Ova 3: CrystalSorcererce
P.O.V. KATSUKI
La oscuridad de mi habitación era una extensión de mi mente
Un espacio donde nada más que el juego importaba, en ese rincón solitario, donde las luces de la ciudad apenas se filtraban a través de las cortinas gruesas, me sentía en casa, el único brillo en la penumbra provenía de la pantalla de mi computadora, iluminando mi rostro con una luz fría y artificial
Mis manos se movían de manera frenética sobre el teclado, una danza de precisión y velocidad que solo aquellos que viven para ganar podrían entender, mi respiración era controlada, mis pupilas fijas en cada detalle del juego, cada movimiento calculado al milímetro
El sudor bajaba por mi frente, resbalando hasta la punta de mi nariz, pero ni siquiera parpadeaba, mi mente estaba concentrada en un solo objetivo
Destruir al enemigo que se interponía en mi camino, mis oponentes no eran simples jugadores; eran obstáculos, piedras en el camino que debía aplastar para llegar a la cima
No importaba cuán buenos fueran, no eran rivales para mí
Con cada segundo que pasaba, la tensión en mi cuerpo aumentaba, mi mandíbula estaba apretada, los dientes rechinando mientras lanzaba órdenes precisas a través de los dedos, la victoria estaba a la vista, un par de movimientos más y...
-¡Boom! ¡En tu cara, idiota!- grité, golpeando la mesa con la palma de la mano, tan fuerte que la madera tembló bajo mi furia
El sonido de mi voz resonó en la habitación vacía, pero no me importó, no había nadie más que importara en ese momento, solo yo y mi triunfo
En la pantalla, el mensaje de "Victoria" se desplegaba con letras brillantes, un testamento a mi habilidad superior, me recosté en la silla, una sonrisa arrogante estirándose en mis labios, nadie podía derrotarme
Nadie
En el mundo Gamer era conocido por el seudonimo CrystalSorcererce, asi... Me solian llamar en mi escuela, debido a que usaba anteojos y me gustaban los libros de Harry Potter... Aveces me pregunto que hubiera pasado si hubiera tenido aunque sea un amigo de niño
>-¿Quién necesita héroes?-< pensaba para mis adentros, una y otra vez >-Esos son para los débiles, para los que no saben cómo ganar en la vida real-< Para los que necesitan una excusa, un consuelo, aquí no hay atajos, no hay excusas, solo ganar, siempre ganar
Todo lo demás es una pérdida de tiempo
Sin embargo, en medio de mi momentáneo regocijo, algo extraño ocurrió, la pantalla, que debería haber mostrado mis estadísticas, parpadeó, la imagen se distorsionó, y por un breve segundo pensé que mi computadora había fallado, pero no era eso
Una luz brillante comenzó a emerger del centro de la pantalla, como si intentara salir del monitor y envolverme
Me eché hacia atrás, sorprendido, parpadeando para aclarar la vista
-¿Qué mierda...? - murmuré, apenas terminando la frase cuando la luz lo cubrió todo
Cerré los ojos, instintivamente levantando un brazo para protegerme de la cegadora claridad. Sentí como si mi cuerpo se desvaneciera, como si el suelo bajo mis pies ya no existiera, el sudor frío recorrió mi espalda
Esto no era un simple error técnico, algo más estaba pasando
Abrí los ojos con cautela, esperando ver mi habitación, tal vez una pantalla rota o alguna otra señal de que todo había sido un mal sueño, pero lo que vi era completamente diferente, algo que no tenía sentido
Un mensaje, ese mensaje decía
【Chico ¿Han sentido alguna vez que nacieron en el mundo incorrecto? 】
-¿Qué...... es esto?- me preguntaba yo, y otro mensaje me llego
【¿Qué piensan de este mundo? ¿Es interesante? ¿Es un lugar donde puedas sentirte
tranquilo? 】
【Qué pasaría si un mundo donde todo fuera decidido por un simple juego existiera-】
Esos mensajes me confundía por lo raro que sonaba, pensé apagar mi computadora para no seguir hablando con un posible hacker o psicópata en potencia, pero la notificación de otro mensaje llego
【Un mundo donde los objetivos y reglas son claros, un mundo en la cima de la lista de
videojuegos, ¿Qué piensas?】
En ese momento decidí escribirle una respuesta
_【Si esa clase de mundo existiera realmente, entonces eso significaría que yo de verdad nací en el mundo equivocado】_
El silencio que siguió a mi respuesta fue opresivo, como si el mundo mismo estuviera conteniendo el aliento
Mis dedos temblaban sobre el teclado, esperando una reacción, la luz de la pantalla seguía brillando intensamente, proyectando sombras alargadas en las paredes de mi habitación
Estaba a punto de levantarme de la silla cuando la respuesta apareció, lenta y deliberada
【Entonces, chico, ¿te gustaría probar ese mundo?】
El mensaje parpadeó en la pantalla, cada palabra parecía clavarse en mi mente como un desafío, sentí una mezcla de emoción y temor al mismo tiempo, era como si una puerta desconocida se hubiera abierto ante mí, una puerta que prometía algo más grande, algo que mi existencia hasta ahora no me había dado
Respiré hondo, mi corazón latía con fuerza en mi pecho
¿Era esto real?
¿Podría ser posible?
Miré alrededor de mi habitación, la familiaridad de todo me resultaba extrañamente ajena en ese momento
Algo dentro de mí gritaba que aceptara, que diera el salto, que abandonara este mundo monótono y limitado por algo... más.
Mis manos se movieron por sí solas, escribiendo una única palabra que sellaría mi destino.
_【Sí】_
La pantalla parpadeó de nuevo, y esta vez sentí un tirón en mi estómago, como si algo invisible me estuviera jalando hacia adelante, la luz de la pantalla se intensificó hasta el punto en que tuve que cerrar los ojos de nuevo
Sentí como si estuviera cayendo, aunque no podía decir si era una caída real o simplemente la sensación de dejar atrás todo lo que conocía
Cuando finalmente abrí los ojos, no estaba en mi habitación, el lugar que me rodeaba era vasto, iluminado por un cielo de un tono irreal, con colores que parecían cambiar constantemente, como una aurora boreal interminable
A mi alrededor, podía ver estructuras flotando en el aire, caminos que se curvaban en direcciones imposibles, y en la distancia, una torre que parecía rasgar el cielo mismo
Me levanté con cautela, mirando mis manos, mis pies, mi cuerpo, todo estaba ahí, pero al mismo tiempo, había algo diferente en la sensación de mi propia existencia, como si estuviera más... vivo
Cada latido de mi corazón resonaba en mis oídos, más fuerte, más claro
Entonces, una voz resonó en mi mente, profunda y autoritaria
【Bienvenido a Disboard, chico. Aquí, todo se decide por los juegos, no hay guerras, no hay conflictos armados, solo la pureza del desafío y la mente】
Sentí un escalofrío recorrer mi espalda, Disboard... nunca había oído hablar de ese nombre antes
Un mundo donde las reglas eran claras, donde el ingenio y la habilidad decidían todo
Pero había algo más, algo que aún no entendía
【Si deseas sobrevivir aquí, tendrás que jugar y ganar, chico, cada acción, cada decisión, será un juego ¿Estás listo para enfrentar el verdadero desafío?】
Miré hacia la torre en la distancia, una sonrisa se formó en mis labios
Había esperado algo así toda mi vida, una oportunidad para demostrar que no solo era el mejor, sino que estaba destinado a serlo
Apreté los puños, sintiendo la adrenalina correr por mis venas
-Jugaré- susurré, mi voz firme, cargada de una determinación que nunca antes había sentido-Y ganaré.... Siempre gano-
La aventura había comenzado...
La sensación de euforia al pronunciar esas palabras fue breve, pero intensa y la adrenalina que antes solo sentía durante una partida, ahora inundaba cada fibra de mi ser
La sonrisa en mi rostro era una mezcla de desafío y una especie de triunfo anticipado. Este era mi mundo ahora, un mundo donde cada acción sería una prueba, y yo estaba listo para aplastar a cualquier oponente que se cruzara en mi camino
Sin embargo, mi entusiasmo se vio interrumpido rápidamente cuando, de la nada, una figura apareció ante mí
Era un chico, o al menos eso parecía a simple vista
Tenía un aspecto infantil, con cabellos desordenados de color rubio y ojos de un púrpura profundo que irradiaban una luz extraña, vestía una camiseta holgada con un diseño de cuadros y pantalones cortos, su apariencia relajada contrastaba con la atmósfera tensa que me rodeaba
-¿Quién eres?- pregunté, mi voz aún cargada de la emoción que sentía
El chico sonrió, pero había algo en esa sonrisa que no me gustó. Era la sonrisa de alguien que sabía más de lo que mostraba, alguien que se divertía a costa de los demás
-Soy quien te trajo aquí- respondió, su voz tenía un tono despreocupado, como si lo que acabara de hacer no tuviera mayor importancia
Fruncí el ceño -Eso no responde mi pregunta- insistí, mi paciencia comenzaba a agotarse - Quiero saber tu nombre-
El chico se rió entre dientes, una risa suave pero que no podía evitar irritarme, se llevó las manos detrás de la cabeza, como si estuviera completamente a gusto con la situación
-Puedes llamarme Tet -dijo finalmente, y aunque lo dijo de manera casual, sentí que ese nombre tenía un peso especial en este mundo
-Tet...- repetí, tratando de procesar lo que acababa de escuchar -¿Tú me trajiste aquí?-
Tet asintió, aún sonriendo de manera desenfadada
-Te traje aquí porque dijiste que naciste en el mundo equivocado, ¿no? Así que pensé, ¿por qué no darle una oportunidad de demostrarlo?-
La ira comenzó a hervir en mi interior
¿Quién se creía este tipo para jugar con mi vida de esta manera? Mi mundo, por muy aburrido que pudiera haber sido, al menos era mío
-¿Crees que es divertido? -le espeté, mi voz empezando a subir de tono -¿Crees que puedes simplemente arrancar a alguien de su vida y tirarlo en un lugar como este, solo porque se te antoja?-
Tet no pareció inmutarse ante mi explosión, De hecho, su sonrisa se amplió un poco más.
-Bueno, parece que sí- respondió, encogiéndose de hombros -Pero, ¿no es emocionante? ¿No te sientes... más vivo que nunca?-
Ese comentario me detuvo
Tenía razón
Había algo en este lugar que hacía que cada latido de mi corazón resonara con una intensidad desconocida
-Ademas, tu vida ensero que era patetica, bueno jugando, pero, siempre solo- Tet se encogió de hombros otra vez -Que mejor que traerte aqui-
Mi rabia burbujeaba por esas palabras, ¿Mi vida patética? , pero me contuve
Tet tenía razón en un sentido... Ahora
Podía sentarme a maldecir mi destino, o podía aprovechar esta oportunidad y demostrar que era el mejor, incluso en un mundo que no entendía
-Voy a jugar- dije finalmente, con voz firme y Tet rió suavemente, una risa que parecía venir de un lugar de genuina diversión
-Eso es lo que quería escuchar- dijo -Bienvenido a Disboard, Katsuki, no me decepciones-
Y con esas palabras, Tet se desvaneció tan repentinamente como había aparecido, dejándome solo en ese extraño lugar
Al ver a mi alrededor todo parecía un desierto, el desierto que me rodeaba era vasto y aparentemente infinito, un mar de dunas doradas bajo un cielo que parecía pulsar con colores iridiscentes
El aire era caliente, seco, pero no sofocante; una sensación extrañamente neutral, como si este mundo no estuviera interesado en mi confort, sino en mi resistencia
Respiré hondo, dejando que el sabor arenoso del viento llenara mis pulmones
Mis pensamientos giraban en torno a lo que acababa de suceder
Tet, Disboard, un mundo donde todo se decidía por juegos
Mis palabras todavía resonaban en mi cabeza: >Voy a jugar<
Lo había dicho en un impulso, con la adrenalina de la situación, pero ahora, con el calor del desierto golpeándome, la realidad de lo que significaba comenzó a asentarse
-¿Dónde se supone que debo empezar? -murmuré, mirando alrededor en busca de alguna pista, algo que me indicara qué hacer a continuación
Justo cuando esa pregunta pasaba por mi mente, una voz femenina, suave y melodiosa, rompió el silencio
-Estás perdido, ¿verdad?-
Me giré bruscamente hacia el origen de la voz
Una chica estaba de pie en lo alto de una duna cercana, era una chica baja y esbelta con cabello morad, usaba un velo negro sobre su cabeza, y era muy plana, de hecho estaba pensando que se trataba mas de un chico muy lindo
-¿Quién eres tú? -pregunté, tratando de no dejarme intimidar por su presencia repentina
La chica descendió la duna con una gracia natural, como si el terreno traicionero no fuera más que una alfombra suave bajo sus pies, cuando llegó a mi lado, noté que era más baja que yo, pero había algo en su porte que la hacía parecer mucho más imponente
-Mi nombre es Chlammy Zell-dijo con una sonrisa tranquila, pero sus ojos tenían un brillo astuto -parece que necesitas un guía.-
-No necesito que nadie me guíe -respondí de inmediato, más por reflejo que por convicción, ademas, sentia que algo nos observaba pero no se sentia como algo hostil, si no como si se trataba de un espectador, Chlammy levanto un ceja
-Oh, claro que no. Después de todo, te las arreglaste para llegar aquí... completamente solo -replicó con un tono irónico
Fruncí el ceño, no me gustaba la forma en que subrayaba lo obvio, pero tenía razón
No tenía ni idea de dónde estaba ni cómo moverme en este mundo
Y si realmente todo aquí se decidía por juegos, necesitaría toda la ayuda posible para orientarme
-Está bien- dije finalmente, cediendo un poco -¿Qué sabes de este lugar?
Chlammy sonrió, complacida
-¿Acaso haz vivido toda la vida bajo tierra? Esto es Disboard es un mundo donde cada conflicto, cada disputa, se resuelve a través de los juegos, no hay violencia física, no hay guerras como en tu mundo, aquí, lo que realmente importa es la habilidad, la estrategia y la suerte.... Pero no te equivoques, no es un lugar fácil para los débiles de corazón, y todo se rige por los 10 compromisos-
¿10 Compromisos? Ese dios de pacotilla nunca me lo explico, ¿O si?
Mi mente estaba procesando todo a una velocidad vertiginosa
Disboard, un mundo gobernado por juegos, donde no existía la violencia directa, donde la estrategia, la habilidad y la suerte eran lo único que importaba
Podría parecer el paraíso de un gamer como yo, pero algo en las palabras de Chlammy me hacía sospechar que las cosas no serían tan simples
-Los Diez Compromisos -repitió ella, observando mi expresión de desconcierto -Son las reglas sagradas que rigen este mundo ¿De verdad no te lo han explicado tus padres o algo asi?-
Negué con la cabeza, cruzando los brazos mientras trataba de parecer más seguro de lo que realmente estaba, no estaba seguro de que tan buena idea sea decir que no soy de ese mundo, capaz llame de mas la atencion, asi que lo mejor sera fingir que soy de este mundo -Solo sali de casa, y lo ultimo que me dijeron fue que jugara.
Chlammy soltó un suspiro, con un toque de exasperación, pero detrás de su mirada astuta había algo de compasión
Tet, el dios que me había traído aquí, parecía estar más interesado en verme tropezar que en ofrecerme una ventaja justa
El maldito se lo estaba tomando como un juego personal, estoy seguro que ya lo habia visto antes
-Escucha -dijo ella, cruzando los brazos sobre su pecho casi inexistente mientras me miraba directamente -Los Diez Compromisos son lo que mantiene el orden en este mundo, no puedes simplemente ignorarlos, aquí, todos juegan bajo las mismas reglas, incluso los dioses, todo conflicto, desde los más pequeños hasta los más grandes, se resuelve a través de un juego, no hay excepciones-
Chlammy comenzó a recitar las reglas, como si estuviera leyendo de una lista mental bien memorizada:
1.-Todo tipo de homicidio, guerra y robo están prohibidos
2.-Cualquier conflicto se resolverá en base a juegos
3.-En los juegos deben hacerse apuestas, las cuales deberán ser aprobadas por ambas partes
4.-En cuanto a la tercera regla, el tipo de juego o las apuestas no están restringidas
5.-El grupo desafiado tiene el derecho de elegir el juego
6.-Toda apuesta, bajo Las Diez Reglas, debe cumplirse
7.-En conflictos grupales, deben declarar a alguien quien los represente
8.-Los participantes instantáneamente pierden el juego si se les sorprende haciendo trampa
9.-En el nombre de Dios, las reglas arriba señaladas serán permanentes
10.-Vamos a divertirnos jugando juntos
Cuando terminó, me quedé un momento en silencio, digiriendo la información
Las reglas sonaban simples, pero sabía que cualquier sistema podía ser explotado si uno era lo suficientemente inteligente
Las reglas de este mundo no estaban hechas para proteger a los débiles, sino para premiar a los más astutos
-Interesante- murmuré, más para mí mismo que para Chlammy -Así que todo se basa en los juegos, pero, ¿cómo sabes quién hace trampa si nadie puede interferir?-
Chlammy esbozó una sonrisa de medio lado, como si mi pregunta hubiera revelado más de lo que quería mostrar -Eso es algo que debes averiguar por ti mismo, chico, no todos aquí juegan de forma limpia, incluso si las reglas lo prohíben, solo importa que no te pillen-
Suspiré
Las reglas si eran sencillas de entender, mientras la segui hasta que llegamos a una especie de cantina
-Bueno, ya te ayude, a partir de aqui, ya es cosa tuya, vine a hacer algo... No me molestes-
Ella entro y yo vi en una mesa a una mujer en una mesa con unas cartas, supongo que ya es tiempo de comenzar
Me acerqué a la mesa con confianza, cada paso resonando en el suelo de la cantina vacía, la mujer que me esperaba al otro lado tenía un aire de misterio que me intrigaba, su rostro estaba parcialmente oculto tras un velo de encaje negro, pero podía ver sus ojos: brillaban como el oro líquido bajo la tenue luz
Sostenía una baraja de cartas en sus manos, moviéndolas con destreza, como si fueran una extensión natural de su cuerpo
-¿Quieres jugar?- dijo ella, su voz suave, pero afilada, como una daga envuelta en terciopelo
Asentí, deslizando una silla para sentarme frente a ella, me sentí seguro, listo para cualquier cosa que este mundo me lanzara, este era mi terreno; los juegos eran mi vida, y no importaba quién estuviera al otro lado de la mesa
-¿Cuál es el juego? -pregunté, cruzando los brazos, mi mirada fija en sus manos mientras barajaba las cartas
La mujer sonrió, era una sonrisa peligrosa, que no alcanzaba sus ojos
-Un simple juego de cartas- dijo, distribuyendo la baraja con elegancia sobre la mesa -Black Jack, pero las reglas aquí son un poco diferentes, se juega con una apuesta especial, si pierdes, pierdes algo de valor, algo que te pertenece, si ganas... bueno, el cielo es el límite-
No me intimidaba, mis habilidades estaban más que afinadas para este tipo de desafíos
-¿Y qué estamos apostando?- inquirí, dejando que un toque de arrogancia se filtrara en mi tono
Ella levantó una ceja, como si estuviera entretenida por mi confianza, lentamente, deslizó una ficha de oro sobre la mesa
Había una inscripción en ella, pero no me tomé el tiempo de leerla, sabía que en este mundo, todo tenía un valor diferente
-Tu libertad- respondió simplemente, y el aire pareció volverse más denso en ese momento y ella mostro una bolsa con monedas -A cambio de esto, ¿Que te parece?-
Me reí por dentro ¿Mi libertad? Como si eso pudiera estar en juego en un mundo así, esto era solo un nuevo desafío, y si algo había aprendido de mi vida anterior, era que siempre había una salida, una forma de ganar
-Acepto- dije, tomando la baraja y comenzando a repartir las cartas
El juego comenzó
Cada mano que jugábamos, el calor entre nosotros parecía intensificarse, como si una fuerza invisible alimentara la tensión
Ella jugaba con una calma helada, como si supiera algo que yo no
Pero yo no iba a dejarme intimidar por su actitud
Las cartas fluían en mis manos con la misma facilidad que siempre, y aunque sentía su mirada fija en mí, no flaqueé ni un momento
La primera mano de Black Jack se repartió con una precisión que reflejaba años de práctica
Las cartas se deslizaron por la mesa, revelando un 10 de tréboles y un 7 de corazones para mí, mientras que la mujer frente a mí mostraba un 9 de diamantes y un As de picas
El sudor bajaba por mi sien, pero no por el juego, sino por la intensidad de la situación
El aire estaba cargado de una tensión palpable, como si cada carta que se colocara en la mesa pudiera determinar no solo el resultado del juego, sino algo más profundo, algo esencial
Ella observó sus cartas con una serenidad que rozaba lo inquietante, y su mirada se encontró con la mía, desafiándome a seguir adelante
-Tu turno- dijo con una voz que era un susurro, pero que parecía llenar toda la sala
-Planto- respondí, seguro de que mi mano era suficiente para ganar esta ronda inicial
Ella sonrió, una sonrisa pequeña pero significativa, y entonces volteó sus cartas, el As contaba como 11, dándole un total de 20. Me había ganado por un punto, la primera mano era suya
-Parece que esta ronda es mía- comentó con una dulzura que me irritó
-El juego no ha terminado- respondí, más firme de lo que me sentía, no iba a dejar que una pérdida inicial me desanimara, me ajusté las gafas y me preparé para la siguiente mano
La segunda mano comenzó, y ahora sentía que el juego se había vuelto más personal
Las cartas parecían más pesadas al levantarlas, esta vez, recibí un 9 de espadas y un 5 de corazones, mientras que ella mostraba un 8 de tréboles y un 7 de diamantes
Tenía un total de 14, una mano peligrosa, pero había aprendido a arriesgar cuando era necesario
-Carta -dije con decisión
La carta que llegó fue un 6 de tréboles, elevando mi total a 20
Una buena mano, pero no perfecta, la mujer me observó con esos ojos dorados, buscando una señal de duda en mi rostro, pero no encontraría nada
-¿Plantas? -preguntó
-Sí -respondí
Ella tomó una carta más, un 5 de corazones, elevando su total a 20
Era un empate
Ambos miramos las cartas sobre la mesa, y luego nuestras miradas se cruzaron de nuevo
-Un empate- dijo y mi mano sintió un hormigueo -Parece que estamos bien emparejados-
-Eso parece- respondí con frialdad, ya que note como es que hizo trampa, pero queria vencerla en su juego
Las siguientes manos continuaron en un tenso intercambio
Ganaba una, ella ganaba otra, y la tensión solo aumentaba ya que queria ver que tan lejos podia llegar ella
Sentía que el juego se alargaba como una cuerda estirada hasta su límite, pero cada vez más tensa, a punto de romperse en cualquier momento
En una de las manos, recibí un par de Ases, lo que me daba la opción de dividir la mano
Decidí hacerlo, y las cartas adicionales me dieron un 10 y un 9, haciendo un total de 21 y 20 en cada mano
Era una jugada fuerte, pero ella no parecía afectada en lo más mínimo
Tomó su carta y reveló un Rey de corazones, dándole un total de 19
-Ganas esta vez -dijo, su voz neutral
Las cartas se deslizaron por la mesa, cada una encontrando su lugar, mi mano mostraba un 10 y un 7, mientras que la mujer tenía un 9 visible, con una carta oculta
Mi mente comenzó a calcular las probabilidades, estaba en 17, lo cual no era malo, pero también era arriesgado
A lo largo de los años, había aprendido que la paciencia y la lectura del oponente eran claves para ganar, y esta mujer no daba señales fáciles de leer
-¿Plantarte o pedir una carta?- preguntó la mujer, su tono impregnado de una ligera burla
Me tomé un segundo para evaluar, podría plantarme, pero ella ya me tenía en la mira, había algo en su postura, en la forma en que jugaba, que indicaba que no era una novata
No, había algo más
Un truco. Y si no actuaba pronto, podría quedar atrapado
-Una carta más- decidí
La mujer sonrió levemente mientras me pasaba la carta
Sentí la anticipación aumentar, como si estuviera a punto de descubrir su juego
Levanté la carta lentamente: un 4. Total: 21
Mi mirada se encontró con la suya, no me moví ni un milímetro
Quería ver cómo reaccionaba
-21- dije, sin poder contener una sonrisa
Ella no pareció inmutarse, pero noté una ligera rigidez en su expresión, reveló su carta oculta: un 6, lo que le daba un total de 15
Ahora ella estaba en una posición peligrosa, sabía que tenía que pedir otra carta, y eso la ponía en riesgo
Le lanzó una mirada rápida a la carta del mazo, como si dudara por primera vez
Con una sonrisa forzada, pidió la carta
Un 8
-Te pasaste- dije, mis palabras goteando con una mezcla de triunfo y desdén
La mujer dejó escapar un suspiro profundo, y su expresión cambió por primera vez desde que había comenzado el juego
Era una mezcla de frustración y algo más... reconocimiento, tal vez
-Parece que he perdido- dijo, empujando la bolsa de monedas hacia mí -Pero, ¿realmente crees que todo es tan simple?-
Estaba a punto de tomar la bolsa cuando noté algo raro, el brillo de las monedas dentro de la bolsa no era común, y mi instinto me dijo que revisara mejor
Tomé una de las monedas y la examiné más de cerca, en su superficie había grabados extraños símbolos que no reconocía
-¿Qué es esto?- pregunté, alzando la moneda
La mujer sonrió con suficiencia
-Te dije que perderías algo de valor. No te mencioné qué tipo de valor- dijo ella -Esas monedas... representan tiempo, tiempo de tu vida-
Sentí un escalofrío
El truco estaba en la apuesta misma
Cada vez que jugábamos, no solo jugábamos por mi libertad o riqueza; jugábamos por mi tiempo, mi esencia misma
Y ella había apostado su tiempo también
De repente, me di cuenta de lo que estaba en juego
No era una simple partida de cartas
La verdadera trampa no estaba en las cartas, sino en lo que estábamos apostando
Ella había jugado con una ventaja que yo no conocía desde el principio, sabiendo que, aunque perdiera, me llevaría algo mucho más importante
Pero ahí es donde cometió su error, ella había estado jugando bajo una suposición: que yo no sabría cómo leer el juego detrás del juego
-Así que apostamos tiempo- dije, tomando una ficha de la bolsa y sosteniéndola entre mis dedos -Eso cambia las cosas-
Su sonrisa desapareció por completo, sabía que algo había cambiado, sabía que había descubierto su truco
-Pero hay una cosa que no calculaste- añadí, inclinándome hacia adelante -Yo ya lo estaba averiguando-
Antes de que pudiera reaccionar, saqué una carta que había guardado bajo la manga
Era una broma literal, pero en este mundo donde los juegos lo eran todo, la carta que saqué no era una carta cualquiera, era una carta con propiedades magicas, un objeto mágico que permitía cambiar las reglas del juego una vez durante una partida
-Esta carta... cambia nuestra apuesta- le dije con frialdad -Ya no jugamos por tiempo
Jugamos por nuestras habilidades, quien pierda, perderá la capacidad de jugar nunca más
Sus ojos se agrandaron
No esperaba esto
Había confiado en su pequeña trampa, pensando que podría jugar conmigo
Pero ahora, estaba en una situación en la que ella misma había quedado atrapada
La mujer intentó protestar, pero las reglas del juego en Disboard eran absolutas
La carta que había jugado ahora regía la apuesta
Tomamos nuestras cartas nuevamente
Mis manos temblaban ligeramente, pero me concentré. Cada movimiento que hacía era calculado al extremo
Sentía su nerviosismo, su falta de certeza
Finalmente, la partida llegó a su fin. Yo gané. Y cuando las cartas se acomodaron, su rostro perdió toda arrogancia, se veía derrotada, pero más que nada... rota
-Ya no puedes jugar más- le dije suavemente, levantándome de la mesa -Eso es lo que sucede cuando tratas de jugar sucio conmigo-
La mujer asintió con la cabeza, levantándose en silencio
Me dejo todas sus pertenencias que parecían poseer valor, me pareció curioso... Creo que voy a seguir...
