Capítulo 17
Mike
Scott se levantó con una expresión de incredulidad al ver al chico frente a nosotros. Seguro cree que está alucinando, pero es que ni yo podía terminar de creer que su hermano estaba frente a nosotros.
—T-Troy —susurró Scott con los ojos muy abiertos, sentí mi corazón desgarrarse al ver tanto dolor y anhelo en su mirada.
—Scott —dijo su hermano reaccionando y corriendo hacia él, observé como se fundían en un cálido y gran abrazo.
Ambos sollozaron y se susurraron cosas, mi piel se erizó al ver a Scott llorando, tenía una pequeña sonrisa temblorosa en sus labios mientras tomaba el rostro de Troy en sus manos.
Me paré y me acerqué a Eddy, el cual miraba a sus hijos con una pequeña sonrisa mientras se abrazaban.
—Mike —dijo él como saludo mirándome, le sonreí levemente, no había cambiado tanto en estos años. Eddy era tan alto como Damien, tenía el cabello castaño y los ojos negros grisáceos, un color bastante extraño.
—Es un gusto verte —dije mirándolo a los ojos, él sonrió de lado y removió mi cabello.
—Según he escuchado eres el novio de mi hijo.
Abrí mucho los ojos y me sonrojé, él tenía una mirada pícara, solté una risa nerviosa y miré a Scott, estoy seguro de que él fue quien se lo dijo, ¿a quién más le habrá contado? Sonreí y asentí mirando a Eddy, él asintió levemente.
Scott me miró y sonrió, su hermano estaba observándome con mucha atención, me removí un poco incómodo por su fija mirada, Scott y Eddy se abrazaron y comenzaron a hablar, miré hacia otro lado.
—Mike, ¿cierto?
Giré el rostro con algo de sorpresa, Troy se había acercado y estaba mirándome fijamente, asentí nervioso.
—¿Troy? —pregunté sin saber que mas decir, él asintió y me miró de arriba abajo sin disimulo alguno.
—Scooootty, tu novio es muy lindo —Troy dijo eso frunciendo el ceño, pasé saliva, él hizo un puchero y agarró mis mejillas.
Lo miré confuso, parece enojarle un poco como me veo pero aun así no deja de apretujar mis mejillas y hacer pucheros.
Scott negando me alejó de él y lo miró con sorpresa.
—¿Cómo lo sabes? —preguntó mirándolo, luego miró a su padre y lo comprendió, Troy frunció aún más el ceño mirándome. ¿Qué le hice?
—¿Quieres quitarme a mi hermano, niño bonito? —preguntó entrecerrando sus ojos, me sorprendí, por eso está enojado, levanté ambas manos al aire y negué.
Fruncí los labios al ver como abrazó a Scott sin dejar de mirarme, sonrió con malicia cuando mi novio lo rodeó con sus brazos, hice un puchero mirando a Scott y me giré hacia Eddy.
—Iré a llamar a Damien y a Alex —dije sonriéndole, él asintió, caminé hacia las escaleras mirando de reojo como Scott y su hermano se daban amor.
Suspiré, ¿estoy celoso de su hermano? Lo que me preocupa ahora es, ¿se irán para Alemania? Si lo hacen se llevarán a Scott, estoy seguro. No quiero que lo alejen de mí.
Mis ojos se humedecieron con solo pensarlo, ya sé que le dije a Alex que lo comprendo y que sé que Scott regresará si se va, pero ahora que es muy probable que se vaya mi corazón duele.
—Creo que tu novio va a llorar...
Escuché como Troy le dijo eso con curiosidad a Scott, caminé con más rapidez hacia las escaleras sin mirarlos, Troy es muy perceptivo.
Toqué varias veces a la puerta de la habitación de Alex y Damien, este último la abrió mientras se abotonaba la camisa, me aclaré la garganta.
—E-Eddy y su hijo están aquí —dije bajando un poco la mirada, me di media vuelta para irme.
