-¿Estas segura?

-Si dices otra palabra, te juro que daré media vuelta y saldré corriendo.

-Es que nunca te había visto llena de tanto valor ¿Quién eres?

-Soy una idiota, eso soy.

-No te trates mal, solo yo puedo decirte eso de vez en cuando y si, si lo eres, por que tenías que decirle a Jhoe que mueres por besarlo desde que cruzó la puerta de tu casa y que te derrites cada vez que rasca su nuca y ni hablar de cuando...

-Podrías cerrar la boca querida Penelope. -Veo que abre su boca en modo de reproche. -Lo siento, es que estoy nerviosa.

-Joder solo hablaras con él, no le pedirás matrimonio.

-No digas Joder ¡Joder esta bajando las escaleras!

-Acabas de decir Joder-Me reclama de vuelta-¡Joder esta sin camisa!

¡JODER ESTA SIN CAMISA!

Cosa que no ayuda para nada, porque ahora mi corazón está a millón y puedo decir que no solo son los nervios de hablarle si no de ver la obra de arte que es su abdomen -¿Debería irme? -Y perderme de esta vista ¡Jamás!

Trago saliva y veo a Emma quién ahora da vueltas en el mismo sitio -Genial ahora no solo yo estoy nerviosa -Debería respirar profundo como me han enseñado ante situaciones que me generar presión, ok llevo veinte minutos ensayando lo que le diré y creo que justo ahora mi mente ha quedado en blanco. Respira Clarise, respira.

-¿Qué hacen señoritas?

La voz de Dan hace que me exalte y Emma emite un chillido que al castaño le causa gracia, y como si nos fueran atrapado cometiendo un delito alzó ambos brazos, a lo que Dan se da cuenta y se acerca a la ventana.

-¡Con que estabas viendo al sexy de Jhoe Stone sin camisa eh Clarita!

-¡No, de que hablas! -Exclamó.

-Tú también Rubia, no, no, no -Titubea-Eso está muy mal cariño, te he dicho que puedes verme a mi todo lo que quieras, eso que ves tras la ventana no es nada comparado con lo que hay de bajo de esta camiseta querida -Dice mientras pasa sus manos sobre su abdomen.

Emma y yo nos volteamos a ver y sin evitarlo empezamos a reír, Dan niega con su cabeza, mientras insiste que espiar a Jhoe esta sumamente mal y que ya ha cumplido su parte del trato que solo queda que yo esté en la puerta de la casa.

-Ya le dije que necesito algo urgente y que me quede sin llaves, ahora queda en ustedes hacer lo que sea que van hacer con mi querido hermano. Si de eso depende que me pasen la tarea, puedo amarrarlo en el sótano. Y te doy un lazo si quieres-Alza ambas cejas y yo me tapó la cara con las manos.

-Uhh a lo 50 sombras, Clarise aprovecha.-Emma me da un empujón juguetón.

-¡Oye! Reclamo, dejen hablar tonterías.

-Cómo quieras señorita Anastasia

¡Por Dios!

-Dejen de decir esas cosas.

-Ya Dante, la pones más nerviosa, deja de recalcarle sus oscuros pensamientos.

-¡Emma!

-¡Anastasia! Digo ¡Clari!

Y así Dan empieza a reír sin parar y a mi solo me comen los nervios, por que veo que Jhoe vuelve a pasar por la sala de estar, sin percatarse claro que estamos viéndolo como modela sus tan preciados abdominales.

Deja los malos pensamientos Clarise

-Bien Clarita, yo me voy, me llevo a este pequeño ser-Dice sosteniendo a Emma por los hombros.-Ahí esta mi hermano, tu veras que haces con él, por fa no lo mates, ni lo muerdas-Recalca. -Ni lo uses, bueno eso ya es decisión de él. ¡Usa protección! No quiero sobrinos, soy muy joven para tener sobrinos.

Y así sin mas me dejan sola parada frente a la entrada de la casa de Jhoe Stone.-¿Cómo debo de sentirme? - ¿Nerviosa? ¿Ansiosa? ¿Miedosa? -Pues todo lo que terminé en "osa"-Sacudo mi cabeza y me decido a tocar.