Tet... Un dios... ¿Que pasaría si lo derroto totalmente?
Podría convertirme... ¿En un Dios?
Me encanta el reto... Porque después de todo
Yo... Yo soy
El número 1
Me levanté de la mesa con una sonrisa que reflejaba más que la simple victoria sobre una oponente, sentía la energía del mundo a mi alrededor, el peso de las reglas y las apuestas que regían este extraño lugar
Me llevé las monedas a mi bolsillo, pero lo que realmente importaba no era el oro ni el tiempo ganado
Era la sensación de control, el poder que empezaba a comprender sobre los juegos y las trampas que regían Disboard
Mientras me alejaba de la cantina, no podía dejar de pensar en lo que había dicho sobre Tet, el Dios que controlaba este mundo
Él era el creador de las reglas, el amo del juego final, si todo en Disboard se regía por los juegos, entonces incluso él debería poder ser desafiado... y derrotado
Pero antes de pensar en un enfrentamiento con Tet, sabía que debía aprender más, este mundo estaba lleno de jugadores hábiles, cada uno buscando su propio objetivo, y no podía permitirme el lujo de subestimarlos
La ciudad estaba viva con el bullicio de gente, luces y sombras, pero a pesar de la actividad, había una sensación subyacente de calma... como si todos supieran que las reglas de Tet protegían el equilibrio
Pero, ¿Por cuánto tiempo? Después de todo, si yo podía aprender a manipular las reglas, otros también podrían hacerlo
Mi próxima parada sería buscar más conocimiento, aliados quizás, y entender cómo este mundo realmente funcionaba detrás de su fachada de juegos inocentes
La mujer del velo me había mostrado que el engaño podía ser una herramienta poderosa, pero solo si uno sabía cuándo usarla y, lo más importante, cuándo no
Aquí, el mayor poder residía no solo en la habilidad para ganar, sino en comprender las apuestas ocultas que otros no veían
Tet... ¿Qué clase de ser apostaba su divinidad a los juegos? Y más importante aún, ¿qué juego tendría que jugar para llegar hasta él?
Mientras me alejaba de la cantina, vi a Chlammy observándome desde la distancia
No podía leer su expresión del todo, pero algo en su postura me decía que ella sabía que el juego estaba lejos de haber terminado ¿Acaso ella también tenía sus propios planes?
Sonreí para mí mismo
Este mundo era una gigantesca partida, y yo estaba decidido a ser el último jugador en pie
De repente, el aire pareció cambiar a mi alrededor, y vi a una chica con cabello corto de color rojo-rosado y los ojos azules, y una figura curvilínea con grandes pechos, vi que ella estaba fruestrada, luego de haber perdido al parecer con Chlammy
La chica de cabello rojo-rosado me llamó la atención de inmediato, su frustración era palpable, casi tangible en el aire que la rodeaba
Parecía una jugadora, pero claramente acababa de sufrir una derrota importante
Me acerqué lentamente, sin prisa pero con curiosidad, no era común encontrar a alguien que mostrara tanta emoción después de un juego en este mundo, donde los rostros inmutables y las sonrisas calculadas eran la norma
-Vaya... alguien no está teniendo un buen día- Comenté, mi tono ligero pero lo suficientemente fuerte para llamar su atención
Ella giró sobre sus talones, su mirada encendida y los ojos azules destellando con una mezcla de sorpresa e irritación
Estaba claramente molesta, pero al verme, su expresión cambió ligeramente, evaluándome como si intentara descifrar si yo era una amenaza o una simple distracción
-¿Quién eres tú?- Preguntó con un tono cortante, como si no estuviera de humor para conversaciones casuales
-Solo alguien que quiere probar que puede hacer lo que quiere... y sobre todo interesado en los juegos- respondí con una sonrisa neutral -Y, al parecer, tú también lo estás-
Ella bufó, cruzando los brazos sobre su pecho en un gesto que no hacía más que resaltar su frustración
-¿Interesado en los juegos? Claro, claro... Todos aquí lo están, pero lo que acabo de perder no es un simple juego, perdí algo más importante- Dijo con amargura, sus ojos se clavaron en los míos -Y no puedo recuperarlo tan fácilmente-
Su reacción me intrigó, claramente, había algo detrás de esa derrota, algo que involucraba más que simples apuestas materiales
Me acerqué un poco más, inclinándome ligeramente hacia adelante como si compartiera un secreto
-¿Qué es lo que perdiste?- pregunté, sin rodeos
Por un momento, pareció dudar, como si estuviera considerando si confiar o no en un desconocido
Pero finalmente, la frustración superó su cautela
-Mi nombre es Stephanie Dola, y acabo de perder mi derecho al trono del reino de Elkia-
Mis cejas se arquearon en señal de sorpresa al escuchar sus palabras
"Perder el derecho al trono de un reino"
No me parece una apuesta común, ni siquiera en un mundo donde todo se decidía por juegos, ahora entendía por qué estaba tan molesta, Stephanie Dola, me dijo que es la nieta del último rey, el cual había apostado algo más que su orgullo
Había perdido el futuro de su nación
-Eso es... bastante serio- Comenté, dejando que mi tono reflejara algo de la gravedad de la situación -¿Y cómo fue que perdiste algo tan importante?-
Stephanie bufó, frustrada, mirando al suelo antes de responder
-Fue contra Chlammy...- Dijo, su voz llena de resentimiento -Un juego de ajedrez, pensé que podía ganarle, pero no me di cuenta de que estaba usando magia, no tenía oportunidad y ahora... Elkia está condenada, no queda nada para los Immanity-
La palabra "Immanity" me hizo recordar lo poco que sabía de este mundo, los humanos aquí no eran los seres poderosos e ingeniosos de mi mundo anterior; eran la raza más débil de todas
Sin magia, sin fuerza sobrenatural, solo con su ingenio para jugar y ahora, incluso eso parecía haberles fallado
-Así que Chlammy hizo trampa- Murmuré, más para mí mismo -No me sorprende, cuando la conocí, sabia mucho, no la culpo... las reglas no castigan el intentar hacer trampa, solo el ser atrapado-
Stephanie me miró, sus ojos brillando con una mezcla de esperanza y desconfianza
-¿Y qué harías tú al respecto?- Preguntó, como si no estuviera segura de si valía la pena seguir la conversación
Sonreí
Esta era una oportunidad interesante
-No soy alguien que pierda, especialmente en un juego- Le respondí con confianza -Y si Chlammy ha tomado algo que no es suyo, quizás sea hora de que alguien la derrote en su propio terreno-
Stephanie frunció el ceño, claramente intrigada pero también cautelosa
-¿Y qué te hace pensar que podrías ganarle? Ni siquiera conoces las reglas de este mundo tan bien como ella-
Me encogí de hombros
-Digamos que soy un rápido aprendiz, además, me gustan los desafíos y si hay algo que no soporto... Es no ser el mejor... Digamos que tenemos, intereses compartidos, y si Elkia es el último bastión de los Immanity, no dejaré que caiga sin un buen juego-
Stephanie pareció considerarlo por un momento, luego suspiró profundamente
-Es arriesgado... pero, sinceramente, no tengo mucho que perder ahora, si puedes hacer que Chlammy devuelva lo que ha robado, te estaré en deuda-
Extendí una mano hacia ella, sonriendo
-Entonces hagamos un trato, Stephanie Dola, jugaré para recuperar el reino, y a cambio, tú me ayudarás a entender este mundo... Porque si voy a desafiar a Chlammy y a cualquiera que se interponga en mi camino, necesitaré conocer todas las reglas, no solo las que están escritas, sino las que se juegan bajo la mesa-
Stephanie me miró por un largo momento antes de aceptar mi mano con una firmeza inesperada
-Trato hecho, pero te advierto, este mundo no es tan simple como parece-
-No me gustan las cosas simples- Respondí con una sonrisa astuta -¿Dónde estaría la diversión en eso?
Con nuestra alianza sellada, sentí que el próximo juego estaba a punto de comenzar y ahora, con un objetivo más claro en mente, me dirigía hacia la próxima etapa de este complicado tablero, Chlammy, Tet, los Imanity... no importaba cuán enredadas fueran las reglas o cuán sucio jugaran
Yo jugaría para ganar y si el premio final era desafiar a un dios, tanto mejor
Miré a Stephanie mientras nos alejábamos de la cantina
Tal vez, después de todo, no estaba solo en este juego y aunque ella parecía frágil y derrotada ahora, tal vez había más en Stephanie Dola de lo que aparentaba
Stephanie Dola parecía evaluarme por unos segundos más, como si intentara decidir si debía confiar en mí o no, sus ojos azules aún brillaban con una mezcla de frustración y una pequeña chispa de curiosidad
Finalmente, dejó escapar un suspiro, su tensión disminuyendo un poco mientras asentía
-Supongo que no tengo nada que perder mostrándote el castillo- Dijo, su tono aún algo cortante, pero menos hostil -Sígueme-
Me guió a través de las calles que llevaban al castillo de Elkia, era una estructura impresionante, aunque el peso del declive de la humanidad, o como la llamaban aquí, "Immanity", se hacía evidente en su deterioro
A medida que subíamos las escaleras y atravesábamos pasillos, Stephanie me lanzaba miradas furtivas, como si estuviera tratando de entender quién era yo y qué quería realmente
-Así que, ¿Katsuki, verdad?- Dijo finalmente, rompiendo el silencio mientras llegábamos a una gran sala con ventanales altos que dejaban pasar la luz del atardecer -No pareces de aquí-
-Es un mundo muy... particular- Respondí con una media sonrisa -Todo se decide por juegos, ¿no es así? Un lugar donde incluso la realeza puede perder su trono en una partida-
Stephanie apretó los labios ante mi comentario, claramente tocando un nervio sensible
-Sí, y eso es precisamente lo que pasó, no subestimes los juegos aquí, Katsuki, la gente no juega por diversión, juegan por todo-
Me detuve frente a una ventana que ofrecía una vista panorámica del reino Elkia estaba en declive, lo podía ver desde aquí
-Entonces yo llevare tu carga-
Un reino que, alguna vez, debía haber sido majestuoso, pero que ahora apenas mantenía su poder frente a las otras razas más fuertes y astutas
-Y eso me lleva a lo que quiero proponerte- dije, girándome hacia ella -Antes de ser tu compañero, quiero hacer un pequeño juego contigo, quiero medir tu nivel, ver de qué eres capaz ¿Qué me dices?-
Stephanie parpadeó, sorprendida por mi propuesta, durante unos segundos, pareció dudar, pero luego su determinación volvió a brillar en sus ojos
-¿Un juego conmigo?- Preguntó con una mezcla de desconfianza e interés -¿Qué clase de juego tienes en mente?-
Sonreí y saqué una baraja de cartas del bolsillo interior de mi chaqueta, dejándola entre mis dedos mientras las movía con soltura
-Algo simple, un juego de cartas, podría ser "Memoria" o algo similar, nada complicado, solo quiero conocer tus habilidades, tus reflejos... y, claro, conversar un poco mientras jugamos-
Stephanie me miró fijamente antes de asentir
-Está bien, acepto, pero no subestimes a una Dola, Katsuki, no tengo intención de perder-
Nos sentamos en una mesa cercana, y mientras barajaba las cartas, comenzamos a charlar
-Dime, Stephanie, ¿Qué sabes realmente de Immanity?- Pregunté mientras distribuía las cartas
Stephanie parecía un poco sorprendida por la pregunta, pero luego suspiró y empezó a hablar
-Immanity... Es el nombre de nuestra raza aquí en Disboard, somos la décima de las 16 razas que habitan este mundo, las más débiles, no podemos usar magia como las otras razas, y no tenemos habilidades especiales, nuestra única ventaja, si es que se puede llamar así, es nuestra inteligencia, nos apoyamos en los juegos y la astucia para sobrevivir... o al menos eso es lo que intentamos-
Hice una pausa en la baraja y la miré con interés
-Entonces, en un mundo lleno de seres con poderes y habilidades sobrenaturales, los humanos solo pueden confiar en su ingenio para ganar, ¿Es eso?-
-Exactamente- Respondió, sacando su primera carta -Aunque eso no ha sido suficiente últimamente, el reino de Elkia ha estado perdiendo territorio durante generaciones, y ahora yo... bueno, perdí el trono, no soy buena en los juegos como lo era mi abuelo-
Tomé una carta y asentí lentamente
-El ingenio es una gran ventaja, Stephanie, subestimar la capacidad de la mente humana en un mundo donde todos dependen de trucos y magia es un error, tal vez la verdadera fuerza de los Immanity es que son los únicos que no tienen poderes para apoyarse, eso los hace más creativos, más impredecibles-
Ella me miró mientras pensaba en lo que dije, había algo en su mirada, una mezcla de reflexión y duda
-Eso suena bonito, pero ¿Cómo se supone que sobrevivimos así?- Dijo ella, sacando otra carta, frustrada -No somos como las otras razas, no podemos simplemente esperar que el ingenio nos salve siempre-
-El ingenio, combinado con estrategia, puede ser la mayor de las armas- Respondí mientras sacaba mi carta -Mira este juego que estamos jugando, parece simple, pero detrás de cada carta que levantas, hay decisiones, cálculos... pequeños detalles que pueden hacer la diferencia entre ganar y perder, en un mundo donde todos confían en sus poderes, la astucia puede ser la clave para sorprenderlos-
Stephanie parecía estar empezando a considerar mis palabras mientras jugábamos, a medida que la partida avanzaba, noté que tenía un buen instinto para los juegos, pero sus movimientos eran algo impulsivos
No tomaba el tiempo suficiente para analizar a su oponente ni para anticipar las próximas jugadas
-Creo que entiendo lo que quieres decir- Dijo finalmente, levantando la mirada de las cartas -Pero no es fácil, he fallado antes, y si lo hago otra vez...-
-Es un juego, Stephanie- La interrumpí con una sonrisa -Ganar y perder son solo partes del proceso, lo importante es aprender de cada partida, cada error que cometas es una oportunidad para mejorar y aquí, en Disboard, los juegos son lo único que realmente importa-
Stephanie guardó silencio por un momento, luego sonrió débilmente
-Tienes razón, tal vez haya una oportunidad para mí después de todo, pero dime, Katsuki, ¿Por qué estás tan interesado en los juegos y en ayudarme? ¿Qué ganas tú con esto?-
Dejé las cartas sobre la mesa y la miré directamente a los ojos
-Es simple, para probar que puedo hacerlo, y ser el número 1 en todo, y en este mundo, si los juegos son la clave para todo, entonces quiero ser el mejor jugador, pero para eso, necesito aliados, personas con potencial y creo que tú lo tienes, Stephanie-
Ella me observó detenidamente, evaluando si mis palabras eran sinceras
Finalmente, dejó escapar una pequeña risa
-Tienes una manera de hablar que casi suena convincente, Katsuki- dijo -Pero si realmente crees en eso, te tomaré la palabra, aunque primero, tendrás que ganarme en este juego-
Ambos nos concentramos en la partida final de cartas, las apuestas eran bajas, pero en ese momento, más que un simple juego, era un paso hacia la comprensión mutua
Al final, gané, aunque por un margen estrecho. Stephanie me miró, derrotada pero no desanimada
-Bueno, parece que tienes algo de habilidad- Admitió, aunque con una sonrisa desafiante -Pero no creas que siempre será así-
Me levanté de la mesa y extendí una mano
-Entonces, ¿aliados?-
Ella vaciló solo un momento antes de tomar mi mano
-Aliados- Respondió, y su mirada reflejaba una determinación renovada
Mientras salíamos de la sala, no pude evitar pensar en los desafíos que nos esperaban
Había algo en Stephanie que me decía que, aunque ahora era una jugadora débil, tenía el potencial para convertirse en alguien formidable
Tet... aún estaba lejos, pero cada paso que dábamos nos acercaba a la verdadera partida
Mientras caminábamos por los pasillos del castillo, después de haber establecido nuestra alianza, algo más inmediato reclamó mi atención
El sonido inconfundible de mi estómago gruñendo resonó en el aire, Stephanie, que caminaba a mi lado, no pudo evitar reírse suavemente, cubriéndose la boca con una mano
-Parece que alguien necesita comer- Dijo, todavía con una sonrisa divertida -Puedo llevarte al comedor del castillo, la cocina del palacio puede preparar algo rápidamente-
-Sí, creo que será mejor almorzar algo antes de seguir adelante- Admití con una sonrisa incómoda, rascándome la nuca -No puedo pensar bien con el estómago vacío-
Mientras caminábamos hacia el comedor, mi mente seguía girando en torno a mi próximo movimiento, quería enfrentarme a Chlammy, la chica que había jugado un papel crucial en los eventos recientes y que había derrotado a Stephanie para arrebatarle el trono
Pero sabía que para desafiarla, necesitaría algo de igual o mayor valor que cualquier cosa que ella pudiera ofrecer, aquí en Disboard, donde todo se decidía mediante juegos y apuestas, las reglas eran claras
No podías desafiar a alguien si no tenías algo valioso que arriesgar
-Necesito algo... algo grande- Murmuré en voz baja, más para mí mismo que para Stephanie
Ella me miró de reojo, levantando una ceja
-¿Estás pensando en desafiar a Chlammy?- preguntó, claramente interesada -¿Y qué planeas apostar?-
-Exacto, ese es el problema- Respondí mientras abría la puerta del comedor y me dejaba caer en una silla -No puedo ir a un duelo con las manos vacías, necesito algo de valor, algo que sea igual o mayor que lo que Chlammy pueda ofrecer-
Stephanie se quedó pensativa por un momento, antes de llamar a un sirviente y pedir algo de comer para los dos
Mientras esperaba, continué reflexionando en silencio
En Disboard, las apuestas no solo se limitaban a cosas físicas o territorios, podías apostar tu memoria, tu libertad, tu vida entera si querías
Pero, para ganar contra alguien tan calculador como Chlammy, necesitaba una ventaja estratégica, algo que pudiera asegurar mi victoria incluso antes de que empezara el juego
-Katsuki, si quieres desafiar a Chlammy, no solo es cuestión de lo que apuestes- Dijo Stephanie, interrumpiendo mis pensamientos -Ella es muy astuta y no juega para perder, tendrás que ser más que inteligente para vencerla-
-Lo sé- asentí -Pero antes de llegar a eso, necesito entender más sobre las otras razas ¿Cómo funcionan? ¿Qué habilidades tienen? Si Chlammy está aliada con los Elfos, por ejemplo, debo conocer bien sus puntos fuertes y débiles, quiero saber cómo juegan todas las razas en este mundo-
Stephanie me miró mientras el sirviente nos servía un plato de comida
Tomé un bocado y, mientras masticaba, Stephanie comenzó a explicarme en detalle
-Disboard está formado por 16 razas diferentes, llamadas "Ixseeds", nosotros, los humanos, o como se nos llama aquí, "Immanity", estamos en el décimo puesto, somos los únicos sin habilidades mágicas ni poderes especiales, y por eso estamos en desventaja en casi todos los juegos-
-Pero, ¿qué pasa con las otras razas?- pregunté, tomando otro bocado -Sé que los Elfos, como los aliados de Chlammy, son poderosos en magia, pero ¿quién más está ahí fuera?-
-Bueno- Dijo Stephanie, acomodándose en su silla -Hay muchas razas, pero las más notables que debes conocer son las que están por encima de nosotros en la clasificación, los Elfos son la sexta raza más poderosa, especialistas en magia arcana, pueden usar encantamientos sin necesidad de hacer pactos ni preparaciones complicadas, en términos de poder mágico, son de los más formidables-
Tomé nota mental de eso, enfrentarse a un Elfo en un juego que involucrara magia directa sería casi un suicidio
Tendría que ser algo en lo que la magia no les diera una ventaja inmediata
-Luego están los Flügel- Continuó Stephanie -Ellos ocupan el sexto lugar, son seres alados que fueron creados como armas vivientes, su conocimiento es vasto y su poder abrumador, afortunadamente, no suelen jugar a menudo, porque prefieren estudiar y recopilar conocimiento-
-Entonces son más bien eruditos, pero con un poder devastador- comenté -Interesante ¿Y qué hay de los Dhampir y Sirenas?-
Stephanie asintió con la cabeza
-Los Dhampir son una raza de vampiros que ocupan el puesto doce, justo por debajo de los Immanity, tienen la capacidad de absorber energía vital, pero su debilidad es que dependen de la energía de otros para sobrevivir, hace poco hicieron una alianza con las Sirenas, una raza que habita en el mar y que tiene el poder de controlar a los demás mediante sus canciones, las Sirenas ocupan el lugar 14, pero esa alianza les da un peligroso equilibrio-
Mientras escuchaba, cada pieza de información iba encajando en mi mente, sabía que para ganar en este mundo, no solo necesitaba habilidad en los juegos, sino también conocer las fortalezas y debilidades de los demás
Si me enfrentaba a Chlammy y sus aliados élficos, tenía que tener en cuenta su uso de magia
Pero si podía encontrar la manera de neutralizar esa ventaja, podría tener una oportunidad
-¿Y qué hay de los Warbeasts?- Pregunté -He escuchado que son bastante formidables-
Stephanie frunció el ceño ligeramente, como si el recuerdo de ellos le molestara
-Los Warbeasts ocupan el puesto séptimo, son increíblemente misteriosos, porque por lo visto quienes juegan con ellos pierden la memoria-
Asentí mientras terminaba mi comida, mi mente ya estaba corriendo con estrategias, posibles apuestas y enfoques para futuros juegos
Intuía que Chlammy tenia una alianza
La pregunte era... con quien?
