Pov. Mike

Scott apartó su fría mirada de mi cuando una chica se puso a hablar con el, ¿por qué me miró así? Hasta donde sé no le he hecho nada malo, él por el contrario me hizo sentir muy mal esta mañana, apreté las manos en puños y dejé de mirarlo.

Dirigí mi mirada hacia el extraño pelirrojo que estaba a mi lado, él me miró y sonrió, lo observe mejor, su cabello era algo largo y rojizo, el era un poco alto, sus ojos eran azules claros, no tenía músculos hasta se podría decir que parece una persona frágil, también parece ser agradable y tiene una linda sonrisa.

—¿Cómo te llamas? —Preguntó sin dejar de mirarme. Noté un fuerte acento francés en él.

—Mike... ¿Y tú? —Pregunté con curiosidad. Él sacó un gorro de su mochila y se lo puso.

—Steve. —Dijo a la vez que cruzaba los brazos detrás de su espalda, parecía estar acomodándose para dormir...

—Bueno Mike, echaré una siesta, por favor levántame cuando esta aburrida clase haya acabado. Cubreme los ojos con el gorro. —Dijo con tranquilidad, con algo de duda baje el gorro hasta tapar sus ojos. Minutos después lo escuche roncar.

(...)

Faltaban unos quince minutos para que terminara la clase de Francés, Steve parecía estar teniendo un sueño feliz, sonreía mientras roncaba, todos los que estaban por aquí se reían en voz baja al verlo balbucear cosas estando dormido.

Scott me ha dirigido varias miradas pero he decidido ignorarlo hasta que se disculpe por lo que dijo, la profesora comenzó a caminar hacia acá atrás, mire a Steve con alarma.

—Steve... —Lo llame entre dientes, disimuladamente lo pique con mi lápiz pero ni caso, ese estaba en la luna.

—¡Stevenson Howard despierte ahora mismo! —Exclamó indignada la profesora mientras daba una fuerte palmada en la mesa, todos dimos un respingo.

—¡Sí mamá! —Exclamó Steve despertándose sobresaltado, no pudimos evitar reírnos al escucharlo decir eso.

La profesora se puso roja y lo miro mal, el la miro con temor en cuanto se quitó el gorro de sus ojos y vio que no era su mama.

Ella se dio la vuelta y regresó al frente de la clase.

—Ya hablaremos sobre su castigo, abra su libro en la página 10 y junto a su compañero lea la conversación. —Dijo mirándonos a los dos mientras se bajaba los lentes, Steve resopló y abrió el libro, yo me puse nervioso.

No hay algo que se me de peor que el Francés, apenas y se que bonjour significa "hola" , no estoy listo para hacer el ridiculo delante de toda la clase.

Tyler me estaba enseñando Francés... Pero siempre terminábamos haciendo otra cosa que no era estudiar.

Qué extraño, normalmente me sonrojaría al recordar esas cosas...

Lentamente fui abriendo mi libro, deseando que tocaran la campana de cambio de hora, cuando llegue a la página 10 mire a Steve, él me miraba con expectación.

—Comienza. —Él asintió cuando dije eso, comenzó a hablar en un perfecto francés, obvio después de todo es francés, eso me hará quedar peor cuando todos escuchen mi pronunciación sangra oídos.

Cuando el termino de hablar se quedó mirándome, de reojo mire a Scott, él también estaba mirándome, con las manos sudadas comencé a leer en voz baja, tanto así que creo que solo Steve me escucho.

Cuando terminamos de hablar la profesora se acercó y se quedo mirandome.

—Mike, no pudimos escucharte, lee otra vez y un poco mas alto. —Dijo mirándome a los ojos, yo trague duro.

—Professeur, él es un chico tímido, no debemos presionarlo desde ahora. —Todos dirigimos nuestras miradas a la puerta allí estaba Tyler mirando a la profesora.

