Llegó el dia siguiente, era el quinto día en esa lujosa finca. Eran ya las 12 del mediodía, y nadie estaba por ahí.

O en realidad, sí. Pero no despiertos.

Tenya y Momo dormían en un sofa abrazados mientras el adulto usaba una especie bikini amarrado en sus pectorales. Momo estaba en trajes menores, usando apenas un "hilo bikini", mientras su pecho era tapado por su esposo.

Kyoka y Denki dormían en una silla de tensión, el rubio tenía su pie en la cara de su novia debido a la pose en que estaban.

Asui estaba sentada en en el sofá, con Shoji durmiendo en su regazo. La peliverde también dormitaba.

Ochaco se había dormido sentada en el suelo al lado del refrigerador, mientras que Sero estaba tirado en medio de la sala/comedor con muchas latas de cerveza a su al rededor.

Inasa y Shoto durmieron en el baño de invitados. Uno arriba del otro.

Mina y Kirishima eran los que apenas reaccionaban, dentro de su habitación tranquilos.

Por otro lado, Bakugo dormía abrazando a su almohada. Y Midoriya dormía a pierna suelta. Nadie estaba consciente aún.

...

A las 2 p.m. algunos de los adultos despertaban algo desorientados.. Se escucharon gritos de horror y una que otra maldición por parte de ellos. Estaban en una situación muy bochornosa e incomoda.

~ ~

Mina había salido a beber agua pero cuando iba a tomar el vaso e ingerir el líquido, quedó impactada ante una pelinegra con las tetas en el aire durmiendo en los brazos del antiguo delegado (o presidente) de la ex clase de la universidad. La pelirrosa emitió un chillido que se convirtió en grito y escupió su agua en el proceso. Es que ella era muy dramática y exagerada.

La mujer embarazada caminó pausadamente por cada lugar del comedor y piscina, y todos era un completo desastre. Nadie lo sabia pero Ashido iba a ponerlos a limpiar y hacerle la comida durante todo el resto del día (eso para muchos era un temible castigo ya que la mujer pedía unas cosas sumamente extrañas y sabores raros, sin incluir, que tenían que verse en la obligación de comerlo con ella).

Kirishima había salido también de su habitación. Quedó en una especie de trance cuando vio tal desastre. Fue en busca de su mujer, pero esta con sus dos manos tapó su rostro rápido.

- ¡No veas!

- Está bien, pinky.

El pelirrojo volteó su rostro y se encontró a Sero con la boca abierta, babeando mientras roncaba. Eijiro como buen mejor amigo, decidió buscar una especie de pimienta. Un chile o "chirel". Lo metió a su boca con sumo cuidado, y se fue de ahí bajo la atenta mirada (divertida) de Mina.

Ambos rieron, sabían que eso sería muy divertido más tarde.

...

Izuku despertó con una migraña, estaba demasiado sensible a todo. Con mucha cautela y calma fue al baño a orinar. Miró su rostro y tenía más ojeras que cara. Sinceramente, esas vacaciones estaban acabando con su vida. Tomó un baño rápido, y cuando salió de la ducha, Katsuki lo esperaba afuera del baño.

No le dio tiempo de reaccionar cuando sintió un golpe en su pómulo izquierdo haciéndole caer como plomo al suelo. Gimió adolorido cuando sintió otra patada en su costilla, y otro en su estómago.

- ¡Eres un maldito! ¡Maldita sea!.- gritaba exasperado el rubio.- ¡Muérete! ¡Muérete! ¡Muérete! ¡AAAHHG! ¡Maldición, te odio! ¡Te odio!

Izuku vio como el rubio se quebraba poco a poco ante él, llorando en silencio. El chico había dejando de golpearle para simplemente ponerse a llorar como un niño.

El peliverde se estremeció en su lugar, sabía que la había cagado. Se levantó a duras penas del frío y duro piso, y fue directo a donde estaba el cenizo para abrazarlo. Por muy extraño que parezca, el susodicho se quebró aún más en los fornidos brazos del más alto, su llanto se intensificó y sus lágrimas junto a su fluidos bañaban el pecho de Izuku.