Mediante descarte, llegue a una respuesta...
-Gracias, Stephanie- Dije finalmente, levantándome de la mesa -Esto me ha ayudado a aclarar mis pensamientos-
Ella me miró con una mezcla de curiosidad y algo de preocupación
-¿Y qué piensas hacer ahora?-
Sonreí de lado
-Voy a prepararme para desafiar a Chlammy, pero primero, necesito encontrar algo de valor para apostar, algo que le haga imposible rechazar el juego-
Stephanie me observó mientras me dirigía hacia la puerta, sin duda preguntándose cuál sería mi próximo movimiento
Pero eso era algo que ni siquiera yo tenía claro en ese momento, lo único seguro era que el juego en Disboard nunca se detenía, y para sobrevivir, siempre había que estar un paso adelante
Después de terminar el almuerzo, el ambiente en el comedor quedó más tranquilo, el bullicio de la cocina apenas se escuchaba en la distancia
Mi mente seguía enfocada en lo que vendría después, pero había algo más que me inquietaba
Un nombre, una historia que escuché mencionada varias veces desde que llegué aquí
El "rey tonto"
Si quería entender realmente cómo jugar este juego, necesitaba conocer el trasfondo completo, y esa figura parecía ser clave
Me giré hacia Stephanie, quien seguía en la mesa, mirando por la ventana con un aire pensativo
-Stephanie- Comencé, llamando su atención -Hay algo más que necesito saber, algo que he escuchado mencionar varias veces pero que no entiendo del todo, la gente llama al antiguo rey de Elkia el "rey tonto", ese título parece tener mucho peso, y no puedo ignorar que tiene que ver contigo y con la situación actual ¿Qué pasó realmente con él?-
Su expresión cambió de inmediato
Pude ver una mezcla de tristeza y frustración en su rostro, como si el tema fuera una herida aún abierta
Pero al mismo tiempo, había una especie de resolución en su mirada, como si supiera que eventualmente tendría que enfrentarse a la verdad de esa historia
-El "rey tonto"- Repitió ella suavemente, como probando las palabras antes de hablar -Ese era... mi abuelo-
Sentí un pequeño nudo en el estómago, había oído rumores de que Stephanie estaba relacionada con el antiguo rey, pero no sabía que el vínculo era tan cercano
-¿Tu abuelo?- Pregunté, inclinándome hacia adelante -Entonces, él fue el que perdió tanto territorio de Immanity, ¿verdad?-
Stephanie asintió lentamente, sus ojos fijos en algún punto lejano, tomó un respiro profundo antes de continuar
-Sí, la gente lo culpa por todas las pérdidas de nuestro reino, durante su reinado, Immanity cayó aún más bajo en la escala de poder, perdimos tierras, recursos, aliados... Todo lo que él apostó en juegos, lo perdió, es por eso que lo llaman el "rey tonto", muchos creen que sus decisiones nos llevaron al borde de la extinción-
Hizo una pausa, sus manos se apretaron sobre su falda, como si estuviera tratando de contener una oleada de emociones
Pude ver que no era fácil para ella hablar de esto, pero continuó, como si necesitara sacarlo de su pecho
-Pero hay algo que pocos saben, mi abuelo no era tan tonto como la gente cree o al menos, no de la forma en que lo pintan, cada juego que jugó, cada territorio que perdió... lo hizo con un propósito, su meta era encontrar una manera de unir a Immanity, creía que si entendíamos nuestras debilidades y aprendíamos de nuestras derrotas, podríamos renacer más fuertes, incluso dejó atrás un testamento, una serie de notas que explicaban su visión, pero nadie le prestó atención-
Su voz se quebró un poco en esa última frase, y noté que sus ojos estaban llenos de una tristeza profunda
-¿Entonces todo fue parte de su plan?- Pregunté, intrigado -¿Perder a propósito?-
Stephanie asintió, aunque con una expresión amarga
-Eso es lo que creo-
-Interesante- dije mientras cruzaba los brazos, asimilando la información, el rey, aunque apodado "tonto", parecía haber jugado un juego mucho más profundo del que los demás le daban crédito, aunque sea difícil de ver-Entonces, su legado no es simplemente el de un perdedor, supongo que habra que encontrar lo que queria esconder-
-Exactamente- Respondió Stephanie, su voz más firme ahora -Pero cuando murió, todo lo que nos queda son sus errores, sus apuestas fallidas y un reino roto...-
Me quedé en silencio por un momento, procesando sus palabras
Esto añadía una nueva capa al enigma de Elkia y los Immanity, para cualquiera, solo seria un tarado, pero para mi, que siempre busco todas las perspectivas
Me parece que es imposible ser tan estúpido, amenos que sea apropósito
El "rey tonto" no había sido simplemente un inepto, sino un visionario incomprendido que había intentado jugar el juego de Disboard de una manera completamente diferente
Pero su estrategia fallida había dejado un reino fracturado, y ahora me encontraba en medio de ese caos, tratando de descubrir cómo usar esa información a mi favor
-Y tú, ¿qué piensas hacer con ese legado?- Pregunté finalmente, mirándola a los ojos
Stephanie se quedó pensativa, como si la pregunta también la hubiera tomado por sorpresa
-Quiero... quiero demostrar que mi abuelo no estaba equivocado, quiero reconstruir Elkia, recuperar el orgullo de los Immanity y demostrar que, aunque no tenemos magia ni fuerza, podemos sobrevivir en este mundo a nuestra manera, si puedo hacer eso, entonces tal vez la gente deje de llamar a mi abuelo un tonto-
Había una determinación en su voz que no había notado antes, aunque Stephanie a menudo parecía insegura y emocional, en ese momento podía ver la fuerza que había debajo de todo eso
Quería honrar a su abuelo y salvar a su pueblo, pero sabía que no podía hacerlo sola, su alianza conmigo y la confianza que estaba depositando en mis habilidades era una parte clave de su plan
-Entiendo- Dije, asintiendo -En ese caso, me aseguraré de que lo logremos, usaremos su visión y llevaremos a Immanity a un nivel que nadie espera, después de todo, la gente subestima a los débiles, y eso puede ser nuestra mayor ventaja-
Stephanie me miró, sorprendida por mi respuesta, pero luego sonrió, aunque de manera triste
-Gracias, Katsuki, sé que este no es tu mundo, pero significa mucho que quieras ayudarme a cumplir ese sueño-
-No tienes que agradecerme todavía- dije, levantándome de la mesa -Primero, tenemos que ganar unos cuantos juegos y para hacer eso, necesito encontrar algo que iguale o supere el valor de lo que Chlammy pueda ofrecer-
Stephanie asintió, aunque su preocupación volvió a aparecer
-Sí, eso es cierto, pero no va a ser fácil, Chlammy tiene la ventaja de la magia, pero no sabes de quien o que, y si pierdes, las consecuencias podrían ser devastadoras-
-Lo sé- Respondí con una sonrisa confiada, ya que luego de descartar razas, solo podía ser una -Pero en el juego, no siempre gana el más fuerte, solo el que tiene la mejor estrategia-
Salí del comedor, sintiendo el peso de la responsabilidad sobre mis hombros, con la historia del "rey tonto" en mente, sabía que debía jugar este juego con cuidado
Cada paso, cada apuesta, debía ser calculada. No solo para vencer a Chlammy, sino para asegurar que Immanity tuviera un futuro y en ese futuro, el nombre del "rey tonto" sería recordado de una manera muy diferente
Después de salir del comedor, mi mente estaba enfocada en lo que vendría a continuación, necesitaba encontrar a Chlammy y hacerle una oferta que no pudiera rechazar, el juego que se avecinaba sería crucial, pero sabía que no podía acercarme a ella sin un plan que la desarmara por completo
Tenía que ser algo más grande, algo que la forzara a reconsiderar todas sus estrategias
No tuve que buscar mucho, Chlammy estaba en los jardines exteriores del castillo, acompañada, como de costumbre, y sentia sobre mi una mirada fria, lo cual solo confirmaba una teoria que tenia en mi cabeza
-Chlammy- dije, haciendo una leve inclinación de cabeza -Me alegra encontrarte, quería agradecerte por haberme ayudado en el desierto, sin ti, dudo que hubiera llegado hasta aquí-
Ella me observó con cautela, su expresión imperturbable, era evidente que no confiaba en mí, y probablemente se estaba preguntando cuál era mi verdadero propósito al dirigirme a ella de manera tan cordial
-No me malinterpretes- Continué, sonriendo ligeramente -Lo que hiciste no fue desinteresado, lo sé, pero aun así, lo aprecio-
Chlammy entrecerró los ojos, cruzando los brazos
-No necesitas agradecerme, lo que hice fue por mi propio interés, no por ti y si estás aquí solo para hablar trivialidades, me temo que estás perdiendo el tiempo-
Sonreí ante su respuesta fría, era justo lo que esperaba
-No estoy aquí solo para hablar trivialidades, de hecho, tengo algo que ofrecerte, una oportunidad única-
Al escuchar esto, Chlammy pareció interesarse, aunque mantenía su actitud defensiva
-¿Y qué crees que podrías ofrecerme tú, un recién llegado, que sea de valor?- Respondió Chlammy, con una sonrisa burlona -Después de todo, yo ya tengo una ventaja clara en el próximo juego. No necesito nada de ti-
Sabía que ese sería su enfoque, pero había venido preparado, me acerqué un poco más, bajando ligeramente la voz para que solo Chlammy y su aliada pudieran oír
-¿Qué tal si te ofrezco no solo el reino de Immanity, sino también el de las bestias?-
Su expresión se congeló por un instante, pude ver cómo su mente empezaba a procesar lo que acababa de decir, aunque trató de disimularlo, la duda y la sorpresa la asaltaron
-¿El reino de las bestias?- Chlammy soltó una risa sarcástica, aunque su tono delataba su desconcierto -Eso es ridículo, no hay forma de que puedas hacer algo así, ni siquiera puedes asegurar Immanity, mucho menos una raza tan poderosa como las bestias-
-Dame tres meses- Dije, con total seriedad -En tres meses, te entregaré ambos reinos Immanity y el reino de las bestias, sera tuyo si en una apuesta me ganas, todo estará bajo tu control y si fallo, te prometo mi lealtad absoluta, seré tu sirviente, tu peón, sin reservas-
Chlammy me observó fijamente, tratando de encontrar alguna señal de debilidad o mentira en mi expresión, pero yo me mantuve firme, dejando que mis palabras calaran en su mente
Ella quería poder, eso era obvio y lo que le estaba ofreciendo era algo que jamás habría imaginado posible
-No me hagas reír- Respondió después de un momento -No eres más que un jugador más en este tablero ¿Qué te hace pensar que podrías lograr algo así? Y más importante, ¿por qué debería confiar en ti?-
-No tienes que confiar en mí ahora- Le dije, inclinándome un poco hacia ella -Solo déjame demostrarte de lo que soy capaz, pero hay algo más que necesitas saber, tu ventaja actual en el próximo juego no es tan grande como piensas-
Chlammy frunció el ceño, claramente molesta por mi insinuación
-¿Qué estás insinuando?-
Me acerqué aún más, reduciendo mi voz a un susurro, asegurándome de que solo ella pudiera escuchar lo que estaba a punto de decir
-Tu amiga... Se que te esta ayudando a hacer trampa, no soy ciego ni tonto, lo he notado desde el principio, y tambien se que es una elfa, por que descartando a las otras razas, la elfa es la mas probable, no puede ser fantasma, no puede ser un elemental, ni gigante, ni enano, investigando, solo el elfo cumpliría con la magia que usas para intervenir en tus juegos, lo que te da una ventaja que, si se expone, destruiría cualquier oportunidad que tengas-
Chlammy se tensó, y vi como mi entorno pareció brevemente distorsionarse un poco
-Puedes decirle que se haga presente por favor... Me gustaría subir un poco mi ego ahora mismo si no te molesta- Cuando dije eso vi como una mujer joven con cabello largo con dos trenzas de color crema, con un adorno color café con cuatro plumas una de color azul y 3 verdes y un moño de color rosa sujetado a una de sus trenzas, sus ojos son de color azul con una pupila en forma de una estrella de 4 puntas de color magenta con orejas largas y puntiagudas -Un gusto madam... Soy Katsuki-
La expresion de la mujer elfo, era una seria mientras me fulminaba con la mirada
-Soy Feel Nilvalen... Y no sabes de lo que estás hablando- Dijo Feel en un tono frío, dando un paso hacia adelante
Yo sonreía mas calmada al saber que tenia razón
-No estoy aquí para discutir detalles técnicos de tu magia, Feel, estoy aquí porque, honestamente, creo que puedo ser más útil para Chlammy que tú, con mi ayuda, no necesitarás hacer trampa, podemos ganar juntos y de una manera mucho más gloriosa-
Feel se quedó mirándome con los ojos entrecerrados, claramente furiosa por mi insinuación. Chlammy, por su parte, parecía estar debatiéndose entre la incredulidad y la curiosidad
Creo que ella no pensaba que lo descubriría, y la verdad, no hubiera podido de no ser porque tengo cierta capacidad para percibir las cosas, una capacidad que mi cerebro desarrollo al estar constantemente activo frente a las pantallas
... Aunque también me desgracia con algunos problemas de visión, pero me queda mejor la mirada entre cerrada, creo que impone mas
-No estoy interesado en destruir tu alianza, Chlammy- Continué -Pero si continuas dependiendo de la magia de Feel, tu victoria nunca será verdaderamente tuya, siempre será de ella ¿No preferirías ganar con tu propio ingenio, con una estrategia que tú misma has creado?-
Chlammy parecía a punto de replicar, pero mis palabras la hicieron detenerse, sabía que había dado en el blanco, para alguien como ella, el orgullo era un arma de doble filo y aunque dependía de la magia de Feel, también sabía que una victoria manchada no era lo que realmente deseaba
Fiel, por otro lado, no se quedó en silencio
-Estás jugando con fuego, niño- Susurró Feel, claramente molesta -Subestimar el poder de los elfos no es algo que te recomendaría hacer-
-Creo que son ustedes quienes me subestiman ami- Respondí tranquilamente pero note que solo las estaba provocando en una mala dirección -Solo estoy diciendo que, si Chlammy está realmente buscando el poder, no lo encontrará a través de ti, yo puedo darle más de lo que tú jamás podrías ofrecer-
Feel apretó los dientes, pero Chlammy levantó una mano para detenerla, había un destello de cálculo en los ojos de Chlammy que me indicó que estaba considerando seriamente mi propuesta
-Tres meses, dices...- Murmuró Chlammy, todavía algo escéptica pero interesada -¿Y si fallas?-
-Entonces mi lealtad es toda tuya- respondí sin vacilar -Seré tuyo, sin reservas-
Chlammy me observó en silencio, todavía procesando todo lo que había escuchado, Feel, aunque claramente molesta, no dijo nada más, finalmente, después de lo que pareció una eternidad, Chlammy asintió lentamente
-Bien, te daré esos tres meses, Katsuki, pero si fallas, no dudaré en aplastarte-
Sonreí ante su respuesta, había logrado lo que quería
Después de ese encuentro, me fui a buscar a Stephanie, para decirle lo que habia hecho
La encontre en una habitación del castillo, se veia algo distraida viendo una llave, pero no le di importancia
-Stephanie, hay algo que debo contarte- Dije mientras me le acercaba
-¿Qué es?- Preguntó ella, levantando la vista, notando el tono de mi voz
-Hablé con Chlammy, le ofrecí algo... arriesgado-
Stephanie arqueó una ceja, con una mezcla de preocupación y curiosidad en su expresión
-¿Arriesgado? ¿Qué hiciste esta vez?- preguntó, ya anticipando algo imprudente
Me cruce de brazos mientras le sonreía levemente
-Le prometí que en tres meses le daría no solo el reino de Immanity, sino también el reino de las bestias-
Por un instante, Stephanie se quedó completamente en silencio, procesando lo que acababa de escuchar
Su rostro pasó por una rápida sucesión de emociones
Primero la sorpresa, luego la incredulidad, y finalmente, la frustración
-¡¿QUÉ HICISTE?!- Exclamó, poniéndose de pie de inmediato -¡Eso es una locura, Katsuki! ¿Prometiste entregarle el reino de las bestias y también el de Immanity? ¿Tienes idea de lo que estás diciendo?-
Me mantuve tranquilo esperando esa reacción, ya que era algo difícil de explicar
-Sé que suena descabellado, pero créeme, lo pensé bien- Dije con seguridad
-¡Eso no tiene sentido!- Replicó Stephanie, comenzando a caminar de un lado a otro, agitando las manos en exasperación -¡No tenemos ni una fracción del poder que necesitaríamos para lograr algo así! ¿Cómo esperas derrotar a las bestias, una de las razas más poderosas, que ni siquiera podemos comprender completamente? ¡Es imposible!-
Suspire y la mire directamente a los ojos
-¿Y qué si no lo es?- Respondí con calma -Lo que hice fue parte de un plan mayor, Stephanie, Chlammy es un obstáculo que tenemos que superar, y para hacerlo, necesitamos algo que la saque de su zona de confort, algo que no pueda ignorar, le ofrecí eso para que baje la guardia, pero mientras tanto, yo la desafiaré... y cuando gane, recuperaré el reino de Immanity para la mejor opción- La mire a ella cuando dije eso ultimo
-¡No puedes simplemente prometerle el mundo a alguien como Chlammy! ¡Es una jugadora peligrosa!- Stephanie me miraba con los ojos entrecerrados, su frustracion era palpable -Y ni siquiera tienes idea de cómo vamos a lograrlo. ¿Cómo esperas que...?-
Katsuki la interrumpió, levantando una mano
-Primero, tenemos que conocer mejor a nuestros enemigos y para eso, necesito que me cuentes sobre la raza de las bestias híbridas, sé que su rey se llama Ino Hatsuse, pero quiero detalles-
Stephanie se detuvo en su perorata, sorprendiéndose por el giro de la conversación, respiró hondo, aún molesta, pero aceptó que al menos debía responder
-Ino Hatsuse es el actual líder de la raza de las bestias- empece a explicar, cruzándome de brazos, son extremadamente poderosos, tanto física como mentalmente, lo más aterrador de ellos es que tienen la habilidad de leer la mente de sus oponentes, lo que les permite adelantarse a sus movimientos y estrategias, por eso, nadie ha podido derrotarlos en siglos, siempre están un paso por delante
Asentí intrigado por la información
-¿Leer la mente? Interesante, aunque eso también significa que confían demasiado en esa habilidad, si podemos encontrar una manera de bloquearla o confundirla, podríamos tener una oportunidad- comentó, más para mi mismo que para ella
-Eso suena mucho más fácil de lo que realmente es- Dijo Stephanie, aunque su tono ya no era tan agitado -Pero también hay otro problema, no tenemos acceso a la información necesaria para planear una estrategia sólida contra ellos-
Arque una ceja
-¿Cómo que no? ¿Acaso no tienen una biblioteca aquí?-
Stephanie suspiró, mirando al suelo con algo de vergüenza
-Sí, teníamos una biblioteca... pero la perdimos en una apuesta, mi abuelo, el anterior rey, apostó la biblioteca en uno de sus intentos de recuperar algo de poder para Immanity. Y, bueno, perdió-
Me quede en silencio unos segundos procesando la información que acabo de recibir, y deje escapar una risa seca, casi incrédula
-Así que realmente era un tonto, tu abuelo- Murmure, sacudiendo la cabeza -¿Cómo pudo haber apostado la biblioteca? Es la fuente de conocimiento más valiosa que un reino podría tener-
Note como Stephanie apretó los puños, molesta ante la crítica a su abuelo, aunque sabía que tenía razón
-Él hizo lo que creyó que era mejor en ese momento... pero sí, fue una de sus peores decisiones- Admitió, con tristeza en la voz -La biblioteca contenía siglos de conocimiento acumulado, no solo sobre nuestra historia, sino también sobre otras razas, sus debilidades, sus fortalezas, ahora... todo eso está en manos de quienes nos derrotaron-
Pase mi mano mano por el cabello, pensativo
-Tendremos que recuperar esa biblioteca-
No habia de otra, cometí errores, pero tienen solución, asi que me queda utilizar otro plan, por suerte ya habia empezado a crear en mi cabeza como quinientos sesentaidos planes en cuyo caso fallara el anterior