Miré hacia atrás al sentir a Damien agarrarme del brazo, sus ojos negros estaban puestos en mí.
—Alex —dijo él sin dejar de mirarme, pasé saliva y miré como Alex salía de la habitación tratando de arreglar su cabello, el cual estaba todo revuelto.
Él murmuró un "hmn" y después de sonreírme caminó hacia las escaleras tambaleándose un poco, arqueé una ceja, ni preguntaré que estaban haciendo.
—¿No vas a bajar? —le pregunté a Damien con sorpresa, él pasó un brazo sobre mis hombros.
—Claro que si —respondió mirándome, asentí mientras caminábamos hacia las escaleras. —Mike, perdóname si fui un poco duro contigo, a veces no puedo controlarlo —dijo deteniéndose y mirándome seriamente, le sonreí con tranquilidad.
Él se refiere a sobre como me habló hace media hora, lo comprendo. Aunque eso no es nada en comparación a como les habla y trata a otros que ponen triste a Alex.
—No importa —respondí alejándome y caminando, me detuve al sentir como me abrazaba por detrás.
—De verdad lo siento —dijo en voz baja, yo sonreí y dándome la vuelta lo abracé.
Gracias a Damien sé lo que significa tener un padre, me gusta que él nos proteja a Alex y a mí aunque sea de nosotros mismos, no puedo culparlo por hacerlo.
—Yo también quiero un abrazo.
Escuchamos el tono enfurruñado de Alex, segundos después él nos abrazó. Calidez, eso siento dentro de mí al estar con ellos.
—Eddy quiere verte —dijo Alex en un gruñido cuando nos separamos, Damien se rió y después de sonreírnos caminó hacia las escaleras para ver a su primo.
Miré a Alex con curiosidad, él estaba haciendo morritos mientras miraba a Damien irse.
No le agrada mucho Eddy, porque cuando viene no se le despega a Damien, todos sabemos que lo hace por molestar a Alex. Eso me suena conocido...
¡Troy! Él estaba haciendo lo mismo hace un rato, parece que es de familia.
—Debes estar muy feliz —dijo Alex sonriéndome esta vez, él se veía tranquilo.
—¿Debería? —pregunté sorprendido mirándolo con atención, ahora el que se sorprendió fue él, me tomó de la mano y caminó hacia el balcón al final del pasillo.
Miré las casas vecinas, él señaló la de Matt y Alexis que se veía desde aquí.
—Eddy compró la de al lado.
Abrí mucho los ojos y la boca al escucharlo, luego lo miré con incredulidad, él me sonrió, sonreí de oreja a oreja, en un arrebato de emoción lo abracé con mucha fuerza, él me correspondió, suspiré de alivio.
Seguí sonriendo cuando nos separamos, estaba feliz, muy feliz. Levanté la mirada al cielo azul lleno de nubes, cada vez me sentía más y más libre como ellas.
—Bajemos —dijo Alex tomándome de la mano, asentí mirándolo.
Mientras bajábamos las escaleras la mirada de Scott se encontró con la mía, él me observaba con preocupación, le sonreí con tranquilidad.
Todos nos sentamos en la sala, mientras los demás hablaban Scott se sentó a mi lado y tomó mi mano, levanté la mirada.
—Creo que me odia —le dije en voz baja mirando de reojo a su hermano, el cual no dejaba de mirarme, Scott negó sonriente y se acercó más a mí.
—Solo está celoso —dijo en mi oído, me estremecí por su cercanía y asentí lentamente.
—Scott... —lo llamé en un susurro, él me miró a los ojos. —Quiero volver a hacerlo —admití avergonzado, él sonrió aún más.
—Yo también —respondió susurrando, aparté la mirada con mis mejillas ardiendo.
—Que bello está el día, ¿no? —dijo Troy encantado caminando hacia nosotros y sonriéndome con burla, me dio un tic en una ceja.
—Sí, está hermoso —le respondí con una sonrisa, él frunció sus cejas y me miró con desafío.
