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22

Sus papás lo miraban estáticos, sin soltar ni una sola palabra luego de lo que dijo el pequeño Yoongi. Este los miraba serio, con una de sus cejas alzadas buscando y esperando la respuesta a su duda, sus padres siempre sabian todo lo que les preguntaba, entonces, ¿por qué ahora parecia que no?

"¿qué dices Yoongi?"

Oh, ¿no habian escuchado? Aclaró su garganta y enderezó su espalda con seguridad. Tal vez debia alzar la voz un poco mas. 

"¿Jiminie es mi destinado?"

Jin y Namjoon se miraron incrédulos. Yoongi tuvo que haber sacado eso de algun lado, ellos ni siquiera le habían hablado de ese tema aun.

"Jiminie me lo dijo hoy, no le entendí mucho. Pero si él lo dice entonces le creo"

SeokJin abrió la boca sin éxito para hablar. ¿Cómo se supone que le explique? Yoongi siempre fue un niño inteligente, pero, es difícil explicarle a un niño de su edad sobre los destinos y lo que se supone es "el amor de tu vida para siempre, en esta y en las demás vidas".

"Verás, campeón" Nam se adelantó a hablar, mirando a su esposo y sonriéndole para tranquilizarlo "Sentemonos en el sillón mientras papá Jinie va por una leche chocolatada"

El pequeño aceptó sonriente siguiéndolo mientras el Omega se dirigió a la cocina y su padre le sonrió con cariño acariciando su cabello.

"¿Alguna vez te he contado como nos conocimos tu papá y yo?"

YoongGi negó confundido. ¿Qué tenía eso que ver?

"Los destinados son dos personas que comparten vidas pasadas y no solo eso, comparten un pedazo de su corazón y sus lobos están conectados a pesar de la distancia. Nacieron para amarse, nacieron para estar juntos y salvarse mutuamente de cualquier peligro"

Se detuvo a hablar cuando su esposo llegó frente a ellos extendiendoles un vaso de chocolate. Se sonrieron y se miraron con tanto amor que desbordaba en el ambiente.

"Tu padre y yo nos conocimos cuando más lo necesitabamos, YoonYoon" habló el Omega "En el momento correcto, como marcaba el destino él y yo nos unimos"

YoonGi miró como sus padres se tomaban de la mano con amor. Y los miró dando un sorbo a su vaso.

"Hemos hablado de que yo no puedo tener cachorros, ¿verdad Yoon?" Su hijo asintió "Bueno, yo entré en depresión por eso, estaba muriendo y no solo físicamente si no emocionalmente y mi lobito se escondió tanto en mi que yo ya no tenía fuerzas, fue ahí cuando conocí a papá. El me ayudó, él me amó, los dos estábamos destinados a encontrarnos, corazón, a salvarnos mutuamente. Nosotros somos destinados, de todas las vidas por haber"

"Encontrar a tu destinado no es solo amarlo y ya, Yoongi. Es ayudarlo, alentarlo y estar para él incluso si eso significa ponerte en riesgo a ti, porque los lobos están unidos y ellos morirían por el otro"

...

El pequeño Alfita había estado pensando toda la noche respecto a eso, ¡No había dormido nada! Eso demostraba cuán preocupado estaba.

Salió de su cama con los cabellos revueltos y bostezó mientras metía sus piecitos en las cómodas pantuflas que su papi Seokjin siempre acomodaba para él.

Se alistó para la escuela el solito. ¡Ya era un niño grande! Podía ser igual que independiente que su papá NamJoon. Aunque él a veces era muy olvidadizo y torpe. Su padre Jinie siempre estaba ahí para él.

Si olvidaba su almuerzo, el omega iba hasta su oficina para llevárselo recién hecho y calientito.
Si llegaba cansado y dormia toda la tarde, su esposo le planchaba la ropa y le acomodaba su maletín.

Ahora lo entendía, por eso sus papis eran destinados. Se complementaban tan bien que prácticamente vivir con la ausencia del otro era casi imposible.

Recordaba la vez que su papi Omega había tenido que viajar a Japón para visitar a su abuelita enferma, los dos Alfas de la casa tuvieron que quedarse, claramente el mayor acargo, sin embargo, Yoongi había escuchado a su padre la semana completa llorar como niño chiquito en su cama mientras abrazaba la sudadera favorita del Omega. ¡YoonGi lo juzgaría y se burlaría de él! Pero él no estuvo muy lejos de pasar por lo mismo.
Sin embargo, el Alfa mayor se notaba desganado y menos feliz, eso si, más torpe y olvidadizo.

Toda la semana estuvo llevando las calcetas de pares distintos y comía puro rumen en la oficina. Una tortura, dicho por él mismo.

Yoongi sonrió y corrió listo hacía la primer planta, en donde un plato calientito y sabroso se asomaba en la mesa de la cocina.

"buenos días, dormilón. ¿Listo para las clases de de hoy?"

Asintió contento a las palabras de su papi Jin y comió contento.
Hoy tenía grandes planes.

...

La hora del receso había llegado, JiMin se le había acercado desde el inició para hablar con él y estar juntos todo el día. Claro que Yoongi ya estaba acostumbrado, asi que escuchó al bonito Omega parlotear sobre su fin de semana con sus padres.

A los diez minutos del receso, JiMin creyó buena idea ir a los columpios, ¡Por fin estaban desocupados!

"Corra, hyung. O alguien nos los pueden ganar"

Ante la insistencia, corrieron juntos y se sentaron. El rubiecito tomó aire un rato antes de seguir su larga conversación como siempre. Él era tan parlanchín, pero a Yoongi hyung parecía no molestarle como a los otros niños.

"Oye, minnie"

Paró su hablar y prestó atención al rostro ajeno, no dijo nada pero demostró prestarle interés, asi que el mayor siguió.

"Le pregunté a mis papis sobre lo que me dijiste de los destinados..."

"Ooh..." Exclamó el menor con su boquita abierta y sus pequeñas, y gorditas manos cubriendola un poco

"Dijeron muchas cosas raras sobre morir"

Jimin rió

"¡No son cosas raras, Yoonie Hyung" el omega chilló con burla "Noona también dijo lo mismo, ¡Pero se supone que es un acto de amor!"

“No entiendo que tiene de romántico morir"

El Alfa lo miró dudoso con el ceño fruncido. ¿Dónde estaba lo romántico? Era nefasto y cobarde.

"Mi papá dijo que es un acto de valentía morir por el amor de nuestra vida" un pequeño puchero se formó en sus labios y Yoongi solo sintió su corazón latir desenfrenado. "Morir es de valientes, eso dijeron"

No entendía a los adultos, pero esta vez, estaba en total desacuerdo con ello.

"Supongo que si, pero es aún más valiente vivir por alguien, ¿No crees?"

Su donsaeng alzó los hombros.

"Morir por alguien es demasiado rápido, pero vivir por alguien dura más y te esforzarias más por esa persona. Vivirias felizmente por ella"

Al Omega le brillaron los ojitos. ¡Era verdad! Su Hyung era todo un romántico.
Lo miró y le sonrió con dulzura.

"Yo viviría por ti, JiMinnie"

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