Sakura había llegado a la cafetería donde siempre hablaba con su amiga rubia. 

Ella le buscó hasta escuchar uns voz chillona llamándome. 

-¡Frentona! - decía Ino mientrss levantaba la mano- ¡Aquí!

-¿Hace falta que grites tamto? - preguntaba mientras se acercaba.

-¿Quien sabe? - Ino se encogió de hombros- Dicen que con la edad vas perdiendo la visión. 

-¡Mis oídos están perfectamente Ino-cerda! -le gritó. 

-Si, si... Lo que tú digas - Ino sentó y le acercó a Sakura una taza de té- Toma ya hice tu pedido. 

-¿Para que me has llamado? - preguntaba la pelirrosa mientras se sentaba. 

-Como sabes Minato-chan vino a mi casa ayer por la noche pidiéndome un favor. 

-¿Él querría que me convencieras para hacer el transplante ocular? - preguntó la pelirrosa antes de tomsr un sorbo de su té- Sabes muy bien que no puedo hacerlo.

-Él no me pidió que te convemciera - explicó Ino- él me pidió que haga la operación por ti. 

-Si que es un buen chico-  comentó la pelirrosa mientras veía el reflejo de si misma en el té.

-Lo es, pero yo no quiero hacerlo - explicó la Yamanaka- quiero que lo hagas tú. 

-¡¿Yo...?! - ella se apuntó a si misma- ¡Ino sabes que yo no puedo hacerlo! - luego bajó la voz con un tono melancólico- No quiero perder a nadie más por culpa de un trabajo mal hecho. 

-Sasuke sabía que esos ojos eran defectuosos -explicó Ino algo alterada- nadie tiene la culpa salvo él mismo. 

-Yo lo sabía y aún así hice la operación-  comentó Sakura- por lo tanto yo tengo parte de la culpa.

-Sakura - Ino suspiró cansada- como médico ya he perdido muchos pacientes y sé que es difícil, sientes que no hiciste lo suficiente, siempre piensas que podrías hacer algo más pero, lo único que puedes hacer es deguir hacia adelante - explicó de una forma amable- y lo único que te pido es que sigas hacia adelante. 

-Ya pero - aprietó los puños- es una cirugía muy arriesgada y no se si podría hacerlo. 

-En la medicina hay veces que tienes que correr riesgo - puso su mano junto a la de la pelirrosa- ¿Quieres que Mikoto-chan pierda la visión? ¿No verdad? 

-Tú.. ¿podrías ayudarme a hacerlo Ino-cerda? - le preguntó humildemente. 

-Por supesto frentona - le respondió con una sonrisa. 

En el otro lado de la ciudad Boruto había ido a visitar a la novena Hokage para ayudarle con su plan de interceptar a la chica cuyo nombre en clave es Argo. 

-Que sepas que estoy completamente de acuerdo contigo, ¿pero no crees que estás yendo demasiado lejos - preguntó la Hakage al encender su laptop. 

-Yo no confío en ella Sarada - dijo Boruto-  y por eso quiero mantenerla vigilada. 

Sarada iba a responderle pero, notó que alguien había aceptado la video llamada. 

-Sarada-san,  Boruto - dijo el hombre al otro lado de la pantalla- ¿Que es tan urgente como para realizar una videoconferencia conmigo?

-Saludos Tentou - dijo Boruto- vengo para pedirte que actives la red de espionaje compartida de las 5 grandes naciones para seguir una muchacha - saco una foto del bolsillo y la pone sobre la mesa- Su nombre es Argo y se dirige hacia la villa de la lluvia en estos momentos. 

-¿Y para qué solicitas una medida tan extrema par esa chica? - preguntó Tentou en un tono serio. 

-Argo es conocida como vemdedora de información.-  explicó Naruto- Sabes muy bien que esa clase de persona suelen vender a su mejor a amigo por unas cuantas monedas.

-¿Y que te hace pensar que esa chica es igual que los demás? - preguntó Sarada- Tu inteligencia ya averiguo que Kirito-san la conoce desde hace tiempo, así que él debe de tener plena confianza em ella. 

-Lo que pasa es que yo no confío en ella-  dijo Boruto que estaba de brazos cruzados detrás del sillón de la Hokage- ¿Puedes hacerlo Tentou?

-Mira Boruto la cuestión no es si puedo hacerlo o no - explicó Tentou- la cuestión es que podría ser catastrófico políticamente hablando. 

-Ai... - el capitán general suspiró- sé muy bien que nos estamos arriesgando a romper un tratado económico que nos favorece a ambas partes y que Kirito podría interpretarlo como traición.  -los dos líderes permanecieron en silencio- Enteded mi lado, solo quiero comprobar si ella es de fiar. 

-¿Como piensas hacerlo? - preguntó Sarada temiendo la respuesta. 

