Al amanecer, nuestro camino hacia Raiwn se reanudó.

Luego de cruzar parte del camino, tardamos cerca de dos días en llegar hacia la zona central de Japón.

Pero luego de tanto y algunas complicaciones en el camino, finalmente logré divisar la ciudad en la lejanía.

Raiwn era una ciudad envuelta por unos muros de acero, construida poco después de la apertura del primer refugio.

Lo único que se es que fue construido por los primeros moradores en salir de un refugio de "Pandora".

Desde lejos se podía ver como varias caravanas de comercio iban y venían de esta, claramente tomándola como punto de encuentro y de ventas.

En Raiwn estaba todo lo que podías desear en este ambiente post apocalíptico o al menos lo mejor.

Protección, trabajo, comercio y un fluido constante de agua limpia gracias a una purificadora.

Aunque para mi... solo es el lugar donde voy a ver a una vieja amiga.

-Ha pasado un tiempo desde que estuve aquí.

Noté como Ochako se mantenía algo cautelosa con la ciudad, cosa que debí esperarme.

Como salvaje, tal ves la educaron para mantenerse alejada de ese tipo de comunidades o ciudades.

Pero luego de varios días creo que logre entender un poco el pensamiento de esta salvaje.

Me acerque para darle unas caricias en su cabeza, cosa que le gustaba mucho.

-...

Aún así ella se mantuvo cautelosa, pero pude notar como estaba lista para seguir con su camino.

-Bien, vamos.

Sin más demora, nos dirigimos hacia Raiwn.

***

Luego de pasar un rato mirando varios puestos y recargando mis depósitos de agua, ya era hora.

Me dirigí hacia el sur de la ciudad, específicamente hacia una casa con un letrero que decía : "Taller de Ingeniería".

Al entrar, pude escuchar una clásica campana sonar por la apertura de la puerta.

Ring~*

Esto llamó la atención de la persona que estaba en el mostrador, girando para verme.

-Si, ¿Qué dese...?

Cuando vi que ella me había visto, sonreí por la felicidad de saber que no se había muerto.

-¡Izuku!

Rápidamente mi amiga corrió hacia mi para recibirme con un fuerte abrazo, creo que es normal ya.

Siempre que salgo piensa que jamás volveré, tal ves por mi naturaleza atrayente del peligro.

Por ahora, solo disfrutaré el encuentro con mi amiga.

-Hola, Mei. Ha pasado tiempo.

-¡Mucho tiempo, mi querido Izuku! ¡Pensé que habías sido cena de Pardosos!

-Esa cosa ni siquiera es común en Japón, creo que lo extinguimos la última ves.

-¡De todas formas!

Me siento algo tranquilo al ver que su forma de ser tan energética jamás cambiará.

Ella es mi amiga Mei, Hatsume Mei. Una linda chica de cabello rosa y de ojos peculiares.

Es de los últimos conocidos que me quedan en este país, después de todo la mayoría ya migró.

En un salvavidas en el mejor momento, mejor ahora porque se una cosa.

Ella será la única persona que podrá darme un precio justo por las piezas de tecnología que logre recuperar del cargamento.

Aunque está tienda no es suya, le pertenece a su padre adoptivo por así decirlo.

El señor Higari Maijima es alguien agradable, me acogió un tiempo luego de llegar a la ciudad y ayudarle con algunas cosas.

Ahora debería estar reparando una que otra cosa en la ciudad, ese es su trabajo después de todo.

Tengo otro amigo por aquí en la ciudad, pero tal ves llegue luego.

Mientras Mei y yo hablamos, ella logró percatarse de Ochako, quien se escondía detrás de mí.

-¿Huh? ¿Y está chica...?

Mei se acercó hacia Ochako, quien retrocedió alerta a su repentina cercanía.

-¿Es tu novia?

-Qué va, no es eso.

Negué rápidamente todo posible malentendido futuro, peor tratándose de Mei.

Es conocido como su lengua es bastante fácil de soltar en los bares.

Peor si hay artefactos tecnológicos o algo de conocimiento de por medio, pero fuera de eso... Es de confianza.

Sentí como Mei comenzaba a verme con una cara curiosidad e interesada por Ochako.