—Troy... te ves muy bien, pensé que estarías más... —Scott se calló y se quedó pensativo.
—¿Depresivo? —preguntó Troy mirándolo, Scott asintió incómodo.
Troy quedó en coma por el shock de ser violado, incluso Scott quedó bastante mal después de lo que le hicieron, pero Troy se ve en perfecto estado, no parece que le haya afectado mucho estar dormido durante meses.
La expresión del hermano mayor de Scott se tornó sombría y se endureció, parecía otra persona. Una más triste y seria. Él miró con disimulo a su padre, cuando vio que seguía hablando con Damien y Alex nos miró.
—¿Por qué crees que caí en coma? —preguntó Troy con seriedad, Scott frunció el ceño y apretó los labios, entrelacé nuestros dedos y apreté suavemente su mano.
—Por el trauma... —dije al ver que Scott se había quedado en silencio, es algo difícil para él.
—No fue porque una zorra me violó, por Dios Scott, nuestra madre está loca. Ya estaba preparado para algo así o peor —Scott y yo nos sorprendimos al escucharlo, Troy se rió sin gracia alguna.
—Troy... —lo llamó su padre con cautela al escucharlo, pero Troy negó, sus ojos estaban llenos de lágrimas mientras todos lo mirábamos.
—¿N-No viste todas las botellas de vodka en el piso? —preguntó mirando a Scott, el cual agarró más fuerte mi mano y negó lentamente. —Mientras la zorra abría mi boca Nathaly me forzaba a beber, yo no podía moverme, antes me habían drogado...
Hasta a mí me llegó el dolor con el que dijo eso, Scott bajó la cabeza y cerró con fuerza sus ojos, su mandíbula estaba apretada, estaba luchando contra las lágrimas. Y no es para menos, me sorprende que Troy siga vivo, y Scott cuerdo. Años de sufrimientos y traumas, drogas, alcohol, violación...
—P-Pero todo eso ya quedó en el pasado, Nathaly no saldrá en un largo tiempo del psiquiátrico, papá me comenzó a dar terapia desde que desperté por eso no estoy loco, y nosotros viviremos con él —dijo Troy con una pequeña sonrisa y una mirada ilusionada, sentí mi corazón apretujarse al escucharlo, mis ojos estaban llenos de lágrimas al ver lo soñador que seguía siendo.
Pero no era solo un sueño, era la realidad; eso me hacía feliz ya que Scott sería feliz. Mi novio dejó que las lágrimas salieran y asintió.
Troy me miró y me sonrió, finalmente sentí que era una sonrisa sincera, me sorprendí y se la devolví.
—¡Troy!
Todos miramos hacia la puerta, Rose había llegado y estaba casi llorando, Troy le sonrió y ella corrió hacia él y lo abrazó con fuerza.
—M-Me a-asfixias —dijo Troy como pudo, Rose se separó de él y le sonrió apenada.
. . .
Miré a Snack perseguir una mariposa, me aparté el cabello mojado de la frente, miré hacia la piscina donde estaban los demás.
¿Cómo terminamos en el patio? Ah ya lo recuerdo.
Rose había venido con Alexis. Eso lo explica todo.
Es bueno relajarse un poco, todos estaban algo nerviosos, el juicio con Austin es en unos días.
Me reí al ver como Tyler empujó a Scott al agua mientras se reía malvadamente, pero luego llegó Damien y tiró a Tyler y a Troy.
Entré en la cocina y vi a Alexis atorándose con Doritos mientras Alex no lo miraba.
—Sé lo que haces, Alexis —dijo Alex sin girarse, Alexis se sonrojó.
—Nog hago nagda —respondió él inocentemente mirando como su cabello goteaba, masticó como una ardilla lo que había en su boca justo antes que de Alex se girara y lo mirara.
Me senté junto a él y comí de las papitas, Alex arqueó una ceja mirando a Alexis, sus labios estaban rojos por los Doritos.