-Pienso interceptarla justo al entrar en el país del fuego - respondió seriamente- luego la interrogaremos y le sacaremos cuales son sus verdaderas intenciones - luego susurró- Creo que Inojin será perfecto para el trabajo. 

-¿Y por eso piensas accionar la red de espionaje compartida? - preguntó el Daimyou- ¿Para monitorear sus pasos hasta llegar en la frontera?

-La red de espionaje es más un as bajo la manga - contestó antes de sacar un munitor GPS- Kirito le puso un sello rastreador a la chica y con esto puedo seguir sus pasos, caso ella lo descubra y decida romperlo...

-Si es que ya no lo ha hecho - comentó Sarada.

-La red de espionaje se encargará de rastrearla - terminó de explicar el Uzumaki. 

-Muy agudo Boruto - le elogió Sarada- se nota que papá te entrenó bien. 

-Muchos de mis éxitos profesionales se lo debo a él, Sarada - comentó el rubio. 

-Mira Boruto... - Tentou suspiró- que conste que lo haré por nuestra amistad, pero que sepas que si eso sale mal me veré obligado quitarte tu puesto de capitán general y - luego miró a Sarada- Konoha tendrá que buscar a otro Hokage. Fin de la transmisión. 

Tentou cerró la llamada y Sarada dio un leve suspiro antes de mirar a Boruto. 

-Espero que estés contento - dijo en un tono de preocupación- acabas de poner en riesgo nuestras carreras como Shinobi.

-Piensa de una forma más optimista Sarada - dijo Boruto con una sonrisa- Si ella no tiene nada que ocultarnos la escoltaremos hasta la frontera con la villa de la lluvia. 

-¿Y si eso sale mal qué?¿Y si al final tienes razón y ella es en verdad una traidora?

-Tú te encargarás de explicarle a Kirito por qué su preciada amiga ya no se encuentra en el mundo de los vivos. 

-¡De eso ni hablar! - Sarada se levantó en ascuas y fue hacia Boruto- ¡La llevarás de custodia hacia el país del hierro donde será juzgada con sus leyes! ¡¿Entendido?!

Em ese momento Boruto empezó a reírse de la azabache. 

-¿Acaso crees que soy Danzou, Sarada? - dijo entre risas- sabes muy bien que yo lo intentaría por la via legal y no provocaria una quinta gran guerra Ninja.

-Eres un pedazo de idiota - resopló la Hokage- ¿Y que piensas hacer realmente?

-Yo no podré cuidar de esta misión personalmente ya que estaré ocupado escoltándote a la cumbre de los cinco Kages - explicó el Uzumaki- pero Inojin puede hacerlo.

-¿Inojin? - ella cruzó los brazos- ¿No crees que le estarás dando mucha responsabilidad a aquél rubio inmaturo?

-Es un maestro en interrogatorios y nada como sus bestias de tinta para decirles lo que hay en el camino. Es la persona perfecta para la escolta Sarada. 

-Estoy pensando en pedirle a Inojin que me escolte hacia la cumbre - dijo con una sonrisa burlona.

-¡Tampoco te pases! - gruñó con una pizca de celos. 

Los hijos de la Hokage y sus nuevos amigos acababan de llegar otra vez en el campo de entrenamiento del equipo 7 para una segunda ronda de peleas.

-¡Muy bien, ahora es mi turno! - dijo Jessica- Y yo me enfrentaré a... - apuntó a la otra rubia del grupo- Kasumi. 

La mimirrubia dio un paso hacia adelante y dijo crujiendose los nudillos. 

-Veamos quien es la mejor rubia del grupo.-  mostró una sonrisa zorruna. 

-Bien, haré un cambió en las reglas - luego murmuró la Herleins- ya que no soy muy buena en taijutsu - Kasumi asintió.

-¿Cuales serán las nuevas reglas? - preguntó la rubia Uzumaki.

-Valen ninjutsu y taijutsu, pero no vale técnicas que pueden matar. 

-Perfecto-  sonrió Kasumi antes de dar un golpe en el suelo gritando un- ¡Shanaro!

El golpe causó grandes grietas en el suelo y Jessica no cayó en una de ellas porqué lo esquivo en el último momento. 

-¡Plumas letales! - una descarga de plumas fueron en dirección a Kasumi. 

La rubia Uzumaki las esquivó una a una las plumas hasta lanzarle un rasengan. 

-¡Globos energético! - gritó Jessica al lanzar una bola de energía eléctrico que le dio al rasengan y las dos técnicas se chocaron y se anularon. 

-¡Sus ataques son impresionantes! -comentó Tobby- Las técnicas de tu novia son increíbles Minato. 

-Lo mismo digo de la tuya- comentó Minato. 

-Ella... No es... M-mi novia - dijo Tobby mientras tartamudeaba y se ponía algo rojo.

En ese momento Minato y Mikoto se dedicaron una sonrisa entendiendo el mensaje. 

De hecho Tobby nutría sentimientos por la Herleins, pero él no quería aceptarlos. Al menos no todavía. 