-Siéntate, va a tomar un rato ponernos al día.

***

Luego de un rato, logre ponerme al día con Mei sobre todo en general.

Le conté de mis viajes, lo que vi y lo que viví.

Pero lo más importante fue la parte del cómo conocí a Ochako y del porqué ella ahora está conmigo.

Intente ocultar mi verdadera intención al inicio, pero ella logró descubrirlo.

La cara que puso no fue nada amigable.

-Izuku... A veces me pregunto como puedes ser tan idiota.

-¡Hey! ¡Cualquiera en mi posición haría lo mismo!

-Sabes que no veo bien la esclavitud y tu vas para obligar a una pobre salvaje a ser tuya.

-Pero nada paso, hasta le deje seguirme.

-Por protección hacia ti supongo.

-...

-Veo que tengo razón, Dios mío...

Mei se tomó el puente de la nariz con algo de decepción, eso podía sentirlo claramente.

Solo pude agachar mi cabeza avergonzado, o al menos fingir que lo estaba.

Luego de un rato en el cual Ochako comenzaba a curiosear por la tienda, Mei cambio el tema.

-Pasemos a los negocios mejor, ya luego te puedo regañar o usar de sujeto de prueba para un bebé.

-¡Todo menos eso!

Si una vida larga quiero vivir, evitar los bebés de Mei debo seguir.

¡Es una lunática en ese tema!

Recuerdo que me obligó a envenenarme con radiación sólo para poder comprobar un aparato que calcula su cantidad.

Cosa que funcionó mejor que lo planeado, hasta llevo uno...

¡Pero ese no es el punto!

Mejor me largo al bar apenas termine de comerciar con ella, quien sabe... tal vez haga trueque con algo útil.

-¿Qué me trajiste esta ves?

-Tengo varias cosas, pero son algo... delicadas.

-¿Qué tanto?

-Grado militar, use la llave.

-...

Mei se levantó de golpe, caminando hacia la entrada de la tienda.

Ella lo cerró con llave para comenzar a caminar hacia otra habitación.

-Veámoslo en mi oficina, no queremos... susurradores.

Si, es normal ver en estos días espías de otras tiendas para robar o peor... matar.

Peor sabiendo que los objetos de Mei eran cotizados, tengo suerte de ser un amigo íntimo de ella.

Por ahora decidí seguirla, dejando que Ochako jugará... con lo que sea que tenga en la boca.

No importa, es inmune a la radiación.

***

Una ves en la oficina de Mei, pude ver como ella empezaba a analizar todos mis materiales.

Pude ver como su curiosidad y emoción crecían al verlo, aunque no entendía el porqué.

Yo no sé qué hacen esas cosas, solo las traigo y me da un par de chapas que nunca viene mal.

Además que me deja dormir en una habitación libre siempre que paso, cosa que no le gusta al recto de mi otro amigo.

Pero disfrutaré el rato hasta que el llegue, ahí mis ánimos van a morir un poco.

Por ahora, Mei me dirigió la palabra mientras veía una caja llena de cables.

-Esto es un módulo de sensores de antes de la guerra, como... ¿Dónde conseguiste esto?

-Ya te dije, en una caravana abandonada cerca del monte Akagi por Maebashi.

-Izuku... esto no es sólo grado militar, ha sido modificado.

-... ¿?

-Ósea que alguien reparo este módulo no hace mucho, además que esta... demasiado bien reparado.

Mei comenzó a preocuparse un poco al ver el módulo, aunque no sabía el por qué.

Solo vi como ella mordía su labio al ver bien cada parte del módulo.

-¿Algo más que quieras decirme?

-Ya te dije que tuve que usar la llave del refugio, tal ves... sea algo de "Pandora". Sabes bien que esos idiotas hacían cosas raras en sus refugios.

-Si, como con el...

Mei se callo antes de decir algo, cosa que agradezco sinceramente.

No me gusta tocar el tema del refugio con ella, ni con... nadie.

Eso es una parte de mi pasado que prefiero olvidar, así que por ahora me concéntrate y disfrutaré.

***

Al menos eso pretendía... hasta que la puerta fue abierta.

-Oye, Mei. ¿Por qué hay una chica abajo y la puerta estaba...?

-... ¿?