—¿Si sabes que puedes comer, cierto? —preguntó Alex tomando una papa frita, los ojos de Alexis brillaron y comenzó a comer encantado.
Alexis tiene la costumbre de comerse lo que Alex cocina antes de que esté listo, por lo que Alex siempre lo saca de la cocina, entonces el tiene el pequeño trauma de que Alex no lo deja comer, así que lo hace a escondidas.
Alex y yo miramos con atención lo que él hacía, tomó dos rebanadas de pan, les puso salsa picante de los snacks, sobre eso puso papas fritas, doritos y papitas de queso, puso la otra rebanada de pan y se llevó su extraño sándwich a la boca, la expresión de satisfacción que puso también era extraña.
Me sonrojé y aparté la mirada de él. ¡Pensamientos sucios abandonen mi mente!
—¿Estás teniendo un orgasmo, Alexis? —preguntó Alex arqueando sus cejas, Alexis le guiñó un ojo...
—Oh si nene...
Me reí, solo él le guiña un ojo y le dice eso a un sándwich.
—¿Reunión de ukes? —preguntó Kate con emoción entrando a la cocina, todos la fulminamos con la mirada, ella se rió y se tiró en un banquillo y miró con amor el sándwich de Alexis.
—No, no y no —dijo Alexis gruñendo, Kate hizo un puchero y se preparó un sándwich igual.
Miramos por las puertas transparentes como Troy perseguía a Adrian y a Scott con una pistola de agua, miré a Kate, ella veía sorprendida a Scott, la imagen que tenía de él es la de un homofóbico, la misma que teníamos todos.
—¿Ustedes nunca se han topado con un homofóbico? —le preguntó ella a Alex y a Alexis.
Ahora que lo pienso nunca he visto que alguien los discrimine, aparte de uno o dos comentarios de Scott.
—Pues... Aquel chico en la universidad —dijo Alex recordando y mirando a Alexis, el cual asintió y se comió una papa con rabia.
—Ese idiogta —respondió Alexis masticando enojado. Kate y yo los miramos expectantes, Alex nos miró.
—El primer día en la universidad, un chico se enteró de que somos gays, nos dijo cosas muy feas... —dijo Alex encogiéndose de hombros, fruncí el ceño.
¿Quién en sus sano juicio los insultaría? Miré de soslayo a Matt y a Damien en el patio...
—¿Y qué pasó después? —preguntó Kate con intriga.
—Al día siguiente todos en la universidad lo sabían, primero fue un homofóbico, luego eran ocho o más que nos insultaban... —dijo Alexis mirándonos después de chupar sus dedos, él lo dijo muy tranquilo.
Me sentí mal por ellos, apenas la primera semana y tantas personas los molestaban.
—Pero, dos días después Damien y Matt se enteraron... —dijo Alex tomando una papa frita, Kate se acercó mucho a él y lo miró con fascinación esperando a que dijera más. —Todos esos homofóbicos visitaron al dentista esa tarde... —continuó Alex con una sonrisa sádica, Alexis sonrió de igual manera.
—Los usaron de sacos de boxeo —dijo Alexis lamiéndo un dorito, Kate suspiró con felicidad, arqueé una ceja mirándola, seguro lo está imaginando todo.
—Y Damien se metió en la oficina del director y les mandó un mensaje a todos en la universidad... —recordó Alex sonrojándose, Alexis se rió.
—Dijo que si se metían con su gatito iban a conocer a Rompe —dijo Alexis riéndose y mirando a Alex con picardía, el cual miró a otro lado.
—¿A Rompe? —preguntó Kate con curiosidad, Alexis se acercó más a Alex.
—El Rompe Madres de Damien, es un bate de metal —aclaró Alexis con una gran sonrisa, me llevé una mano a la boca para no reírme. "El Rompe madres de Damien"
Alex infló sus mejillas y lo miró mal, Kate se rió y miró a Alexis.
—¿En serio lo llamaba así? —preguntó con burla, Alexis asintió con una sonrisa.
