Día 3 Do'h
Universo sin quirk
La primera vez que lo escucho fue en una ocasión cuando iban corriendo, dando vueltas por los dormitorios de la universidad cuando de repente una roca que no vieron hizo al pecoso caerse de boca al suelo, dio unas cuantas vueltas hasta quedar con la cara enterrada en el lodo y el trasero alzado con algunas flores pegadas en su pecoso rostro. El rubio se acercó para confirmar que su querido y tonto novio estuviera bien, llego a su lado y solo escucho a su pecoso medio gritar.
''¡DO'H!''
Fue lo que grito mientras se ponía de pie.
Katsuki se quedo quieto mientras procesaba la situación, entonces se comenzó a reír a carcajadas.
-Que demonios deku- Se sostenía el estómago después de tanto reír- Ahora tienes un hijo llamado Bart y una llamada lisa...PUAJ- exclamo sacando la lengua- no gracias no quiero hijos.
El pecoso lo miro con reproche.
-Ahora no estoy de humor para tus chistes kacchan- se levanto lentamente mientras se sobaba la cara- Mejor consuélame que ya no encuentro mi dignidad.
El rubio se rio de nuevo, pero extendió los brazos, el pecoso de inmediato se lanzó a los brazos de su kacchan y se acurruco en su pecho, el rubio lo envolvió en un abrazo y ambos se balancearon de un lado a otro jugando y riendo.
La segunda vez que lo escucho fue en su recamara.
En uno de sus besos mientras estaban recostados en la cama del rubio, este comenzó a mover a izuku un poco mas arriba de la cama para estar más cómodos. Y como tenía todos los sentidos ocupados en izuku no se dio cuenta cuando todo el cuerpo del pecoso ya estaba recostado en la cama y la cabeza de izuku llego a la pared, solo escucho el sonido del golpe y como izuku se separaba rápido del beso.
-¡DO'H!- Volvió a exclamar como días atrás había hecho mientras se sobaba la cabeza.
Katsuki se volvió a reír a carcajadas. Izuku le miro molesto y le tapo la cara con su palma.
-Deja de reírte, no es chistoso, es por tu culpa que me golpeado- el pecoso aún tenía su palma en su cara, así que optó por darle una larga lamida.
El de pelo verde chillo quitando su mano de la cara del rubio y la limpio en su blusa, miro mal al rubio y este solo le sonrió burlón.
-¿Qué pasa amor?- le miro divertido viendo como el peliverde se sonrojaba, sabia que le gustaba que lo llamara así aunque jamás se lo pedía, el lo hacia para complacerlo o burlarse de él, más la primera.
-Deja de mirarme así- el pecoso lo empujo un poco para acomodarse en la cama y quedar acostado viendo de frente a la pared.
-Oh vamos- el rubio se medió acostó a su lado aunque el peliverde le daba la espalda- No te enojes bebé.
Vio como las puntas de las orejas del de pelo verde se ponían rojitas y sonrió con ternura, su novio tenía tanta debilidad por los apodos lindos que era adorable.
El de ojos verdes se volteo a verlo y aun con la cara roja le miro con un puchero en los labios y el entrecejo fruncido tiernamente. Se inclino y beso el puchero el pecoso se relajo un poco.
Se acostó por completo a su lado y lo abrazo por la cintura atrayéndolo a su cuerpo. El pecoso pego su cara en el pecho del rubio acurrucándose.
Katsuki suspiro complacido y beso la frente del pecoso.
-Te amo- le susurro al oído mientras acariciaba la espalda del pecoso, pudo sentir como se estremecía y después relajaba.
-Yo también, te amo mucho- el de ojos verdes dio un ligero beso en la barbilla del rubio.
La tercera vez que lo escucho fue horas después de la segunda.
