Día 23 Día lluvioso
Izuku amaba los días de lluvia.
Con sus cortos 4 añitos camino con un paragua rojo hasta el parque. Saltaba en todos los charcos que encontraba manchando sus botitas rojas. Hasta que vio al rubio a la distancia.
-KAAAACHAAAAANNN- grito a la distancia.
El rubio miro al peliverde en su pequeña casa del árbol, tiro las escaleras y el pecoso subió pasándole su paraguas. El de ojitos verde le sonrió al subir y subió la escalera.
-¿Trajiste las cosas?- pregunto katsuki.
Izuku sonrió y saco de su mochila papitas y jugos. El rubio acomodo las almohadas y cobijas, se sentaron contra la madera junto a la ventana de la casita y se cobijaron acurrucándose entre ellos. Las bolsas con papitas y dulces fueron puestas sobre las mantas y la Tablet fue puesta en las piernas del rubio y le puso play a la película.
El pecoso se cobijo hasta el pecho y recargo su carita en el hombro del más alto abriendo una bolsa de papitas y comiendo con tranquilidad.
La lluvia resonaba fuerte afuera y unas pocas gotas los mojaban un poco pero no importaba. La película trataba de unos chicos que se enamoraban y eran separados por sus diferentes clases sociales, al final ambos escaparon y se besaron en un puente con la luna llena de fondo.
-¿Qué es eso?- pregunto el pecoso.
-¿Qué cosa deku?
-Eso que hicieron, juntar sus labios así- con sus manos hizo señas mostrando su punto.
El rubio inflo su pecho con orgullo y miro a izuku.
-Eso se llama ''beso''
-¿Y por que lo hacen?
-Por que se quieren, cuando alguien te quiere y tu a esa persona se besan.
Izuku abrió la boca sorprendido y asintió.
-Ahora entiendo.
Y con sus pequeñas manos tomo la cara del rubio dándole un pequeño beso.
No duro más de unos segundos y el pecoso se separo sonrojado.
-Es que yo quiero mucho a kacchan......-fue lo que dijo el pecoso.
Katsuk..........
Katsuki estaba reiniciando su cerebro.
Entonces tomo la pecosa carita y con brusquedad y pego sus labios con los suyos.
Varios años después el pecoso se acerco y subió con cuidado la escalera. El rubio le saludo con un movimiento de cabeza y su vista se fue otra vez al celular, el pecoso recogió la escalera y se acerco al rubio.
-Hola amor- saludo con un beso en su mejilla.
El rubio se hizo aún lado y moviendo la cobija invitándolo a pasar, el pecoso se recostó acurrucándose en el brazo del rubio. Este paso su brazo alrededor de los hombros del pecoso pegándolo a su cuerpo. Izuku suspiro gustoso con el aroma masculino de katsuki.
-Y..........¿Haremos algo interesante?- pregunto el rubio coqueto.
Izuku lo empujo con suavidad y río.
-¿Dese de cuando los días de películas se convirtieron en días de dejarme en silla de ruedas?- pregunto con urla.
-Desde que te pusiste 1000 veces más hermoso y cumplimos 16- beso su mejilla con fuerza.
El rubio recostó a izuku en el ''nido'' y se acomodo aprisionándolo con su cuerpo. Los besos jamás faltaban y las caricias se hicieron presentes y los jadeos de izuku resonaron en su oído. Beso su blanco y pecoso cuello escuchando los gemidos del peliverde. Era una suerte que estuviera lloviendo, así los gemidos de ambos no se escucharían fuera de la casita del árbol.
Sus manos tocaron el cuerpo que ya conocía bien de memoria. Beso en los lugares favoritos de izuku y toco en sus favoritas. El pecoso tenía un sonrojo en su cara, orejas y hombros, el peliverde tomo su rostro con cuidado y lo beso como hacía desde hace tantos años.
Recuerda cuando los descubrieron.
El rubio había dejado la puerta de la casita abierta y las escaleras abajo, según el solo serían unos minutos.
Comenzaron a jugar que katsuki le pedía matrimonio a izuku y este aceptaba, el rubio se colocaba un moño de broche y le ponía en la cabeza al pecoso una manta blanca y una margarita. Dijeron sus ''votos'' y se besaron, el rubio siempre fue más alto y fuerte por lo que con facilidad cargo al pecoso como princesa y le dio muchos besitos pequeños en los labios y mejillas, cuando le dio el beso largo (que solo era pegar sus labios as rato de lo normal) y el pecoso se aferro a su cuello su madre entro por la puerta en el suelo.
Los tres se quedaron estáticos y la rubia río con ganas.
''Sabía que ustedes eran el uno para el otro''
Y así como estaban vestidos los llevo con su esposo y la madre del pecoso. Los tres adultos se rieron demasiado. Desde entonces están ''comprometidos''
Sus gemidos pararon y respiraron los dos agitados.
-¿Otra ronda futuro esposo?- pregunto riendo.
Izuku también río pero asintió.
Amaba esos días, desde niños se juntaban los días que llovía para ver películas y series, eso nunca cambio, incluso después de la acción veían películas.
Amaba esos días.
Se acurruco en el pecho del rubio y este beso el anillo plateado delgado con un diamante grande en el centro. Y cómo siempre se dio cuenta cuanto deseaba casarse con ese rubio.
Se dio cuenta como siempre en un día lluvioso
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