Me consumen los nervios, pero ya practique una decena de veces lo que diré así que no queda más, que esperar que el castaño abra la puerta y pueda decirle que me atrae de una manera inexplicable y que me tiemblan las manos nada más de tenerlo cerca y de que...

Acaba de abrir la puerta, modo: Pánico activado.

Algo me dice que salga corriendo y otra parte solo se dedica en ver su cara, tiene el ceño fruncido y acaba de decir "¿Qué demonios quieres Daniel? " Cuándo se percata de mi presencia, hace ante mano de cerrar la puerta y yo solo me sentí confundida , pero creo que fue por la impresión, de un momento intenta disculparse, pero se percata que esta sin camisa y no se que es lo que acaba de hacer, pero se ha tapado de la manera más tierna que jamás he visto, poniendo ambas manos sobre su panza como si estuviera embarazado.

-¿Qué haces? -Preguntó sin evitar reírme.

-Lo, lo siento, ¿Qué haces aquí ? digo, pues... ¿Quieres pasar?

Yo asiento con la cabeza, él se hace a un lado y yo me adentro a la sala, donde sin duda alguna me terminó de poner nerviosa, al ver que Jhoe queda recostado a la puerta de entrada con sus manos sobre su abdomen y su mirada fija en mi.

Respira y céntrate Clarise

-Jhoe lo que pasa es que.

-Shuu...-Me indica silencio.-Lo que pasa es que papá está dormido, quieres venir a la cocina, digo espera que, si iré por una camiseta. ¿Puedes ir a la cocina?

Yo asiento y veo como se aleja escalera arriba, y yo, me quedo plasmada esperándolo, por que no tengo la más remota idea de donde queda la cocina, además mis ojos solo se encargaron de detallar la espalda desnuda de Thomas.

Con que eso de jugar a cincuenta sombras no te quedaría mal

Sacudo mi cabeza ante tal idea, y prosigo a encontrar lo que seria la cocina, me asomo en el marco de una puerta para confirmar si esa es la cocina al percatarme que así es me adentro en ella, recostándome en la isla blanca que se encuentra en el centro .

La verdad estoy haciendo y no puedo parar de mover mi pierna, este escenario jamás se fuera planteado en mi cabeza, estar en la casa de Jhoe Stone luego de ser rechazada en la puerta de mi casa es algo que sin duda alguna me hace cuestionar lo inesperadas que son ciertas cosas en mi vidas.

Decido quedarme observando un pequeño matero que hay en el centro de la isla, no sin antes divagar un poco sobre que es lo que quiero decirle a Jhoe, se que no es fácil de explicar, pero como le digo que altera mis sentidos y que aunque tengo miedo quiero abrirme un poco sobre lo que siento.

Y así sin mas doy media vuelta y me encuentro con esos ojos azules que están observándome con mucha precaución, como si esperasen algo de mi y se que es así, que ha llegado la hora de hablarle. Intento que las palabras salgan de mi boca, intento decirle que me atrae de una manera inexplicable, también intento decirle que me encanta el hecho de que sus manos estén jugando entre ellas, por que eso solo me indica que esta nervioso y aunque quede totalmente confundida luego de la situación de hace unas horas, la verdad es que quiero decirle que.

-Antes de que digas algo, yo quiero disculparme.-Expresa.

Me quedo plasmada allí en la mitad de la cocina, observando como el castaño de ojos azules se intenta disculpar.

-No hay que disculparse fue algo repentino, y se que no te lo esperabas por eso lo siento yo también, creo que fue...

-Por favor no digas que fue un error -Dice al tiempo es que sus ojos se cierran y su ceño se frunce.

-¡Que! No, para nada, nunca pensé eso. Si me sentí mal, pero es por que... Jhoe yo solo quisiera, yo solo quiero decirte que.

¡Genial con que estos son los benditos problemas de comunicación!

-Yo solo, ¡oh por amor a Dios es culpa tuya!

-¡Sí lo sé! Soy un imbécil, no debí...