Herleins y Uzumaki tenían sus kunais en cruzadas. Jessica la tenía en horizontal y Kasumi en vertical. 

Kasumi aprovechó su mano libre para crear un nuevo rasengan y darle en el estomago de la Herleins. 

Jessica caería aturdida en el suelo si ella no hubiese hecho un jutsu de sustitución antes, asi que lo que cayó de verdad fue un tronco. 

La verdadera Jessica apareció detrás de Kasumi. 

-¡Sorpresa! - dijo la Herleins antes de adarle un golpe en la mejilla. 

Kasumi se chocó de espaldas contra uno de los árboles y le sonrió a la Herleins antes de desaparecer. 

En ese momento la rubia Uzumaki salió de una de las grietas del suelo dándole un uppercut en la barbilla de su contrincante , también rubia, mandandola a valor unos metros antes de caer violentamente al suelo. 

-Jéssica Herleins está fuera de combate-  explicó Nick antes de apuntar a la Uzumaki- Kasumi Uzumaki es la ganadora. 

Kasumi, como buena ganadora se acercó a Jessica y le extendió la mano. 

-La próxima vez - decía mientras le sonreía- trata de mostrar tu verdadero potencial. 

-Si... - respondió Jéssica mientras se levantaba con el apoyó de Kasumi- Lo mismo digo de ti. 

En otra parte de Konoha , Boruto fue a hacerle una visita a alguien que no veía con mucha frecuencia, su hermana. 

Segundos despues de llamar por el timbre Himawari abrió la puerta con la energía de siempre. 

-¡Hermano! - ella le dio un cálido abrazo- Te he echado de menos - dijo antes de separarse- hacía tiempo que no nos visitabas. 

-¡Cuñado! - le saludó Inojin desde la barra de la cocina- Siéntate y tómate una cerveza con nosotros. 

-No puedo Inojin - explicaba mientras entraba- Estoy de servicio. 

-Joo - Himawari hizo un puchero- Casi nunca nos visitas y cuando lo haces es por tu trabajo - luego espetó- a veces te pareces a papá. 

Boruto se rió nerviosamente antes de responder.

-Lo siento - le dedicó una sonrisa- prometo que os vendré a visitar en mis tiempos libres. 

-Mas vale que sea una promesa de Uzumaki - ella se cruzó los brazos y continuó con el puchero. 

-Y lo es - respondió mientras se dirigía hacia la barra- Siempre lo es - susurró para sus adentros. 

Mientras veía que su cuñado se acercaba Inojin se dirigió hacia Inoshiki, que estaba tumbado en el sofá jugando a la videoconsola.

-¿ Y tú no tienes nada que decir para tú tio? - le dijo con el ceño fruncido. 

-Ah si... - dijo sin despegar la mirada de la videoconsola- Hola tio - dijo en un tono desanimado. 

-¡Ahi que ver con ese crío! - masculló con una ceja arqueada- de esa forma no se graduará como ninja nunca - resopló en un tono aún más bajo. 

Boruto sonrió debido esta situación ya que Inoshiki le recordaba a él mismo en algunas situaciones. 

-No te preocupes - decía mientras se sentaba al lado de su amigo de pelo largo- todavía hay tiempo hasta la repesca, quizá madure un poco más hasta ese momento.

-Eso espero.-  se lamentó antes de tomar un trago de su cerveza.

-¿Y bien? - dijo Himawari al otro laso de la barra- ¿Cual es la misión que le tienes a mi esposo, hermano?

Boruto vuelve a su semblante serio y pone la foto de Argo sobre el frío mármol

-Necesito que patrulles la frontera noroeste durante las próximas semanas.-  explicaba el rubio- Argo aún está en el país de la piedra, pero es cuestión de tiempo que llegue a nuestros dominios. 

-¿Que quieres que haga después de interceptarla?

-Quiero que averigües su mente para ver si tiene la intención de traicionarnos la llevarás bajo custodia has Kirito y le explicarás la situación. 

-¿Y si ella es realmente de fiar? - preguntó el rubio de pelo largo. 

-Le escoltarás hasta la frontera con el país de la lluvia-  explicó el Uzumaki mayor- pero solo hasta la frontera, ¿entendido? Si entras en la aldeas podrías provocar una guerra. 

-El burro hablando de las orejas - comentó el Yamanaka- ¿Sabes muy bien que tu desconfianza podría provocar una crisis diplomática con el país del hierro?

-Lo sé - dijo en un tono serio- Sarada y Tentou ya me advirtieron de mi decisión. 

En ese momento Himawari dio un golpe de mano abierta en el mármol de la barra causando algunas grietas en la misma.

-¡Ya basta de hablar de cosas de trabajó! -ella les dedicó una mirada seria con su Byakugan activado antes de volver a su personalidad alegre de siempre y decir- Hermano, ¿te quedas a cenar con nosotros? - le dedicó una sonrisa. 

Continuará.