-¡Ya estoy en casa! - gritaba Sarada mientras cerraba la puerta y se quitaba las botas. 

-Bienvenida hija - la recibió Sakura.  

La pelirrosa estaba haciendo la cena, mientras Sarada se sentaba en la mesa.

-Hoy hemos tenido un chico nuevo en la clase - empezó a contar la hija. 

Sakura sonrió discretamente para que su hija no lo notase.  Era la primera vez que Sarada le hablaba de algún chico. 

Normalmente protestaba sobre alguna idiotez dicha por Chouchou o si los profesores le hubiesen dado muchas tareas, pero nunca sobre un chico. 

-¿Y como se llama ese chico? - preguntó la pelirrosa. 

-Boruto Uzumaki. 

-¿Boruto Uzumaki? - Sakura se asustó y dejó su cucharón caer en la sopa. 

-¿Mama? - Sarada dejó de apoyar la cabeza sobre su hombro y la miró con preocupación- ¿Todo bien?

-La sopa está lista-  ignoró la pregunta por un momento y puso los platos con sopa de patatas y carne sobre la mesa-Boruto Uzumaki es el hijo de Naruto Uzumaki.

-¿El renombrado profesor de la universidad de Tokyo?  

"Mi madre era profesora"

"Supongo que no era solo su msdre - pensó Sarada-  además eso explica por que es tan inteligente"

-Eso es-  tomó una cucharada por de su sopa- ¿Has visto las noticias ultimamente hija?

-No-  también tomo una cuchara da de su sopa-  ¿Por que? 

-Si las vieras sabrías que Naruto Uzumaki y su familia sufrieron un accidente serio y su família, su esposa; Hinata murió en el acto, su hija menor; murió camino al hospital. 

-¿Y Naruto y Boruto? - preguntó Sarada con curiosidad.

-Boruto es el que menos se hirió; solo heridas leves y nada más. 

-¿Y su padre?

-El esta entre la vida y la muerte - concluyó con tristeza- Naruto Uzumaki se encuentra en coma profundo. 

-¿Cuando ocurrió ese accidente?

-Hace unos seis meses.  - sonrió-  creo que debes ver un poco más las noticias hija. 

-Si..

Boruto acababa de llegar al hospital municipal  de Konoha y fue directo a la recepción.

-Hola vengo a ver a mi padre-  dijo de forma amable. 

-Boruto Uzumaki. ¿Cierto? - él asintió- cuarto 703.

Le entregó una tarjeta con el número de la habitación. 

Se trataba de una tarjeta magnética para avisar que eres un visitante y no un paciente.

Boruto tenía que entregar esto a la recepcionista o sino le caería una multa muy gorda. 

Al llegar en la habitación 703 el vió lo de que siempre veía: su padre en coma y su vida en las manos de unas malditas máquinas. 

-Hola papá.-  lo único que oía como respuesta era el pip de los aparatos- Hoy he conocido a una chica bien guapa...

Acarició el pelo de su padre. 

-... Creo que os llevaríais muy bien.-  sonrió-  Espero que te despiertes pronto para conocerla...

Pip

-... Papá-  cambió a un tono serio- Kawaki sigue dando problemas...

Empezó a llorar. 

-... Ya no sé que hacer papá-  se seca las lágrimas com la manga de la camisa- Ahora mismo necesito uno de tus consejos. 

Kawaki era el hermano mayor de Boruto, siempre dio problemas debido al hecho de ser adoptado, pero Boruto y su familia lo quería como si fuera de su propia sangre. 

Kawaki se quedó muy mal después del accidente,  principalmente por el hecho de que Himawari también se haya ido al igual que su madre. 

Himawari era la hermana mebor de la família y era la que Kawaki tenía un vínculo más fuerte. 

Por causa de eso Kawaki se entregó a las drogas. 

Para Sarada ya era hora de dormir y ella se encontraba tumbada en la cama, pero el pensamiento en un rubio de ojos azules no la dejaba dormir.

"¿Que tal un intercambio de desgracias?"

Esa frase le taladraba la cabeza todo el día.  Sarada se preguntaba si debía contarle algo que ni siquiera Chouchou sabría.

"Mi madre ya no se encuentra en el mundo de los vivos"

En ese momento Sarada se sintió privilegiada por almenos tener un familiar para recibirla al llegar a casa.  Al mismo tiempo sentía lástima de él por eso.

"(...) Soy emancipado y vivo con mi hermano problemático" .

"Bueno.  Al menos Boruto tiene su hermano. ¿vetdad? Es mejor que nada ".

Sarada no tenía idea de lo equivocada que estaba.

Ya eran las nueve de la noche y Boruto por fin llegaba a su casa.