Pero ahora debo hacer mas, para adaptar dichas ideas en esta nueva situación -No podemos permitirnos ir a ciegas contra la raza de las bestias o cualquier otro adversario, necesitamos información, y rápido-
Stephanie me miraba con una mezcla de incredulidad y admiración
La idea de retomar el reino a través de un plan tan arriesgado le parecía a cualquiera casi imposible
-Sé que no confías en mí completamente todavía, pero te prometo que no estoy aquí para perder, recuperaremos lo que es nuestro, y esta vez lo haremos bien-
-Si realmente puedes hacer que esto funcione...- Decia en voz baja -Entonces estaré de tu lado hasta el final, pero no subestimes a nuestros enemigos y por favor, no cometas los mismos errores que mi abuelo-
Sonreí de lado a lado
-No lo haré, pero también recuerda, Stephanie, que a veces, para ganar un juego, tienes que hacer una jugada que parezca imposible-
Con esas palabras resonando entre ellos, la conversación quedó en el aire, ahora, ambos sabían que no había vuelta atrás
Después de mi conversación comencé a prepararme para lo que venia, no seria fácil, y con la biblioteca que hay que recuperar, era aun mas difícil, camine por el castillo mientras Stephanie me seguía con cierta inquietud
-Antes de que te vayas... Hay algo más que necesitas saber sobre la biblioteca-
Katsuki se detuvo y la miró con curiosidad, cruzando los brazos
-¿Qué es?-
-La persona que ganó la biblioteca en la apuesta de mi abuelo no es una simple Immanity...- Decia Stephanie, su voz bajando un poco al mencionarlo -Es una Flügel-
Levante mi ceja un poco sorprendido, pero no alarmado
-¿Una Flügel? Entonces estamos hablando de alguien poderoso-
La Flügel escuche que eran una de las razas más poderosas y temidas de Disboard
Seres alados, creados originalmente para la guerra, cuyo propósito era recolectar y proteger conocimiento, además de destruir a quienes se opusieran a sus designios
Su inteligencia, capacidad destructiva, y sed de conocimiento eran incomparables
-Exactamente, la Flügel que ganó la biblioteca... se llama Jibril- Continuó Stephanie -Ella es una de las más antiguas de su raza, y probablemente una de las más peligrosas. si realmente quieres recuperar la biblioteca, tendrás que enfrentarte a ella, y eso no será nada fácil-
Asentí mientras reflexionaba unos momentos
-Una Flügel... interesante, eso suena como un reto digno- Comencé a sonreír, ya que la dificultad solo incrementaba mi interés
-¿Digno?- Stephanie me miró incrédula -¿Sabes lo que dices? Las Flügel son criaturas increíblemente peligrosas, no son simplemente fuertes, son seres creados con la única intención de destruir y además, su intelecto es enorme, Jibril no es alguien con quien puedas jugar a la ligera-
-Eso lo hace aún más emocionante, si alguien como Jibril está protegiendo la biblioteca, entonces no solo será una cuestión de fuerza, sino también de estrategia, además, ¿Qué mejor manera de recuperar todo ese conocimiento que desafiando a alguien que lo valora tanto como ella?-
Stephanie suspiró, sabiendo que no podría disuadirme
-Solo... ten cuidado- Dijo ella finalmente -No subestimes lo que te espera-
Al llegar a la torre que albergaba la biblioteca, me quede impresionado por la magnitud y la belleza del lugar
Las estructuras iluminadas por una suave luz dorada, no había duda
Este era un lugar de poder y sabiduría antigua
Cuando entró, todo estaba en un silencio sepulcral, salvo el suave susurro de las páginas de los libros que flotaban de un lado a otro, como si estuvieran vivos
Entonces, una figura apareció frente a a mi
Una mujer de cabellos largos y claros, con grandes alas blancas, vestida con ropajes que parecían cambiar de color con la luz, se acercó flotando ligeramente sobre el suelo, sus ojos brillaban con una intensidad y sabiduría que revelaban siglos de conocimiento, y una sonrisa tranquila se formó en sus labios mientras lo observaba
-Así que, finalmente has llegado- dijo la mujer con una voz suave pero llena de poder -He estado esperando, mi nombre es Jibril, y soy la que custodia este lugar-
Aunque no me sentía siquiera un poco intimidado
-Es un honor conocerte, Jibril, mi nombre es Katsuki- Decía mientras incline mi cabeza -He venido aquí por una razón muy especifica-
Me miraba muy curiosa, parecía divertirse viéndome
-Oh, ¿De verdad? ¿Y qué te trae hasta mi biblioteca?- Preguntó, inclinando la cabeza ligeramente, como si ya supiera la respuesta, pero deseosa de escucharla de mis labios
Esboce una ligera sonrisa
-He venido para desafiarte, quiero recuperar la biblioteca que una vez perteneció al reino de Immanity, sé que fue ganada en un juego justo, pero creo que ya es hora de intentar reclamarla nuevamente-
Por un breve momento, los ojos de Jibril brillaron con interés y una pizca de diversión
-¿Desafiarme, dices?- Su voz sonaba melódica, pero había una intensidad en ella que hacía eco en la gran sala -Nadie ha tenido el atrevimiento de desafiarme en siglos-
-Tal vez sea hora de un cambio, los Immanity, el conocimiento es todo lo que tenemos, recuperar esta biblioteca es vital para la supervivencia de nuestro pueblo-
Jibril rió suavemente, flotando con gracia alrededor de Katsuki, observándolo con más atención
-Qué fascinante, un Immanity que habla con tanta seguridad, me agradas, Katsuki, pero dime, ¿Qué podrías ofrecerme que sea lo suficientemente valioso como para aceptar tu desafío?- Preguntó, con una sonrisa astuta mientras yo cruzaba mis brazos mantiendo mi confianza
-Que tal todo mi conocimiento... Todos mis saberes, en mi cabeza hay un total grabado de 70.000.000 libros grabados de memoria, sobre juegos, historia, matematica... Todos los géneros que puedes pedir-
Al decir eso note como ella estaba viendome casi riendo, como si no me creyera
-Te parece gracioso?-
-Pues si, no hay tantos libros en este mundo-
-En este... No, pero yo no soy de este mundo-
Cuando Jibril extendió su mano hacia mí, su expresión de incredulidad fue evidente
Lo entendía, por supuesto
Nadie en Disboard habría creído lo que estaba a punto de mostrarle, pero yo no era de este mundo, y en mi mundo, las posibilidades tecnológicas habían sobrepasado lo que esta realidad podría imaginar
Su toque fue suave, pero una corriente de energía, un ligero cosquilleo, recorrió mi piel cuando sus dedos rozaron mi frente, podía sentirlo
Estaba escaneando mi mente, tratando de buscar algo que confirmara si lo que le había dicho era cierto
Ella, una criatura antigua y poderosa, acostumbrada a tener el control, ahora intentaba entender algo que no pertenecía a su realidad
Durante unos segundos, dejé que analizara
Sabía lo que encontraría, o al menos, sabía que se sorprendería, mi conocimiento no era lo que ella esperaba; no eran simples recuerdos de un Immanity común
Yo había absorbido, procesado y almacenado información de un mundo mucho más avanzado
Libros, datos, fórmulas matemáticas, teorías científicas... todo estaba ahí, organizadamente archivado en mi memoria como un gigantesco y complejo sistema
Pude ver cómo su rostro, al principio sereno y ligeramente burlón, empezaba a transformarse
Sus ojos se abrieron más, y por un momento, su respiración cambió, un indicio de asombro
No me lo esperaba, pero allí estaba
Jibril, la Flügel, estaba impresionada
-Esto es... increíble- susurró finalmente, casi para sí misma, mientras su análisis continuaba
Era evidente que no había visto nada como esto en todos sus siglos de vida
Sus palabras eran como un eco lejano, pero estaban cargadas de un respeto creciente
Sentí una ligera satisfacción al escucharla, sabía que había captado su atención, y no solo eso, su respeto
Pero aún así, me mantuve en silencio, esperando a que terminara su inspección, de alguna manera, esto era parte del juego, no se trataba solo de mostrarle que tenía el conocimiento
Era cuestión de dejar que lo procesara, que lo interiorizara, y que llegara a la conclusión inevitable por sí mismo
Cuando finalmente retiró su mano, sus alas se desplegaron un poco más, como si algo dentro de ella se hubiera agitado
No era solo sorpresa, era una mezcla de fascinación y respeto
-Estás diciendo la verdad- declaró, y en su tono ya no había ni una pizca de duda o burla, sus palabras, aunque tranquilas, retumbaban en el vasto salón de la biblioteca -Tu conocimiento es vasto. Más vasto de lo que jamás podría haber imaginado, eres más que un simple Immanity, Katsuki-
No pude evitar sonreír ligeramente ante eso, desde que llegué a este mundo, sabía que las razas poderosas como la suya subestimaban a los Immanity, para ellos, éramos los más débiles, los más insignificantes
Pero siempre supe que nuestra verdadera fortaleza no radicaba en la fuerza bruta ni en las habilidades mágicas, sino en nuestra capacidad para adaptarnos, para aprender, para planear, y yo, al ser de otro mundo, no solo tenía la ventaja del conocimiento, sino también la perspectiva
-Entonces, Jibril- dije, manteniendo mi voz firme, segura -¿Aceptarás mi desafío?-
Podía notar que estaba pensando, procesando la situación, no me cabía duda de que su mente trabajaba a un ritmo increíble, considerando todas las posibles ramificaciones de aceptar o no mi propuesta
Pero al final, su sonrisa astuta volvió a aparecer
-Será un honor aceptar tu desafío- dijo finalmente, con una chispa de emoción en sus ojos, era el tipo de emoción que sólo alguien como ella podría sentir: el ansia de un reto intelectual, de un oponente digno, pero su advertencia vino con la misma chispa -Pero ten cuidado, Katsuki, aunque posees conocimientos vastos, la Flügel no es una raza que se rinde fácilmente, tendrás que usar todo lo que sabes si quieres derrotarme y recuperar esta biblioteca-
Había esperado una respuesta como esa
Después de todo, ¿Por qué lo haría fácil? Esta era Jibril, una de las criaturas más poderosas de Disboard, alguien que valoraba el conocimiento por encima de todo
La mera idea de un desafío la emocionaba, y sabía que no sería algo simple
Pero yo tampoco estaba aquí para buscar el camino fácil
Estaba preparado
Miré a mi alrededor
La gigantesca biblioteca, iluminada por una suave luz dorada, respiraba poder
Este no era solo un lugar lleno de libros; era un campo de batalla intelectual, uno donde el conocimiento era la mayor arma y yo estaba más que listo para pelear
-Que así sea- dije, devolviéndole la mirada con la misma intensidad -Que comience el juego-
Sabía que lo que venía sería complicado, pero al mismo tiempo, estaba emocionado
Este era el tipo de desafío que había estado esperando desde que llegué a este mundo, mi mente estaba lista, con cientos de planes formándose al mismo tiempo, analizando cada posible estrategia, cada movimiento que podría hacer
Jibril, por su parte, parecía igualmente lista, el aire entre nosotros estaba cargado de expectativa, como si ambos supiéramos que lo que estaba por venir cambiaría todo
Había logrado lo imposible
Capturar la atención de una Flügel, y ahora tendría que probar mi valía
Pero en mi mente, solo una cosa estaba clara
No iba a perder
No solo por mí, sino por todos aquellos que dependían de esta biblioteca, por el futuro del reino de Immanity, este era solo un paso más en el camino hacia la victoria
El desafío había comenzado, y yo estaba listo para jugar
El aire entre Jibril y yo estaba cargado de expectativa
Sabía que este desafío no sería solo un simple juego, sería una batalla de mentes. Jibril, una Flügel con siglos de conocimiento y experiencia, no era alguien a quien subestimar, y yo no era el tipo de persona que cometería ese error
Pero lo más importante era que sabía jugar y en este mundo, el juego lo era todo
-Antes de comenzar- dijo Jibril, con una sonrisa divertida en los labios -¿No deberíamos establecer las condiciones? Un desafío sin una apuesta carece de emoción-
Asentí lentamente
Había anticipado esto, y ya sabía lo que diría
El riesgo era la clave para aumentar la tensión
-De acuerdo- respondí, cruzando los brazos y sosteniendo su mirada con firmeza -Si gano, recuperaré la biblioteca en su totalidad para el reino de Immanity, como ya hemos acordado. Pero quiero algo más-
Jibril arqueó una ceja, interesada
El brillo en sus ojos me indicaba que le gustaba cómo se desarrollaba esto
-Quiero que el perdedor se convierta en el sirviente del ganador- añadí, sin desviar la mirada -Para siempre-
Jibril parpadeó por un momento, sorprendida por mi audacia, pero luego rió suavemente, un sonido ligero y melódico
-¿Un Immanity sugiriendo una condición tan audaz? Interesante...- musitó, ladeando la cabeza con un toque de admiración, luego, su sonrisa se ensanchó -Muy bien, acepto tus términos, si pierdes, serás mi sirviente, y servirás a los Flügel por la eternidad, pero si ganas, como tú lo has dicho, te serviré a ti-
Mi corazón dio un vuelco, pero no mostré la tensión que sentía por dentro
Sabía lo que estaba en juego, y sabía que no podía permitirme perder
Sin embargo, mi rostro se mantuvo sereno, y simplemente asentí
El pacto estaba hecho, y ahora no había vuelta atrás
Nos posicionamos frente a frente, y el entorno a nuestro alrededor comenzó a cambiar
Los libros flotantes de la biblioteca se transformaron en piezas de juego que se desplazaban por el aire, creando una atmósfera visualmente impresionante
Un tablero brillante apareció entre nosotros, suspendido en el aire, y ambos tomamos nuestros asientos, listos para comenzar
-El juego será simple- dijo Jibril, sus ojos brillando con un entusiasmo apenas contenido -Un duelo de estrategia y conocimiento, el primero en capturar la mente del otro, gana-
Lo supe en ese momento
Este no era un juego normal
Jibril estaba llevando el desafío a un nivel completamente nuevo, se trataba de usar nuestras mentes, pero no solo para mover piezas en un tablero
Teníamos que predecir los movimientos del otro, manipular la situación a nuestro favor y proteger nuestra propia mente de ser invadida
El juego comenzó, y desde el primer movimiento, pude sentir la intensidad del desafío, Jibril movió sus piezas con precisión y rapidez, como si estuviera leyendo mis pensamientos, anticipando cada uno de mis movimientos
Sabía que no podría superarla simplemente en conocimiento
Ella tenía siglos de ventaja, pero yo tenía algo que ella no esperaba
El engaño
A medida que el juego avanzaba, comencé a planificar mis movimientos de manera más calculada, pero también de forma sutil
Sabía que si dejaba pistas de lo que pretendía hacer, Jibril las recogería, convencida de que estaba viendo a través de mi estrategia, era una apuesta arriesgada, pero contaba con su exceso de confianza
Empecé a dejar patrones en mis jugadas, movimientos que parecían torpes, como si estuviera desesperado por intentar algo que claramente no funcionaría
Ella lo notó, por supuesto, pude ver la chispa de satisfacción en sus ojos mientras creía que estaba adelantándose a mis movimientos
Aumentaba la presión, moviendo sus piezas con rapidez y destreza, convencida de que me tenía acorralado
Pero lo que no veía era que esas jugadas erróneas eran deliberadas
Estaba jugando un juego dentro del juego, preparando el terreno para mi movimiento final, uno que la tomaría completamente por sorpresa
Mientras ella atacaba, yo me retiraba estratégicamente, y en ese aparente retroceso, ocultaba mi verdadera intención
Finalmente, cuando Jibril hizo un movimiento que parecía asegurarse la victoria, sonrió triunfante
-Parece que te tengo- dijo, su tono calmado pero cargado de una confianza abrumadora -Una jugada más, y será el fin, Katsuki-
Pero era justo lo que necesitaba
-Es curioso...- respondí, con una ligera sonrisa en los labios -Porque eso es exactamente lo que estaba esperando-
Jibril parpadeó, su expresión cambió por un momento, dudando
Antes de que pudiera reaccionar, moví una de mis piezas clave, una jugada que había estado preparando en secreto desde el principio, oculta bajo capas de jugadas falsas
Su reacción fue inmediata
El tablero cambió, las piezas que ella creía tener bajo control ahora se movían en mi favor
-¿Qué...?- exclamó, sus ojos abriéndose con sorpresa
-Te hice creer que estabas ganando todo este tiempo- continué, mientras el tablero entero reflejaba mi victoria inminente -Al enfocarte en mi aparente debilidad, no viste que te había guiado hacia una trampa, no perdiste por falta de conocimiento, Jibril, al contrario, de todos mis planes, en cada jugada tu acabas con 100 en solo un movimiento... Muy impresionado pero... perdiste porque te dejaste engañar-
Un silencio pesado cayó entre nosotros. Jibril observó el tablero, procesando lo que acababa de suceder
Su sonrisa se desvaneció lentamente, reemplazada por una expresión de aceptación
Sabía que había perdido, y la apuesta que habíamos hecho era clara
-Impresionante...- murmuró finalmente, con una mezcla de asombro y respeto -No puedo negarlo, Katsuki, me has derrotado-
El tablero desapareció, y con él, la tensión que había estado cargando el aire, Jibril, con una dignidad impresionante, se levantó de su asiento y me miró directamente a los ojos
-Tal como acordamos- dijo, su tono solemne -A partir de ahora, seré tu sirvienta, tu seguidora, mi conocimiento y mis habilidades están a tu disposición, has ganado este juego, y con él, mi lealtad-
Miré a Jibril, viendo en ella no solo a una oponente formidable, sino a una aliada que podría ser invaluable en el camino que se avecinaba, pero más allá de eso, había ganado su respeto, algo que pocas personas podían decir
-No te considero solo una sirvienta- le dije, manteniendo mi voz firme pero amigable -A partir de ahora, serás mi compañera, necesitaré tu ayuda, tu conocimiento, y juntos, recuperaremos todo lo que el reino de Immanity ha perdido-
Jibril sonrió levemente, una nueva chispa de emoción en sus ojos
-Entonces, Katsuki- dijo, inclinando ligeramente la cabeza -Estoy a tu servicio ¿Qué será lo siguiente?-
Jibril se levantó del asiento, sus alas replegándose con elegancia mientras ajustaba su posición frente a mí, su expresión, aunque aún cargada de respeto, se suavizó ligeramente, como si algo más rondara en su mente
-Antes de que sigamos adelante- comenzó, su tono ahora más tranquilo, casi didáctico -Hay algo de lo que quiero advertirte, sé que mencionaste antes a la tribu de las bestias, los Híbridos, ¿cierto?-
Asentí, intrigado por el giro de la conversación, la biblioteca de Immanity ya estaba asegurada, pero Jibril aún parecía tener más que decir, algo importante que podría ser clave para mis próximos movimientos
-De hecho- continuó, sus ojos adquiriendo un matiz más serio -Hace tiempo, participé en un juego contra la gente bestia, fue... extraño, aunque no lo admitiría fácilmente, no recuerdo los detalles de esa apuesta, eso es algo que no me ocurre a menudo- Su tono era curioso, pero había una sombra de inquietud detrás de sus palabras
-¿Qué quieres decir?- pregunté, un tanto desconcertado por lo que estaba revelando
-Exactamente lo que has escuchado- respondió Jibril, sus ojos enfocándose intensamente en los míos -Perdí un juego contra la tribu bestia, y, a cambio de algo, me vi obligada a otorgarles una parte de la biblioteca, pero lo extraño es que no recuerdo qué fue lo que aposté o cómo fue la partida, es como si una parte de mi memoria hubiera sido bloqueada-
Eso me sorprendió. Jibril, una Flügel con un intelecto vasto y un recuerdo casi perfecto, no recordaba una apuesta ¿Cómo era posible que alguien con tanto poder e inteligencia pudiera olvidar un detalle tan crucial?
