Cassie

Últimamente estaba demasiado sensible y sensorial hacia algunas situaciones, una de ellas era el hecho de que Luke tendría que volver a prestar servicio pese a su nuevo cargo. Cada vez se acercaba mas y mas el día en que tendría que irse, hasta que finalmente estábamos en la base, esperando a que su autobús llegara .

Verlo partir me iba a doler, mas de lo que pensaba y no estaba lista para pasar los siguientes días sin el, me había acostumbrado a su presencia en la casa y en mi vida.

—Te voy a extrañar demasiado Salazar. —Me dijo antes de dejar un beso en mis labios y frotar mi mano que estaba entrelazada con la de el.

Caminamos un poco entre la gente hasta llegar al lugar en donde se estacionaria el autobús. Nos quedamos allí, abrazados un rato.

—Cuídate mucho por favor. Necesito qué regreses a casa en una sola pieza y bien. —hable en voz baja dejando que solo el me escuchara.

—Volveré cuando menos lo esperes. También cuídate. No quiero que tu madre se preocupe porque no comes bien o porque tienes un ataque con tu diabetes. —tomo mi mentón para que lo mirara y yo solo sonreí.

—Es lo justo soldado.

En cuanto termine la frase, el transporte de Luke había llegado. Justo a tiempo, mi estomago se revolvió con fuerza amenazando en devolver todo lo que había comido. La sensación de que se fuera era como un vació en ese momento, empezaba a sentirse mal y no sabia si era indigestión o la ausencia de Luke.

***

Al volver a casa, Peaches fue quien me recibió. Su colita irradiaba de felicidad y yo la abrace antes de sentarme sobre la cama para que ella se recostara un rato a mi lado. Tenia aun el sabor amargo en la boca después de la despedida de Luke. Mire mi teléfono como si eso fuera a hacer que el tiempo pasara mas rápido.

Lo observe un buen rato, hasta que la pantalla se
ilumino. Un numero desconocido se dejo ver en aquella luz que ahora daba en mi rostro, dude un poco pero al final me decidí por responder.

—¿Bueno?

Al otro lado de la linea, no escuchaba nada. Me quede esperando, a lo mejor en Algun momento escucharía de quien se trataba pero entre mas pasaban los segundos menos lógica tenia. Estuve por colgar, hasta que a través de esa misma linea, se escucho una respiración pesada.

—¿Quien es? —volví a hablar yo.

Esta vez, la única respuesta fue una risa pesada. Luego, solo el sonido de que la llamada había sido cortada. Pensé que tal vez era alguna broma pesada de esas que hacían con números al azar, así que no preste atención.

Mi estomago seguía revuelto, quise buscar algo para poder calmar la sensación de nauseas pero no me ayudo nada, en cambio mi cuerpo me obligo a correr al baño para vaciar mí estomago. Toda la culpa se la asimile a los nervios y el miedo que tenia de que Luke se hubiese ido, desde la vez del accidente con los explosivos, me negaba mucho a que volviera a la guerra.

—¿Cassie? —la voz de mi madre me exalto. — ¿Cassie esta todo bien?

—¡Estoy en el baño! —grite como respuesta antes de limpiar mi rostro.

—¿De nuevo las nauseas? Cassie, llevas así desde antes que Luke se fuera.

—Estoy bien. Deben ser los nervios de no tenerlo en casa.

Mi mamá negó con la cabeza y se acerco para darme un abrazo que recibí con gusto.

— Cariño. No es por asustarte demás, pero ¿y si es otra cosa? —la mire con el seño fruncido apenas dijo esas palabras.

—Ma, ¿que estas insinuando?

Ella se encogió de hombros antes de alejarse del abrazo e ir hasta la cocina donde la seguí.

—Podrías estar embarazada hija. — lo solto así, directo. — para nadie es un secreto que ustedes dos no toman precauciones de nada.

—¡Ma! ¡Por supuesto que tomamos precauciones! —me queje mientras me sentaba frente a ella viéndola guardar algunas cosas. — aunque no sea todo el tiempo.

—Una vez, es suficiente para quedar con un bebé. Solo digo cariño que seria buena idea que te hicieras algunas pruebas, solo por si acaso.

Negué con la cabeza y seguido de ello mientras mi madre seguía insistiendo, hable con Nora, aun había mucho trabajo por hacer y necesitábamos adelantar varias cosas pese a que no habíamos hecho mucho por la despedida de Luke.

—Te vere luego Ma, cuida de Peaches en mi ausencia.

Deje un beso en la cabeza de mi madre y sali de casa directo al bar donde ahora también practicábamos y trabajamos en canciones para lanzar. Camine por las calles de siempre, con mis audífonos puestos, normalmente me iba en mi auto, pero esta vez necesitaba tiempo para mi y para pensar en otras cosas que no fueran Luke.

Baje por algunas calles, y cruce algunas otras. Estaba  cerca, solo a algunas cuadras de llegar cuando en uno de los semáforos, empece a sentir algo raro. Empece a sentir que me miraban demasiado, como si alguien cerca de allí tuviera la vista fija en mi, era algo incomodo y aunque busque con la mirada por todos lados de la calle, no note nada extraño.

Pase el semáforo y apenas llegue a la puerta del bar. Mi teléfono sonó con una notificación de Luke, era un mensaje indicando que aun no llegaban al lugar pero que tan pronto así fuera, me escribiría. Deje a un lado el teléfono y heche un ultimo vistazo a mi alrededor para estar segura y al no ver nada de nuevo. Entre al lugar.

—Pero miren quien decidió aparecer. —Nora se acercó y me abrazo.

—Ten cuidado. Puede que mi estomago decida devolverse. —bromee a lo que ella rodó los ojos.

—Eso tiene nombre Cassie. Se llama; embarazo. O intoxicación pero tu, no te ves para nada intoxicada.

Le di un golpe en el hombro antes de sentarme en una de las sillas.

—Mi madre y tu, se pusieron en mi contra. Ya entendí.

Ambas nos reímos y en aquel segundo en que mire hacia la ventana, me pareció ver a alguien observando desde afuera. Lo malo, es que en cuanto quise mirar de nuevo, no había nadie ya.