Mientras el nuevo equipo 7 celebraba su felicidad momentánea, muy lejos de allí había un mal que conspiraba contra la villa.

O mejor dicho: contra la família Uzumaki. 

Kawaki estaba dentro de un tubo con un líquido amarillo y respirando por aparatos. 

-¿Falta mucho para que esté listo el receptáculo? - preguntó un hombre misterioso a la chica al lado suyo. 

-La verdad es que no-  respondió la mujer mientras ponía una mano sobre aquél cristal. 

-Sarada Uchiha - el hombre esbozó una sonrisa en su rostro- tu estúpida venganza hizo que me facilitases aún más mi trabajo. 

2 años atrás. 

Pocas horas después de que Sarada derrotara a Kawaki destrozandole la mente. Dos hombres con una capucha negra que les ocultaban el rostro llegaron al local. 

-¡Kawaki! ¡Kawaki! - un tipo le daba un par de bofetones, pero sin respuesta. 

-No te esfuerces tanto - le espetó su compañero antes de sacar una mini linterna y examinarle las pupilas. 

-¿Y bien? - preguntó con leve grado de impaciencia. 

-Las pupilas estan dilatadas y su mirada me recuerda a la de un pez muerto-  explicó y lugo le tomó el pulso y los latidos de su corazón- lo demás todo en orden. 

-Llevemosle a Jigen - una sonrisa amarilla se dibujó en su rostro- creo que le encantará la noticia. 

Volviendo a Konoha: Mitsuki acababa de quitarle las pulseras inhibidoras de. chakra. 

-Gracias Mitsuki - agradecía mientras se masajeaba los pulsos. 

-No hay de que-  la serpiente cálida le mostró su típica sonrisa. 

-Oye tío Mitsuki - le llamó Mikoto- contando con nosotros. ¿Cuantos equipos se agraduaron?

-¿Contando con vosotros? - les mostró otra vez esa sonrisa suya- Solo uno. 

Los tres genin se quedaron atónitos con la respuestas. 

-Solo vosotros habéis cumplido con los requisitos de la misión. 

-Esto... - le preguntó Minato rascando la cabeza- ¿Cuales eran esos requisitos exactamente?

-Llevar a la persona protegida hasta la ubicación indicada.

No sufrir un solo rasguño.

Trabajar en equipo.

Evitar que la persona protegida sea dañada. 

Exceptuando a vosotros, todos fallaron en alguno de los ítems pedido en mi lista. 

-¿No crees que lo has hecho muy difícil Mitsuki? - indagó Boruto.

-Difícil si. Pero no imposible - respondió- total tendrán una oportunidad de repesca dentro de seis meses.

Ya era la hora del almuerzo y los genin junto con Boruto y Mitsuki volvían a casa.

-Jo, me siento mal por todos los que reprobaron el examen-  Comentó Kazumi. 

-No te preocupes por eso Kazumi-chan - intentó animarle Minato- Lo que importa es que ahora seguiremos el legado de nuestros padres y seremos el nuevo equipo 7. 

Cuamdo Kazumi dijo "nuestros padres" Borutp dudó si era porque ya consideraba a Boruto y a Sarada sus padres adoptivos o si había algo más. 

El rubio iba a abrir la boca para preguntárselo, pero Minato se adelantó diciendo algo completamente diferente. 

-Oye papá ya es la hora.

-¿La hora de qué? - le preguntó su padre. 

-Es la hora de que nos digas la verdad sobrd los bebés.  - la respuesta que le dio Minato le causó escalofríos al rubio mayor. 

- Nos lo prometiste años atrás , ¿Lo recuerdas papá? - esta vez fue el turno de Mikoto. 

Kazumi miraba la escena toda confundida tal cual su compañero pálido. 

-¿De qué habláis? - índagó la rubia con curiosidad. 

-Papá nos prometió que cuando seamos genin nos contaría la verdad sobre los bebés.  - le explicó Minato. 

-¿Quieres que le cuente con quien planeabas tener más de cien mil hijos también? - le espetó Boruto. 