-No eso no, no me refería a...

Y fui interrumpida

No se en que momento mi espalda a chocado con la encimera de la cocina, solo se que sea lo que sea que esté pasando en este justo momento es lo suficientemente encantador como para olvidarme de que en serio me ha dolido el golpe en mi espalda baja.

Los labios de Jhoe son suaves y sus manos han pasado a tocarme las mejillas, me esta besando y yo, yo se lo estoy permitiendo por que me dejo llevar, si de esta manera evitó que siguiera hablando, créanme que fue una buena estrategia.

Puedo sentir su pecho elevarse un par de veces y se que sus manos están temblando, lo que hace el momento aun más indescriptible, todo él es algo sin descripción por que tenerlo cerca produce en mi un efecto que no había sentido nunca, porque sentir como sus manos acarician suavemente mis mejillas es algo único, por que sentir que por primera vez en mucho tiempo de verdad quiero intentar arriesgarme sin miedo a perder es algo que no tiene explicación, el efecto Jhoe Stone ha empezado a atraparme y no estoy dispuesta a poner resistencia.

Y justo ahora, mientras mis manos suben a su pecho y puedo sentir el latir de su corazón, me doy cuenta que quiero intentarlo, que quiero volar nuevamente y dejarme llevar por lo que sea que esté sintiendo, permitirme a mi misma abrir ese pequeño cofre que se encuentra bajo llave en mi pecho, quiero volar sin miedo a caer, quiero intentar comprender por qué su mirada me atrapa, porque estar con él se siente tan bien y sobre todo quiero probarme a mi misma que de verdad puedo volver a querer.

***

Las manos me tiemblan, tanto que no puedo sostener el lápiz, estoy intentando trazar... Estoy intentando, yo solo, yo solo intento, yo solo intento respirar...

Mis manos sueltan aquel lápiz y se van instantáneamente a mi pecho, duele.

Duele tanto que cierro los ojos, no se en que momento todo ha empezado a dar vueltas, solo se que duele y me asusta. Tengo miedo, tanto miedo que mi piel se eriza.

Intento mantener el equilibrio mientras postró mis manos sobre la ventana, sin pensarlo la abro, necesito aire ya que siento que todo el que está en mi se esta escapando, se escapa tan rápido que me impide hablar, quiero pedir ayuda pero la verdad es que apenas y puedo abrir los ojos. Tengo miedo.

No se que esta pasando, solo se que quiero correr, necesito correr, pero apenas puedo mantenerme de pie, intento respirar, intento inhalar un poco de aire, yo solo intento estar bien...

***

Me despierto con el corazón a mil, trato de controlar mi respiración porque siento que me estoy ahogando, Coco me mira con cierta confusión, me dispongo a ponerme de pie y dirigirme a la ventana.

Ya pasó

Mis labios están resecos, intento controlar mi respiración, frotó suavemente mis brazos en un intento de abrazo.

Ya pasó

Lo repito unas diez veces antes de volver a la cama, me hago ovillo entre las cobijas, pero entonces un recuerdo me invade, un recuerdo no tan lejano, un recuerdo que incluye unos hermosos ojos azules mirándome con cierta pizca de picardía, y unos labios suaves como un algodón, y sonrió, por primera vez en mucho tiempo sonrió en vez de caer.

-¡Clarise, te están llamado!

-¿Ah? -Preguntó con los ojos cerrados, mientras intento descifrar quien acaba de decir eso.

-Tú teléfono lleva sonando como 10 minutos, contesta.

-Mmm vale -Le indico a mi madre quien se asoma en la puerta de mi habitación .-¿Que horas son?-Le pregunto

-Poco más de las 9, te dormiste muy rápido hoy.

-La verdad estoy agotada, y ni se por qué.

-Deberías contestar y descansar entonces cariño, yo voy a ver mi serie, te quiero, descansa.

-También te quiero mamá, descansa.

Bajo un poco el brillo de mi teléfono y me dispongo a ver quien estaba llamando y como llegué a suponer lo tengo cinco llamadas perdidas de Emma. -Me va a matar -Marco su número y espero que ha que me conteste, aunque tengo la idea de lo que me va a decir la verdad nunca estaré preparada para cualquier ocurrencia proveniente de Penelope.

