Minato acababa de llegar en su cara y se encontró con sus compañeras de equipo, su abuela Sakura y sus padre en el salon.

-Bue-buenas noches - dijo el mimirrubio con una mezcla de nerviosismo y miedo.

-¡¿Se puede saber donde estabas?! - vino Sarada en ascuas con las manos en la cintura.

-Lo siento mamá- decía Minato con un sudor frío en la nuca- estaba en la casa de la tia Ino y...

-Ino me ha llamada hace media hora diciéndome que necesitamos hablar mañana y que acababas de salir - explicaba Sakura- y eso fue hace media hora.

-¡Y no se tarde media hora en venir de la casa de Ino-san jovencito! - complementó la azabache- ni siquiera por el camino más largo.

"Joo abuela, así no me ayudas mucho" se lamentó en sus adentros.

-Bueno... - se rascaba la nuca- es que me encontré con una chica en el camino y....

-¡¿Una chica?! - Kasumi dio un paso hacia delante em ascuas -¿Eso significa que me estás traicionando Minato-kun?

-¡¿Que...?! Kasumi-chan yo no...

-¿Y esa pluma que llevas en el bolsillo Minato? - le cuestionó su hermana.

-¿Esto? - él saca dicha pluma- Es solo un regalo que me hizo Jessica.

-Jessica... Jessica... - Kasumi tardó un poco en recordarla- ¿Jessica Herleins? ¿Que tiene ella que no tenga yo? ¿Acaso es porqué su pelo es más rubio que el mio? ¡¿Es eso?! - decía con los ojos llorosos. 

-No Kasumi-chan - dijo Minato en un tono serio- Solo hay espacio psra ti en mi corazón.  - luego le miró a su hermana- para ti y para Miko por supuesto.

-¡Hey! ¡A mi no me metas en tus problemas conyugales! -exclamó levemente sonrojada.

-¡Silencio! -Gritó Sarada- Minato estás castigado sin videojuegos durante dos semanas. 

-Lo siento mamá.- dijo Minato cabizbajo. 

Sarada se acercó a su hijo y se agachó poniendo la mano en su hombro. 

-Mira hijo, sabes que a mi no me gusta que estés en casa hasta tan tarde. 

-No es solo por esto, mamá-  dijo Minato-  Querría pedirte perdón por gritarte esta mañana.

Sarada abrazó a Minato cariñosamente. 

-No hay nada que perdonar, Minato. - decía la azabache- supongo que has heredado mis ganas de sacrificarse por los que amas. 

-Es por eso que estoy aqui - Sakura puso un viejo libro en la mesilla de centro del salón. 

-¿Que es eso, suegra? - preguntó el rubio mayor. 

-Las niñas y yo hemos estado investigando sobre algo que ayude con la teoría de Minato-chan. 

-Es verdad, el tio Sasuke te dio la llave maestra del distrito Uchiha en su testamento. 

-Asi es, Boruto-kun - confirmó Sakura- gracias a esto encontre este libro.

-¿Y que hay en el?  - preguntó Naruto mientras abría el libro y analizaba su contenido rápidamente. 

-Es un registro de todos los transplantes oculares.  La mayoría de ellos en la primera gran guerra ninja.

-¿Has encontrado algo importante mamá? - preguntó Sarada mientras se sentaba al lado de su rubio.

-Lo que he notado es que todo los Uchihas que hicieron la cirugía ya estaban casi ciegos y ninguno de ellos donó sus ojos por voluntad propia como lo quiere hacer Minato.

-El tio Sasuje tenía razón - susurró Boruto- la idea de Minato es pionera. 

-¿Que quieres decir, Boruto-kun? - preguntó la Haruno.

-Lo que quiero decir es que la idea de Minato es un disparo en la oscuridad y que las probabilidades que las cosas salgan bien o mal son iguales.

-Minato vino a mi para pedirme ayuda para que yo les haga la cirugía a los dos pero, sin vuestro permiso y dada al hecho de que la última vez que hice ese tipo de operación uno de los dos... - Sakura no pudo decirlo- yo no puedo hacerlo, lo siento. 

