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Capítulo 13

Salíamos del cuarto de interrogatorios, pero un grito femenino nos detuvo.

Era la señora O"Connell seguida de su esposo y detrás de ellos la cabo primero Smith. La última no hacía más que demostrar su preocupación y disculpas con la expresión que llevaba consigo en su rostro.

- Les dije que esperaran afuera, pero ellos entraron y-

Se dirigía al sheriff.

Recuerdo haber compartido un par de cursos con ella hasta que se mudó. Veo que al igual que yo, decidió volver .

-Tranquila cabo, regrese a sus quehaceres.

Smith se retira intentando caminar rápidamente con dirección a su oficina.

-¿ Qué se le ofrece señor y señora O"Connell ?. - Intentaba calmarlos, era obvio que mi presencia allí no era del agrado de ellos.

El señor O"Connel tomó a su esposa a modo de demostrar que la apoyaba en sus palabras. Su postura no indicaba más que dominancia y aire amenazante ante mi.
Tengo sorpresivamente miedo. El oficial se ubica delante mío haciéndome a un costado y poniendo su mano derecha delante de sí a modo de pedirle a la pareja que se calme.

- Señores. Les recuerdo nos encontramos en una comisaria. Y que como oficial de ella no estoy dispuesto vaya a ocurrir un alboroto dentro de ella. Menos cuando la señorita aquí presente no ha actuado para incitarlos a tal hecho y siendo que han entrado a estas dependencias con aire de prepotencia.

La señora O"Connel mira a su marido. Este mantiene su estilo de elegancia...tal cual como lo recordaba. Era el padre de un joven que se graduó seis años antes que yo. Lo ubicaba. Se sacaba excelentes notas e incluso obtuvo un reconocimiento en la escuela. Siempre se le veía feliz con sus amigos. Definitivamente se parecía a su padre...y bueno, Ava a su mamá.

- Nos enteramos que esta niña estaría aquí hoy -dijo el esposo.- No la queremos aquí.

<<Woo, esto está sobrepasando límites>>

No hablé, me limité a escuchar.

- ¿Por qué ella ha de no estar acá? Discúlpenme, pero ella tiene el mismo derecho que ustedes de pisar este recinto y los que ella plazca al menos hasta no ser comprobado que ella es culpable.

<<No esperaba eso>>

-Oficial, le pido no hable de ese modo en frente nuestro. ¿Sabe cuántos movimientos necesito hacer para que su cargo sea removido?.

<<Ay no. No, no. Olvidé lo poderosa que es ésta familia dentro de la región. Maldición.>>

El oficial no espera mucho para responder. La seriedad se apoderó de su rostro y es que siquiera noté el momento en que la situación se puso tan tensa.

Pero él rompe el silencio.

- O"Connell. No me intimidarás con tus juegos de poder e inmunidad. Puedes jugar sucio como te plazca, pero te diré algo. Tengo en el archivero los datos de algunas estafas de las cuales te han demandado un par de ex- colegas tuyos. No importa lo que hagas, créeme que en estos mismos momentos puedo ir y resolver todos los delitos que cometiste robándole a personas inocentes que ahora se encuentran viviendo por culpa tuya en la calle. La pregunta es, ¿ qué prefieres ?. Ocupe mi tiempo en ello o en descubrir cuál fue la verdadera causa de muerte de tu hija.

Un silencio abrumador se apoderó del vestíbulo. Sólo se oían las teclas pulsadas por quién sabe qué en algún computador por allí.

La señora O"Connell se volvió blanca como un papel. Me pregunto si sabía o tenía conocimiento previo de los pasatiempos de su marido.

Ella lo mira con cólera. Pero él no dice nada al respecto. Es más, ignora ello y se dirige al sheriff.

-Enfóquese en mi hija.

El oficial asintió con la cabeza.

-Eso creí.

O"Connel tomó de la mano de su esposa para retirarse del lugar. Pero ésta la suelta con asco mientras él queda sorprendido al respecto.

-Vete. -Siquiera le dirigió la vista.- Hablaremos en la casa.

Por Dios. No imagino el golpe en el pecho que debe de sentir justo en estos momentos la morena situada a un par de pasos en frente mío. E interiormente pienso en el gran peso y dolor que se suma a la ya conocida mueete de su hija.

Él obedeció.

- Quiero...- las palabras no salían de su boca. Parecía que en cualquier momento caería al piso inundada en lágrimas. Sus ojos ahora brillantes, mirada esquiva intentando no mirarnos a los ojos, y la voz entrecortada intentaron proseguir. Entiendo que como madre defienda a su hija, es lo que mi madre toda la vida ha hecho... es lo que yo hubiese hecho si mi pequeña hubiese llegado a este mundo.- Quiero decirle que no retiraré cargos. Seguiré hasta el final hasta saber qué ocurrió con mi hija. -Al hombre vestido de café e insignia al lado mío, para luego dirigirse a mi-. Mientras que a ti Carrasco, sólo decirte... que...no sé cómo ni cuándo viste a mi hija previamente. ¡Si lo hiciste!. Quién sabe qué ideaste para meterle cosas en la cabeza y sin que yo me diese cuenta. Pero averiguaré...y es que no entiendo. NO ENTIENDO cómo es que mi hija SANA y sin ningún antecedente o desorden mental de un día para otro hubiese cometido... con sus manos...tal horripilante acto.

Y aquel <<horripilante acto>> fue soltado con asquerosidad. Cuando dijo aquellas palabras me recorrió con su mirada de pies a cabeza y no pude evitar sentir escalofríos.

- Señora-

El sheriff quería detenerla, pero ella levantando su dedo índice indicó que faltaba poco para terminar, le estaba pidiendo el último minuto de su tiempo.

- Quizá te sale de maravilla el papel de actriz... ¿o quién sabe?. Tu pasado resultó no ser superado al cien por ciento como aseguran algunos. Pero lo cierto es, que desde que ocurrió aquello, creo que la locura no te abandonó. Que tu familia está maldita y han traído una suerte de maldición al pueblo. Desde allí, desde que esa pequeña, tu hermana, corrompida por cierto por el mismisimo mal se haya despellejado viva en el bosque mientras que tú intentabas salvarla con aquel enclenque en tu vientre... todos los niños fallecidos no han sido más que causa tuya y de aquella mocosa muerta-

-¡BASTA!. Saquenla de aquí- ordenó el oficial.

Ella seguía gritando mientras él la guiaba hasta la puerta que conducía a la recepción.

-No te equivoques...¡morirás al igual que ella! Y pagarás por llevarte a mi hija.

...

¿Qué opinan? Sigo/no sigo
Disfruto escribiendo, aprecio cada apoyo que he recibido de ustedes. Les agradezco

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