Jimin había despertado mucho antes de la hora que comúnmente él despierta. Quería por lo menos desayunar con su pequeño hijo. Lamentaba mucho el hecho de no poder dejarlo en el preescolar, al menos prepararle el desayuno y desayunar con él.
 
Era algo, ¿No es así?
 
Una vez listo el desayuno, se dirigió a la habitación de su hijo, el cual se encontraba hecho bolita entre sus sábanas de Pororo. Buscó su uniforme escolar y procedió a plancharlo para luego dejarlo a un lado de la cama de Jin.
 
—Jin ― le habló bajito ―bebé despierta...― Jimin observó como su pequeño abría de poco a poco sus ojitos, Jimin le sonrió dejando un pequeño beso en su frente. ―Buenos días, bebé.
 
—Buenos días, papi ― Jimin sonrió al escuchar la tierna, dulce y algo ronca vocecita mañanera de Jin.
 
—Vamos, bebé, te preparé el desayuno.
 
—¿Desayunaras conmigo, papi? ― los ojitos de Jin brillaron, Jimin sonrió asintiendo.
 
—Si bebé, anda vamos, que el tío Yoongi no tarda en llegar también.
 
Jimin tomo la manita de su pequeño y así ambos se dirigieron a la cocina para ir asentarse al comedor.
 
—¿Te divertiste en la pijamada con tus tíos? ― Preguntó Jimin, entregándole un vasito con leche chocolatada.
 
—¡Si! Fue muy divertido, papi. Mis tíos aceptaron ver Pororo conmigo.
 
—¿Sí? Me alegra mucho, bebé.― el timbre de la puerta de la casa sonó.― debe ser tu tío Yoongi.― Jimin se dirigió a la puerta y si como lo dijo era Yoongi. Se saludaron y así ambos se dirigieron a la cocina.
 
—¡Tío Yoonie! ¡Buenos días!
 
—Buenos días, osito.― saludó Yoongi con una linda sonrisa.
 
—Ya terminé mi desayuno, papi. ― anunció el pequeño.
 
—Bien cariño, anda y ve a labarte los dientes, si necesitas ayuda me hablas.
 
—Sí, papi.― el niño bajó de su silla y salió corriendo hacia el baño.
 
—¡Bebé, no corras! ― escuchó un "Está bien, papi" y sonrió.

—Aprovechando que Jinnie se fue, anda dime ¿Qué tal la pasaste?
 
—Pues verás ¿Bien? Mi jefe estuvo en el mismo lugar... En un principio nuestra charla fue ¿rara?... Por cierto, Lee TaeMin me las pagará ¡Me abandonó! y por el amigo escritor de mi jefe. ― Yoongi rio negando ― En fin... al final mi jefe me invitó la cena y la charla fue agradable...
 
—Al menos te divertiste, Minnie.― le sonrió ― Jinnie se portó excelente. Y logró que Taehyung aceptará ver Pororo ― Yoongi rio al recordar el tierno puchero que tenía su esposo al estar viendo Pororo por petición de Jin, Taehyung odiaba ver esa caricatura animada, pero con un tierno puchero y unos cuantos pestañeos por parte de Jin, Taehyung termino aceptando.
 
—Eso me comentó ― Sonrió ―, además mi pequeño siempre se porta bien.

 
Jimin se encontraba ya en la entrada del enorme y lujoso edificio donde él trabajaba, tomó un respiro y se adentró, dio unos cuantos pasos más cuando alguien chocó con el tirándole café en cima (que por suerte estaba frío), Jungkook y NamJoon también iban entrando detrás de él.
 
—¡Dios mío! Y-yo ¡Lo siento mucho! ― dijo un chico de baja estatura, el otro rubio no paraba de dar reverencias y mirándole como un cachorrito asustado―. ¡Le pagaré la tintorería!
 
—Oye, tranquilo ― le sonrió amable ―no te preocupes, de todos modos, está era una de mis camisas viejas ―dijo bromeando para tranquilizar al chico.
 
—De verdad, lo siento mucho... ― le dijo apenado, Jimin sonrió enternecido, el chico por alguna extraña razón le recordaba a su hijo.
 
—Ya, no te preocupes. ―Nadie había notado el ceño fruncido de Jungkook ―¿Cómo te llamas?
 
— JiHoon... Jang JiHoon.― el chico le sonrió tímido.
 
—¿¡Eres el nuevo escritor!? ― Jimin le restó importancia a su camisa manchada de café.―De verdad quedé encantado con lo que enviaste. ¿Cuántos años tienes?
 
—Veinte... ― le sonrió.
 
—Oh... Yo tengo veintitrés. De verdad eres más joven que yo y escribes maravilloso ― le alabó.
 
—¡Muchas gracias! ― el chico se sonrojó.

—Awww, ¡eres muy tierno! ― Jimin chilló y abrazo al chico, quien tímido correspondió al abrazo.―me recuerdas mucho a mi hijo.
 
—¿Tiene un hijo, Hyung? ― Jimin solo asintió y se separó del abrazo.
 
—Si, veras...
 
—Jimin ― Jungkook habló ya harto de ver cómo Jimin se comportaba meloso con el niño ese ―Toma. ― todos los presentes se miraron asombrados por la escena que estaban mirando con sus propios ojos, Jungkook se había quitado su saco para dárselo a Jimin.
 
—Gracias... ― Jimin lo acepto sonrojado, Jungkook hizo un ademán restándole importancia y miró al otro rubio.
 
—Tú ¿Eres el nuevo? ― este asintió intimidado ―acompáñame.
 
Jimin le deseo suerte a JiHoon y este le agradeció.

Jimin se encontraba afuera de la oficina de su jefe esperando que terminara su entrevista con JiHoon.
 
Park observo como la puerta de la oficina se abría y de ahí salía JiHoon, quien al verlo le sonrió enormemente.
 
—¡Hyung! ― sus ojos se achinaron al sonreír.
 
—Hoonie ¿Cómo te fue?
 
—¡Muy bien, Hyung!, Ya me asignó una oficina y dijo que muy pronto me enviaría un editor.
 
 —Me alegro mucho por ti. ― Jimin le sonrió.
 
—Gracias, Hyung. ― JiHoon desprendía un aura de inocencia y amabilidad, en cuanto lo vio algo le dijo que tenía que cuidar de él.
 
—Bien, ya es hora del almuerzo, te veo en la cafetería ― el menor asintió frenéticamente―. Bien nos vemos ― Jimin se despidió de él y entro a la oficina de su jefe.―Buenos días señor Jeon.
 
—Ahora solo soy el señor Jeon, ¿dónde quedo el "Jeon"? ¿O simplemente el "Jungkook"?
 
—Bueno, ayer no estaba en horas laborales. ― Sonrió ― ¿Necesita algo, señor Jeon?

—No, solo toma asiento, necesito hablarte de algo.― dijo Jungkook colocando una silla al lado de él.― En una semana necesito ir a la casa de mis padres y tú vas acompañarme.
 
—¿Qué? ¿Yo? ¿Por qué?
 
—Eres mi asistente, tu trabajo es asistirme— sonrió de lado—. Si necesito algo tu debes estar para mí— Jimin rodó los ojos y exhaló.
 
—Entiendo... ¿Por cuánto tiempo nos iremos? Como ya sabe tengo un hijo.
 
—Serán solo dos o tres días, además no saldremos del país, iremos a Seul.
 
—Está bien. Gracias por avisarme con tiempo, creo que mi cuñado podrá cuidar a mi hijo.
 
—De acuerdo. ¿Cómo pasaste la noche? ¿hubo resaca?
 
—No, realmente no bebí demás. Sólo que nuestra plática fue sumamente rara...
 
—¿Rara? ― Jungkook posó su mano como pudo en la delgada cintura de Jimin.
 