-Ha...

Y aquí está, mi maldito por desgracia amigo, Tenya Iida.

No tengo nada con el, solo es que...

-Oh... Es Izuku.

-Maldición... y yo que quería dormir bien este día.

Pará desestresarme rápidamente de haber visto su cara, saque un cigarro de mi bolsillo para prenderlo.

Pero antes de encenderlo, Tenya lo tomó para tirarlo al piso y pisarlo.

-¡Hey!

-¡No debes fumar, Izuku! ¡Te hace daño al pulmón y te quita años de vida! ¡Además que eres joven aun!

-¡Por esta razón es que no te soporto! ¡Siempre tiras mis cigarros!

-¡Deja de fumar por tu salud!

-¡Oblígame mal intento de aspirante de Ranger que se quedó como cartero!

-¡¡Eso sí que no te lo acepto!!

-¡¡Pues ven robotrón!!

En un instante, comencé a tener un forcejeo con Tenya en la oficina de Mei.

Esto es bastante común, más cuando menciono el hecho de los Ranger.

Los Ranger eran como una policía que tenía centros en todo Asia y según escuché en gran parte de Europa también.

Tenya tomó el examen para entrar, pero... no pudo por no tener el coraje de matar a un caníbal.

Por eso ahora solo es un mensajero que lleva encargos de aquí para allí, es bastante rápido en eso.

Por ahora, yo solo seguí con mi lucha casual con Tenya.

Al menos eso intentaba hacer, pero Mei nos detuvo con un tono serio de voz.

Nos paramos al instante, pues... no es normal escuchar a Mei hablar enserio.

-Izuku...

Ella miró con algo de miedo el módulo, apretando con fuerza en su agarre.

-¿Seguro que no hay algo más que puedas decir?

-...

Finalmente recordé eso que me olvidé decirle, lo que me sorprendió al ver esa caravana.

-Oh, claro... También había una especie de armadura de metal gruesa. No se que era esa cosa.

-... ¡¡¡!!!

En un segundo, los ojos de Mei pasaron a ser pálidos y dejar de tener toda clase de brillo.

Sus manos empezaron a temblar mientras que un sudor recorría todo su cuerpo.

Ahora sí quiero respuesta de que diablos esta pasando por su cabeza, así que me levante.

-Mei...

Pero al instante, una explosión se escucho en toda la lejanía de forma contundente.

¡¡BOOM!!*

La explosión fue tan poderosa que incluso sacudió la tienda entera por un segundo.

-¡Que está...!

Tenya corrió hacia le ventana, mirando en la lejanía hacia la entrada de la ciudad.

Yo también corrí para ver que diablos estaba sucediendo, logrando ver algo... confundo.

-¿Otra armadura?

***

En donde nació la explosión, una gran cantidad de humo y polvo se levantó en el aire.

Varios ranger y guardias de la ciudad fueron hacia la entrada, cargando con sus armas hacia delante.

-¡Que alguien revise que causó la explosión!

-¡Si!

Un guardia se acercó tapando su boca con la mano por el polvo, tratando de mirar a su alrededor.

-Yo no veo na...

Pero antes de poder decir otra cosa, un disparo atravesó su pecho en un solo avance.

¡¡Bang!!*

El guardia cayó muerto al instante, cosa que alertó a todos los que estaban en la zona.

Lo que parecía ser el capitán de los Ranger camino apuntando hacia delante.

-¿¡Quién eres!?

Respondiendo su pregunta, el atacante se dio a conocer al caminar a través de la densa neblina de polvo.

Una figura cubierta por una coraza de metal avanzó, el cual tenía una arma de fuego pesada en sus manos.

Un collar de balas corría desde su ante brazo hasta el arma, el cual soltaba humo por su uso reciente.

La armadura de metal no dijo nada ante los guardias y Ranger en la puerta.

-¿Qué está...?

-... ¡¡!!

Sin hacer nada antes, la armadura de metal comenzó a expulsar un sonido de giro.

Fuuuuh*

De repente... una lluvia de balas salió disparado desde aquella arma pesada.

¡¡Raktak!!*

¡¡Raktak!!*

¡¡Raktak!!*

¡¡Raktak!!*

¡¡Raktak!!*