Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

«six»

Gruño golpeando el colchón de mi cama, no han parado de tocar el timbre y no quiero dejar mi tranquilo sueño para ir a atender la puerta.

No me queda más remedio. Ni siquiera me miro antes de abrir, estoy en pijamas y seguramente el cabello desordenado. Lo que daría por tener una sirvienta que se encargara de éste tipo de situaciones.

El reloj del salón indica las 2 de la madrugada.

Madrugada, madrugada..

¿Madrugada? ¿Pero qué cojo...

- ¿Qué haces aquí?

Mi rostro debe valer oro en éstos momentos. El chico que se ha encargado de molestarme en las últimas 24 horas está parado muy casual en la entrada como si nada.

- ¿Jungkook?

Una sonrisa retorcida aparece en sus labios como si le hubiese hecho gracia que lo nombrara.

- ¿Te has aprendido mi nombre, linda? - ay no, no estoy para sus jueguitos en éste momento.

- ¿Me estás acosando? - pregunto dando una fugaz mirada hacia la calle y es ahora donde se activan todas mis alarmas.

¿Y si quiere hacerme daño? ¿Y si es un psicópata o un enfermo mental o un depravado sexual? Ay madre santa.

¿Y por qué no habla?

- ¿Any que sucede?

Primera y última vez que le voy a agradecer mentalmente a un ligue de Lilith salvarme el pellejo. El señor Jeon está parado en el último escalón de las escaleras con solo un short deportivo puesto y mirando hacia un lugar en específico de la sala de estar y es cuando me doy cuenta que la "visita" se ha colado en mi casa deliberadamente como si fuese la cosa más normal del mundo.

Me detengo un momento a apreciarlo descaradamente. Empiezo por sus pies calzados por unas zapatillas Adidas extremadamente limpias, wow, ni yo soy tan pulcra. Pantalones de deporte color negro, sus manos metidas en los bolsillos de éste, sin dudas le hacen ver sexy. Una polera blanca sin cuello mucho más grande de la talla que debería usar. Mis ojos siguen escalando por su cuello, su nuez de Adán no pasa desapercibida, al toparme con sus labios me muerdo los míos en una acción inconciente, él se pasa la lengua dejándolos húmedos y me pregunto a qué sabrán y si el idiota besará bien, agh como sea. Me paralizo al toparme con sus ojos clavados en los míos y una de sus cejas arqueadas.

¿Se habrá dado cuenta de lo que estaba pensando? Anna tenía razón, está guapísimo.

- ¿Ustedes se conocen? - pregunta el señor al llegar a mi lado.

Es raro, pero me siento intimidada en éste mismo instante.

- Emm.. bueno..- titubeo paseando la mirada entre los dos.

- ¿Qué? ¿Te da miedo perderla? - se adelanta él a responder por mí.

- Dijiste que no conocías a más ningún chino aparte de mí - se voltea a verme Jeon.

- ¿Chino? No somos chinos, somos coreanos.

¿Somos?

- Ya le he explicado eso - hay un dege de burla en la voz del mayor - ¿Qué haces aquí hijo?

¿Hijo?

Mis neuronas están haciendo corto circuito en mi cabeza.

- ¿Hijo? - lanzo la pregunta al aire.

- ¿No te ha contado que tiene un hijo de tú edad? - coloca un brazo en mis hombros cuando se me acerca y enseguida me alejo nuevamente.

- Si me ha dicho, solo que no sabía que eras tú - bufo.

- Bueno, es mejor si se conocen - alega el señor y su hijo ríe sarcástico.

- ¿Qué pretendes ahora, qué juguemos a ser la familia feliz? - puedo sentir la rabia que está sintiendo contra su progenitor. - ¿Qué pasará con mamá si se entera de esto?

Un momento, esperen, paren el tren.

- ¿Está casado? - chillo tapando mi boca.

- No vengas a hacerte la inocente ahora, lo sabías perfectamente - me habla enfadado.

- Yo no..

- No le hables así, Any no tiene culpa que..

- ¿Any? ¿Culpa? ¿Te estás oyendo papá? - pasa sus manos desesperado por su cabello.

- ¿Pueden ir a otro sitio a discutir? Estaba teniendo un sueño estupendo - interrumpo y ambos me miran.

- ¡Gente que va de sobrada y efectivamente sobra! - murmura entornando los ojos hacia el techo.

¿Cree que no lo he escuchado? Podrá insultarme y hablarme mal, pero no sé lo permitiré en mi casa y a éstas horas.

- Jung.. - su padre coloca una mano en su hombro.

¿Me están esquivando? Es como ese momento incómodo cuando le mandas un mensaje a alguien que está en línea y nunca lo lee. Más ignorado que Ignoradoman en Ignorolandia.

- ¿Pueden prestarme atención? - vuelvo a interrumpir.

- ¿Te quieres callar de una vez? - suelta él.

- ¡No!

Me mira con odio, si las miradas mataran ya estaría en la tumba.

- Hora de irse - comienzo a empujarlo para sacarlo de una vez y vuelve a ojearme malhumorado.

No entiendo por qué la gente siempre intenta caer bien. Yo disfruto cuando les caigo mal, que no les guste mi presencia. Buajajaja "Qué triunfe el mal".

- Creo que debería irme con él - susurra el mayor.

- ¡Sí! Lárguese usted también - tiro la puerta dejándolo fuera.

Me importa un carajo si está descalzo y con el torso desnudo, lo único que me importa es que podré dormir en paz, aunque vuelvo a sentir asco hacia ese hombre y pena por su esposa, si pudiera decirle lo qu hace su marido con mi madre no me quedaría ningún remordimiento dentro, pero lamentablemente eso no sucederá y tendré que cargar nuevamente con las malas decisiones de Lilith.

Las 3:15 de la madrugada y tengo exámen en la mañana.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro