Historia Original, personajes de propiedad de Masashi Kishimoto.

Aclaración: Infidelidad (como que últimamente todas tienen esto ¿no? XD), Sexo explícito, lenguaje soez. Me olvidé de decir: personajes con OoC (aunque lo habrán notado XD)

Botado

Naruto maldijo interiormente cuando la mirada de Hinata se clavó en la rubia y entrecerró los ojos al mismo tiempo que su cuerpo se tensaba.

Shion abrió la boca y la cerró como pez fuera del agua, sus ojos saltones también ayudaban a la imagen. Él pensó que Hinata se movería, y lo hizo pero no para separase de él, sinó que subió la pierna que estaba casi arriba de Naruto, terminando a horcajadas. Naruto apretó la mandíbula, porque ella ni siquiera disimulo cuando apretó su sexo contra el de él.

—¿Quieres unirte rubia?— preguntó Hinata sin apartar la mirada de Shion.

Naruto se aguantó la risa cuando no sólo el rostro de Shion se volvió rojo tomate, sino también el de Sasuke. Pero Hinata no había terminado.

— Él tiene una polla que puede complacer a dos mujeres—, dijo con diversión y guiño un ojo. Su mirada volvió a Naruto—. ¿O no, nene?

Naruto no pudo contener el gemido cuando ella se restregó contra su polla dura con firmeza. No sabía en qué momento había cerrado los ojos, pero los abrió cuando la puerta se cerró con fuerza. Su mirada fue a la puerta justo cuando Hinata resoplaba y salía de arriba de él. La mano de Naruto se apretó contra su espalda, intentando que se quedará dónde estaba, pero ella salió igual.

—Que aburrida—, dijo mientras tomaba su mochila.

Naruto atrapó la otra correa y le arrebató la mochila, dejándola con un movimiento de mano en la mesita de luz. La otra se estiró para cerrarse sobre el brazo de Hinata y la empujó hasta que cayó sobre él. Hinata pegó un chillido y río divertida.

—Ven acá, provocadora—, dijo en voz baja y ronca, tomando su rostro y haciendo que pegue su boca a la suya.

Hinata rió mientras él besaba su boca con pasión, queriendo tanto follarla pero sabía que no podía.

—Eres mala—, dijo sobre su boca cuando ella no le contesto a su beso plenamente.

Naruto abrió los párpados para mirarla, sus ojos brillaba mientras la sonrisa más hermosa adornaba su rostro. Él no pudo evitar morder la curvatura de su exuberante labio grueso. Naruto gimio cuando Hinata acarició su polla por arriba de las sábanas y el boxer.

—Mmm, ¿Te gusta la idea de follar a dos mujeres?— le preguntó con voz sensual.

Naruto se mordió el labio y apretó sus manos en la cintura de Hinata mientras ella seguía acariciando lentamente su eje adolorido.

—¿No es la fantasía de muchos?— preguntó con respiración algo agitada. Hinata rió un poco y él gimió—. ¿Cuál es tu fantasia? ¿Follaste alguna vez con una mujer?¿O un trío?

Naruto respiraba cada vez más duro mientras Hinata ponía la mirada pensativa, pero sin dejar de tocar su polla.

—No he hecho tríos, pero si he follado con una chica—, admitió.

Naruto gimio.

— Cuéntame— le rogó con ojos pesados.

Hinata se mordió el labio y llevó su otra mano para bajar la sábana. El cuerpo de Naruto se endureció cuando ella uso esa misma mano para bajar su boxer lentamente, su polla saltó como resorte tieso. Los ojos pesados de Naruto fueron a su rostro cuando ella se llevó una mano a la cara. Él sintió que el fuego se triplicaba en su cuerpo cuando se dió cuenta que estaba mojando su mano con saliva.

Todo su cuerpo estaba duro como roca cuando ella cerró su mano mojada sobre su eje, sus dedos bailaron por su miembro mientras Naruto siseaba.

—Fue hace tiempo, pero me gustó mucho—, Naruto la observó, jadeante—. Ella era muy linda, caliente—, Naruto se apresuró a quitarle la remera con las manos temblorosas. Gimoteo al ver su sostén de encaje negro.

—Sigue..— le pidió mientras acomodaba mejor su espalda en las almohadas, su mirada nunca dejó su rostro.

Naruto apretó las manos en el colchón cuando ella cerró su mano y comenzó a acariciarlo de arriba hacia abajo.

—Mientras me besaba—, empezó Hinata con voz baja y ronca, ella subió su mano libre a la comisura de su boca y comenzó a bajar. Naruto jadeó cuando llegó a su sostén y lo bajó un poco para que viera su pezón duro—. Ella comenzó a tocarme las tetas. Luego, me los chupó muy rico.

Naruto gimio tirando la cabeza hacia atrás al ver qué ella se apretaba el pezón, sumado a su movimiento de mano sobre su polla dura como granito, él terminó temblando.

—¡Oh! Mierda. Me estás matando—, se quejó—. Sigue—, pero él no abrió los ojos y gimió más duro cuando ella uso las dos manos para masajearlo.

—Yo también se los chupé...—, siguió Hinata y Naruto no pudo evitar imaginar cada palabra que ella decía.

En su cabeza estaba Hinata con una mujer desconocida, él podía escuchar los gemidos de ambas. Naruto había visto las caras de Hinata mientras follaba, sabía los ruidos que hacía y eso sólo lo puso como un tren. Demasiado pronto, estaba gimiendo agarrando con fuerza el respaldo de la cama. Su estómago estaba tenso mientras más se acercaba al borde. Fue consciente que Hinata estaba usando su rodilla para frotarse el coño cubierto de jean, mientras lo masajeaba con lentitud.

— Más... Más rápido— le rogó Naruto mientras apretaba más su rodilla contra ella.

Hinata había dejado de contar y estaba gimiendo con él. Naruto reconoció que ella estaba cerca de correrse también. Él levantó la cabeza de la almohada para verla y gruñó con lo que vio. Hinata con ambos senos fuera del sostén, sus pechos saltaban cada vez que ella se movía. Sus pezones estaba muy fruncidos y duros y a él se le hizo agua la boca.

Su cabeza cayó hacia atrás de nuevo cuando Hinata apretó particularmente fuerte y acarició sus testículos.

—¡Joder! Me voy a correr—, se quejó sin aire.

Hinata se corrió cuando terminó de hablar, gimiendo su nombre con éxtasis y él la siguió. Sus manos se apretaron en el cabecero y terminó arqueando la espalda y cadera hacia arriba, ayudándose con las piernas tensas. Su semen salió disparado como una fuente, cayendo en su remera y en las sábanas. Hinata se desplomó sobre su pecho mientras ella también tenía réplicas y él al fin podía relajar su cuerpo en el colchón.

Naruto acarició su cabeza cuando logró dejar la madera y sonrió entre la respiración agitada.

—Mierda. Eso fue caliente— y rió un poco.

Hinata se rió en su pecho.

—Oh, si.

Continuará...