-¿Que es eso? - antes de abrir la puerta el rubio escucho que una canción de heavy metal sonaba a toda pastilla dentro de su casa.

"Ay no. Otra vez no"
Pensó antes de abrir la puerta. 

El rubio solo suspiró y abrió la puerta con miedo de lo que se iba a encontrar.

La canción a todo volumen venía del salón, así que Boruto fue hacía allá. 

Al llegar allí el se encontró con su hermano oliendo una de las tres carreras de cocaína en la mesita del salón. 

Al ver que su hermano había llegado Kawaki lo miró con una sonrisa y las pupilas dilatadas.

Boruto no dijo nada. Solo fue hacia la radio y la apagó. 

-¡Hermanito! - Kawaki se fue corriendo para abrazar a su hermano.

-No me toques-  le empujó y este cayó al suelo.

-¿Que te ocorre hermano? - se sentó- ¿Es que no estás contento de verme?

-No de esa forma-  Boruto lo cogió por el cuello de la camisa y lo llevó arrastras hasta la puerta.

-Eh. ¿Que vas a hacer?  - preguntó dejandose llevar. 

-Sacarte de aqui - descia mientras llegaba a la puerta. 

-O no, la clínica otra vez no-  protestaba Kawaki.

-¡Callate!

Kawaki empezó a patalear el suelo para huir del agarre de Boruto. 

-¡No quiero ir, no quiero ir! -Kawaki consiguió sacarse la camisa y salir del agarre del rubio-He dicho que no quiero ir. 

Kawaki le da un puñetazo en el ojo de Boruto. 

El Uzumaki no pensó dos veces y le devolvió el golpe con un gancho de derecha que acertó su mejillas e hizo Kawaki escupir 3 dientes.

-¡Me las vas a pagar hermano! - Kawaki cargó contra el rubio, pero Boruto fue más inteligente. 

Él abrió la puerta en el último segundo, haciendo con que Kawaki se tropezara en el pequeño tramo de escaleras que separan la entrada de su chalet y la calle. 

Kawaki tardó unos segundos en notar que estaba caído en el suelo, pero cuando lo hizo volvió a cargar contra su hermano y Boruto cerró la puerta en él último segundo.

-¡Hermano! ¡Abre la puerta hermano! - mientras Kawaki gritaba y golpeaba la puerta, Boruto usó la camiseta que éste se habia quitado y lo usó como máscara. 

La máscara era para que cuando el vaya a coger la cocaína no la acabe aspirando sin querer.

-¡Soy tu hermano mayor y tienes que respetarme! ¿Me oyes? - Boruto lo ignoró y fue a por una bolsa. 

Con ayuda de un cuchillo Boruto consiguió arrastrar el polvo hasta la bolsa de cierre al vacío y la cerró con toda la droga dentro.

Antes de hacer lo que tenía que hacer, Boruto echó un vistazo en los armarios, por si su hermano hubiese ocultado más drogas.  No encontró nada. 

Kawaki seguía gritando para que le abriera. 

-¡Abre hermano! - Boruto abrió la puerta, pero no fue para dejarlo entrar.

Fue para darle una patada en la cara rompiendole la nariz y tirandolo a la calle.

-¡Llévate está mierda contigo! - le tira la bolsa con la cocaína.  

-Pero si... No tengo sitio a donde ir-  apeló para la fibra sensible de Boruto, no funcionó muy bien.

Boruto le tiró un fajo de billetes.

-¿Que es eso?- le preguntó.

-50 mil yenes.-  explicó con un tono poco usual para el rubio; era frío y sin sentimientos- podrás vivir en una buena pensión por unas 3 semanas. 

-¡No puedes hacerme esto! - gritó Kawaki con lágrimas en los ojos- que puedo, la casa es mía.

-A papá no le gustaría ver esto-  a Boruto le hirvió la sangre al oir eso. 

-Exacto-  había odio en la mirada de Boruto, odio y tristeza- el sentiría vergüenza del hijo que él acogió estar en una situación deplorable como está. 

Boruto cerró la puerta.

-Vete antes de que llame a la policía-  dijo desde adentro. 

Kawaki se levantó murmurando un.

-Me las vas a pagar, me las vas a pagar,  me las vas a pagar-  abrió la bolsa y olio la sustancia- Si... Me las vas a pagar. 

Y así empezó a caminar sin rumbo. 

Dentro del Chalet Boruto se sentó de espaldas en la puerta y empezó a llorar. 

En un período de 6 meses Kawaki escapó de diez clínicas distintas y él vió que su hermano ya no tenía remedio. 

"Papá necesito tu ayuda"

Lo sé era para ser semanal, pero estoy inspirado y quiero adelantar algunos capítulos por si me quedo sin internet. 

Adios...