—¡Oh Tyler! Adelante... —Dijo ella con felicidad mientras caminaba hacia el. Los dos comenzaron a hablar entre ellos.

Yo me mordí el labio inferior con nerviosismo, esta vez si senti mis mejillas calentarse cuando él dirigió su mirada hacia mi, estúpido Tyler, hace cosas que no se ni que pensar, primero me toquetea sin mi permiso y ahora viene y me ayuda, lo mire, en sus labios había una encantadora sonrisa mientras hablaba con la profesora. Pero, ¿Es esa sonrisa real? No lo se.

Mire a Scott, él estaba mirándome, tenía el ceño algo fruncido.

—Parece que tu francés no es muy bueno, si quieres puedo ayudarte. —Mire a Steve algo sorprendido, él me sonreía, antes de que le respondiera tocaron la campana.

Los dos nos levantamos, todos comenzaron a salir.

—¿Que tienes ahora? —Preguntó mirándome.

—Matemáticas, ¿y tu? —Dije haciendo un puchero, no me gustan las matemáticas, el me miro con lastima.

—Lo siento por ti, yo tengo arte, adios, nos vemos luego. —Dijo caminando hacia la puerta, le sonreí.

Mire alrededor, ya Scott y Tyler se habían ido. Camine hacia la puerta algo pensativo. ¿Acaso me importa tanto lo que Scott piense de mi? ¿Por que aun me duelen sus palabras? ¿Por qué me duele su rechazo? Nunca me habían importado los insultos de los homofobicos, pero el...

Lo que él dice si me duele, suspire pesadamente y me encamine fuera del salón

Luego de varias horas de clases había llegado el receso, mientras caminaba por un pasillo vi mas allá a Austin, el venia caminando en mi dirección mientras miraba al suelo pensativo, no vi a nadie mas por el pasillo así que me metí al primer curso vacío que había.

He cavado mi propia tumba, con terror vi que he entrado al salon de Física, donde ese lunático da clases, no había nadie, escuche sus pasos acercándose al salon, ¡Mierda! Corrí levemente y me escondi detras de un gran librero que habia alli.

Lo escuché abrir la puerta, luego oí varias cosas moverse y un zipper bajarse, lentamente me deslicé hasta el suelo para esconderme mejor, él no había prendido las luces, si lo hacía sin duda me encontraría, con discreción saque un poco la cabeza para ver que hacia.

El estaba sentado detrás de su escritorio, masturbandose...

Con los ojos mas que abiertos lo mire, el estaba susurrándose cosas asi mismo. El es muy guapo, tiene dinero, podría tener casi todo lo que quisiera ¿por qué estaba tan obsesionado con Alex?.

Tape mi boca para callar mi exclamación de sorpresa y enojo, sentí unas grandes nauseas al ver que en la tablet que tenia en una de sus manos había una foto de Alex, se masturba pensando en él, sin duda sigue obsesionado.

—A-Alex... —Mi expresión era de estupefacción al escucharlo gemir el nombre de mi padre, minutos después desvié la mirada para no ver a ese cerdo corriendose.

Escuche su agitada respiración, abrace mis piernas con fuerza, no puedo salir de aquí hasta que el se vaya.

. . .

Ha pasado como media hora y ya perdí la cuenta de cuantas pajas se ha hecho Austin pensando en Alex, me tape los oidos a partir de la número cinco ¿Es que no se le acaba el semen, no se le cansa la mano o que? Ha sido una tortura escucharlo gemir, creo que he quedado traumado de por vida.

Cuando decidí mirarlo otra vez lo vi marcando en su celular.

—Necesito que me ayudes a hacer algo, si... Tch, no me rendiré nunca, para eso te pago, soy el profesor de su hijo... No, no quiero a su hijo. ¡QUIERO A ALEX, JODER! —Fruncí el ceño al escucharlo discutir con alguien al teléfono.

Saque mi celular y comencé a grabarlo...