—Oh si, lo llevó varias veces a la universidad, hasta tiene un lema —dijo Alexis fingiendo mucha seriedad.
—Alexis —lo llamó Alex, lo miramos, su rostro estaba muy rojo.
—Decía: "Molesta a mi gatito blanco y te meteré este bate por el a...
—ALEXIS —lo interrumpió Alex mirándolo mal, Alexis sonrió con inocencia.
—Ustedes ya saben lo que sigue —dijo Alexis mirándonos, nosotros nos reímos y asentimos. Eso es muy tierno, y tan Damien.
Lo miré, él y Matt estaban afuera formando un complot para atacar a Eddy y a Fred.
—Vamos a divertirnos...
Nos levantamos y seguimos a Alexis al patio.
—Oigan, ¿recuerdan al Rompe Madres de Damien? —preguntó Alexis en voz alta y con malicia, todos se rieron.
—Está en el sótano —respondió Damien sonriendo y acercándose a Alex, lo cargó en contra de su voluntad y se lanzó con él a la piscina.
Sonreí y entré yo también, busqué a Scott con la mirada, sentí que algo me jalaba el pie, me reí y lo miré debajo de mí.
Me sumergí y le saqué la lengua, él me sonrió y se acercó más, sus ojos se veían hermosos bajo el agua cristalina, me alejé cuando iba a besarme, él hizo un puchero y me siguió.
Me agarró el pie deteniéndome, quise reírme pero contuve la risa, él se acercó y nos besamos, cuando no pude aguantar más subí a respirar.
Una pelota de voleyball golpeó mi cabeza, miré de donde vino, Tyler silbando miró a los lados, luego me sacó la lengua y salió corriendo tras Kate, me reí, que maduro eres Tyler.
Miré todo el cabello de Scott tapando sus ojos, se lo aparté y me encontré con su mirada, puse mis manos en sus hombros y miré alrededor, como no nos estaban mirando me acerqué y le di un besito.
Él puso una rara sonrisa, mis mejillas se calentaron al sentir su mano en mi miembro.
—S-Scott... —susurré con advertencia, él siguió acariciándome.
Una gran pelota plástica de colores impactó contra nuestras cabezas interrumpiendo lo que sucedía, me sonrojé más que nunca al ver que fue Damien quien la había lanzado. Él es experto en saber cuándo está pasando algo pervertido.
—No tientes contra mi paciencia Scott —dijo Damien en voz baja nadando cerca de nosotros, entrecerró los ojos y fue como un tiburón tras Alex el pescadito, Scott se puso pálido.
—¿A qué se refiere? —pregunté con interés, Scott se rió un poco nervioso.
—Bueno... ¿pensaste que Alex estaba molesto por lo que hicimos? —preguntó mirándome, asentí lentamente. —Y eso que no viste a Damien —dijo con cautela, lo miré confundido. Damien no estaba enojado.
—No lo entiendo —dije frunciendo el ceño, él miró alrededor y luego se acercó más a mí, abrí mucho los ojos al ver que el agua se había llevado un poco de lo que parecía ser maquillaje en su mejilla izquierda, dejando a la vista un pequeño moretón. —¿Damien te golpeó? —pregunté preocupado, él asintió lentamente.
—Me dio un puñetazo porque lo hicimos aprovechandonos de que él dormía. Cuando fuiste a hablar con Alex, me dijo que si volvía a usar mi amiguito contigo lo cortaría mientras duermo, me explicó detalladamente como lo cortaría y lo disfrutaría —respondió Scott bajando la voz, abrí mucho los ojos pero no pude evitar reírme un poco al ver terror en su mirada al decir lo que le haría Damien, Scott me miró mal, le sonreí.
—Duerme con un bóxer eléctrico —le aconsejé como buen novio, él tragó duro. —Ya sabes como en esa pelícu...
—Mike —me interrumpió con súplica, le sonreí con calma y lo abracé.