-La tribu bestia...- murmuré, reflexionando -¿Podrían tener algo que afecte la memoria de los participantes del juego? Si es así, deben estar usando algo más allá de simples trucos mentales-
Jibril asintió, sus ojos mostrando un destello de admiración
-Esa es una posibilidad- admitió -La gente bestia es famosa por sus habilidades especiales, no solo físicas, sino también psíquicas, pueden haber utilizado algún tipo de magia o habilidad desconocida para interferir con mi memoria, si piensas enfrentarte a ellos, debes tener cuidado, juegan con reglas diferentes-
Esta revelación me hizo replantear la situación, si la tribu bestia tenía el poder de hacer olvidar un juego incluso a una Flügel, tendríamos que enfrentarlos con más cautela de lo que había previsto
-Aún así- continué, con una sonrisa irónica -Parece que la biblioteca ha pasado por muchas manos últimamente, pero no te preocupes, Jibril, la recuperaremos completamente, lo que me interesa ahora es saber más sobre los Híbridos y cómo podríamos desafiarlos, pero antes, necesito hablar con Stephanie-
Jibril me observó un momento antes de asentir, aparentemente satisfecha con mi respuesta
-Muy bien- dijo, inclinando ligeramente la cabeza -Te seguiré hasta el castillo-.
Con Jibril flotando a mi lado, abandonamos la imponente biblioteca y caminamos hacia donde Stephanie nos esperaba
Al llegar a su salón privado, la vi sentada cerca de una ventana, con la vista perdida hacia el horizonte, no había esperado que regresara tan pronto, mucho menos con Jibril a mi lado
Cuando me vio entrar, sus ojos se abrieron de par en par, y la sorpresa fue palpable en su rostro
-¿K-Katsuki?- tartamudeó, poniéndose de pie de inmediato -No puede ser... ¡¿Lograste vencer a Jibril?!- Su incredulidad era total, sus ojos pasaban de mí a la Flügel, quien simplemente le dedicó una sonrisa calmada
-Sí- respondí, cruzando los brazos -He recuperado la biblioteca para Immanity. Jibril ahora nos ayudará en lo que viene-
Stephanie quedó en silencio, aún procesando lo que acababa de escuchar, era evidente que nunca había esperado que volviera con éxito y menos aún con la mismísima Jibril, quien ahora se mantenía a mi lado como una aliada
-Es impresionante... No pensé que fuera posible- murmuró Stephanie, en voz baja -Nadie ha logrado vencer a una Flügel en un desafío... y mucho menos hacerla su sirvienta-
Miré a Jibril, quien observaba la conversación con su habitual calma, no parecía molesta ni incómoda por el hecho de que había perdido el juego y ahora debía servirme. Si algo, parecía disfrutar del resultado
Pero lo más interesante fue que noté algo diferente en Stephanie, la manera en que me miraba había cambiado, ya no era solo admiración por mis habilidades en los juegos; había algo más
Una chispa en sus ojos que antes no estaba allí ¿Respeto? ¿Intriga? Quizá algo más profundo
Me acerqué a ella, manteniendo una actitud relajada
-Stephanie- dije con una sonrisa -Esto es solo el principio, Jibril y yo hemos discutido algo importante sobre la tribu bestia, parece que utilizan un tipo de truco que afecta la memoria de sus oponentes, incluso contra alguien tan poderosa como ella, vamos a necesitar más que simple estrategia para derrotarlos-
-¿Afectar la memoria?- Stephanie frunció el ceño, claramente alarmada por esa información -¿Cómo es posible que puedan hacer algo así?-
-Eso es lo que intentaremos descubrir- dije, cruzando los brazos mientras reflexionaba -Pero si queremos enfrentarnos a ellos, necesitamos estar preparados para cualquier cosa y ahora que tenemos a Jibril de nuestro lado, nuestras probabilidades han aumentado significativamente-
Stephanie me miraba, y pude notar una nueva determinación en su rostro, aunque también ese brillo distinto, una mezcla de sorpresa y algo más que no lograba identificar del todo
Parecía que, a partir de ahora, su percepción de mí había cambiado...
Una pena... era hermosa... Pero... En mi cabeza, mis planes son otros
Mientras caminaba por las calles del reino, con Jibril a mi lado y Stephanie siguiéndonos a unos pasos de distancia, mi mente ya estaba enfocada en nuestro próximo reto
La tribu bestia, los Híbridos
Había escuchado suficientes rumores sobre ellos, sobre su reino y, más específicamente, sobre su torre
Sabía que el corazón de su poder estaba ahí, en ese lugar imponente que se elevaba en el horizonte como una aguja afilada que perforaba el cielo, ahora, más que nunca, era crucial descifrar sus secretos
Desde la distancia, observé la Torre de la Tribu Bestia, una estructura intimidante que sobresalía sobre el paisaje, casi como si vigilara a toda la región
Era imposible no sentir el poder que emanaba de ella, no solo era un símbolo de su fuerza física, sino también un recordatorio de su astucia y control sobre aquellos que desafiaban sus reglas
Había algo más, sin embargo, algo que me hacía sospechar que lo que veíamos no era todo lo que había
"La memoria de Jibril fue afectada..." pensé, recordando lo que me había dicho antes "Pero, ¿cómo? Si los Híbridos tienen ese tipo de control, ¿por qué no lo usan en cada juego? ¿O tal vez lo hacen, y nosotros simplemente no lo notamos?"
Mis pensamientos corrían mientras observaba la torre desde la distancia, como si pudiera descifrar su misterio solo con la mirada, había algo en la estructura misma que no me cuadraba
¿Era posible que la torre en sí fuese un componente clave en sus juegos? Podría ser una fuente de energía, o tal vez un tipo de distracción, algo diseñado para desviar la atención de su verdadera estrategia
No compartí estas teorías con Jibril o Stephanie en ese momento
Aún no
Era mejor guardar mis pensamientos por ahora, dejar que la información se asentara y ver si más pistas confirmaban mis sospechas
Pero algo me decía que la torre era clave, los Híbridos estaban jugando un juego dentro de un juego, y no iban a ser fáciles de vencer
-Debemos notificarles de nuestra llegada- dije finalmente, rompiendo el silencio, me giré hacia Jibril y Stephanie, quienes me miraban con expectación -Vamos a hacer esto de manera correcta, no es prudente llegar sin avisar, mandaremos un mensaje para que nos esperen-
Stephanie parecía nerviosa, su mirada oscilando entre la torre en la distancia y yo
Claramente, la idea de enfrentarnos a los Híbridos la ponía en guardia
Pero sabía que, a estas alturas, retroceder no era una opción
-¿Estás seguro de esto, Katsuki?- preguntó, la preocupación en su voz era palpable -Sabes lo que dicen sobre ellos... Nadie ha salido victorioso contra la Tribu Bestia en siglos, ni siquiera los elfos se atreven a desafiarles abiertamente-.
Sonreí, con una confianza que ya comenzaba a ser natural en mí
-Si queremos ganar, no podemos permitirnos tener miedo, las bestias juegan su propio juego, pero nosotros haremos lo mismo, solo necesitamos averiguar cuál es su verdadero truco- Mis ojos volvieron a la torre, una vez más desafiando su presencia con mi mirada
Me acerqué a una pequeña estación de mensajería en el reino, donde los pájaros mensajeros eran entrenados para enviar mensajes a largas distancias
Tomé una pluma y escribí en un trozo de pergamino
"A la tribu bestia, me llamo Katsuki, representante de Immanity, un gusto, queria hacerle saber a su lider que quisiera ir a verlo a su territorio, para tener una charla, y de ser posible divertirnos todos"
Enrollé el pergamino y lo até a la pata del ave mensajera, este alzó el vuelo con un sonido suave, dirigiéndose hacia la Torre de la Tribu Bestia
Miré el cielo mientras el ave desaparecía en la distancia, el mensaje había sido enviado, y ahora solo quedaba esperar su respuesta
-Está hecho- dije, mirando a Jibril y Stephanie con una sonrisa calmada -Ahora nos preparamos, nos reuniremos con ellos en su propio terreno, pero esta vez, seremos nosotros quienes controlen el tablero-
Jibril asintió, una sonrisa juguetona apareciendo en sus labios
-Esto será interesante- murmuró ella -Hace tiempo que no me enfrento a la tribu bestia, y después de lo que me dijiste sobre sus habilidades... estoy intrigada por lo que pueda pasar-
Stephanie, sin embargo, seguía algo tensa, aunque no cuestionó mi decisión, sabía que lo que estaba en juego iba mucho más allá de su propio miedo
Ahora, era cuestión de supervivencia para Immanity, y yo había demostrado que tenía lo necesario para hacer frente a los retos imposibles
Juntos, caminamos hacia la frontera del reino de Immanity, donde comenzaríamos nuestro viaje hacia la Torre de la Tribu Bestia
Mientras avanzábamos, podía sentir la tensión en el aire, pero también algo más. Stephanie estaba actuando de una forma diferente conmigo, más cercana
Podía notar cómo me observaba de vez en cuando, con una expresión que ya no era solo de preocupación o duda, parecía que algo había cambiado en la forma en que me veía, tal vez por la victoria contra Jibril, o tal vez porque ya no me consideraba simplemente un jugador más
Fuera lo que fuera, no podía permitirme distraerme
Tenía que mantenerme enfocado en lo que venía, en el próximo desafío, en la Tribu Bestia y sus juegos mentales
Había mucho más en juego de lo que cualquiera de nosotros podía ver
La torre, sus secretos, las memorias perdidas... todo comenzaba a encajar en una imagen más grande. Solo quedaba por ver si mis teorías eran correctas
El mensaje estaba en camino, y el juego ya había comenzado
La tensión en el aire se volvio palpable cuando llegamos al territorio de la Tribu Bestia
El camino hacia su capital estaba flanqueado por una exuberante vegetación, pero la naturaleza majestuosa no lograba ocultar la sensación de peligro latente, las historias sobre su fuerza y astucia mental no eran simples rumores, sabía que estábamos entrando en la boca del lobo, y la única forma de salir victorioso sería controlando cada aspecto del juego
Al llegar a la entrada de su imponente torre, nos recibieron varios miembros de la Tribu Bestia, con posturas rígidas y miradas que dejaban claro que no éramos bienvenidos
Pero eso solo me hizo sonreír
Había venido a enfrentarlos, y ya sentía que tenía una ventaja sobre ellos
-Así que este es el famoso reino de la Tribu Bestia- Murmuré en voz alta, lo suficientemente fuerte como para que todos me oyeran -Francamente, me lo esperaba más impresionante, he visto mejores estructuras en pueblos abandonados-
Stephanie, que me seguía de cerca junto a Jibril, me lanzó una mirada de puro pánico, su rostro estaba pálido, y podía sentir cómo su nerviosismo crecía con cada palabra que salía de mi boca
-K-Katsuki...- Murmuró en un susurro desesperado, claramente preocupada por el rumbo que estaba tomando mi comportamiento
Pero no tenía tiempo para tranquilizarla ahora
Sabía lo que estaba haciendo, y ese era precisamente el plan
Provocar a la Tribu Bestia, forzar una reacción...
Es lo malo de parecer humano, o de poder sentir, nadie es inmune a las reacciones
Finalmente, nos llevaron al salón principal, donde el líder de la Tribu Bestia, Ino Hatsuse, nos esperaba parado en la entrada, mientras lo seguia una pequela niña bestia con orejas puntiagudas y mirada desafiante
Izuna Hatsuse, su nieta
Sus ojos me siguieron con una mezcla de curiosidad y desconfianza mientras me acercaba
-Vaya, vaya- dije con una sonrisa altanera, sin hacer ningún tipo de reverencia -Supongo que tú eres el famoso Ino Hatsuse, qué sorpresa tan... normal, me esperaba algo más intimidante, aunque, claro, las historias suelen exagerar-
Stephanie dejó escapar un leve jadeo, claramente horrorizada por mi falta de respeto, Jibril, por otro lado, observaba la situación con una sonrisa divertida
Conocía mi estilo lo suficiente como para entender que había un propósito detrás de cada palabra que decía
Ino me miró con frialdad, sin levantarse de su asiento
Su mirada, sin embargo, era penetrante, como si intentara leerme de inmediato
No lo culpaba; después de todo, su raza era famosa por su capacidad de detectar debilidades
-Immanity tiene la costumbre de subestimar a sus oponentes- dijo Ino con voz grave mientras notaba como hacia sus colmillos presentes -Y suelen pagar un precio alto por ello-
Me encogí de hombros, fingiendo despreocupación, no puedo lastimarlo a el, y el a mi no, si no es mediante un juego
-Subestimar no es lo que hago, simplemente observo y hasta ahora, lo que veo es bastante... decepcionante, aunque- Añadí, con una sonrisa calculada, ya que comence a armar mi proximo movimiento- Esa jovencita a tu lado parece más interesante ¿Cómo te llamas?- Me giré hacia Izuna, quien frunció el ceño ante mi tono
-Izuna- respondió, sus palabras cortantes
-Izuna, un buen nombre- comenté, con una sonrisa amigable mientras me inclinaba un poco hacia ella -Espero que tú seas más interesante que tu abuelo, porque honestamente, si esto es todo lo que tiene la Tribu Bestia, me temo que he hecho el viaje en vano-
La provocación fue clara, y pude ver cómo los músculos de Ino se tensaban ligeramente
La paciencia de un líder tiene sus límites, y yo estaba empujándolo a los suyos deliberadamente
-Cuidado con tus palabras, Immanity- Advirtió Ino, su voz ahora cargada de amenaza -Estás en nuestro territorio, aquí, no hay espacio para el orgullo vacío de los humanos-
Sonreí, satisfecho, justo lo que quería, había logrado captar su atención y, lo que era más importante, sembrar la semilla de la competencia
-No estoy aquí para presumir- Dije, con un tono más serio ahora -Estoy aquí para desafiarlos, a ti, Ino Hatsuse, a ti y a tu gente, quiero un juego, un desafío entre Immanity y la Tribu Bestia y no cualquier desafío, claro, estoy seguro de que sabrás apreciarlo-
Ino se inclinó hacia adelante, su interés ahora mucho más evidente, aunque trataba de mantener una fachada de frialdad, podía ver el brillo en sus ojos
Había mordido el anzuelo
-¿Y qué propones, Immanity? ¿Qué es lo que quieres de nosotros?- preguntó, sus palabras llenas de desconfianza
-Quiero lo mismo que todos los que te han desafiado antes- dije -Quiero la verdad detrás de tu poder, quiero saber cómo la Tribu Bestia ha ganado todos sus juegos, cómo han logrado que ni siquiera los elfos puedan vencerlos, quiero eso... y más-
Stephanie jadeó nuevamente, esta vez más fuerte, Jibril permanecía serena, pero sus ojos brillaban con curiosidad
-¿Y qué ofreces a cambio?- preguntó Ino, su mirada afilada
Sonreí, sabiendo que esta era la parte clave de la negociación, me giré hacia Jibril, que me devolvió una mirada tranquila y segura
Luego miré de nuevo a Ino
-Te ofrezco a Jibril, mi compañera Flügel, y todo su conocimiento, incluida su biblioteca entera- Dije, con un tono lleno de seguridad -Estoy seguro de que sabes lo que eso significa, todo el conocimiento de una de las razas más poderosas de Disboard, te lo ofrezco en un solo juego-
El silencio que siguió fue abrumador
Podía sentir los latidos acelerados de Stephanie a mi lado, y la mirada penetrante de Jibril sobre mí, Ino, por su parte, permanecía en silencio, analizando mi propuesta
Sabía que era una oferta demasiado buena como para ignorarla, pero también sabía que estaba poniendo todo sobre la mesa
Finalmente, Ino sonrió, una sonrisa que no llegaba a sus ojos
-Acepto- Respondió, con un tono peligroso -Si pierdes, Jibril y todo su conocimiento pertenecerán a la Tribu Bestia, pero si tú ganas...- Hizo una pausa, sus ojos brillando con una astucia fría -Podrás llevarte lo que quieras...-
-Entonces, el juego está hecho- Dije, mirando a Ino directamente a los ojos -Prepárate, Ino Hatsuse, el verdadero desafío acaba de comenzar-
Con una sonrisa confiada, me di media vuelta, caminando tranquilamente hacia la salida del salón, Stephanie seguía mirándome, pálida, probablemente sin creerse aún la magnitud de lo que acababa de hacer, Ino Hatsuse mantuvo su mirada fija en mí, sin perder la compostura, aunque sabía que lo había dejado con mucho en qué pensar
Su nieta, Izuna, parecía dividida entre la curiosidad y el desprecio
No les di más atención
Antes de salir, me detuve justo en el umbral de la puerta, sin mirarlos, pero asegurándome de que mis palabras resonaran en el gran salón
-Tienen dos semanas- Dije, sin darle mayor importancia -Dos semanas para preparar su juego, hagan lo que quieran, pueden usar cualquier truco, cualquier trampa, lo que sea, solo asegúrense de que sea interesante-
Las miradas de asombro en sus rostros no eran necesarias para que yo supiera que los había descolocado
Había un método en mi arrogancia, uno que ellos aún no entendían
El poder de la Tribu Bestia estaba en su capacidad de anticiparse a los movimientos de sus oponentes, en usar su astucia y habilidades para crear juegos que no pudieran perder
Pero les estaba dando la libertad total
Quería que se sintieran confiados, que creyeran que podían manipular el juego a su favor, porque solo así se desmoronaría su ventaja cuando llegara el momento adecuado
Salimos del salón, y Stephanie no tardó en alcanzarme, visiblemente inquieta, Jibril, por otro lado, caminaba detrás de mí con una sonrisa entretenida, disfrutando del espectáculo
-¡¿Katsuki?!- La voz de Stephanie era un susurro apremiante -¿Qué acabas de hacer? Les diste dos semanas para preparar un juego... ¡Y además les dijiste que pueden hacer trampas! ¡Eso es una locura! ¡Es como entregarles la victoria en bandeja de plata!-
La miré de reojo, manteniendo mi expresión relajada
-Relájate, Stephanie, todo esto es parte del plan-
-¡¿Plan?!- Repitió, claramente frustrada -¡No puedo entender qué tipo de plan te lleva a poner a Jibril y su biblioteca como apuesta! ¡Ademas en dos semanas se cumple el plazo de tiempo que te dio Chlammy-
Jibril se rió suavemente, como si todo esto fuera un simple entretenimiento para ella
-No es una apuesta si no planeo perder- Le respondí, mi tono calmado -Y créeme, no perderé-
Stephanie parecía incapaz de procesar la tranquilidad con la que hablaba, pero Jibril se inclinó ligeramente hacia mí, sus alas brillando con una luz suave en la penumbra del pasillo
-Estoy ansiosa por ver cómo desarrollas esto, maestro- comentó Jibril con una sonrisa astuta, claramente divirtiéndose con el riesgo en el que la había puesto
Su lealtad ya estaba sellada por el resultado de nuestro anterior juego, y su confianza en mis habilidades solo se había fortalecido desde entonces
Las siguientes dos semanas fueron un ciclo constante de planificación y preparación
No perdí un segundo
Sabía que cada momento que pasaba, la Tribu Bestia estaría elaborando su juego, intentando usar su habilidad de leer mentes para asegurarse la victoria
Pero yo no era alguien que dejara nada al azar. Mi capacidad para analizar escenarios múltiples era precisamente la razón por la que había llegado hasta aquí
Durante esos días, creé miles de simulaciones en mi mente, considerando cada posible movimiento que podrían hacer
Sabía que el juego que propondrían no sería simple
Sería elaborado, lleno de trampas y sorpresas, diseñado para desorientar y aplastar a cualquier oponente que no estuviera preparado
Me encerré en mi habitación, a menudo rodeado de papeles, escribiendo teorías, estrategias y posibles desenlaces
Para cuando llegara el día del juego, tendría preparados todos los escenarios posibles
Teoría número uno: Usarán su habilidad de leer mentes
Era lo más obvio, la Tribu Bestia no podía resistir la tentación de explotar su mayor ventaja. Harían que el juego girara en torno a decisiones que requirieran lectura de mente, algo que un humano común no podría contrarrestar
Pero yo no era un humano común
Ya había diseñado una serie de métodos para bloquear sus intentos de leerme
Técnicas mentales, distracciones, y, lo más importante, haría que ellos creyeran que estaban leyendo lo que querían leer
Teoría número dos: Introducirán trampas sutiles
Ya me lo esperaba
Les di carta blanca para hacer trampas, y no eran tan ingenuos como para dejar pasar esa oportunidad
Harían que las reglas del juego tuvieran lagunas que ellos pudieran explotar a su favor
Sin embargo, sabía que cada trampa que introdujeran me daría una pista sobre su verdadera estrategia
Solo tenía que observar con atención. Las trampas mal diseñadas a menudo son el talón de Aquiles de los tramposos
Teoría número tres: Manipularán las condiciones físicas del juego
Los bestia no eran solo mentales, también eran físicos, por sentido comun y colectivo conocimiento popular, las bestias son físicamente superiores, si podían ponerme en una situación donde la fuerza o la velocidad física fuera un factor clave, ganarían fácilmente
Sin embargo, sabía que harían todo lo posible para que no lo pareciera, para que yo no me diera cuenta de que me estaban empujando a ese tipo de desafíos hasta que fuera demasiado tarde
Pasaba días enteros analizando sus fortalezas y debilidades, mientras mantenía la calma ante Stephanie y Jibril, Stephanie seguía preocupada, pero con el tiempo comenzó a darse cuenta de que yo tenía un plan, aunque no podía comprenderlo del todo. Jibril, por otro lado, seguía disfrutando del proceso
Sus conocimientos eran vastos, pero estaba claro que encontraba placer en ver a alguien como yo jugar con la incertidumbre
Finalmente, el día llegó
Envió un ave mensajera a la Tribu Bestia, anunciando mi visita formal y mi aceptación del desafío
El mensaje fue claro
Estaba listo para enfrentar el juego que habían preparado
Había calculado cada detalle, analizado cada posibilidad, y sabía que, sin importar qué truco intentaran, estaba preparado para superarlo
Caminé hacia el lugar designado, acompañado por Stephanie y Jibril, que me seguían en silencio, Stephanie estaba más nerviosa que nunca, pero confiaba en mí, aunque fuera con dudas
