☾︎ Incidente en Cainhurts (2) ☽︎
Vlad se encontraba en una carruaje con dirección a Cainhurts, de acompañantes tenía a Eileen y a Alfred, Gascoigne los iba a acompañar pero la Reina Annalise les aclaró que solo necesitaba la presencia de ellos 3 y de sus respectivos alumnos además de quienes eran los mejores prospectos de la Maestre Bernadette y del Maestre Gascoigne.
En cambio los siete alumnos se habían ido en otros carruajes por separado (Tenshi se fue con Raizo, Kaito y Byakuren mientras que Tenzou viajó con Masato y Shinji).
- Buen cazador.... ¿Para que crees que sea la invitación que nos extendió la Reina Vileblood?
Preguntó Eileen con mucha curiosidad mientras se quitaba la máscara un rato para refrescarse, revelando a una mujer mayor de tez pálida, cabello negro y ojos ámbar.
[Eileen, hasta el momento no hay un diseño oficial de ella sin la máscara]
- La verdad no lo sé, creí que era solo para el detalle del reclutamiento.... Pero si requirieron tu presencia y la del desquiciado aquí presente, significa que se trata de un asunto serio....
Respondió Vlad como si nada, ganándose un bufido de parte de Alfred.
- No estoy tan desquiciado, además no es la primera vez que la Reina me manda a llamar para algo importante.
Recalcó Alfred mientras rodaba los ojos con molestia.
- Tu estás acostumbrado a recibir todo tipo de pedidos de parte de la Reina, Alfred.... Hasta para eso....
El rubio se quedó callado mientras sentía que sus mejillas se teñian de un tono carmesí.
- ¿Te crees muy gracioso, verdad Te-?
De pronto se calló por una mirada desafiante de parte del azabache.
- Ok, reconozco que si me pasé con el comentario.... Pero por favor no pronuncies ese nombre otra vez, aún no estoy listo para que alguien más lo sepa....
El rubio asintió a las palabras de su amigo y así fue como el resto del trayecto se quedaron en un silencio algo incómodo para los tres cazadores veteranos.
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Tras un rato de viaje finalmente llegaron al castillo, siendo escoltados por un sirviente que los llevó al salón del trono mientras que otro sirviente se ofreció a darle a los jóvenes un recorrido por el castillo y sus alrededores para que se fueran familiarizando con su nuevo entorno.
Al llegar al salón fueron recibidos por la Reina Annalise y dos de sus hijas, las princesas Isabel y Himiko.... Una era de sangre y la otra era adoptada, pero aún así las Reina las amaba con intensidad.
[Isabel]
[Himiko]
Las tres nobles los saludaron cortésmente, Vlad y Eileen correspondieron de la misma manera mientras que Alfred veia fijamente a la Reina de una manera misteriosa.
- Es bueno que hayan llegado con bien; Gran Maestre Vlad, Maestre Eileen y también usted, Maestre Alfred.
Los tres asintieron a sus respectivos títulos, aunque el viejo cazador y la Cuervo notaron aquel tono coqueto y sutil que la Reina usó para Alfred, quien solo volteo la mirada fingiendo demencia bajo la mirada divertida de las dos princesas.
- Comencemos con el tema del reclutamiento, ya tengo la lista de los postulantes.
Un mayordomo le pasó un pergamino a la princesa Isabel y ella a su vez se la pasó a su madre, estaba a punto de empezar a leerlo cuando llegó un sirviente bastante alterado que abrió las puertas del salón abruptamente haciendo que los presentes se sobresaltaran.
- ¿Puedo saber a qué debo la repentina intromisión mientras estoy reunida con mis invitados?
Preguntó Annalise con evidente molestia, siendo calmada por Himiko.
- Su majestad....
El sirviente inhaló hondo para después exclamar a todo pulmón.
- ¡Nueve caballeros de alto rango han enloquecido por la Plaga de las Bestias y mataron a algunos de los nuestros, les succionaron la sangre y huyeron al bosque!
Todos estaban perplejos ante aquella situación.
- ¡Un momento!, si tú eres el sirviente que quedó al cuidado de los aprendices de cazadores ¿En dónde están ellos?
Preguntó Alfred con una clara preocupación, ya que el recordaba perfectamente como aquel sirviente se había ofrecido a cuidar de ellos durante su estadía en Cainhurts.
- E-Ellos me dijeron que me encargara de avisarle a su majestad sobre la situación para después darme la oportunidad de escapar mientras ellos iban a por los infectados....
Todos se alarmaron, pero Annalise decidió calmar la situación.