-Es por eso que he ido a ver la tía Ino abuela Sakura - explicó Minato- iba a pedirle que haga la cirugía en tu lugar - luego Minato se puso cabizbajo- lamentablemente ella me rechazo diciéndome que soy menor de edad y como tal no puede hacer este tipo de operación sin el permiso de padres y responsables.

-Entiendo lo que sientes hijo, pero no me arriesgaré hasta que haya alguna garantía de éxito. 

-¿Tanto te empeñas en darme tus ojos? - preguntó Mikoto- Si  no utilizo mi mangekyou con tanta frecuencia...

-Esto solo servirá para retrasar tu ceguera Miko - dijo Minato- y yo no quiero retrasarla, quiero evitarla - luego le mostró una sonrisa- quiero que me veas siendo Hokage.

-Ja... No tan rápido  hermanito- dijo Mikoto- Yo seré Hokage antes que tú. 

-¡Hey! No os olvidéis de mi - dijo la mimirrubia- ¡Yo también quiero ser Hokage!

Todos se rieron por la situación.

Cierta pelirrosa se fijó en cierta rubia y pudo ver las semejanzas que Kasumi tenía con cierto Uzumaki que no estaba presente. 

-"Si que es tu hija, Naruto"

-Bueno... -Sakura se levantó- te dejo el libro hija - Explicó la Haruno- quizás con tu rinengan puedes encontrar un mensaje oculto o algo.

La família Uzumaki se despidió de la pelirrosa para así volver a quedar solos. 

-¿Habéis cenado niños? - preguntó Sarada.

-Si, la abuela Sakura nos hizo la cena antes de ir al distrito Uchiha. - explicó Mikoto. 

-Yo cené con la tía Ino - dijo Minato. 

No pasó ni un segundo hasta oir un gruñir de estómago. 

-Creo que es mi culpa - Boruto se rió nerviosamente. 

-Prepararé algo de comer - dijo la azabache- yo tampoco he cenado. 

-¿Que te parece si pedimos hamburguesas para cenar? - propuso Boruto.

-Ni hablar Boruto - respondió Sarada mientras iba hacia la cocina- el pedido llegará muy tarde y nosotros tenemos muchas cosas que hacer mañana. Calentaré las sobras de ayer y ya.

-Jooo Sarada, sabes como ser aguafiestas.-  gruñó el rubio. 

Ya era la hora de dormir.

Después de haberse confesado Minato y Kasumi decidieron dormir junto, solo dormir. 

La que no podía dormir era Mikoto. Tenía mucho que pensar. 

Ella se sentía mal por obligar a su hermanito hacer una operación tan arriesgada como un transplante ocular.

También tenía otro pensamiento en su mente, uno que le asustaba.

-Recuerdo que ayer por la noche yo estaba tumbada en esta misma posición. 

Recuerdo haber sentido aquél dolor en el pecho. 

Y recuerdo sentir una sensación cálida en el pecho hace poco cuando Minato dijo que tenía lugar en su corazón.  

Mikoto puso la mano en el pecho y notó que su corazón latía a gran velocidad.

-¿por qué me late tan rápido ? - pensó la miniuchiha-Creo que debo dejar el café.  

Mientras la azabache menor lidiaba con sus propios pensamientos, otra azabache analizaba el libro que le había entregado su madre pelirrosa. 

-Duérmete ya Sarada - dijo Boruto- tenemos que levantarnos mañana temprano. 

-No hasta que termine de leer este libro - dijo la Uchiha.

Boruto se sentó para ver en que parte estaba. 

-Todavía vas por el primer transplante - dijo el rubio- tardarás toda la noche en leerlo, Sarada.

-El primer transplante fue entre Madara Uchiha y su hermano, Izuna

Al parecer hay un sello de ca muflaje en el final de su testimonio. 

-¿Como es que la tia Sakura no pudo notarlo?

-Quizá sea un fuinjutsu que tan solo los Uchihas puedan detectarlo - opinó la azabache. 

Sarada activó su Sharingan común y juntó las manos antes de decir: 

-¡Liberar! -en la parte del papel que estaba en blanco aparecieron unas escrituras en morado. 

