-Pues en la universidad, Ahm... tuve que quitárselo de las garras a un mocoso que quiso sobre pasarse, ese bastardo uso su voz de mando en él. -soltó un gruñido pero se asustó cuando escuchó un pequeño chillido salir de los labios de la señora.

-Muchas gracias Jovencito, mi Taehyungie es un niño muy dulce pero se ha ganado algunos problemas por rechazar a la mayoría de sus pretendientes, principalmente con los alfas, a pesar de que le insisto en aceptar al menos uno se niega rotundamente; ya va a cumplir veinte años y ni siquiera tiene amigos aparte de Hoseokie. -suelta un suspiro cargado.

-No hay porque señora...

-Suran, pero puedes decirme Nana Su, ¿cuál es tu nombre?

-Oh! Disculpe mi falta de respeto, mi nombre es Kim Namjoon. -se pone en pies y hace una drástica reverencia de noventa grados, esto hace sonreír a la mujer pues ve lo educado que es el chico.

-Eres un joven muy apuesto -El alfa se sonroja, a pesar de que esta acostumbrado a escucharlo pero  que el alago venga de una señora como lo es la abuela del niño lindo que lo ha dejado cautivado le hace sentir tímido.

-Muchas gracias Nana Su. -le regala una sonrisa.

-Cuéntame ¿en que trabajas Namjoon-ah? -se siente como si fuese un interrogatorio policiaco a pesar de ver la cálida sonrisa de la señora, pero si ella es la clave para tener a Taehyung para él entonces aquí vamos...

-Soy dueño de K Corp. -declara con timidez pues realmente anhela ganarse la confianza de la señora sentada frente a él.

-Interesante, disculpa la ignorancia de esta anciana, pero ¿en que área se desarrolla la empresa?

-No se preocupe por eso Nana, K Corp. se basa principal en inversión, trabajamos en diferentes áreas, desde bienes raíces hasta exportación. -a Suran le agrada mucho el chico pues en cada acción que proviene de él ve sinceridad y humildad.

-Ahora bien, por lo que me has contado conociste hoy a mi pequeño bebé y por más amable que seas, se que traerlo hasta aquí no fue solo por mera causalidad, cuéntame que te traes entre manos con mi niño? -esta vez la señora se pone totalmente seria, haciendo que un escalofrío traspase la columna vertebral del alfa poniéndole nervioso, ¿Cómo una señora tan dulce puede inducir miedo?

-Bueno... no le voy a decir que estoy enamorado porque lo acabo de conocer, pero hay algo que me llama mucho la atención de él, en este preciso momento mi lobo está como loco dando vueltas por que desde aquí podemos percibir su olor; aparte de que es un niño muy tierno y pues nunca había visto a un omega tan lindo como él, me disculpo si le he causado una mala impresión o si les he hecho sentir incómodos. -se pone en pies y hace una respetuosa reverencia hacia la señora llamando la atención de algunos clientes que pueden ver su comportamiento, la señora solo sonríe y le hace señas para que se siente nuevamente, el joven con la mirada en el piso acata la orden, algo avergonzado por ser tan obvio.

-No tienes porque pedir perdón, yo soy quien debería disculparme, te he hecho todas estas preguntas porque eres el primera persona aparte de su familia y el pequeño Hoseokie con el que Taehyung se ha sentido cómodo, con ningún otro deja que se le acerque a más de metro y medio sino es necesario. - revela la señora haciendo que el pecho del contrario se llene con una sensación de calidez y orgullo -Pero bueno, al menos le has pedido su número? -pregunta esta vez la señora cambiando de tema.

-Pues... por así decirlo le mentí diciendo que como soy su nuevo patrocinador le dejaría mi número para que me informara cualquier cosa importante y pues se la creyó -susurra rascando su nuca con nerviosismo.

-Estos jóvenes de ahora no tiene valor, en mis tiempo a la edad de Taehyung yo ya tenía un cachorro. -eso hace al joven sonrojarse -Bueno no es el método que esperaba pero es mejor que nada, solo no tardes mucho en pedirle cortejo, quiero tener bisnietos antes de hacerle compañía a mi esposo en el más allá. -vocifera en son de chiste, haciendo relajar un poco al chico.

La mujer iba a decir algo más pero aparece Taehyung ya cambiado, con su rico aroma embobando al alfa con una linda bebida que a simple vista se ve exageradamente dulce para el alfa, pero lo último que quiere es hacer sentir mal al omega diciéndole que no es amante a lo dulce, así que solo se dispone a sonreírle en agradecimiento.

Ve al chico sentarse frente a él con ojos curiosos y llenos de ilusión, así que se decide por probar la bebida, le da un sorbo y debe de admitir que a pesar de ser muy dulce le encanta.

-Esto está muy delicioso, ¿qué es? -pregunta mientras saborea el contenido del vaso.

-Es un frappe de chocolate hyung. -revela el menor con una tímida sonrisa, lo que no sabe es que el Lobito del omega juega contento por haber complacido a su hyung.

-No había probado este...

-Café, es un café Namu hyung. -la sonrisa de Tae se vuelve más amplia, mientras la señora se retira de manera silenciosa.

-Está muy rico -afirma esta vez, continua bebiendo el líquido en silencio.

-Yo... ya debería irme. -avisa el moreno.

-Oh! Esta bien, supongo; muchas gracias por hoy hyung, l-lamento haberle causado tantos problemas. -habla con tristeza el menor.

-Recuerda que me puedes contactar, para lo que sea sin importar nada, solo envíame un mensaje o llámame -Le reafirma el mayor con una sonrisa.

Dicho esto se pone en pies saca su billetera pero es interrumpido por el omega.

-No hyung, tómelo c-como un regalo, después de todo usted me ayudó -Mira sus piecitos que juegan entre ellos con timidez, le entrega devuelta su chaqueta -Muchas gracias por todo Namu hyung -Taehyung no sabía la razón pero tanto su Lobito como el estaban tristes por que su nuevo hyung tenía que irse, pero jamás lo diría.