¿Cómo fue que el reservado Min Yoongi logró conquistar al pequeño y tierno Park Jimin? Para los amigos cercanos de aquella pareja acaramelada, era un misterio. Sin embargo, no era nada del otro mundo lo que el Alfa tuvo que hacer para tener a ese lindo Omega a su lado.

Park JiMin siempre fue tímido y muy amable, le encantaban las muñecas y los colores pasteles, era alguien que fue criado con todo el amor que había. Asi que cuando conoció a Min Yoongi, el niño de siete años que lo defendió de los demás en el kinder, fue como si hubiera conocido a un super heroe, aunque viendolo bien, era todo un Max Steel a los ojos de él.

Comenzó a comportarse como chicle, a donde iba el pelinegro lo acompañaba. Esos dias, Jimin llegaba emocionado con su madre para contarle lo lindo que era tener a un hyung como Yoongi cuidandolo, y Suran desde aquel momento notó todo. La alegría del niño emanaba un dulce olor proveniente de su lobo, ese aroma que debía salir cuando el estuviera más grande fue presenciado  a los cinco años en el Omega.

Conoció a su destinado

Los Park compartieron la emoción de su hijo, aunque no por la misma razón.

"¿Alguna vez te he contado sobre los destinados, Minnie?"

La mujer acarició el cabello del niño cuando terminó de arroparlo. Él negó.

"Verás, según dicen, la Diosa Luna siempre soñó tanto con encontrar a su otra mitad, pero al ir creciendo se dio cuenta de que era algo imposible para ella. Su corazón se rompió en pedazos, en tantos pero tantos que no sabía como repararlo. Así que con una idea brillante, tomó esos pedazitos de su corazón y los esparció en los lobos de muchas personas, les otorgó el deseo que ella tanto anhelaba pero no tendría. Por eso, se les llama destinados, porque cada pedazito de su corazón tiene un complemento y están destinados a encontrarse en esta vida y en las demás"

Jimin sonrió y saltó de la cama.

"¿Tú y papá son destinados, mami?"

"No, pero eso no significa que no nos amemos. No somos destinados, pero nuestros lobos se aman tanto en esta vida"

Abrazó a su hijo, sentandolo en sus piernas para darle besos en toda la cara, lo que provocó carcajadas en Jimin.

"Cuando dos personas son destinados, sus lobos lo saben, sienten el olor del lobo contrario, uno que solo puede oler el otro y nadie más"

"¿Como sabré que solo lo huelo yo, mami?"

"No lo sé, quizá puedes preguntarle sobre su aroma a esa persona, y si tú persives otro, ahí tendrás la respuesta"

(.)

El joven Park lo había decidido y con toda la valentía caminó al salón de su hyung quien se encontraba sentado, comiendo tranquilamente su lonche.

"¡Hyung!"

Yoongi lo miró sonriente, debía admitir que la presencia del pequeño emocionaba a su lobo, haciéndolo rasguñar por dentro y moviendo su cola. Eso le causaba cosquillas.

"Dime, Minnie"

"¿A qué huelo?"

Dudoso, el Alfa olfateo al Omega y cerró los ojos para concentrarse. Su lobo apenas estaba creciendo, por lo que no podía distinguir muy bien los aromas, ¡ni siquiera el de su papá Jin! Pero quería intentarlo por Jimin.
Sin embargo, no le costó tanto encontrar los dos aromas... O tres

"Hueles a vainilla y fresas" pausó un poco confundido "pero también hueles a uva"

Oh... Lo que mamá dijo

Y Jimin solo pudo chillar emocionado.

"¡Hyung, hyung, somos destinados!"

Yoongi no entendió pero asintió dandole la razón al menor. Le preguntaría a papá Jin sobre eso, pero mientras tanto, él solo quería hacer feliz al rubio.

______________________
Bastante tiempo pasó.
Bueno, explico. Cambié
la diferencia de edad,
Yoongi y Jimin se llevan
dos años.
Y con el aroma, al nacer
los Alfas y Omegas nacen
con un solo aroma que
los identifica en la
jerarquía. Al cumplir
18 años les sale su segundo
y último aroma.
Solo el destinado del contrario
podrá oler el tercer aroma.