-Tienes tres minutos, que digo tres tienes cinco jodidos segundos para explicarme ¿Qué demonios paso allá adentro? y ¿por qué no fuiste a mi casa como lo habíamos planeado? . Porque me dejaste sola con Dante, sabes que hizo ¡Quieres saberlo! Se puso a comer las galletas de chocolate con Theo, han hecho un desastre en la sala y hasta ahora estoy terminando de limpiarlo, ni siquiera pudo ayudarme a eso, según se tenía que ir rápido y... Ese no es el tema, ese no es el tema ¿Qué demonios sucedió Clarise?

-¡Respira si!

-¡No me pidas que respire!

-Te calmas o no te diré nada.

-¡No me digas nada entonces! -Cuelga.

Me quedo mirando la pantalla de mi teléfono anonadada, frunzo mi ceño ante la acción de Emma, en la pantalla de teléfono aparece un mensaje que no había visto antes. No es uno solo en realidad son tres mensajes, pero mi teléfono empieza a repicar nuevamente, contesto.

-No era que no querías que te contará.

-Bueno ya, fue un momento de rabieta, sabes que te amo no, cuéntamelo todo mi querida Fiorella.

-Una mas y cuelgo yo.

-Como quieras mi amada Clarise ¿Qué sucedió con Jhoe te pone los nervios de punta Stone?

-Bueno, pues no lo see Emmy creo que...

-Ay noo, ya se te pego lo de Jhoe.

-Me beso-Murmuro.

-Clari no te entiendo ¿Qué paso? Oh no, oh nooo quita esa cara-Mi entrecejo se frunce y la veo con algo de gracia.-¿Te lo besaste verdad ? Es eso ¿Verdad? ¡Oh por Dios!

Empiezo a negar divertida e intento explicarle, pero Penélope ha empezado a bailar, sí a bailar. La veo moverse por toda su habitación, debo aclarar que cambio a video llamada para ver en mis gestos si le estaba mintiendo en algo. Yo solo me río de la situación e intentó explicarle al momento en que toma asiento nuevamente.

-En realidad, él me besó.

Y así termina mi noche, Emma no paraba de gritar y yo solo intentaba que se callara para evitar despertar a Theo que dormía a su lado, la verdad es que ese bebe es hermoso pero si lo despiertan de su siesta parece un rabioso chiguagua.

Mi corazón se ha acelerado y no puedo creer que este experimentando estas sensaciones, que me sienta lo suficientemente nerviosa como para cubrirme con mi cobija solo por ver su nombre alumbrar la pantalla de mi celular, su mensaje es un encanto pues me ha enviado un sticker de patito con un gran corazón ¡Dios me dijo que ese era tomate! y que me deseaba buenas noches. Solo se que estoy sonriendo como una tonta y que mi corazón esta latiendo con fuerza y esta vez para bien o al menos eso espero. No puedo evitar y muerdo mi labio inferior al recordar aquel momento que vivimos en la cocina de su casa, la imagen de su rostro a centímetros del mío no para de reproducirse una y otra vez por mi cabeza y la verdad es que tampoco estoy evitando que esto pase, me estoy permitiendo pensarle y sobre todo extrañarle porque aunque hace un par de horas no lo veo, sinceramente quisiera ver esos grandes ojos con destellos azules y esa sonrisa nerviosa justo ahora.

Y sí, me veo perdida en mis pensamientos una vez mas, mamá me habla sobre una reunión en su trabajo, y yo, yo no puedo dejar de mirar la pantalla de mi celular-¡No puedo creer que este haciendo esto!-Me refiero a estar esperando su mensaje, pensando claramente que fue él quién me escribió la ultima vez, pero, yo solo quiero un buenos días.

-¿Pasa algo cariño?- Pregunta mamá.