La confianza de Jibril era mucho más tranquila, segura, como si ya supiera que este juego solo sería una pieza más en mi colección de victorias
Sabía que Ino y su gente nos estarían esperando, con su orgullo y su estrategia lista para ser desplegada, pero también sabía que estaban entrando en mi juego, incluso antes de que comenzara
-Vamos a poner a prueba todo lo que han preparado- murmuré, sonriendo con calma mientras nos acercábamos
Porque al final, no era solo el destino de la biblioteca de Jibril lo que estaba en juego, era mi capacidad de superar a una de las razas más inteligentes y astutas de Disboard
Las dos semanas que les di para preparar el juego habían pasado volando, aunque para mí, cada minuto estaba perfectamente calculado, al final, todo se reducía a la ejecución, y confiaba plenamente en mi capacidad de adaptarme a cualquier escenario que la Tribu Bestia hubiera ideado
Cuando el día del desafío finalmente llegó, me encontraba frente a la élite de la tribu, liderada por Ino Hatsuse, con su nieta, Izuna, a su lado, observándome con ojos brillantes y llenos de ferocidad
-¿Así que el gran desafío que nos espera es con Izuna?- dije, con una sonrisa ligeramente arrogante, mirando a la pequeña bestia que, a pesar de su tamaño, emanaba una fuerza palpable -Bien, me gusta, será interesante-
Stephanie, que estaba a mi lado, se mantenía tensa, sus ojos moviéndose nerviosamente entre la tribu bestia y yo
No era difícil ver que aún dudaba de la situación
Por otro lado, Jibril se mantenía en silencio, observando todo con su habitual curiosidad, como si se deleitara en cada movimiento que hacía, esperando ver qué haría yo a continuación
Izuna avanzó, sus ojos dorados fijos en mí, lista para lo que estaba por venir
Pero justo antes de que el juego comenzara, alcé la mano, interrumpiendo el flujo natural de las cosas
-Esperen un momento- dije, mi voz resonando con calma en el salón, lo suficientemente fuerte como para que todos los presentes me escucharan -Creo que podemos hacer esto más... interesante-
Las miradas de todos los presentes se volvieron hacia mí, expectantes
Podía sentir la tensión creciente en el aire, especialmente de parte de Stephanie, quien estaba claramente al borde de un colapso nervioso
-¿Qué estás haciendo ahora?- Susurró Stephanie, con los dientes apretados, sabía que estaba a punto de hacer algo que ella no comprendería al principio, pero eso era parte del plan
-Quiero agregar algo más a la apuesta- Dije, ignorando el murmullo que comenzó a surgir entre los miembros de la Tribu Bestia -Además de la biblioteca de Jibril y la vida de Izuna, estoy dispuesto a apostar algo mucho más valioso-
Hice una pausa dramática, asegurándome de que todos estuvieran prestando atención
-Estoy dispuesto a apostar la vida de cada miembro de la Tribu Bestia-
El salón quedó en un silencio absoluto
Pude ver los rostros de asombro y confusión entre los presentes, e incluso Ino Hatsuse, con todo su autocontrol, no pudo ocultar su sorpresa
Pero la reacción más marcada fue la de Stephanie, quien quedó completamente en shock
-¡¿Qué... qué acabas de decir?!- exclamó Stephanie, mirándome como si hubiera perdido la cabeza -¡No puedes hacer eso! Solo el líder de la Tribu Bestia tiene la autoridad para apostar la vida de su gente ¡Eso es una locura!-
Mantuve mi expresión calmada, incluso divertida
-Lo sé- Respondí -Pero, técnicamente, durante los tres meses, soy el líder temporal de Immanity ¿No es así? Es un tecnicismo del sistema de este mundo, Chlammy, me dio un plazo donde su jugada fue puesta en suspensión temporal, y tu aun eras princesa, yo te derrote en nuestro primer juego, y dije que llevaría tu carga-
Stephanie me miraba con incredulidad, luchando por procesar lo que acababa de decir
-¡Eso no es un tecnicismo, es una manipulación de las reglas! ¡No puedes jugar con algo tan serio como la vida de un pueblo entero!- Gritó, su voz temblando de miedo y frustración
-Claro que puedo- Le respondí, mi tono sin perder su calma habitual -Después de todo, las reglas de este mundo son claras, mientras sigan vigentes, cualquier cosa puede ser apostada en un juego y hasta que se cumplan los tres meses de mi liderazgo, tengo la autoridad de hacer esa apuesta-
-¡Pero... pero eso es demasiado! ¡No podemos arriesgar tanto!- replicó Stephanie, temblando ante la magnitud de lo que proponía
Me acerqué a ella, colocando una mano suave pero firme sobre su hombro, inclinándome ligeramente hacia su oído para que solo ella pudiera escucharme
-Stephanie, confía en mí- Le susurré, con un tono que no dejaba espacio para la duda -Todo esto es parte del plan, nunca haría una apuesta sin tener la certeza de que puedo ganarla-
Ella vaciló, sus ojos llenos de preocupación, pero finalmente, tras unos momentos de intensa duda, asintió lentamente
-Está bien... confiaré en ti- Murmuró con voz temblorosa
Desde atrás, Jibril observaba la escena con una mezcla de asombro y diversión
-A veces me pregunto quién es realmente la bestia aquí- Comentó Jibril, con una sonrisa peligrosa -¿Ellos o tú, maestro?-
-No soy una bestia, Jibril- respondí sin voltear a verla -Soy un ganador-
La reacción de Ino Hatsuse no se hizo esperar
Estaba claramente furioso, con sus ojos brillando de rabia mientras se dirigía hacia mí, su presencia intimidante llenando el salón
-¡Estás jugando con la vida de mi gente como si fuera un simple trofeo!- Rugió, su voz profunda resonando en las paredes de la sala -¡No permitiré que un Immanity apueste algo tan valioso!-
Lo miré directamente, sin miedo, manteniendo mi expresión relajada, sabía exactamente cómo manipular la situación
-¿Por qué no, Ino?- Respondí tranquilamente -Si confías tanto en la victoria de Izuna, ¿Qué hay que temer? Después de todo, si están seguros de ganar, la vida de tu pueblo nunca estará en peligro o, ¿acaso tienes dudas sobre la capacidad de tu propia nieta?-
Ino gruñó, claramente irritado, pero no podía retroceder
Sabía que había presionado los botones correctos
No había manera de que rechazara la oferta ahora, no sin perder autoridad ante su tribu
-¡Acepto tu desafío!- Gritó, golpeando el suelo con el pie, su furia palpable -Pero si pierdes, no solo perderás a Jibril y su biblioteca, sino también tu vida y la de todos los Immanity-
-Hecho- Respondí, sonriendo de lado -Es un trato-
Volteé hacia Jibril, quien me observaba con un brillo malicioso en los ojos
-Jibril, necesito que cuides la zona- Le ordené- Es posible que algunos miembros del pueblo intenten interrumpir el juego una vez que comience, no quiero que nada interfiera con esto-
Jibril asintió con una sonrisa satisfecha
-Como desees, maestro, no permitiré que nada ni nadie perturbe el desarrollo del juego-
Con todo listo, nos dirigimos al lugar del desafío
Las miradas de los presentes eran una mezcla de asombro y miedo
Pero, para mí, solo había una cosa clara: este juego ya estaba ganado antes de comenzar
Todo lo que quedaba era jugarlo.
Todos los detalles ya estaban claros
Los miembros de la Tribu Bestia observaban con una mezcla de cautela y orgullo, y pude notar que Ino Hatsuse apenas contenía su frustración, Izuna, la nieta del líder, por otro lado, parecía emocionada, ansiosa por comenzar el desafío
Antes de que diera inicio, uno de los observadores se adelantó para explicar la última regla importante del juego
-Antes de empezar, se debe aclarar que el perdedor, en este caso, si Katsuki llegan a perder, perderá sus memorias, específicamente, los recuerdos relacionados con este juego y cualquier información relevante que pueda afectar futuros desafíos-
Sentí a Stephanie estremecerse a mi lado al escuchar eso, su nerviosismo claramente intensificado
Pero yo mantuve mi calma habitual
Sabía que esta era una regla estándar en juegos de alto nivel en Disboard
Era una apuesta alta, pero yo no estaba preocupado.
Mientras los preparativos finales se realizaban, caminé casualmente hacia Ino Hatsuse
Este me miró con desconfianza, sus ojos dorados brillando bajo la luz del salón
-¿Qué quieres ahora, humano?- Gruñó, claramente molesto por mi presencia
Sonreí ligeramente, manteniendo mi tono bajo para que solo él me escuchara
-No es nada, Ino- Le dije, aparentando despreocupación -Solo quería decirte algo antes de que todo comience-
Ino frunció el ceño, desconfiado pero curioso
-He investigado sobre tu raza, todos piensan que pueden leer la mente de sus oponentes, que ese es su gran truco... pero no es cierto, ¿verdad?- Le dije, inclinándome un poco hacia él, vi cómo su expresión se endurecía, claramente desconcertado -Lo que en realidad tienen es un conjunto de super sentidos, agudeza visual, auditiva, olfativa... sienten hasta los latidos del corazón de los demás, los cambios en la respiración y las pequeñas fluctuaciones del cuerpo, es así como interpretan lo que piensan las personas, no hay magia, solo biología-
Ino permaneció en silencio, su mandíbula apretada
Sabía que había tocado un punto delicado
-No tienes que decirme nada- Continué -No lo comparto por ninguna razón especial, solo quería que supieras que para mí, eso no es impresionante, solo otro detalle que ya he considerado en el juego que estamos por jugar-
Le di una sonrisa tranquila antes de alejarme de él, dejando que procesara lo que le acababa de decir
No necesitaba una respuesta de su parte; lo importante era que él supiera que no me intimidaba en absoluto
Mientras tanto, Jibril observaba con una expresión de deleite en su rostro, aunque no dijo nada
Sabía que disfrutaría ver cómo se desarrollaban las cosas, como siempre lo hacía cuando yo tenía algún plan
Finalmente, llegó el momento del desafío
El juego se había decidido
Una simulación de supervivencia en un entorno virtual
Ambos contendientes comenzaríamos con tres vidas, y el objetivo era simple: eliminar al oponente tres veces antes de perder todas nuestras vidas
Izuna me miraba con una sonrisa confiada, claramente segura de que su raza tenía la ventaja en este tipo de juego y en circunstancias normales, tal vez lo harían
Pero como ya le había dicho a Ino, para mí, sus habilidades no eran nada del otro mundo
Nos transportaron al entorno virtual
Un vasto y peligroso paisaje que combinaba elementos de jungla y ciudad en ruinas
El aire estaba lleno de tensión, y las reglas eran claras
El primero en eliminar al otro tres veces sería el vencedor
No había límites en las armas o estrategias que pudiéramos usar, lo que significaba que tanto la astucia como la habilidad física serían puestas a prueba
Izuna y yo nos miramos fijamente antes de que el juego comenzara oficialmente
Los tres pitidos resonaron, marcando el inicio
El pitido final resonó y antes de poder reaccionar, Izuna desapareció en un parpadeo, su velocidad sobrehumana poniéndome en desventaja inmediatamente
En menos de un segundo, escuché el zumbido del aire cortado por su movimiento detrás de mí
Apenas tuve tiempo de reaccionar antes de que sintiera el peso de su golpe impactando en mi espalda, arrojándome al suelo
-¡Tch! No eres tan rápido, desu- murmuró Izuna con su tono inexpresivo, como si ya supiera que el combate sería unilateral, aún así, no se detuvo a regodearse, siempre alerta
Me levanté, tratando de disimular la punzada de dolor en mi espalda
Era obvio
Físicamente, ella era superior en todos los aspectos, Izuna era más rápida, más fuerte, y sus sentidos estaban afinados al máximo
No era solo su velocidad; su capacidad para rastrear mis movimientos hacía que mis intentos de esquivar fueran inútiles
-¿Así que este es el temido poder de los warbeasts? No está mal, supongo... para un perro con colmillos afilados- Solté, limpiando la tierra de mi ropa mientras me ponía en pie
Sabía que mis palabras no la afectarían, pero no podía evitar el sarcasmo
Sin embargo, ella permaneció completamente indiferente, sus ojos dorados fríos y calculadores, casi como si no hubiera escuchado nada
"Está bien, entonces... Si no puedo vencerla en fuerza bruta, tendré que usar el entorno" pensé mientras me deslizaba entre las sombras de los edificios en ruinas
Izuna no me dio tiempo de descansar
Apenas tuve unos segundos para empezar a correr antes de que la sintiera nuevamente tras de mí, su presencia animal acercándose con una precisión implacable, el juego apenas había comenzado y ya podía sentir el sudor recorriendo mi frente
No estaba acostumbrado a moverme tanto; mi falta de preparación física se hacía evidente, pero sabía que podía compensarlo
Me escondí detrás de una estructura derrumbada, buscando rápidamente algo con lo que pudiera ralentizarla
Mis ojos se fijaron en los escombros y las rocas alrededor. Improvisar era mi única opción, tomé unos cables sueltos de las ruinas y los até entre dos pilares caídos, creando una trampa rudimentaria
No era gran cosa, pero con suerte podría ganar algo de tiempo
Escuché el sonido de pasos acercándose y sonreí para mis adentros
"Caerás en esto, bestia."
El golpe seco de Izuna tropezando con los cables fue apenas un pequeño alivio
Sin embargo, para mi sorpresa, a pesar de haber sido ralentizada, ella no cayó del todo
Se detuvo, evaluando la situación con una calma desconcertante, casi como si hubiera previsto la trampa
Sus orejas se movieron ligeramente, captando el sonido más leve, ajustándose a la trampa improvisada
-¿Eso es lo mejor que tienes, desu?- murmuró, mientras cortaba los cables con sus garras afiladas sin mayor esfuerzo
Maldije entre dientes
Ni siquiera una trampa básica podía frenar a Izuna
Pero aún no estaba derrotado
Mientras ella avanzaba hacia mí, usé el tiempo ganado para activar una serie de trampas improvisadas alrededor: montones de escombros que caerían al menor contacto, maderas afiladas escondidas en la sombra, y más cables entrelazados por las ruinas
Izuna no se detuvo
Cada trampa que desataba a su paso parecía inútil, saltaba sobre ellas con facilidad, moviéndose con la agilidad de un depredador en su hábitat
Aún así, cada obstáculo la hacía perder una fracción de segundo, y yo aprovechaba esos momentos para ganar distancia
"Lo más importante es que la estoy desgastando, aunque no lo parezca" Me dije para tranquilizarme, sabía que si seguía haciendo esto el tiempo suficiente, eventualmente ella cometería un error
Desde su posición, Izuna me miró con ojos inexpresivos, como si todo esto fuera solo una formalidad, un ejercicio que acabaría pronto
Pero eso no importaba
-¿Cansada aún?- Me burlé, respirando con dificultad mientras me escondía detrás de otra columna derrumbada -¿O acaso esa cola tuya también tiene superpoderes?-
Ella no respondió, pero su mirada fría me dejó claro que no había nada que la desconcentrara
Mientras corría entre las sombras, una idea me vino a la mente
Necesitaba algo más que trampas simples
Aproveché mi entorno para crear un señuelo
Agarré algunos restos de metal y los lancé a lo lejos, haciendo ruido para desviar su atención
Sabía que Izuna reaccionaría al sonido, y eso me dio un par de segundos cruciales
Salté detrás de otra estructura y rápidamente tracé un plan más complejo
Con las herramientas improvisadas que encontraba, empecé a colocar una serie de trampas más intrincadas, ocultando los mecanismos bajo el polvo y las rocas, esperando que, al menos, ralentizaran a Izuna lo suficiente para crear una apertura
Pero mientras trabajaba, la realidad seguía golpeando: este no era un juego donde pudiera confiar únicamente en mi inteligencia
Las bestias eran maestros del entorno, y su poder físico era innegable
De repente, escuché un crujido detrás de mí. Mi cuerpo reaccionó demasiado tarde
Sentí el golpe seco de Izuna derribándome al suelo nuevamente, aplastando mi espalda con su mano, inmovilizándome
-Game over, desu- murmuró, mientras su fría mirada me atravesaba
Sin embargo, justo cuando todo parecía perdido, sonreí para mis adentros
Había activado la última trampa
El suelo bajo Izuna colapsó, y ambos caímos hacia una cavidad oculta que había estado preparando desde el principio
El impacto la desorientó, y en ese instante, tuve mi única oportunidad
El impacto resonó en mis oídos mientras caíamos por la trampa que había preparado, y aunque mi cuerpo gritaba por el dolor, no podía permitirme un segundo de descanso, Izuna también se recuperaría rápidamente, lo sabía
Rodé por el suelo para evitar el primer golpe que seguramente vendría de ella, pero para mi sorpresa, no llegó de inmediato
Sentí la tierra vibrar mientras Izuna aterrizaba a unos metros, sus sentidos claramente desorientados por el colapso repentino
Este era mi momento
No podía vencerla en fuerza, pero si conseguía aprovechar los entornos cerrados y su dependencia de sus sentidos, quizás podría cambiar las tornas
-¿Qué pasa, Izuna?- Me burlé mientras me ponía en pie, sacudiéndome el polvo de la ropa -No parece que tengas la ventaja aquí, ¿eh? Pareces... ¿desconcertada, tal vez?-
Sus ojos dorados se clavaron en mí, fríos como el hielo
No se molestó en responder, y mientras la veía prepararse para moverse nuevamente, algo se encendió en mi mente
Había notado algo en su comportamiento, un patrón sutil, Izuna no atacaba sin pensar
A pesar de su velocidad y fuerza, siempre seguía una especie de ritmo, como si estuviera respondiendo a ciertos estímulos en el entorno
Movimientos precisos, rápidos, pero calculados
Dependía mucho de su entorno y sus sentidos sobrehumanos para decidir sus acciones
Eso es
No es solo una fuerza bruta sin control
Tiene un patrón
Un ligero atisbo de esperanza surgió dentro de mí
Si podía prever ese patrón, podría manipularla para llevarla a donde yo quisiera
Y sabía exactamente cómo hacerlo
-¡Aquí, perrita!- Grité, mientras me escabullía por los escombros de la estructura en ruinas, mi voz resonando en el ambiente cerrado
Mi intención era clara
Provocarla y hacer que me persiguiera
No esperaba que cayera en mis trampas una segunda vez, pero sí en su instinto de seguirme
Izuna desapareció de mi vista, y pude escuchar el eco de sus pasos veloces acercándose
Esta vez, no traté de huir en línea recta
En su lugar, comencé a guiarla por caminos más estrechos, callejones formados por los escombros y las estructuras caídas
Sabía que en espacios abiertos, su velocidad y destreza eran imbatibles, pero en lugares reducidos... ahí, sus movimientos eran más predecible
Podía sentirla acercarse cada vez más, su respiración controlada y constante, sus pasos ligeros pero llenos de intención
Cada vez que me giraba para observarla, su mirada seguía siendo impenetrable, sin emociones, pero su cuerpo estaba alerta, completamente centrado en la caza
Sin embargo, yo me mantuve un paso por delante, utilizando la arquitectura del lugar para obligarla a seguir mi ruta
Y entonces llegó la segunda parte de mi plan
Sabía que su raza se apoyaba en sentidos extremadamente agudos
Su visión, su oído, y especialmente su olfato
Si podía sobrecargar esos sentidos, haría que perdiera la concentración, aunque fuera por un segundo
Mientras corría, comencé a buscar artefactos dispersos entre los escombros
Aquí, en esta simulación virtual, había objetos que replicaban el mundo real
Latas oxidadas, pedazos de vidrio roto, y restos de lo que parecía haber sido un sistema eléctrico
Tomé un manojo de cables desgastados y lo conecté rápidamente a una fuente de energía rota
Al girar una palanca improvisada, un sonido agudo y chirriante, casi insoportable, resonó por el pasillo estrecho en el que nos encontrábamos
-¿Cómo te sientes con eso, Izuna?- Grité entre risas, mientras me alejaba un poco más, atento a su reacción
Pude verla detenerse por un segundo, sus orejas moviéndose levemente, intentando ajustar su oído a ese sonido molesto
No era mucho, pero era suficiente para ganar unos segundos más
No paré ahí
Continué recogiendo más artefactos
Botellas vacías que lanzaba al suelo para crear ecos falsos, mecanismos oxidados que producían chispas brillantes y destellos que interrumpían su visión
Cada pequeño truco que armaba la hacía detenerse un poco más, obligándola a procesar el exceso de información
Podía ver que su concentración se quebraba lentamente, aunque su expresión permanecía inexpresiva, como si no estuviera dispuesta a mostrar ninguna debilidad
-¿Y si te dijera que ya estás perdiendo?- Mi voz resonaba en los pasillos, cada vez más desorientada por el eco de los artefactos que había activado -Tal vez no eres tan invencible después de todo, tal vez estás cayendo exactamente en mi trampa, Izuna-
El sonido de mi voz, amplificado y reverberado por los ecos, hizo que sus orejas se movieran de un lado a otro, intentando ubicar mi posición exacta
Perfecto
Estaba logrando desconcertarla
Izuna intentó avanzar nuevamente hacia mí, su velocidad seguía siendo asombrosa, pero esta vez noté que sus movimientos eran ligeramente más torpes, su precisión se estaba desvaneciendo
Los estímulos contradictorios en su entorno estaban sobrecargando sus sentidos
-Ese olfato tuyo... debe estar volviéndose loco ahora, ¿no? Con todo el polvo, la electricidad en el aire, los residuos químicos- Dije, lanzando otra botella que reventó contra una pared, produciendo un destello de luz cegadora
Pude sentir cómo su paciencia se estaba agotando, y por primera vez, noté una ligera rigidez en sus movimientos
Sabía que la estaba llevando al límite
Aprovechando el caos sensorial, la guié hacia un pasillo aún más estrecho, casi una trampa en sí misma
Mientras corría, activé mi último truco
Una serie de chispas eléctricas que llenaron el aire con un olor a quemado
El humo denso y el zumbido constante harían que su olfato se volviera inútil, sobrecargándolo
Izuna se detuvo en seco, su respiración más pesada