Este mensaje es para los ninjas del futuro.

Mi hermano acaba de quitarme los ojos y estoy escribiendo esto a ciegas. 

-Él escribe muy bien como para hacerlo a ciegas - opinó Boruto.

-A lo mejor le pidió a un escriba que lo haga por él-  teorizó la azabache. 

-Es lo más probable -dijo Boruto- él podría escribir a ciegas pero él no escribiría en linea recta y las letras no estaría tan rectas. 

Sarada continuó leyendo aquella extraña nota. 

Mi hermano está ciego por las ansias de poder y su ideología errónea sobre crear un mundo de paz.

Los Uchiha tenemos la maldición del odio en nuestros corazones. 

Habrá un momento donde nuestros corazones ya no esten impregnados por el odio, habrá un momento en quw nuestros ojos ya no serán robados o arrancado y si intercambiados, habrá un momento donde uno no le dará los ojos a su hermanito por deseo de poder y si por amor al prójimo. En este dia el verdadero poder del Sharingan será desvelado. 

-¿El verdadero poder del Sharingan? - se preguntó Boruto- ¿Crees que Minato y Mikoto despertaran el rinengan directamente o algo así? 

-Puede ser - luego susurró- Aunque eso va contra todas las reglas escritss sobre el rinengan. 

-¿Quizás un nuevo doujuutsu? - cuestionó Boruto. 

Sarada y Boruto se meriron como si hubieran resuelto un caso de asesinato.

-Eso significa que hay una probabilidad de éxito.-  comentó Sarada. 

-¿Eso significa que vas a acceder a la cirugía?

-Todavía tengo un pie atrás pero... - Sarada cerró el libro y lo puso en su mesita de noche- Minato es tan terco que temo que haga alguna locura indebida por su hermana.

Hablando en Minato, este ya estaba dormido cuando notó que alguien lo llamaba.

-Minato... Minato...- era Mikoto que lo llamaba incesantemente. 

-Miko.... -Minato se despertó y la miró algo somnoliento- ¿Has tenido una pesadilla?

-No.. -Ella puso la mano en su corazón- mi corazón late demasiado rápido, Creo que tomé demasiado café-  le sonrió- ¿Podemos hablar?

-Claro.- asintió el minirrubio antes de salir delicadamente de la cama para no despertar a Kasumi. 

Minato se tumbó en la cama de al lado junto a su hermana.  Ambos miraron al techo.

Pasó un largo minuto de silencio antes de que Minato rompiera el hielo.

-¿Es aquí donde nos miraba verdad? - preguntó el minirrubia- Es aqui donde despertaste tu Mangekyou, ¿verdad Miko?

-Asi es Minato - dijo antes de ir directo al punto- ¿Por qué te empeñas tanto en darme tus ojos?

-Ya te lo dije - comentó el minirrubio- Quiero que me veas siendo Hokage. 

-¡No me mientas Minato! -Le gritó a media voz- Sé que hay un motivo oculto tras tu determinación. 

-La razón es que... - Suspiró profundamente- Eres la persona más importante en mi vida Miko, tu y Kasumi-chan los sois.

-Minato... - Mikoto empezó a llorar en silencio. 

-No puedo soportar que os pase nada malo y cuando supe que despertaste esos ojos por mi culpa.... Me sentí responsable.

-Yo... -ella lo abrazó- Lo siento mucho. 

-No te preocupes Miko, la operación será un éxito.

-¡Mas te vale que salga bien! -dijo la miniuchiha- Yo no soportaría perderte.

Fue así que ambos cayeron en loa brazos de morfeo.

-Ya eran las cuatro de la mañana cuando alguien llamó al teléfono de Boruto. 

-Si... Dígame - dijo Boruto algo somnoliento. 

-Hola mi sol. 

-Mitsuki... - Boruto se saltó a lo que importa- Son las 4:30 de la mañana, no me voy levantar hasta dentro de dos horas.

-Sumire ha conseguido desencriptar el pergamino pendrive -dijo el pálido- quiero que seas el primero en revisar los archivos.

-Voy para allá.

Continuará