En este momento el escenario era:

Una rubia y un pálido que no entendía del todo la conversación.

Un padre sudando frío.

Y por último; dos gemelos curiosos. 

-Bueno yo me voy - Mitsuki giró por la primera esquina que se encontró. 

-¡No, por favor, Mitsuki! - le imploró el padre Uzumaki- No me dejes solo.

-Son tus hijos - decía mientras se despedía con la mano levantada- Encárgate tú. 

La serpiente blanca se fue saltando por los tejados dejando a un Boruto desesperado. 

-Esperad un momento por favor -Boruto sacó su móvil y llamó a la única persona que sabría manejar aquella vergonzosa situación...

-Si, dígame - le respondió la otra persona al otro  lado de la linea.

-Sarada es urgente - el rubio casi hiperventilaba - ¿Estás ocupada?

-Si, ahora mismo estoy en una reunión con los miembros del consejo.  ¿Que pasa?

-¿Es Boruto? - le preguntó el séptimo a su alumna. 

Sarada solo señaló positivamente con la cabeza.

-Sin problemas-  Naruto se levantó- Daremos una pausa de 5 minutos. 

-Pero... -Sarada intentó argumentar, pero Tsunade la interrumpió.

-No te preocupes hija -dijo la quinta Hokage, mientras se dirigía a la puerta con su compañero- la família es más importante que el papeleo. 

Ambos salieron de la sala y Sarada se quedó solo con su móvil pegado a la oreja.

-Me han dado 5 minutos-  explicó Sarada algo enojada- ¿Que quieres? 

-Los... Los niños... - tartamudeó- Los niños me han hecho la pregunta sobre ya sabés que.

A Sarada le entraban ganas de reirse por el desespero exagerado de Boruto.

-Mira dejaré un clon aquí para que termine el papeleo y saldré más temprano-  dijo la Hokage.

-Oh gracias Sarada-  su corazón saltaba de felicidad y esperanza- ¿A que hora sales?

-Allá por las seis- en el otro lado de la linea se escuchó un murmuro en señal de enfado- entretenlos hasta entonces. 

Sarada colgó el teléfono y Boruto tragó saliva. 

Los niños le miraban preocupados.

Tomó una enorme bocanada de aire y se dirigió al nuevo equipo 7.

-Mira hijos este es un asunto muy delicado y la verdad es que tanto yo como vuestra madre -aunque en el caso de Kazumi madre adoptiva- tienen que estar presentes para hablar de ello. 

La verdad es que si fuera tan solo Minato Boruto se lo explicaría sin problemas, pero habían dos niñas que se morían de curiosidad por saberlo y eso se le iba de las mano. 

-¿Y para cuando vuelve la tía Sarada? - le preguntó Kazumi.

-Allá por las seis- les respondió Boruto. 

Minato miró a su reloj de pulso, aún faltaban 3 horas. 

-Jo falta mucho - se lamentó Minato. 

Por el otro lado cierto rubio les sonrió,  había tenido una idea de como matar el tiempo. 

-¿Que tal si nos tomamos un helado y así podréis presentaros a vuestro nuevo maestro?

-¿Y quién va a ser? -le preguntó Mikoto.

Boruto dio dos golpes en el pecho y acto seguido dijo. 

-Lo tenéis aquí delante.

Los tres se quedaron boquiabiertos al recibir la noticia.

-No vale papá,  si ya nos conoces.-  argumentó Minato.

-Venga, será divertido - insistió- Y además, ¿Se te ocurre algo mejor?

-Bueno... - el minirrubio jugaba con sus dedos- la verdad es que no...

-Muy bien pues allá vamos - Boruto dijo con entusiasmo. 

El rubio mayor llevó a sus hijos una heladería a pocos minutos de caminata de allí. 

Tres hacer sua pedidos, Boruto decidió iniciar la entrevista a sus nuevos alumnos.

-¿Quién empieza? Les preguntó el Uzumaki mayor. 