Su expresión seguía siendo fría, pero sus ojos dorados ya no se movían con la misma certeza que antes
Por primera vez, parecía que estaba comenzando a dudar
Sonreí ampliamente, a sabiendas de que, si seguía explotando esa desorientación, la victoria era mía
-¿Qué pasa, Izuna?- Mi voz se volvió más oscura, resonando en los angostos pasillos -¿Tu instinto te está fallando? ¿O es que tienes miedo? Tal vez no eres tan poderosa como pensabas-
Ella no respondió, pero sus ojos me decían que algo estaba cambiando
Sabía que su naturaleza era fría y calculadora, pero incluso los warbeasts tenían límites, y yo estaba a punto de sobrepasarlos
La miré directamente, con una sonrisa desafiante en los labios
-¿Qué se siente, Izuna? Ser cazada por primera vez-
El primer golpe llegó rápido, pero no fue suficiente
Izuna, después de caer en una de mis trampas improvisadas, había perdido su primera vida
La bestia, que antes me miraba con esa frialdad casi impenetrable, ahora parecía comenzar a mostrar una ligera grieta en su calma
Sus orejas temblaron, y sus ojos dorados se afilaron, pero aun así, mantenía esa compostura, como si todavía estuviera segura de su victoria
Sin embargo, yo sabía algo que ella no
Su control sobre la situación estaba desmoronándose, y eso era exactamente lo que necesitaba
-Oh, Izuna... ¿Ya perdiste una vida?- dije con una sonrisa socarrona, moviéndome lentamente entre los escombros -Parecía que ibas a acabar conmigo en unos minutos... pero ahora estás empezando a caer ¿O acaso todo esto era parte de tu plan? Dejar que te humille lentamente, para luego hacerme sentir mal, ¿eh?-
Izuna no respondió, como siempre, pero algo en su mirada cambió
Comenzaba a perder la paciencia y eso era perfecto
El momento en que uno empieza a perder el control es el momento en que se vuelven más predecibles y ella, a pesar de toda su fuerza y habilidades sobrehumanas, estaba cayendo en mi trampa
Sabía que los warbeasts como ella no dependían solo de su fuerza física
También tenían una aguda percepción mental de su entorno, capaces de leer a sus oponentes como si fueran libros abiertos
Pero la cuestión es que, cuando logras interrumpir esa lectura, desorientarlos, sus sentidos se vuelven inútiles y eso era exactamente lo que estaba haciendo
Jugando con su mente, poco a poco, minando su confianza, llevándola a un estado de desesperación
Volví a moverme rápidamente por las sombras, activando más de mis pequeños trucos. El sonido de explosiones lejanas y el eco de pasos falsos llenaron el espacio, confundiendo sus sentidos agudos
Su olfato y su oído, antes precisos como los de un depredador, ahora estaban sobrecargados
Podía verla agitar las orejas, tratando de localizarme, pero cada vez más frustrada
-¿Qué pasa, Izuna?- Le dije, ocultándome detrás de un muro derrumbado, mi voz resonando desde varios puntos diferentes, gracias a los ecos que había manipulado -¿No puedes olerme? ¿Escucharme? ¿Dónde está esa asombrosa raza warbeast que presume ser imbatible? Porque ahora mismo, no pareces tan impresionante-
Izuna avanzó, rápida como siempre, pero sin la misma precisión de antes
La emboscada que había preparado funcionó a la perfección
Mientras cruzaba el umbral de un pasillo cerrado, una pequeña explosión de gas comprimido la desestabilizó, lanzándola contra una pared
Me acerqué con calma y, antes de que pudiera recuperarse por completo, la golpeé por detrás con un artefacto improvisado, arrebatándole otra vida
Dos vidas
Esta vez, la frustración en su rostro era más evidente
Podía ver cómo sus músculos se tensaban, cómo sus ojos dorados se oscurecían y eso era justo lo que quería
Quería que Izuna comenzara a sentirse humillada, derrotada, impotente
Ella, que siempre había confiado en su fuerza y en sus sentidos, ahora estaba siendo vencida por alguien mucho más débil físicamente
Alguien que se estaba burlando de ella, atacándola donde más le dolía
Su orgullo
-Oh, vaya... otra vida menos, esto no está quedando muy bien para ti, ¿verdad?- Me burlé, acercándome con lentitud, pero manteniendo la distancia necesaria para evitar un contraataque -Tal vez todo eso de ser la nieta de Ino Hatsuse no significa tanto si no puedes ganar este juego, quizá no eres tan fuerte como todos creen-
Su respiración se hizo más pesada
Sus puños se apretaron
Podía sentir que algo dentro de ella estaba cambiando, una especie de aura la rodeo, Jibril me comento algo acerca de esto, era como el equivalente a un estado berserk, una carta final que usaban en la que rompían todas las limitaciones físicas y se convertían en bestias imparables
Pero también era una señal de que estaba perdiendo el control
Y justo cuando lo pensé, sucedió
Los ojos de Izuna brillaron con una intensidad feroz
Su cuerpo se tensó, y de repente, el aire a su alrededor cambió
Pude sentirlo de inmediato
Su agilidad y fuerza se incrementaron exponencialmente, y sus sentidos, antes sobrecargados por mis trucos, ahora parecían agudizarse más allá de lo imaginable
Era como si toda su furia y frustración hubieran sido canalizadas en esa transformación
-Oh, interesante- Murmuré, dando un paso atrás instintivamente -Entonces, finalmente te pones seria-
Izuna ya no intentaba seguirme con cautela
Esta vez, desapareció de mi vista en un abrir y cerrar de ojos, su velocidad superando cualquier cosa que hubiera visto antes
Apenas tuve tiempo de reaccionar cuando sentí una ráfaga de viento pasar junto a mí, y antes de darme cuenta, ya me había alcanzado
-¡Maldita sea!- Logré soltar antes de recibir un golpe devastador que me lanzó contra el suelo, con una fuerza que sentí en todos mis huesos
Perdí una vida en un instante
Dos a una
Mientras me levantaba, noté la transformación completa, Izuna, en ese estado de descontrol, su cuerpo parecía rodeado de una energía salvaje, sus ojos destellaban con furia pura, y cada uno de sus movimientos era veloz y preciso
Estaba a punto de aplastarme
Pero incluso en ese estado de poder absoluto, no podía perder mi enfoque
Si bien su fuerza física era inigualable, ese estado debería de tener un precio a pagar, en este caso seria la perdida de razón, mas difícil sería para ella mantener el control
Sabía que estaba caminando por una cuerda floja
Lo único que tenía que hacer era aguantar, resistir, y esperar el momento justo en el que su instinto la llevara a cometer un error
-¡Ah, así que ahora me golpeas en serio!- Dije, levantándome lentamente, sintiendo cómo cada parte de mi cuerpo dolía -¿Por qué no lo hiciste desde el principio? ¿Es que estabas esperando para impresionarme? ¡Qué encantadora!-
Izuna no respondió con palabras
No las necesitaba
Todo lo que hizo fue lanzarse hacia mí con una velocidad aún mayor que antes, pero ahora sabía lo que venía
Aunque me alcanzara en un segundo, esta vez estaba preparado
Antes de que su golpe me derribara de nuevo, activé otro de mis dispositivos improvisados
Una explosión de luz cegadora
Izuna se cubrió los ojos, pero solo por un segundo
Un segundo suficiente
Rápidamente me escabullí por otro pasillo, utilizando el entorno a mi favor, obligándola a seguirme nuevamente, pero esta vez con mayor desesperación
Cada paso que daba la hacía más fuerte, pero también más salvaje, menos estratégica
Izuna cayó directo en mi trampa
Las cuerdas, reforzadas y tensadas a la perfección, se activaron cuando Izuna avanzó con la velocidad descomunal de su estado de descontrol, la bestia apenas tuvo tiempo de reaccionar
Un segundo estaba a punto de lanzarse sobre mí, y al siguiente, su cuerpo estaba envuelto en una maraña de cuerdas gruesas que se tensaban alrededor de ella, sujetando sus brazos, piernas y torso, inmovilizándola en el aire
Las cuerdas estaban cubiertas con una mezcla improvisada de varios fluidos encontrados, le estorba para usar su fuerza
-¿Qué te hizo pensar que usando ese estado podrías vencerme?- Le dije, acercándome con calma mientras ella forcejeaba furiosamente, tratando de romper las cuerdas
Su mirada, llena de rabia, se clavó en mí. Sus ojos, ahora casi completamente rojos por la transformación, destellaban con una furia salvaje que hubiera intimidado a cualquiera
Pero no a mí
Ya había hecho varias teorías sobre los warbeasts para saber cómo manejarlos, durante este enfrentamiento no hice nada mas que descartarlas al ver como reaccionaba a mis trampas
Por muy poderoso que sea, una vez que comenzaban a perder el control, como lo estaba haciendo ahora Izuna, se volvían predecibles
-Ah, Izuna... siempre tan confiada en tu fuerza, en tu instinto, pero ese es el problema, ¿No lo ves? El poder bruto no siempre te va a salvar- Mis palabras estaban llenas de una arrogancia calculada, diseñada para seguir socavando su ya frágil control sobre la situación -Todo este tiempo, has estado cayendo en cada una de mis trampas, como un ratón atrapado en un laberinto y ahora, mírate, envuelta en estas cuerdas, atrapada, incapaz de moverte-
Izuna rugió, un gruñido bajo y amenazante, y sus músculos se tensaron
Las cuerdas crujieron bajo la presión, pero no cedieron
Sus colmillos se mostraron al gruñir de manera más feroz, y sus orejas se aplanaron contra su cabeza
No iba a rendirse tan fácilmente
-Oh, claro que no- Continué, burlándome mientras la rodeaba con calma, mis manos en los bolsillos -Pero cuanto más te resistas, más rápido perderás el control de ese estado ¿No es así? Es un arma de doble filo, después de todo, estás canalizando tanta energía que tu cuerpo pronto no podrá seguir el ritmo y cuando eso ocurra... bueno, ya no tendrás ninguna ventaja, serás solo otra presa fácil-
Izuna tiró con todas sus fuerzas de las cuerdas, y por un breve momento, creí que podría lograrlo
Su fuerza era abrumadora
Pero las cuerdas resistieron, y ella, al darse cuenta de que estaba atrapada, gruñó aún más fuerte, una mezcla de ira y frustración
-¿Qué pasa, Izuna? ¿Te molesta que alguien más te controle?- Le dije, inclinándome lo suficiente para que nuestras miradas se cruzaran, aunque me aseguré de mantenerme fuera de su alcance -¿O es que nunca habías pensado que podías ser derrotada? La verdad es que esto nunca fue una pelea justa, ¿sabes? Yo no peleo con fuerza, peleo con mi mente y tú, por muy poderosa que seas físicamente, no puedes superar eso-
El silencio era tenso, roto solo por la respiración pesada de Izuna y los chasquidos ocasionales de las cuerdas mientras intentaba liberarse
Sabía que su rabia estaba nublando su juicio, pero también era consciente de que estaba agotando rápidamente la energía
Todo estaba saliendo según lo planeado, o al menos como uno de los cuatroscientos cincuenta y dos, que habia ideado... Una pena que tantos se hayan descartado, dos semanas preparándolos para irse en solo uno momento
-Me pregunto, Izuna- Dije, acercándome aún más, asegurándome de que escuchara cada palabra -... ¿Qué pensará Ino cuando vea cómo caíste en una trampa tan simple? La gran Izuna Hatsuse, humillada ¿Será que, al final, no eres tan fuerte como ellos creen?-
Izuna rugió con fuerza, pero esta vez había algo más en su tono
Desesperación
Aunque su fuerza y agilidad estaban más allá de lo que podría manejar normalmente, ese estado le estaba empezando a pasarle factura
Su respiración se volvió más irregular, sus músculos, aunque aún tensos, parecían empezar a temblar bajo la presión del agotamiento
Sabía que no podía mantener ese estado por mucho más tiempo
Y entonces sucedió
Con un último esfuerzo, Izuna soltó un alarido feroz mientras todo su cuerpo se estremecía, pero en lugar de liberarse, ella colapso sobre si misma
La energía salvaje que la rodeaba se desvaneció como el humo, y su cuerpo, antes en tensión extrema, se aflojó visiblemente, sus ojos, que antes brillaban con un rojo intenso, volvieron lentamente a su tono dorado natural, aunque el agotamiento era evidente en su mirada
El poder que la había transformado en una bestia invencible ahora la había dejado sin fuerzas
-Me lo imaginaba- Susurré, viendo cómo la guerra dentro de ella se desmoronaba, me acerqué lo suficiente para hablarle al oído, mis palabras llenas de burla -Al final, tu poder no fue suficiente, ¿verdad?-
Izuna, ahora debilitada, apenas podía responder
Las cuerdas la mantenían firmemente en su lugar, y aunque su mirada seguía llena de orgullo, ya no podía ocultar su agotamiento, ya había llevado al límite, y ahora, estaba completamente a mi merced
-Así que, ¿Quién ganó, Izuna?- Le pregunté, disfrutando del momento de victoria -Creo que la respuesta es bastante obvia-
El juego estaba prácticamente decidido. Ella ya no podía pelear
Victoria asegurada para mí
La bestia quedó completamente inmóvil, mientras yo me alejaba, sonriendo triunfalmente
La lección estaba clara
No importa cuán fuerte sea alguien, siempre habrá una forma de vencerlos, si sabes cómo jugar el juego
La sala estaba llena de tensión
Después de la caída de Izuna, todo había cambiado
El aire era denso y cargado de emociones conflictivas: incredulidad, rechazo, pero también una especie de silenciosa aceptación
Las miradas de los warbeasts, siempre orgullosos y leales a su raza, ahora estaban fijas en mí
Sentía el peso de su desdén, pero también sabía que, después de lo que había ocurrido, no había marcha atrás
Había ganado
Yo, Katsuki, había humillado a la nieta de Ino Hatsuse y la había derrotado en su propio terreno
Eso significaba solo una cosa
El líder debía ceder su posición al ganador, y ahora me correspondía tomar ese lugar, según las reglas de los warbeasts
Stephanie Dola, que había observado todo el combate desde el otro extremo del salón, seguía sin poder cerrar la boca del asombro. Sus ojos azules brillaban con una mezcla de sorpresa y preocupación, Jibril, por su parte, mantenía su típica sonrisa de curiosidad e interés, aunque incluso en ella había un destello de respeto
Ninguna de las dos había esperado este resultado
Ino Hatsuse, el líder de los warbeasts hasta hace poco, caminaba lentamente hacia su nieta. Izuna, aún débil después del colapso de su repentino estado, estaba en el suelo, exhausta y derrotada
El anciano, con su rostro endurecido por los años de experiencia y sabiduría, la observaba con una mezcla de tristeza y culpa
-Ino...- Dijo Stephanie, rompiendo el silencio, pero Ino levantó una mano, indicándole que guardara silencio
Había algo solemne en sus movimientos, una aceptación inevitable de lo que estaba a punto de ocurrir
Se inclinó junto a Izuna, posando suavemente su mano sobre su cabeza, acariciando sus orejas con un gesto paternal
Sus ojos, normalmente llenos de dureza y estrategia, estaban ahora llenos de arrepentimiento
-Perdóname, Izuna- dijo en voz baja, aunque su tono resonaba en toda la sala -Te puse en una situación en la que no debiste estar, no debí dejar que esto llegara tan lejos-
Izuna, aunque claramente agotada, alzó su mirada hacia su abuelo
El orgullo de la guerra todavía ardía en sus ojos, pero también había una vulnerabilidad que nunca antes le había visto
A pesar de todo, ella no pronunciaba una palabra, los warbeasts rara vez lo hacían cuando el honor estaba en juego
Mientras ese momento tenso se desarrollaba, di un paso adelante, mi mirada fija en Ino
Sabía lo que venía ahora
Había seguido las reglas de los warbeasts, las había usado a mi favor, y ahora, iba a reclamar lo que me pertenecía
-Ino Hatsuse- Dije, mi voz firme resonando por toda la sala -Según las leyes de tu raza, he ganado, he vencido a tu campeona y ahora, como es la costumbre... te toca cumplir-
Ino no se levantó inmediatamente
Parecía que cada palabra que iba a decir le costaba un gran peso emocional
Finalmente, se puso de pie, aunque aún no se volvía hacia mí
Sus ojos permanecieron en Izuna por un segundo más, antes de girarse, mirándome con la solemnidad de un líder que estaba a punto de ceder su lugar
-Tienes razón, Katsuki- Dijo lentamente, cada palabra cargada de gravedad -Según nuestras reglas, has ganado el derecho a reclamar el liderazgo, los warbeasts solo reconocen la fuerza y la habilidad, yo... reconozco tu victoria-
El murmullo entre los warbeasts comenzó a crecer
Algunos de los soldados y generales que habían estado presentes en la sala murmuraban entre sí, claramente incómodos con la idea de que alguien de fuera, alguien que no era de su raza, pudiera ocupar el lugar de líder
Las miradas de desprecio y rechazo eran inconfundibles
Yo no era uno de ellos
Uno de los guerreros más cercanos, de pie en la primera fila, dio un paso adelante
Su cuerpo era grande, musculoso, y su mirada irradiaba furia contenida
-¡Este extranjero no puede ser nuestro líder!- Gruñó, su voz profunda resonando en el salón -¡Él no es un warbeast! ¡No tiene el honor ni la sangre para guiarnos!-
Hubo varios asentimientos de acuerdo a su alrededor, y el murmullo se convirtió en un murmullo aún más fuerte
No me sorprendía
Sabía que los warbeasts eran una raza orgullosa, y la idea de ser liderados por un humano, o al menos alguien que no compartía su sangre, era una ofensa para muchos de ellos
Pero no me inmuté
-Tienes razón- Dije con una sonrisa fría, caminando lentamente hacia el centro del salón, cada paso calculado, proyectando la confianza que necesitaba para mantener el control -No soy un warbeast, no tengo tu fuerza, no tengo tus instintos, pero aún así, los vencí en su propio juego ¿Eso no significa algo?- Mis ojos se encontraron con los del guerrero que había hablado -Si no puedes aceptar mi liderazgo, entonces quizás deberías preguntarte por qué alguien como yo fue capaz de derrotar a tu campeona-
El guerrero apretó los puños, pero no se movió. Sabía que, aunque estaba furioso, no podía deshacer lo que había ocurrido
Las reglas eran claras
-Ino Hatsuse- Continué, volviéndome hacia el anciano líder -Tú eres el líder actual. Dime, ¿aceptas mi reclamo?-
Ino cerró los ojos brevemente, como si intentara reunir la fuerza para decir lo que debía
-Sí, lo acepto- Dijo finalmente -A partir de ahora, Katsuki es nuestro líder-
El silencio que siguió fue aún más tenso que antes
Ninguno de los warbeasts presentes podía creer lo que acababa de escuchar, pero la palabra de Ino era ley, Stephanie observaba, incrédula, mientras Jibril inclinaba la cabeza ligeramente, apreciando el giro inesperado de los eventos
Pero yo, Katsuki, solo me encogí de hombros
-No me importa si me odian- Les dije con una sonrisa arrogante -Pueden rechazarme todo lo que quieran, no estoy aquí para que les guste, estoy aquí porque gané y si quieren desafiarme...- Me detuve un momento, dejando que mis palabras se hundieran en sus mentes -Bueno, ya saben lo que pasó la última vez que alguien lo intentó-
La era de los warbeasts bajo mi mando acababa de comenzar
Mientras avanzábamos hacia el reino de los Immanity, el aire se sentía pesado, Stephanie caminaba a mi lado, visiblemente preocupada, mientras detrás de nosotros nos seguían Izuna e Ino Hatsuse, ambos en silencio
A pesar de las tensiones, sabíamos que habíamos logrado algo monumental
Unir a los warbeasts con los Immanity bajo mi liderazgo
Sin embargo, no todos compartirían esa visión con facilidad, especialmente en el reino de los humanos
Cuando llegamos a Elkia, el castillo de los Immanity, la recepción fue menos que cálida
Los ciudadanos, que habían presenciado desde lejos los resultados de las últimas apuestas y estrategias, parecían confundidos, furiosos incluso
Al acercarme, algunos comenzaron a murmurar, y pronto esos murmullos se convirtieron en voces llenas de desdén
-¡Este es el tipo que ahora se cree nuestro líder!- Gritó uno desde la multitud
-¡Es aún más estúpido que el rey anterior!- Vociferó otro, causando risas nerviosas entre el público
-¡¿Cómo puede este idiota liderar Elkia después de lo que ha hecho?! ¡Nos va a hundir aún más!-
Las críticas arreciaban, Stephanie miraba nerviosa, tratando de intervenir, pero sabía que no podía hacer mucho en este momento
Incluso Ino, que siempre había proyectado una imagen de control y dominio, parecía incómodo ante la hostilidad que recibíamos
Los insultos y las burlas eran implacables
Pero yo... yo me mantuve en silencio
Caminaba con la cabeza en alto, ignorando sus palabras, como si fueran simples susurros en el viento
Había enfrentado desafíos mucho mayores, y nada de lo que dijeran me haría retroceder
Finalmente, al llegar a la plaza central, me detuve
La multitud se agolpaba a mi alrededor, y las miradas de desprecio seguían fijas en mí, Stephanie miraba inquieta, como si esperara que yo hiciera algo para calmar la situación
Sabía que era momento de decir algo, de dirigir algunas palabras a quienes se habían mantenido escépticos
Subí lentamente los escalones de una plataforma cercana, girándome hacia el pueblo, con los ojos de todos puestos en mí
- Así que creen que soy estúpido- Dije en voz alta, lo suficientemente fuerte para que todos escucharan, la multitud enmudeció por un momento, sorprendida de que hubiera comenzado con algo tan directo -Incluso me comparan con el 'rey tonto' que solía gobernar este lugar, no les culpo, después de todo, el antiguo rey fue una broma, ¿verdad? Perdió territorios, hizo apuestas ridículas... y ustedes siguen aquí, sin magia, sin ventajas biológicas... sin nada-
Las miradas de sorpresa y desconcierto se extendieron entre la multitud, pero algunos seguían murmurando, sin confiar aún en mis palabras
-No tengo magia- Continué, señalando con un gesto simple -No soy un warbeast, no tengo habilidades físicas sobrehumanas, ni sentidos agudizados, pero, ¿saben qué? Tampoco ustedes y aún así, aquí estamos, en pie. Elkia sigue existiendo-
Los murmullos disminuyeron un poco