A lo que respondo negando con la cabeza, me mira con cierta desconfianza como si en el fondo quisiera decirme que le estoy ocultando algo, pero no es así, el hecho de no contarle sobre Jhoe no significa que le este mintiendo o guardando algo súper malo, simplemente no se me ha dado la oportunidad de hablarle sobre él.

-¿Cómo esta Emma? digo se que fue algo difícil lo que paso, y no solo para ella, se que te afecto mucho amor, y me preocupa si puedes estar experimentando esas sensaciones nuevamente.-Le quedo mirando fijamente y ella se acerca un poco mas.-¿Estas bien cariño?.

-Todo esta bien mamá, te lo prometo.

Así termina por estrujarme en un gran abrazo, que es interrumpido al momento en que Coco ha decidido unirse a nuestra muestra de afecto, lo levanto aunque pese un montón y le doy un beso para luego dejarlo nuevamente en el suelo. Me percato de que si no me apresuro llegare tarde y tengo nada mas y nada menos que mi famosa clase de química y en serio me siento tranquila como para arruinar esto con solo ver la cara de Verónica si la maestra llega a regañarme.

-Clari, ¿Qué ha pasado con Daniel? digo pues no lo he visto en un buen rato, bueno desde la vez que vino a casa cuando, bueno ya sabes. Es buen chico o al menos eso puedo llegar a percibir, también es apuesto, tiene unos ojos muy lindo, si sí muy lindos.

Se a lo que esto llevara y no, no quiero tocar estos temas, menos cuando nada de lo que mamá se esta imaginando es cierto.-Niego divertida y salgo casi corriendo de la cocina.-No sin antes darle un beso en la mejilla a mamá.

-¡No madre, no como en tercer grado por favor! Te amo, llegare tarde, adiós.

Vuelvo a revisar una vez mas la pantalla de mi celular al salir de casa

Ni un solo mensaje

Pienso un instante.-¿Y si le escribes tú?-Muerdo el carillo de mi mejilla mientras el teléfono aún esta en mi mano, no se que hacer, empiezo a caminar un poco rápido ya que en serio creo que llegare tarde, reviso nuevamente su ultimo mensaje, fue un sticker de un patito diciendo buenas noches, no tengo la menor idea de donde los consiguió pero son súper tiernos, empiezo a reír sola al ver nuevamente cada uno de los sticker que me envió Thomas ayer. Vuelvo a pronunciar su nombre una vez mas y me decido voy a escribirle, pero no se si estará bien que le ponga un ¨Buenos días Thom ¨ o si debo decirle Jhoe, mientras avanzo empiezo a teclear.

Buenos días Jhoe, espero que tengas un lindo día.

Le doy a enviar y guardo con rapidez el celular.

-¡Buenos días Clari! -Doy un brinco al escuchar su voz-También espero que tengas un lindo día, pero sabes, también quiero que mi día empiece contigo o bien con tú compañía¿ gustas subir bella dama?

Mi corazón empezó a latir con rapidez, trago saliva para intentar no caerme porqué estoy un tanto desconcertada y sobre todo muy muy nerviosa, ni siquiera he podido saludarlo, solo me dedico a escanearlo de arriba a abajo ¡Dios que lindo se ve vestido de blanco!

-¿Quieres subir?-Pregunta.

Yo no puedo emitir palabra alguna, él se dedica ha abrir la puerta del copiloto y contemplar que me he quedado completamente inmóvil, decide acercase y yo me tenso, su aroma me invade, es un olor algo cítrico y muy varonil, lo miro de soslayo y veo que me esta observando con cierta confusión.

-Yo, pues solo quise pasar a ya sabes...solo quería Clari ya sabes pues...-Postra su mano en su cuello.

¡Oh no, no lo hagas Jhoe Stone!

-Hola.-Le sonrío saliendo me mi trance.

-Hola Clarise, te ves muy linda hoy, podrías porfa no verme así.

-¿Así como?

