Yo soy una persona la cual no es de "odiar" cualquier cosa sin tener una muy buena razón para hacerlo, por así decirlo.

Para yo llegar a odiar debe ser algo o alguien muy malo -no exageradamente-, desagradable o simplemente que no me de una buena espina.

Es algo que siempre me a pasado, es como un sexto sentido, ¿comprenden?, bueno no, solo es una vibra extraña que siento con unas cuantas personas, las cuales terminan siendo de mal gusto.

Pues...¿ubican al novio de mi mejor amiga?

¿No? Bueno no importa, el punto es que el es una de las personas que odio, me desagrada, me enoja ver su estúpido rostro y...eso.

Y seguro han de pensar "Son celos" y no ¡no lo son!, simplemente me me molesta que sea totalmente diferente frente a otras personas a como lo es a solas.

Digo, es normal actuar un tanto diferente frente a otras personas, ¿pero a tal punto de tratara su novia como una basura frente a sus amigos?

Yo podría ser...

Quiero decir...¡NADIE TIENE EL DERECHO A TRATAR ASÍ A NADIE!

En un inicio el me caía bien, ¿saben?

Un hombre atento con ella, detallista cuando estaba a solas, o eso es lo que ella me compartía, los primeros meses siempre fueron una gran sonrisa de parte de ella.

Pero de la manera en la que me enteré que no la valoraba frente a otra gente hizo que de mi cabeza saliera humo de el enojo.

Todo pasó en una bella tarde...que de pronto se convirtió en una que jamás olvidaré.

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La fresca brisa chocaba entre los árboles ocasionando sonidos entre las ramas, Jennie me acababa de decir que su novio la había invitado a salír con unos cuantos amigos de él, y yo personalmente no le encontré lo malo, pero al parecer, a Jennie le inquietaba.

-Lili vamos no quiero ir sola...

Me dijo Jennie con su hermosa voz, posando su cabeza sobre mi hombro con delicadeza antes de soltar un micro suspiro que pude sentír.

-Pero irá Kai, no estarás sola.

Le respondí con una sonrisa cálida mientras veía sus hermosos cachetes inflados por su tierno puchero, esa mujer es hermosa.

-Es que...

Murmuró, esas palabras fueron las que me hicieron sentir extraña y aceptar a su petición, ya que hubo algo extraño en ella y en sus palabras, sentí que ella de verdad quería que fuera por algún extraño motivo, y yo no me podía negar a esa linda cara.

-Está bien, iré, pero llegaré unos 10 minutos después, antes tengo que pasar por un paquete.

Le dije son desvanecer mi sonrisa y al instante una enorme felicidad se pintó en su rostro, como si la hubiera salvado de algo que en ese momento no sabía que era exactamente.

Solo pensé que a Jennie le gustaría estar conmigo ya que no conoce muy bien a los amigos de Kai.

-Eres la mejor Lali, ¡te amo!

Habló Jennie con un tono de voz super feliz, dándo un beso con sus suaves labios en mi mejilla, cosa que hizo que mi corazón estuviera en las nubes.

[♡]

Unos minutos antes de ir con Jennie, salí a recoger mi paquete, el cual era un pequeño regalo para Jenn, se lo pensaba dar en la fiesta que iba a hacer un buen amigo mío, y pues invité a Jennie, solo que no contaba con que ella invitaría a Kai.

Pero ese no es el punto ahora.

Recogí mi paquete correspondiente, firmé el recibo, lo dejé en mi apartamento y me dirigí hacia el lugar donde estaba Jennie, Kai y sus amigos lo más rápido que pude.

Seguía teniendo una mala espina sobre el porqué Jennie quería que yo vaya, y eso me hizo acelerar el paso.

Digo, es normal que una persona quiera que la acompañe, pero al ser su novio cualquiera quisiera tener su tipo a solas o con los amigos de el otro, pero no es normal, o al menos no en ella.