La verdad comenzaba a asentarse en sus mentes, aunque algunos todavía no estaban convencidos
-Dicen que los Immanity son la raza más débil- Proseguí, mi voz resonando por la plaza -¿Saben por qué dicen eso? Porque no tenemos ninguna ventaja natural, ni fuerza, ni velocidad, ni magia, ni sentidos sobrehumanos, comparados con los Elfos, las Sirenas, los Flügel... parecemos débiles, pero es exactamente por eso que somos la raza más poderosa-
Hubo un silencio profundo, la multitud estaba atenta ahora, algunos de ellos cruzando los brazos o frunciendo el ceño, pero todos escuchaban
-¿Se han preguntado alguna vez por qué seguimos existiendo?- Pregunté, caminando por la plataforma -¿Por qué, después de todo lo que hemos perdido, después de todas las derrotas que hemos sufrido, seguimos siendo una raza? Es porque nosotros, los Immanity, nos adaptamos, no nacimos con ninguna ventaja, así que tuvimos que aprender a luchar con nuestra única arma... Nuestra mente-
Los insultos y las risas se habían apagado
Ahora solo quedaba el sonido de mi voz, retumbando entre los edificios antiguos del reino
-¿Creen que ser débiles es una desventaja? ¡Es lo contrario! Porque cuando nacen con fuerza o magia, dependen de eso, pero nosotros, que no tenemos nada... aprendimos a depender de todo lo demás, nuestra capacidad para pensar, para planear, para superar cualquier obstáculo con pura estrategia, es lo que nos hace invencibles ¡No somos débiles! ¡Somos la raza más poderosa porque nunca hemos tenido otra opción que mejorar!-
Algunas cabezas comenzaron a asentir lentamente en la multitud. Las palabras que había dicho resonaban en su lógica
Algunos ya no me miraban con desprecio, sino con una mezcla de reflexión y curiosidad
-Si creen que soy un líder estúpido por desafiar a los warbeasts, están equivocados- Les dije, cruzando los brazos mientras los observaba a todos -Los derroqué en su propio juego, y ahora, Izuna Hatsuse, su guerrera más poderosa, está aquí, junto a su abuelo, reconociéndome como su nuevo líder-
Giré brevemente la cabeza para mirar a Izuna, quien, aunque seguía algo resentida por la derrota, estaba de pie junto a mí
Ino Hatsuse, por su parte, permanecía impasible, pero su presencia por sí sola hablaba de una alianza que nadie hubiera imaginado posible
- Los Immanity no necesitan magia, no necesitan habilidades especiales, lo único que necesitamos es lo que siempre hemos tenido... Nuestra capacidad de pensar, de resolver problemas, de entender lo que otros no pueden y ahora, tenemos algo más, tenemos aliados poderosos ¡Y vamos a usar todo lo que esté a nuestro alcance para volver a hacer de Elkia un reino invencible!-
Los murmullos ahora eran de aprobación
Las miradas de rechazo comenzaban a desvanecerse, reemplazadas por una sensación de esperanza, de posibilidad, Stephanie me observaba con asombro, mientras Jibril esbozaba una sonrisa más amplia, visiblemente complacida por la reacción de los Immanity
-Pueden seguir pensando que soy estúpido- Finalicé con una sonrisa arrogante -O pueden aceptar que estamos entrando en una nueva era, una era donde los Immanity no serán la raza débil, sino la raza que lo domina todo y si no pueden aceptarlo... entonces siéntense y observen cómo lo hacemos-
La multitud estaba en silencio, pero esa clase de silencio que precede a la reflexión profunda
Lentamente, comenzaron a aplaudir, unos pocos al principio, pero luego más y más, hasta que toda la plaza resonaba con vítores y aplausos
Ino dio un paso adelante, cruzándose de brazos y observando la multitud con seriedad
-Lo que dice es cierto- Dijo el anciano con su voz grave -Los warbeasts hemos reconocido su fuerza, y ahora lo seguiremos, ustedes también deberían-
Izuna, aunque visiblemente frustrada, mantuvo la cabeza en alto, sin discutir la decisión de su abuelo
Katsuki, con el respaldo de dos de los más poderosos warbeasts y el pueblo Immanity comenzando a despertar, había dado el primer paso hacia algo más grande
Una nueva era en la que los Immanity, lejos de ser los más débiles, reclamarían su lugar en el tablero de Disboard
El ambiente en Elkia había cambiado drásticamente desde mi último encuentro con Chlammy Zell
Lo que antes parecía un reino debilitado y sin rumbo, ahora empezaba a reconstruirse bajo mi liderazgo, sin embargo, sabía que mi posición no era completamente segura
Había enemigos que aún dudaban de mi legitimidad y, entre ellos, Chlammy y su aliada, la elfa Feel Nilvalen, eran los más peligrosos
Pero había llegado el momento de enfrentarlas, de cumplir con lo que prometí hace tres meses, y llevar este juego a un nuevo nivel
El sol estaba cayendo cuando vi a Chlammy en la plaza central de Elkia, con Feel a su lado, ambas de pie, observando el cambio en el reino
La última vez que nos vimos, yo prometi grandes cosas, y ahora las tenia, las cosas han cambiado mucho
Mi alianza con los warbeasts era prueba de ello. Ahora, tenía un nuevo juego en mente
Me acerqué con paso firme, sintiendo las miradas curiosas de los transeúntes, Izuna e Ino Hatsuse caminaban detrás de mí, su presencia intimidante como recordatorio del poder que ahora poseía
-Chlammy- La llamé, haciendo que girara lentamente hacia mí, sus ojos, llenos de escepticismo, se clavaron en los míos, mientras Feel a su lado adoptaba una postura más defensiva, quizás anticipando lo que estaba a punto de suceder
-Katsuki- Respondió ella, con frialdad -Parece que al final cumpliste con lo que dijiste, conseguir la lealtad de los warbeasts... admito que no lo esperaba-
Sonreí, inclinando ligeramente la cabeza en señal de reconocimiento
-Te lo dije, ¿no? Hace tres meses, cuando nos encontramos por última vez, te prometí que conseguiría cosas grandes, cosas que otros ni siquiera se atreverían a soñar y, aquí estoy, no solo con los Immanity bajo mi mando, sino con los warbeasts también-
Feel me miró con una mezcla de curiosidad y cautela, su mano moviéndose instintivamente hacia su báculo, pero sin hacer ningún movimiento brusco, Chlammy, por su parte, mantenía su expresión neutral, aunque sus ojos mostraban un destello de interés
-Bien- Dijo ella finalmente -¿Y qué quieres de mí ahora? ¿Vienes a presumir tus logros?-
Me reí suavemente, sacudiendo la cabeza
-Nada tan simple- Respondí, dando un paso más cerca -Vengo a proponerte algo más grande. Quiero desafiarlas a un juego-
Los ojos de Chlammy se estrecharon, mientras que Feel levantaba una ceja, claramente interesada
-¿Un juego?- Preguntó Chlammy lentamente, midiendo cada palabra -¿Qué tienes en mente, Katsuki?-
Sabía que este era el momento decisivo
No había margen para el error
-Un juego que lo cambie todo- Comencé, alzando la mano para señalar a Izuna y Ino detrás de mí -Si tú ganas, te ofrezco a los warbeasts, un reino entero a tus pies, aliado con el poder mágico de los Elfos, imagínalo... Dos de las razas más poderosas de Disboard bajo tu mando-
Feel mostró una chispa de sorpresa en su mirada, pero rápidamente la escondió tras su habitual serenidad, Chlammy, en cambio, no pudo ocultar por completo su reacción
Sabía que la oferta era tentadora
Con los warbeasts bajo su control, junto con los poderes de los elfos, tendría una fuerza inconmensurable
-Pero si yo gano- Continué, acercándome un poco más, con una sonrisa confiada -Me convertiré en el líder legítimo de los Immanity, y ambas me servirán... Tú y Feel serán mis aliadas-
El silencio que siguió fue abrumador
Los ojos de Chlammy se entrecerraron aún más mientras analizaba cada palabra, cada promesa
-Y dime, Katsuki- dijo Chlammy con voz baja pero afilada -Si gano, ¿Cuál es tu precio personal? ¿Qué me ofreces tú, además de los warbeasts?-
Me encogí de hombros, como si fuera la cosa más natural del mundo
-Yo mismo, por supuesto, si tú ganas, me tendrás como tu sirviente leal, exactamente como te lo dije hace tres meses, cumpliré tus órdenes sin cuestionamientos, podrías tenerme bajo tu control, igual que a los warbeasts-
Chlammy rió suavemente, una risa incrédula y peligrosa
-¿De verdad crees que aceptaré un juego en estos términos? ¿Que confiaré en que me entregues algo tan valioso como los warbeasts?-
Mantuve la mirada fija en ella
-Por supuesto, porque tú sabes tan bien como yo, Chlammy, que en Disboard, todo se decide con juegos y este es uno que no puedes ignorar ¿Acaso no es lo que siempre has querido? Poder real, control absoluto, una oportunidad como esta no volverá a presentarse-
Hubo un momento de silencio, Feel miró a Chlammy, claramente incómoda con la oferta
Sabía que las apuestas eran increíblemente altas, pero también podía ver que Chlammy estaba considerando el riesgo
Ella, más que nadie, sabía lo que significaba jugar en este mundo, y que a veces, un gran riesgo traía consigo una recompensa aún mayor
Finalmente, Chlammy me miró directamente a los ojos
-Muy bien- Dijo lentamente -Acepto tu desafío, Katsuki, pero recuerda esto: si pierdes, no solo perderás tu posición, te arrodillarás ante mí, y Elkia será solo el primer paso hacia mi dominio. Y si ganas...-
Se detuvo por un segundo, esbozando una sonrisa calculadora
-Si ganas, tendrás el control de dos de las razas más poderosas del mundo, y serás mi nuevo líder, pero no será tan fácil-
Feel asintió ligeramente, aunque su mirada seguía siendo cautelosa
-No espero que lo sea- Respondí, inclinándome ligeramente hacia ellas -No sería divertido si lo fuera-
Con eso, el destino de tres razas y los futuros de dos líderes quedaban sellados en una apuesta
Un solo juego decidiría quién gobernaría, y quién serviría
Nos miramos fijamente, cada uno sabiendo que, al final, solo uno de nosotros saldría victorioso. Y las apuestas no podían ser más altas
Todo estaba en su lugar, miré a mi alrededor mientras la sala del trono de Elkia se llenaba de expectación, Chlammy Zell me observaba desde el otro lado, su expresión tan fría como siempre, pero no podía evitar notar una sombra de duda en sus ojos
Al lado de ella, Feel Nilvalen permanecía tranquila, aunque sabía que estaba nerviosa
Una elfa nunca muestra su miedo, pero Feel no podía engañarme, no esta vez
Mis aliados estaban a mi lado, Stephanie intentaba parecer tranquila, pero sus manos temblaban ligeramente, sabía que ella no confiaba completamente en mí, que aún dudaba de si mis métodos eran los correctos para los Immanity, pero no podía permitirme perder tiempo en convencerla ahora
Luego, si todo salía bien, ella lo comprendería
Y luego estaban Jibril e Izuna, ellas eran las claves para asegurar que nada saliera mal durante este juego
Las órdenes fueron claras y precisas
—Jibril, necesito que vigiles a Feel, si intenta algo, cualquier truco, quiero que lo detengas de inmediato, no puedo permitir que nada ni nadie interfiera en este juego-
Jibril sonrió, esa sonrisa típica suya, como si el simple hecho de pensar en la posibilidad de confrontar a una elfa la emocionara más de lo que debería
—Por supuesto, amo Katsuki, nada escapará de mis ojos, si Feel siquiera parpadea de manera sospechosa, lo sabrá-
Izuna, por otro lado, estaba más seria de lo habitual, con sus orejas tensas y los ojos afilados, observando cada movimiento
—Izuna, quédate cerca, no dejes que Feel ni Chlammy hagan nada fuera del juego—
—Sí... Desu~— respondió Izuna con un tono bajo pero firme
Volví mi atención a Chlammy, estaba completamente convencido de que podía ganar, pero sabía que ella no era alguien a quien subestimar
Ya había visto lo que podía hacer cuando estaba acorralada, y no podía permitir que esta partida se me escapara
—Chlammy— Dije, con la voz firme —Cumplí mi promesa, los warbeasts ahora están bajo mi control, y ahora es momento de cumplir la tuya, te desafié a este juego, y sabes lo que está en juego, si pierdo, los warbeasts serán tuyos, tal como lo acordamos, dos reinos bajo tu mando, pero si gano... entonces yo seré el legítimo líder de los Immanity, y tanto tú como Feel me servirán lealmente—
Chlammy me observó con frialdad. Sabía que estaba considerando seriamente mi propuesta, pero también estaba claro que el orgullo de ella no le permitiría negarse
—Dijiste hace tres meses que podías conseguir grandes cosas si aceptabas mi desafío— continué —Y aquí estamos, puedes tenerlo todo, o puedes perderlo todo, lo que decidas depende de ti—
Su mirada no vaciló
—Lo acepto— Respondió con su tono cortante
Sabía que esto no iba a ser fácil, el juego que ella eligió era uno de los más complicados que existían, una prueba de estrategia, lógica, paciencia, y sobre todo, resistencia mental
No podía permitirme ni un solo error, y mucho menos dejar que ella me superara en astucia
El tablero apareció ante nosotros, flotando en el aire. Era una versión compleja de Teorema, un juego que no solo se basaba en tácticas y números, sino en la manipulación del entorno, el cálculo preciso de variables, y lo más importante, la habilidad de anticipar cada movimiento del oponente como si fuera una partida de ajedrez tridimensional
Stephanie miraba desde un rincón, nerviosa y expectante
Sabía lo que estaba en juego, sabía lo mucho que podía perder si fallaba, pero también sabía que no había otra opción
Los insultos y las burlas de los Immanity seguían resonando en mi cabeza desde el día en que regresé con el título de líder de los warbeasts, pero hoy, les demostraría que estaban equivocados...
La primera fase del juego comenzó, y sentí que Chlammy me lanzaba un desafío implícito desde el primer movimiento
Cada paso que daba, cada decisión que tomaba, era un intento de ponerme a la defensiva, de forzarme a reaccionar a su estrategia en lugar de ejecutar la mía
Pero yo no caería en su trampa
Mis dedos tocaron una pieza flotante, cambiando su posición, Chlammy frunció el ceño apenas un milímetro, una señal que solo un observador muy atento podría captar
Jibril vigilaba a Feel de cerca
No tenía que mirar para saber que estaba cumpliendo su tarea perfectamente
Los minutos se convirtieron en horas
Cada movimiento era calculado, medido
Cada reacción de Chlammy revelaba algo nuevo sobre su plan
Pero yo no me detendría
No podía
Finalmente, después de lo que parecieron días, llegamos a un punto crítico, Chlammy estaba acorralada
Sus piezas, limitadas, sus opciones, escasas, y ella lo sabía
La frustración comenzó a hacerse visible en su rostro, algo que nunca había mostrado antes
Pero no me detuve
—Esto es lo que te dije hace tres meses— Le dije, mi tono lleno de confianza —Las posibilidades están frente a ti, grandes cosas, como prometí, pero, como ves, siempre he estado un paso por delante—
Chlammy miró el tablero con frialdad, sabiendo que el juego estaba decidido
—Si pierdes— Añadí —Me servirás, junto con Feel, y si ganas, tendrás a los warbeasts a tus pies. Tienes una decisión que tomar, Chlammy—
El último movimiento estaba ante nosotros
Sabía que había ganado
Podía verlo en sus ojos, Chlammy no tenía más opciones
Ahora todo lo que quedaba era ver si ella estaba dispuesta a aceptar su destino
El silencio reinaba en la sala, Chlammy mantenía la mirada fija en el tablero, sus labios apretados mientras procesaba la derrota que se le avecinaba
No era solo un juego lo que estaba en juego aquí, lo sabía bien
El futuro de los Immanity, el destino de los warbeasts, e incluso el poder de los elfos, todo dependía de este resultado
Cada uno de nosotros entendía el peso de esta partida, pero solo yo había anticipado lo que vendría
Finalmente, Chlammy movió una pieza, intentando un último esfuerzo desesperado para cambiar el curso del juego
Pero fue en vano
Con una leve sonrisa, coloqué mi pieza final en el tablero, cerrando la partida de manera definitiva
—Jaque mate— Anuncié, mi voz firme y segura
El rostro de Chlammy se endureció, pero no podía negar la verdad
El tablero brillaba, indicando mi victoria, Feel, a su lado, dejó escapar un suspiro de resignación, entendiendo que la partida había llegado a su inevitable conclusión
Stephanie se levantó de golpe, sus ojos brillando con admiración y alivio
—¡Lo hiciste!— Gritó, corriendo hacia mí con una mezcla de emoción y gratitud, por un instante, olvidó toda duda que tenía sobre mí, abrazando el hecho de que había salvado el reino de Elkia
Me giré hacia ella, sonriendo, pero en el fondo, sabía que lo que venía ahora sería mucho más difícil
—Gracias, Stephanie— Le respondí, con una ligera inclinación de cabeza
Ella sonrió con una mezcla de admiración y esperanza
Sabía lo que significaba esta victoria para su reino, y lo que más la emocionaba era la idea de que, finalmente, el reino de los Immanity podría estar en buenas manos
O eso pensaba
—Sabía que lo lograrías ¡Con esta victoria, Elkia podrá levantarse de nuevo!— Exclamó con gratitud —Estoy segura de que, con tu liderazgo, podrás devolver el poder a los Immanity, y... —Se detuvo por un momento, bajando la mirada, como si lo que iba a decir fuera una especie de esperanza personal —... Tal vez puedas cederme el trono, para que pueda seguir protegiendo a nuestro pueblo—
El ambiente cambió en un instante, Stephanie me miraba con una mezcla de esperanza e ingenuidad, creyendo que mi objetivo final siempre había sido restaurar a Elkia para ella
Pero no fue así
Respiré hondo, mis ojos se encontraron con los suyos, y aunque no quería ser cruel, la verdad debía salir
—No, Stephanie— Le respondí, con firmeza pero sin dureza, sus ojos se ensancharon, completamente confundida por mis palabras
—¿Qué... qué quieres decir?— Preguntó con incredulidad
Me tomé un momento antes de responder, para asegurarme de que ella y todos los presentes entendieran perfectamente
—No jugué para devolverte el reino— Le dije, con una mirada fría pero segura —Jugué para ganarlo... para mí—
Un silencio helado invadió la sala, Stephanie retrocedió, incapaz de procesar lo que acababa de escuchar
Sus manos temblaban, y sus ojos comenzaron a llenarse de lágrimas
—¿Para ti?— Susurró, incrédula, como si las palabras no tuvieran sentido en su mente
La conmoción en la sala era palpable, Jibril sonreía, aparentemente anticipando mi decisión desde el principio, Izuna me observaba con su mirada acostumbrada, aparentemente indiferente, pero atenta, Chlammy se mantuvo en silencio, aunque podía notar una ligera chispa de respeto en sus ojos, incluso en la derrota
—He ganado este reino para quien sea el mejor para gobernarlo— Proseguí, mi voz resonando en el aire —Y ese soy yo, mi objetivo desde el principio era simple... jugar, pero, en poco tiempo, me di cuenta de que jugar por jugar es aburrido si no tienes oponentes dignos... No me malinterpretes, Stephanie, protegeré a los Immanity, pero no lo haré desde las sombras, ni como tu subordinado, lo haré como su rey, y para eso, necesito poder. Necesito convertirme en alguien capaz de desafiar a Tet—
El nombre del dios único resonó en la sala, y el peso de lo que acababa de decir se asentó en todos los presentes
Stephanie no pudo contener sus lágrimas
Había confiado en mí, había creído que yo sería su salvador, pero ahora se daba cuenta de que mis ambiciones iban mucho más allá de lo que ella imaginaba
Para ella, había sido una traición
—No... no puede ser...— Dijo entre sollozos —¡Me engañaste!—
Di un paso hacia ella, calmado pero firme
—Nunca te engañé, Stephanie, hice lo que debía hacer para ganar, y ahora te pregunto ¿Qué es mejor para los Immanity? ¿Un líder débil que depende de la bondad de otros, o alguien que esté dispuesto a enfrentarse al mismísimo dios de este mundo por su raza?—
Ella no pudo responder
Solo se quedó allí, llorando, consumida por el dolor de haber sido traicionada, o al menos eso era lo que sentía
Me acerqué más y, con suavidad, levanté su barbilla para que me mirara directamente a los ojos
—Stephanie, quiero que estés a mi lado— Le dije con sinceridad —No como reina, sino como mi compañera, te prometo que protegeré a los Immanity, pero para lograrlo, necesito poder, y no pienses que planeo hacer algo cruel o injusto, todo lo que haga será por el bien de nuestra raza, pero para derrotar a Tet y ganar este juego, necesito ser más que un simple rey, necesito ser el Rey de Reyes—
Mis palabras la hicieron temblar, pero en el fondo, podía ver que ella entendía
Sabía que mi ambición no era puramente egoísta, sino que buscaba algo más grande, algo que los Immanity necesitaban para sobrevivir en un mundo donde las razas más poderosas los superaban en todos los aspectos
Di un paso atrás, alejándome lentamente, dejando que Stephanie procesara lo que acababa de suceder
—De ahora en adelante— Dije, dirigiéndome a todos los presentes —Llámenme CrystalSorcererce, porque este juego ha cambiado, y si quiero desafiar al dios de los juegos, debo convertirme en algo mucho más que un simple humano—
Jibril rió suavemente, claramente disfrutando el espectáculo, Chlammy observó todo en silencio, mientras Feel permanecía a su lado, tan inexpresiva como siempre
Y Stephanie, a pesar de todo, simplemente me observaba, con lágrimas en los ojos, pero con un atisbo de entendimiento en su mirada
El futuro de Elkia, de los Immanity, y del mundo entero estaba a punto de cambiar
Todo gracias a este nuevo juego
Ahora... ¿Quién sigue?
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¿COMO ESTUVO EL OVA?
¿Que les pareció la historia de esta variante?
Y si, ya se, parece que termina en suspenso
En si, la mayoría de variantes no les pasa lo mismo, otras simplemente nunca conocieron la empatía o nunca han tenido a alguien
En su caso, es alguien que no tuvo amigos, o familia siquiera para estar cerca
En mi opinión personal, yo pondría a este como la variante que en el nivel dolor físico a sufrido menos
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