Ambos estaban dormidos, en algún punto de la noche izuku dio una vuelta sobre katsuki y se quedo a la orilla de la cama, el rubio siempre dormía como estrella y al intentar acomodarse empujo con su brazo a izuku que cayo de la cama con sonido estrepitoso y jalando las sabanas tratando de sujetarse vagamente de algo.
-¡DO'H!-volvió a replicar, katsuki medio dormido y despertado por el golpe río ligero para después asomarse a orilla de la cama.
-¿Estas bien Homero Simpson?- le sonrió mientras lo veía en el piso.
Izuku lo miro mal mientras se levantaba.
-Ya cállate- demando antes de volver a acostarse en la cama dándole la espalda al rubio.
-¿Así que ahora me das ordenes?- pregunto burlón medio acostándose para poder ver su rostro gruñón y abrazando al pecoso por la espalda.
-Solo cállate y déjame dormir tenemos clases en 4 horas- le mostro el reloj en su muñeca mientras pegaba aún más su espalda al pecho calientito de su novio.
-Bien dormilón- se recostó por completo enterrando su cara en los rizos del pecoso y inhaló fuerte, siempre olían a jazmín y menta frescos.
Mientras daba pequeñas caricias en el estomago de izuku y con el suave sonido de su respiración se fue quedando dormido junto al pecoso poco a poco.
La cuarta vez que lo escucho fue una semana después.
Estaban haciendo tarea mientras bebían un poco de café, izuku estaba sentado cruzado de piernas mientras katsuki estaba medio recostado en el suelo apoyándose en su codo.
-Voy al baño- anuncio el pecoso, al levantarse golpeo la mesa provocando que ambas tazas de café cayeran en las libretas.
-¡DO'H!-volvió a gritar el de pelo verde.
-¡NO!- grito katsuki intentando limpiar lo más que podía su libreta.
-Lo lamento kacchan- susurro el de ojos verdes mientras limpiaba lo mas que podía la libreta.
-Pues ya que- bufo molesto el rubio- tendremos que hacer todo otra vez- Izuku asintió triste y comenzando a sollozar.
-lo lamento, se que hemos trabajado mucho en esto- se lamento mientras sus ojos se llenaban de lágrimas.
-Ven aquí- extendió sus brazos y el pecoso no tardo en enterrar su cara y colocar sus manos en su pecho, el de mirada rojiza lo rodeo por la cintura con sus fuertes brazos y recargo su barbilla en los rizos de izuku.
-Esta bien ya no llores pequeño Homero Simpson- dio caricias en círculos en su espalda.
-Ya no me llames así- susurro mientras restregaba su cara en el pecho del rubio.
-Cuando dejes de decir su frase célebre lo haré.
La quinta y la vez más reciente, en realidad no la dijo el pecoso.
Estaba en el cuarto del pecoso leyendo en la cama cuando el pecoso apareció en la puerta.
-La cena esta lista, los chicos y yo preparamos curry, al tuyo le puse mucho picante- El peliverde le sonrío ligeramente.
-Ya voy -al levantarse de la cama tan rápido se terminó pegando la cabeza con el respaldo de la cama.
-¡DO'H!-exclamo sobándose mientras el peliverde reía.
-¿Quién es Homero Simpson ahora?- se burlo el de pelo verde.
El rubio refunfuño algo que no pudo escuchar y se acercó a el.
-Ven dame un abrazo- extendió los brazos y katsuki sentado en la cama rodeo la cintura de izuku con sus brazos y enterró su cara en su plano estómago. Izuku sonrió y con sus manos daba ligeras caricias en el cabello rubio.
-Vamos a comer kacchan.
Katsuki asintió pero no se movió.
-Vamos kacchan.
Katsuki se separo un poco solo para hablar.
-5 minutos más- el de rizos sonrió con ternura y asintió.
-Y luego a comer- el rubio asintió volviendo a enterrar su cara en el pecoso estómago.
-Deku...
-¿Si?
-Te amo
-También te amo kacchan.
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