(...)

Temblando notablemente me levanté del piso y salí de aquel salón, el psicópata se había ido, grabe toda la conversación que tuvo, esta planeando secuestrar a Alex usandome a mi como cebo, también está planeando deshacerse de Damien.

Mis ojos estaban llenos de lágrimas del miedo que sentía en este momento sumándose a eso las enormes ganas de vomitar que tengo.

Mire a mi alrededor, llevo minutos caminando y no hay nadie. ¿Donde rayos estan todos?
Me pregunté sintiéndome desprotegido, mire al suelo y seguí caminando.

—Mike. —Levanté la vista al escuchar la voz de Tyler, el estaba frente a mí, mirándome con preocupación.

Sin pensarlo dos veces camine hacia él y lo abracé, él no dudo en corresponderme, justo lo que necesitaba, un abrazo, me aferre con fuerza de la tela de su camisa mientras el acariciaba mi cabello, nos quedamos asi durante unos minutos, al escuchar las voces de varios estudiantes me aleje de él.

—Dime que sucedió. —Dijo levantando suavemente mi mentón, sus ojos color esmeralda me observaban atentamente, me alegré un poco al notar que no sentía mariposas en mi estomago.

—A-Austin... —Me callé al ver que el pasillo se llenaba de estudiantes, Tch. Ahora aparecen todos.

—Sígueme. —Dijo él mirando alrededor, agarro mi mano y comenzó a caminar.

Había olvidado lo que el trato de hacerme ayer, ya que él estaba actuando como hace varios años, este era el Tyler que me hacía sentir seguro...

La diferencia es que ahora no sentía que me daría un ataque cardíaco en cualquier segundo, yo iba mirando su espalda, aun no me soltaba la mano.

Me llevo hasta el salón Inglés, ambos entramos, el dejo que me sentara en su silla detrás de su escritorio y se quedó parado frente a mi.

—¿Sa-sabes quien es Austin? —Le pregunté tartamudeando un poco, recordar lo que hizo Austin me altero un poco, el asintió.

—El profesor de Física, y un loco que quiso violar a Alex. —Dijo el mirandome. Yo asenti algo sorprendido.

—Anoche estaba en casa de mis padres, Alex y Damien también, me contaron todo. —Dijo el mirando por la ventana algo pensativo, yo asenti comprendiendo.

—Y dime, ¿Que paso? ¿Acaso te hizo algo? —Pregunto esto ultimo con un tono preocupado, yo negué mirándolo y le conté todo lo que pasó, Todo.

Cuando termine de contarle el soltó por lo bajo varias maldiciones.

—No debes quedarte solo en este instituto. —Dijo agarrando mis manos y mirándome directamente a los ojos. Yo asenti algo nervioso al ver su verdadera preocupación.

Podía sentir algo de tensión e incomodidad entre nosotros, obviamente por lo que paso ayer, eso es algo que no quiero ni recordar, el tampoco parecía querer hablar de eso.

Luego de hablar un poco ambos salimos del salon.

—Gracias... Por hablar conmigo, estoy mas tranquilo ahora, adiós. —Dije sonriéndole levemente, el sonrió de lado y asintió.

Me gire y comencé a caminar, en mis labios había una pequeña sonrisa. Camine por varios minutos, vi a Scott a unos pasos de mi, lo ignore y segui de largo.

Con el corazón algo acelerado mire atrás, su mano estaba sobre mi brazo, deteniendome, suspiro pesadamente y me miró a los ojos.

—¿Hasta cuando me ignoraras? —Preguntó haciendo un puchero casi imperceptible. Reprimí una sonrisa al verlo hacer eso. En cambio le mostré una mirada resignada.

—No se... ¿Por que deberia hablar contigo? ¿Para que vuelvas a insultarme? —Sin poder evitarlo dije eso con un deje de dolor, él se veía algo sorprendido.