-No lo se, como si estuvieras asustada, ¿te asusto? no quise sorprenderte, o bueno si, esa era la idea, pero creo que tal vez no te gusto que llegara así de repente , debí avisarte ¿verdad?-Empieza hablar muy rápido-Solo quería ya sabes, pasar a darte los buenos días, pensé en escribirte pero dije algo como ¡Oh vamos Jhoe sabes que quieres verla! y pues no lo se fue impulsivo, tome las llaves del auto y vine, no sabia si te encontraría pero ibas saliendo de casa y pues pensé nuevamente...

Empieza hacer unas caras algo graciosas mientras habla tan rápido que algunas cosas no puedo entender, muerdo mi labio para evitar reírme, no puedo creer lo divertidamente tierno que es verlo hablar así. -Yo pensando que no se había acordado de escribirme.-Y velo aquí parado justo frente a mi en un tipo de discurso del porque quería verme.

-Entonces vi el reloj y dije, es tarde debes apresurarte si quieres verla, pero luego pensé bien ¿y si la llevo al colegio? claro si ella quiere, tendríamos unos cinco minutos o un poco mas si tomo el camino largo...Oh no debí decir eso, la cosa es que ...oh no, no me mires así, lo siento pensaras que estoy loco o algo así o que te acoso ¿Piensas que te acoso? -Abre sus ojos al hacer la pregunta, y veo lo dilatada que están sus pupilas.-Lo siento Clari es que...¡Dios! me perdonas no debí ¿Crees que soy un imbécil?

-¡Oh por Dios ya detente!-Le indico al momento en que me abalanzo y le doy un beso en la mejilla.-Eres una ternura Thomas Stone.

El castaño se queda muy quieto al ver mi gesto y en su cara se forma una sonrisa, juro que verlo sonreír es algo encantador, me subo al auto, pero el sigue parado en la acera mientras no deja de sonreír, ¿ya dije que el blanco le sienta muy bien? tuve que llamarlo para que también entrara al auto, creo que definitivamente si voy a llegar tarde. No tengo ningún tipo de excusa pero tampoco me arrepiento del porque llegare tarde.

Verlo conducir es una escena que no quiero borrar nunca de mi cabeza -¡Demonios Clarise, si te gusta!-Se dedica en contarme unas curiosas historias de cuando Dan y él estaban pequeños de camino al colegio, de vez en cuando voltea a verme, aunque solo por unos segundos hay que recordar que este chico maneja con mucha precaución. Yo solo me veo presa de los nervios, pero es una linda sensación me siento bien, oh eso creo, mis manos empiezan a sudar, sudar mucho, trago saliva y empiezo a morderme el labio al darme cuenta de que me sentía bien y si hablo en pasado, esta pasando justo ahora.

Y no quiero esto, no.

Él ríe y yo solo intento respirar, estamos a una cuadra del colegio, se que esta contándome algo pero no puedo concentrarme de verdad mi respiración esta fallando solo quiero salir del auto, pero tampoco quiero asustarlo, me pregunta algo y solo murmuro ni siquiera se que le estoy diciendo mi cabeza esta dando vueltas.

-¿Estas bien?-Pregunta dirigiendo su vista a mis manos que he empezado a presionar.-Te sientes incomoda, ¿hice algo malo Clari?

Niego rápidamente antes de que el detenga el auto justo frente al colegio, abro la puerta muy rápido, el lo percibe, de verdad necesito aire, se que me ha dicho algo pero no puedo ni mirarle solo quiero salir del auto.

-¿Estas bien?-Pregunta nuevamente.

Yo me detengo un momento frente a la puerta del auto, asiento con mi cabeza mientras procuro mantener la postura, intento darle una sonrisa pero creo que me ha salido una mueca algo chueca. Le agradezco y me despido con un gesto de mi mano, él me mira con cierta preocupación e intenta hablar nuevamente pero antes de eso me le adelanto, le digo que llegare tarde y que debo irme, veo en su cara preocupación y algo de tristeza, asiente con su cabeza y se despide no sin antes decirme.

¨Ten un lindo día Clari y disculpa si te hice algo malo no fue mi intención¨

Si tan solo supiera que fue todo lo contrario y por eso ahora estoy así, si supiera que el hecho de sentirme tan bien, hizo que ahora no pueda respirar, si tan solo supiera que el efecto que causa en mi.