- Maestres cazadores, amablemente les pido su ayuda para pacificar a esos soldados desertores, mis princesas se encargarán de acompañarlos como apoyo mientras me encargó de hacer el papeleo correspondiente para el "consejo de Cainhurts".
Los tres cazadores aceptaron al instante mientras salían a prisa junto con las princesas para buscar a los jóvenes cazadores y así matar a los caballeros enloquecidos antes de que lastimaran a más gente inocente.
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Corrieron por el bosque tratando de mantenerse alertas por si a alguno de esos caballeros se les ocurría hacer un ataque furtivo.... Pero el sonido de las armas de fuego siendo accionadas y el choque del acero de las armas los puso alerta para después correr y ver que los jóvenes se encontraban peleando.
Ahí estaban los nueve caballeros con sus armaduras destrozadas y sus cascos maltrechos, sostenían sus respectivas armas con sus brazos anormalmente largos mientras soltaban risas escalofriantes que podían ser equiparables a la de las hienas.... Viendo el estado en el que estaban era más que evidente que estaban a nada de transformarse en bestias por completo.
Tenshi esquivaba mientras disparaba su pistola en el torso de uno de ellos mientras atraía a otro con su bastón enroscado, separando a dos de los demás.... Por su parte Byakuren uso el truco de su "Rueda de Logarius" para machacar a uno de sus contrincantes, en un momento dado cambio la rueda por un "Martillo Eclesiástico" para posteriormente masacrar al otro sin tantos problemas.
En cambio Masato, Tenzou, Shinji, Raizo y Kaito se encargaban de contener a los otros cinco caballeros para que posteriormente Raizo decapitara a uno de ellos usando dos hojas afiladas (Similar a los machetes Kukri) y Kaito agarro la porra que estaba usando para ensamblar una enorme sierra circular que usó para reducir a uno de ellos a un puré de carne y huesos.
La aprendiz de Eileen rápidamente lanzó un cóctel Molotov a los 6 caballeros que fueron reducidos a carne quemada mientras soltaban gritos de dolor.... Al verse acorralados, los últimos tres caballeros se llenaron de estrés para después sujetar sus cabezas y al final ocurrió lo inevitable.
Dos de ellos se convirtieron en monstruos altos con enormes garras, mientras que otro se convirtió en un monstruo grotesco que era similar a una polilla pero de manera grotesca.
Shinji sacó su pistola y extendió sus alas metálicas, Masato preparó su espada y su escudo a la par que Tenzou sacaba su hoja dentada para que finalmente los tres jóvenes se lanzaran a la batalla al mismo tiempo que sus monstruosos contrincantes se abalanzaron contra ellos.
Masato usó su escudo para embestir a su enemigo al mismo tiempo que lo tumbó y con su espada lo atravesó varias veces hasta convertirlo en carne picada, por su parte Tenzou simplemente rebanó rápidamente los brazos de su enemigo para después decapitarlo de un solo tajo.
Pero el verdadero espectáculo era con Shinji, quien volaba mientras disparaba en el aire desde puntos estratégicos para poco a poco derribar a su presa, que se estampó contra el suelo y trató de arrastrarse para huir.... Lastima que Shinji aterrizó y rápidamente puso su pie en la espalda del monstruo para posteriormente partir su cabeza a la mitad con ayuda de su hacha.
Los siete jóvenes respiraron con fuerza luego de aquella tremenda pelea, siendo ayudados por los cazadores veteranos y las princesas Vileblood para después juntar todos los cuerpos e incinerarlos para que después los cazadores (A excepción de las princesas) recitaran unas plegarias y finalmente todos se fueron del lugar.
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Luego de haber cumplido con su misión inesperada, los diez cazadores regresaron al castillo de Cainhurts en dónde los cazadores veteranos le contaron a la Reina todo lo que había pasado y esta recompensó a los cazadores más jóvenes con más simbolismo que otra cosa.
Una vez que ellos arreglaron los asuntos pendientes, Vlad y los otros cazadores se disponían a irse hasta que un mayordomo los detuvo.
- Maestre Alfred, su majestad la Reina Annalise solicita su presencia en el Salón del Trono para pedirle un último.... Favor....
Dicho esto, el sirviente se marchó mientras Alfred soltaba un suspiro resignado.
- Ustedes adelantense, mientras yo me encargo de esto....
Sin mediar palabra los otros se fueron.... Definitivamente esta sería una larga noche para el Maestre de los Ejecutores, quien procedió a dirigirse al lugar donde había sido citado.
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