Acercó su mano a mi mejilla y me dio una suave caricia mientras nos mirabamos, mi boca estaba levemente abierta, ¿Scott me ha acariciado?

—Perdóname. —Dijo en un susurro ronco, me quede mirando esos hermosos ojos grises, note algo de calidez en su mirada.

Sentí un cosquilleo en el estómago, como el que sentía hace años junto a Tyler. No, este es aún mas intenso. ¿Por qué el? Siento esto por una simple caricia y por una palabra...

¡Basta Mike! No puedo dejar que esta calida sensacion me nuble la mente, no puedo olvidar que el es un homofóbico que podría volver a lastimarme con sus palabras de desprecio.

—Y-Yo... No lo sé Scott, tú no...

—No lo volveré a hacer.

Esta vez sí que sentí todo un zoológico en mi estomago al escucharlo decir eso con un tono ligeramente alarmado.

Él se estaba disculpado de verdad, lo miré e inconscientemente sonreí y asentí con timidez. El parecía algo aliviado.

—¿Vamos a la siguiente clase? —Preguntó con un tono amable.

Dios, esto ya es demasiado ¿Qué habrá pasado? Scott estaba más expresivo que nunca, ¿Estaré alucinando?

Me pregunté mientras lo miraba con algo de sospecha, el sonrió de lado, lo mire muy sorprendido.

—¡¿Quien eres y qué hiciste con Scott?! —Dije mirando fijamente al chico frente a mi.

Él me miró como si estuviera loco y luego soltó una risita.

—¿Que te has fumado Mike? —Preguntó negando con la cabeza, aún había una sonrisa en sus labios.

—¿Seguro que no fuiste tu el que se fumo algo? —Pregunté con los ojos entrecerrados, el me miró fijamente y luego sonrió otra vez.

Comencé a correr lejos de él antes de terminar volviéndome loco, demasiadas cosas extrañas por hoy.

Lo último que vi fue su penetrante mirada.

Camine hacia mi siguiente clase pensando en ese extraño momento, seguro se le pasará ese buen humor en unos minutos.

Y será el mismo inexpresivo y frío Scott de siempre.

(. . .)

En cuanto llegue a mi casa hablé con Alex y Damien sobre lo sucedido con Austin.

Obviamente no les conté la parte en la que Austin se tocaba pensando en Alex, sin duda Damien hubiera ido a matarlo de inmediato.

Ya enfureció bastante cuando les dije los planes de secuestro de Austin.

Ellos me contaron lo que planearon para atraparlo, espero que todo salga bien, no soportaría que les hicieran daño a alguno de los dos.

Mientras estábamos sentados en el comedor Scott entró por la puerta, nos saludó, no lo mire en ningún momento mientras comíamos todos juntos, se que si lo miro mi rostro enrojecerá mucho y no podré explicarlo. Yo... Yo creo que me gusta Scott, bueno, eso explicaría todo lo que siento cuando estoy con el.

Luego de eso me fui a mi habitación con la excusa de que tenía que estudiar. Aparte rápidamente la mirada de Scott cuando nos miramos a los ojos, él frunció un poco el ceño.

Me fui a mi habitación y me tiré en mi cama a dormir por varias horas para evitar pensar en si me gusta Scott o no...

. . .

Cuando desperté eran las 5:00 pm. Hable un rato con mis amigos por whatsapp, luego fui a bañarme.

Luego de bañarme y ponerme algo fresco baje al primer piso, Alex y Damien seguro están trabajando. Vi en la sala de estar a Scott viendo tv, de puntillas me di la vuelta, dispuesto a irme sin ser visto.

—¿A donde crees que vas? —Preguntó sin girarse a verme y haciendo que detuviera mi penoso escape.

—Pues... Pues iba a regar el jardín delantero. —Me inventé rascandome la nuca.