-¡Yo! ¡Yo! - se repetía Minato por la segunda vez.

-Muy bien-  Boruto le pasó la palabra a su hijo- Tú empiezas Minato. 

-Mi nombre es Minato. Tengo 12 y pretendo ser Hokage. 

Mikoto fue la próxima en levantar la mano. 

-Mi nombre es Mikoto Uchiha, tengo 12 años y pretendo ser Hokage también. 

-Asi es hermanita - Minato y Mikoto se apoyaron uno en el hombro del otro- Vamos a ser Hokage juntos. 

"¿Hokage juntos? ¿Eso es posible?" - pensó el rubio mayor. 

En ese momento Kazumi levantó la mano para pedir la palabra. 

-Habla pequeña-  le hizo un gesto con la mano para cederle el permiso para hablar. 

-Mi nombre es Kazumi Uzu.. - casi le dice su verdadera identidad sin querer- Tengo 12 años y pretendo ser un gran ninja. Seré tan amada y respetada al igual que fue mi padre.

-Se nota que quieres mucho a tú padre Kazumi-chan - comentó Boruto. 

- Es que él era el lider de mi aldea y siempre quise ser como él.

Había un tono de nostalgia en las palabras de la rubia. 

Ella de verdad echaba de menos a sus padres, aunque ahora su corazón se siente feliz por volver a tener una família. 

"Un momento -Mikoto empezó a pensar- Si Kazumi- chan quiere llegar a ser como su padre..."

"Y su papá es el Hokage de su dimensión..."

Tanto Minato como Mikoto pensaban lo mismo. 

"¡Eso quiere decir que Kasumi-chan también quiere ser Hokage!

Concluyeron los gemelos al unísono.

Tres personas con un mismo deseo,  ser Hokage.  ¿Alguno de ellos conseguirá cumplirlo?

La verdad es que el futuro se demostraba un gran misterio.

Eso si, los tres sabían que no sería nada fácil. 

-Ahora te toca a ti papá-  le sugirió Mikoto.

-¿Yo? - les miró confundido- pero si ya me conocéis como la palma de vuestra mano.

-Venga papá -Insistieron los gemelos mirándole con ojitos de corderito. 

-Está bien.-  Boruto se levantó- Mi nombre es Boruto Uzumaki, tengo 32 años. Ahora mismo mu sueño es cuidar a mi familia y impedir que no le pase nada a mi aldea.

Después de alguna que otra charla aleatoria, Boruto y los niños comieron sus helados.

Al llegar a casa les tocó darse una ducha y prepararse para recibir a Sarada, ya que ella había dicho que volvería temprano para tratar de ciertos asuntos. 

Al cabo de algunas horas se oye el  ruido de la llave abriendo la puerta de la casa. 

Al oírlo tres niños se fueron corriendo a recibir a la novena Hokage. 

-Ya estoy en casa - mal pudo cerrar la puerta que Sarada sintió como tres criaturillas les abrazaban. 

-¡Hola mamá! - tia Sarada, en el caso de Kazumi.

-Mira mamá - Minato le mostró su bandana- lo que hemos conseguido.

-Enhorabuena niños - Sarada le dio un abrazo a cada uno de sus hijos, y claro su hija adoptiva- Estoy orgullosa de vosotros. 

-Gracias-  dijeron los tres a la vez.

-Bueno -Sarada se levantó- Ahora toca hablar sobre aquello. 

-¿El qué?  - Mikoto apenas le dio un codazo en las costillas que le hizo recordar al instante- Ah eso. 

-Uf -Sarada suspiró-  Sentaos en el sofá,  nos espera una historia muuuuy larga niños. 

Esto es todo por hoy. 

Eh de decir que ya me han nominado 2 veces y os doy dos opciones.

Seguir con la historia y responder las nominaciones al final de esta.

O dar una pausa y responder la nominación en el próximo capítulo. 

Haré un diez cosas sobre mi, pero si queréis que responda a preguntas de mis lectores podéis hacerlas aquí:👇👇👇