Además, no quería parecer entrometida ante los ojos de nadie, y llegar ahí sería ser una intrusa, o al menos así lo veo yo.

Cuando llegué a aquel parque, vi a mis lados para ver donde se encontraban, hasta que vi un grupo de personas, no muchos, unas 3 o 4 además de Jennie y Kai, a los cuales reconocí al instante.

Caminé sigilosamente tratando de no ser ruidosa, pues quería sorprender a Jenn ya que me encanta sorprenderla, su expresión es la mejor ya yo haya visto en la vida.

Es como la de un pequeño gatito asustado.

Me puse tras el árbol lista para dar mi aparición hasta que escuché algo que me desconcertó demasiado.

-Jennie anda a comprar agua para todos.

Escuché la voz de Kai mandarle a Jennie, pero no era cualquier tono de voz, no, era uno autoritario, algo que no me agradó para nada.

Es decir, ¿qué le costaba decirle de una mejor manera?

-Hey, hey, no es necesario Kai.

Respondió unos de los amigos de Kai, creo que no era la única que miraba mal tal acción y tono de voz de Kai.

-No no, ella lo puede hacer, anda.

Volvió a mandar y Jennie sin decir ni una sola palabra se dirigió hacia un pequeño supermercado que quedaba cerca del parque.

Eso me hizo enfurecer más de lo que ya estaba, ¿quién se cree para mandarle a mi Jenn?

Lo que me de verdad me enojó aún mas es que ella le haya hecho caso...

-Oye Kai, no deberías hablarte así a Jenn, es tu novia hermano.

Dijo la voz un chico, el cual supongo era amigo de Kai y con el que estoy muy de acuerdo.

Jennie era su novia, y si no lo fuera tampoco tendría porqué hablarle así, no era correcto mandar a las personas de esa manera, habían varias formas de pedírselo de una manera mas...

No se.

Pero esa no era la manera.

-Tiene razón hermano, Jenn se ve que es una buena chica, valorala.

Dijo otro chico que se encontraba así.

Al parecer los amigos de Kai son más inteligentes que él.

Quitando el echo de que es Jennie y es su novia y todo eso, igual era respeto hacia una persona.

-Nah, igual no me dejará, muere por mí.

Habló Kai antes de que Jennie regresara con los brazos llenos de botellas de agua.

¿Por eso quería que viniera?

-Gracias Jennie.

Escuché agradecer a unos de los amigos de Kai.

-¡Nini! ¡Llegué!

Dije saltando desde detrás de el árbol para darle un abrazo por detrás a Jennie.

Ella me recibió el abrazo como si la hubiera salvado, sin duda esa fue la gota que colmó el vaso con Kai.

-¿Lisa? No sabía que vendrías...

Kai habló con una sonrisa más forzada que...

Lo siento, no se me ocurrió nada para comparar.

Pero ese no es el punto.

-Oh, ellos son mis amigos.

Si Kai, los cuales oficialmente me caen mejor que tu solo con un par de palabras.

-Mucho gusto.

Dijeron 3 personas al mismo tiempo. Pude reconocer cuales eran los que habían hablado, y uno más el cual no lo había escuchado antes.

-Igualmente.

Y después de ese día, todo tuvo más sentido para mí, pues por eso Jennie me pedía que la acompañase a cada salida, por eso se notaba decaída por las noches, por eso se ponía triste cuando no podía acompañarla.

Pero...

¿Por qué no le termina?¿Por qué aguantaba tal actitud de Kai?

No tenía una respuesta clara en ese instante, miles de preguntas se me formaron en la cabeza esa misma tarde.

Jennie era una mujer que se hacía respetar, ¿qué pasó ahí? ¿Por qué no lo mandó a volar desde que toda esa actitud empezó?

Miles de preguntas, sin poder responderlas por mi propia cuenta.

Ya que yo no era la de la relación...

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