Él se giró y me miró con una ceja arqueada, luego miró mis piernas, tch. ¿Por qué tuve que ponerme un short? Además, ¿que tanto me ve?

—Eso ya lo...

Se calló al escuchar el timbre de la casa sonar.

—¡Iré a abrir! —Dije caminando hacia la puerta, el suspiro y siguió viendo la tv.

—¿Tyler... Que haces aqui? —Pregunte sorprendido al verlo frente a mi, el sonrió apenado.

—Tengo que hablar contigo, además he venido a ayudarte con el francés. —Dijo con su resplandeciente sonrisa.

Yo algo sorprendido aún asentí y lo dejé pasar. Algo me dice que quiere hablar de lo que pasó ayer...

Cuando cerré la puerta me gire a verlo, él tenía una sonrisa relajada en el rostro.

—Vamos a mi habitación. —Dije al recordar que Scott estaba en la sala de estar, él asintió y caminó detrás de mí.

—¿Quién era? —Nos paramos al escuchar a Scott hablar, me mordí el labio algo nervioso.

Tyler tosió falsamente haciendo que Scott se girara a vernos, la expresión en su rostro era de escepticismo y fastidio al ver a Tyler.

—¿El violador? —Preguntó sarcásticamente Scott mirándolo, Tyler lo asesinó con la mirada.

—El va a ayudarme con francés, estaremos en mi habitación. —Dije mirándolo, cuando sus ojos grises se posaron en mí no pude evitar sonrojarme.

—Bueno... Grita si necesitas que te salve. —Dijo él encogiéndose de hombros y mirando a Tyler con sospecha ¿está preocupado por mi? Ignore el cosquilleo en mi estomago.

Suspire algo sonrojado y mire de reojo a Tyler, el estaba mirando a Scott, tenía una pequeña sonrisa en sus labios. Susurro con burla un —Homofóbico, eh... — Casi imperceptible pero logré escucharlo.

—Ven. —Dije comenzando a caminar hacia las escaleras, el me siguió.

—¿Él es el hijo de Eddy? —Preguntó mientras entrábamos a mi habitación, yo asenti y me senté en la cama, él lo hizo frente a mi, en la silla de mi escritorio.

Lo mire mejor, el llevaba unos pantalones negros que le quedaban a la medida y una camisa blanca a traves de la cual se notaban sus músculos, se pasó una mano por su rubio cabello y clavó su mirada en mi.

^^

Veinte minutos después Tyler y yo nos encontrábamos besandonos sobre mi cama, nuestras lenguas jugaban entre ellas, el tenia una de sus manos en mi cintura y otra en mi cabello, las mías estaban en su cuello, él metió una mano por debajo de mi camiseta y acarició mis pezones, comenzó a rozar su miembro con el mío...

—Ty-yler... Ya es... E-es suficiente... —Dije entrecortadamente mientras él bajaba una de sus manos hasta mis piernas desnudas y las acariciaba, escuche la puerta abrirse...

Con sorpresa mire hacia allá, ahí parado estaba Scott mirándonos, sentí mi estómago revolverse al ver la mirada fría y ¿dolida? en sus ojos, Tyler dejó de besar mi cuello y miró hacia la puerta, se sorprendió al verlo.

—S-Scott...

Antes de que yo dijera algo él se dio la vuelta y se fue no sin antes azotar la puerta, yo trague duro, ¡Rayos!

—Deberías ir a explicárselo. —Dijo Tyler mirándome, yo asenti y sali corriendo por la puerta.

Toque la puerta de su habitación pero no contestó, la abrí, el no estaba ahí.

Baje rapidamente las escaleras, lo busque por toda la casa hasta que lo vi, él estaba fumando un cigarrillo en la terraza, al estar mirando al cielo no noto que yo estaba detrás de él.

—Scott... Lo que viste... No es lo que crees. —Se giró y me miro, en sus ojos había una mirada de desprecio, como la de la primera vez que nos conocimos...