—JungKook, ¿Qué diablos haces? ― dijo Jimin con el ceño fruncido, viendo como Jungkook se acercaba lentamente a él. Los dos estaban demasiado cerca y Jimin podía sentir la respiración de Jungkook. Jimin relamió sus labios observando como Jungkook se acercaba y posaba su mano desocupada a su nuca, Jimin se estremeció al sentir el roce de sus labios con los de Jungkook.
 
¿Realmente se iba a besar con su jefe?
 
—No sabes lo mucho que deseé besarte...― susurro sobre sus labios, Jimin cerró sus ojos rendidos esperando ser besado ¿Para qué negarlo? El sí quería ser besado por su jefe―. Y no niegues que no quieres esto... ― Jungkook rozó sus labios de nuevo ―Anda Jimin acepta una noche conmigo, nos vamos a divertir mucho...
 
Jimin se separó un poco y frunció el ceño nuevamente y quitó bruscamente la mano Jungkook la cual anteriormente se encontraba en su cintura.
 
—Entonces, yo solo soy un polvo más— Jimin bufó y se alejó completamente de Jungkook ―. Yo no seré una de tus putas Jungkook. No aceptaré tu estúpida idea de un solo polvo. Eso no va conmigo, las personas se conocen, se gustan, se aman y terminan en una relación. No en un simple acostón.
 
—Yo no... Yo nunca tuve que rogarle a nadie para un simple polvo siempre he tenido a quien yo quiera sin esfuerzo alguno. No sé lo que es pasar por un estúpido proceso para tener sexo con alguien...
 
—Si quieres algo conmigo no conseguirás nada así.

—Entonces ¿Qué debo hacer, Jimin? ― preguntó ― ¿No te gusto? Dime Jimin ¿Qué tengo que hacer?
 
—JungKook... Tú solo buscas un polvo conmigo, solo eso, para que después olvides todo y hacer como que no pasó nada... Pero yo no, no quiero un simple polvo. Yo no soy así. Yo no estoy buscando lo que tú buscas, Jungkook.
 
—¿Qué es lo que buscas, Jimin?
 
—Yo... Quiero a alguien que me ame, quiero a alguien que esté dispuesto a escucharme y respetarme. Jungkook yo no estoy para estas cosas de tener sexo sin compromiso, tengo un hijo y ese no es un ejemplo que quisiera darle a mi pequeño. Yo busco un compañero de vida, no busco a alguien que sólo dure una noche y luego me olvide— Jimin agacho su mirada —Y tú, Jungkook, eres exactamente lo que no quiero, eres lo contrario a lo que yo estoy buscando. Tal vez yo te tome en serio cuando estes dispuesto a cumplir lo que yo quiero. Por el momento no estoy dispuesto a tener un solo polvo contigo.
 
Luego de eso Jimin se dio media vuelta para salir de la oficina con el corazón acelerado y con un nudo en la garganta. Se siente un completo idiota ¡Estuvo a punto de aceptar un beso de su jefe! Pero claro el solo era un simple polvo y definitivamente no iba aceptar eso. El merecía mucho.
 
Aún con los nervios a flor de piel se dirigió a la cafetería, tal vez Jihyo y ese tierno chico, JiHoon logren distraerlo.
 
Jungkook se sentó en su silla bruscamente y bufando, odiaba rogarle a alguien, pero algo le decía que Jimin valía la pena. Jimin era muy complicado, le parecía alguien inalcanzable.
 
Sabía que si continuaba podría lastimar a Jimin, no quería que Jimin se enamorara de él. Él jamás podría enamorase de Jimin, ¿O sí? No se enamoraría.
 
No de nuevo.
 
Jimin lo había dejado con miles de dudas en su cabeza ¿Realmente él no se ajustaba a lo que el buscaba? Realmente no sabía por qué aquellas palabras le habían dolido. ¿Cómo haría para volverse lo que Jimin buscaba?
 
No lo sabía, pero definitivamente lo conseguiría.

Holiis, eso es todo por el capítulo de hoy. Espero os guste y nos vemos mañana. Gracias por todo y se despide:

–almin♡