"Mi mami dijo que me cambiaran de escuela, hyung" un puchero se formó en sus labios y el pelinegro sintió morirse de ternura, algo que jamás admitiría en voz alta.

"Papá Jin dijo lo mismo, ¿Sabes por qué?" el Omega negó columpiandose a como podía por no alcanzar el piso.

"Sólo escuché hablar a mi mami con SeokJin hyung, dijo algo como "esa beta es una tonta"" miró al mayor con sus ojitos bien abiertos.

"¿Tonta? No creo que tu mamá haya dicho eso" rió.

El rubio arrugó su nariz.

"Dijo una mala palabra, no pienso repetirla, Yoonie Hyung" respondió bajandose del columpio viejo y oxidado "¿Podemos ir con mamá? Quiero un helado" el mayor asintió.

Tomó la manita del Omega para guiarlo y atravesar el pasto verdoso, vivo y un poco húmedo debido a la lluvia de la mañana. La mujer los miró con ternura al ver las manos unidas con entusiasmo y amor. Jin imitó su acción.

"¿Pasó algo?" habló el mayor.

"Mimi quiere un helado, papa"  contestó señalando al menor y acercandolo a él.

"Entonces iremos por él" contestó la Omega "Ustedes en medio, nosotros estaremos a su lado" explicó, los niños asintieron acatando las órdenes.

Los dos lindos Omegas reían comentando chismes nuevos de su trabajo y los niños miraron a sus mamás. Todos iban tomados de la mano, casi pareciendo una familia de dos Omegas.

"¿Dos Omegas juntos?" una vieja anciana criticó en voz alta, dos ancianas negaron en desaprobación.

"¿Aún hay gente creyéndo tener derecho de juzgar a una persona cuando nadie le preguntó su opinión?"  atacó Jin con una sonrisa falsa.

"Vámonos, querido. Las viejas quedaron en su mentalidad pasada" la mujer tomó el brazo del hombre "Niños, no sean como ellas"

YoonGi y JiMin rieron corrieron al local de los helados, entrando en este y dejando a los mayores detrás, quienes llegaron al poco tiempo para no dejarlos solo durante mucho.

"¿Ya saben que pedirán?" habló SuRan.

"¡Helado de chocolate!"

🍦

"¿Verán películas?" la señora Park preguntó mientras se adentraban en la casa.

El señor Park aparcaba el auto en la cochera, quedándose después con el otro Alfa para hablar de cosas del trabajo. Luego de pasar tiempo en el parque comiendo helado hasta llenarse, un pequeño JiMin rogó a los dos Omegas para que su lindo hyung se quedara en casa de él y poder convivir más. Al final aceptaron encantados por el puchero del rubio, aunque SuRan invitó a sus padres también a quedarse esa noche en casa.

"¡Sí! Llevaré a Hyung a mi cuarto, mami" el Omega no esperó respuesta para salir corriendo arrastrando al mayor con él.

Subieron las escaleras a todo lo que sus cortas y delgadas piernitas les permitían. Cerró la puerta de su cuarto sin pestillo.

Sentó a su hyung en la suave alfombra felpuda blanca que tenía en su habitación, éste lo hizo confundido.

"Hyung..." murmuró.

"¿Qué pasa, Minnie?" la actitud extraña de su menor le hizo sentir preocupación.

El rubio se sentó en las piernas largas del pelinegro, él se sorprendió ante tal acción.

"Yo... Em... Lo que pasa... hyung es que hace mucho no le doy un besito" sus mejillas se calentaron y YoonGi sintió ternura.

"¿Quieres uno, MiMi?" asintió tímido.

Sus caritas se acercaron con timidez y vergüenza para después tocar los cálidos labios ajenos, la pansita del rubio cosquilleo ante el choque de los labios delgados con los suyos, ¡Era como la sensación de los truena pop en su lengua!, solo que esta vez era en su estómago. No los movieron, después de todo, eran dos niños de siete y cinco años quienes daban sus primeros besos, no habían segundas intenciones. Se separon luego de unos segundos mirándose a los ojos.

"Me gustan los besitos" le daba pena admitir eso delante del menor pero era verdad.

"A mi igual, hyung. Mi mami dice que los besitos se les da a quien amas, yo lo amo, Yoonie. Quiero darle besitos para limpiar su boquita sucia al decir malas palabras"

Los dos sonrieron sonrojados y prosiguieron a jugar con los juguetes del menor, riendo y bromeando..

Dos Omegas presenciaron todo, y no pudieron evitar sentir su corazón latir con amor ante el cariño puro de dos niños pequeños.

Por que apesar de que eran muy jóvenes para esos actos, no vieron nada de malo en dejar que ellos crecieran demostrando su amor al otro con actos tan inocentes, por que ellos se amaban y no harían nada para detenerlos.

Denle estrellita culiaos 😠