El pecoso acariciaba su espalda con cariño y daba pequeños besos en la cabeza del contrario. Hasta que se separaron del abrazo, y se sentaron en la cama.

- No quiero simplemente hacerme la víctima, porque no lo soy.- habló Izuku en voz arrepentida pero firme y alta.- pero.. pido perdón. Perdón por dañarte y hacerte cualquier cosa en contra o no, de tu voluntad. Actué como idiota, dejándome llevar por mis impulsos.

- C-Cállate...

- .... yo sólo quería una buena relación contigo, Kacchan.. no quería que tuvieras una imagen errónea de mí pero me equivoqué...

- He dicho que te calles...

- ... si lo que quieres es simplemente alejarte, o alejarme, yo accedería sólo para que estés bien...

- ¡No lo entiendes, maldita sea!.- gritó ronco.

Izuku quedó perplejo ante esa actitud, realmente extrañaba a Bakugo gritar así. Iba a hablar pero el rubio se adelantó, asi que decidió dejarlo expresarse.

- Eres un insensible de mierda... .- la voz de Katsuki se volvió más baja y monótona.- siempre fuiste así, Deku.

Se hizo un silencio sepulcral, y el cenizo continuó hablando.

- Siempre quisiste sobrepasarme en todo, lo lograste!. Tuviste todo lo que un día yo quise tener, y no lo aprovechaste. - hablaba dolido.- .. vivías en una familia donde siempre fuiste aceptado y alabado, pese a todo, siempre fuiste desagradecido..

El peliverde se quedó estático en su lugar, apretando los puños con fuerza. Sabia que el rubio no mentía, y le dolía tener que aceptarlo.

- Lo malditamente peor de todo .. fue cuando.. .- resopló triste con una sonrisa de medio lado.- ... me empezaste a gustar.. - se mordió el labio inferior intentando, olímpicamente, no llorar.

El pecoso sintió algo removerse en su pecho. Él también sentía lo mismo por el contrario.

- Yo, como el mejor de la clase, no podía desatar esos sentimientos en mí, menos por ti. ¡Eres mi jodido rival de mierda!

- Era.- habló, al fin, Midoriya.

- Sigues siendo mejor que yo, y eso para mí es inaceptable.

- Tienes más sentimientos que yo, después de todo.

- Los sentimientos sólo me hacen sentirme más débil.

- Claro que no, Kacchan. Te fortalecen!

Izuku se levantó de su lugar para arrodillarse ante el rubio. Tomó sus manos, blancas y suaves al tacto, y las besó para después tomar su rostro y acariciarlo.

Las mejillas de Katsuki se volvieron rojas. Izuku pasó su mano por su cara para descender a su cuello, y desabotonar la camisa de su pijama, hasta abrirla y dejar expuesto todo el torso del contrario.

Con su mano tomó con suavidad el mentón del rubio y lo movió de izquierda a derecha, viceversa. Veía su cuello, inspeccionando. Notó muchas marcas ahí y en su pecho.

Después de mirarlo fijamente por un rato mientras Katsuki se calmaba, Izuku habló.

- Te he marcado...

- Lo sé, idiota.- giró su rostro evitando la mirada esmeralda. Ya había dejado de llorar y tenía su típico ceño fruncido.

- ¿Te gustó?.- preguntó inconscientemente, se quiso morder la lengua por ser tan despistado. No era el momento para hablar de eso. Aún así...

- Lo odié.

- Uh, lo siento Ka-..

- Así que deberías de hacerlo más seguido, eres pésimo en el sexo, Deku.- quitó su rostro decaído por una risa burlona que se hizo presente en sus labios rápidamente, no se permitiría llorar tanto, no era ningún imbecil sentimental.

Deku quedó de piedra ante eso. Quiso creer que había oído mal pero no, claramente, el chico le había insinuado descaradamente tener aún más momentos íntimos.

El pecoso sonrió también, pero con una mirada de determinación.

- Te haré sentir mejor que nadie, Katsuki!

El corazón del rubio latía con fuerza ante eso, llamarlo por su nombre era cuestión aparte.

No les pasa que tienen favoritismo con alguna de sus historias¿ a mí sí, lol