—Entonces puedes comprar uno de plástico —dije en voz baja, él suspiró pesadamente y me abrazó. —Preferible negro... y extra-grande... —añadí riéndome, él gruñó.
Solo intento que no se tome tan en serio la amenaza de Damien, aunque no dudo que se lo cortará si lo hacemos, pero él no tiene porqué enterarse si lo hacemos o no...
—Apenas te entra el mío y quieres uno más grande.
Abrí mucho los ojos y mi rostro enrojeció al escuchar su susurro, me alejé un poco, él tenía una sonrisa burlona. ¿Qué quiere? Esos lugares son pequeños...
—Haz ganado esta batalla —dije rindiéndome y fingiendo que me dolía el corazón, salí de la piscina y tomé una pistola de agua, él salió sin dejar de sonreír. — ¡Pero no ganarás la guerra! —exclamé como luchador tirándole agua en el rostro, él corrió y tomó otra pistola.
Salí corriendo y mirando hacia atrás le disparaba, rodé como un espía por el húmedo césped y esquivé uno de sus tiros.
—Eres bueno —dijo él asombrado mirando aquel movimiento especial. —Pero no lo suficiente —Añadió dando una gran voltereta y disparándome, me dio justo en la cara.
Me aparté el cabello con rudeza y lo miré. ¡Esto es guerra!
—No sabía que eras porrista, mi amor —dije con burla mientras corría, aunque se vio súper sexy haciendo eso.
Él se detuvo y sacudió sensualmente su cabeza para secar su cabello, abrí la boca encantado al ver que atractivo y sexy era, él se pasó una mano por el cabello y otra por su pecho desnudo, miró al cielo y se relamió los labios, casi babeo.
Terminé tropezando y cayendo como un saco de papas y de cara, me giré, miré con terror al cielo azul y traté de pararme, mis piernas temblaban por lo excitante que fue ver a Scott.
—¡Nooo! —chillé cuando él se subió sobre mí dejándome sin escapatoria.
—No subestimes el poder de una porrista —dijo él agarrando mis brazos, me reí, eso no pegaba con su voz grave.
—Me equivoqué —dije con un tono de rendición, él sonrió triunfante. —No eres una porrista —dije con pasión, entreabrió sus labios con sorpresa y me miró con intensidad.
—¿Entonces que soy? —preguntó echando su cabello para atrás en una sacudida dramática.
—Eres un hombre... mitad vampiro —respondí mirándolo apasionadamente subiendo una de mis piernas en su espalda.
Él mostró sus dientes y los clavó suavemente en mi cuello, grité por ayuda.
—T-Te amo vampiro, ¿p-por qué me m-matas? —dije lastimosamente, mi corazón latió rápidamente y sentí mariposas en mi estómago, sentí el corazón de Scott acelerarse.
—No te mato, también te amo. Te hago vampiro, para que no me abandones jamás —respondió después de alejarse, me relamí los labios, los dos nos quedamos mirándonos. Tuve un escalofrío cuando acarició mi mejilla, ¿realmente lo dijimos jugando?
No.
Yo no. Pero, ¿es amor lo que veo en su mirada?
Acerqué mis labios a los suyos y lo besé lentamente, él me correspondió con suavidad, con sentimiento. Podía sentir como nos transmitíamos lo que sentíamos, sus manos rozando con mis brazos, mis piernas junto a las suyas, sus labios junto a los míos, todo expresaba como nos sentíamos, hasta que llegó Damien y nos tiró un balde de agua fría, lo fulminamos con la mirada temblando del frío, él sonrió inocentemente.
—¡Niños vengan a comer!
Nos separamos al escuchar Alex hablar a lo lejos, Damien caminó hacia él, acaricié el rostro de mi novio, él me miraba con felicidad, le sonreí y ambos nos paramos del césped.
Agarrados de la mano caminamos hacia aquel pequeño mortal que nos llamaba, miré a los demás, ellos fingían no haber visto lo que pasó, suspiré y mi vampiro y yo nos miramos y sonreímos...
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