en demasía los ojos y empezó a abrir y cerrar la boca reiteradamente al oír la dulce voz de su hermoso dongsaeng, alejó el teléfono de su oído para ver el contacto y confirmar lo obvio.
"L-lo siento Jungkookie, no sabía que eras tú bebé" los apodos cariñosos eran totalmente normales para la pareja de mejores amigos, no se sentían incómodos, todo lo contrario a ello, era algo que dictaminaba confianza y ternura solo para ellos dos. "¿Pasó algo pequeño?" preguntó dando un vistazo a la hora de su reloj siendo las jodidas 5:15 de la madrugada.
"Pasa que Googie se comprometió a levantar a su hyungie todas las mañanas para que no pierda sus clases. Así que quiero que te levantes de la camita y vayas al baño a ducharte hyung, yo haré lo mismo y luego prepararé el desayuno para los dos. ¡Adiós Tete! Nos vemos en la escuela a las 6:15 para estar nosotros dos solitos"
"¿Qué? P-pero" Taehyung tartamudeó, asimilado lo que el menor dijo, no pudiendo creerlo, revisó la pantalla de su teléfono y efectivamente el omega había colgado.
El pelinegro iba volver a dormir ignorando las palabras dichas pero el 'solitos' resonó en su mente y eso significaba que podría pasar más tiempo a solas con el tierno chico.
Sintió como en su interior su lobo inició a revolcarse eufórico, aullando y sacando la lengua por la sublime satifacción, Taehyung no quedándose atrás se paró de la cama caminando hacia el baño mientras que -al igual que su lobo- bailaba emocionado...
Desnudo, pero feliz.
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