SoHyun se había animado a intentar caminar un poco, estar tanto tiempo acostada estaba enfermándola más. La castaña caminaba por el pasillo en compañía de TaeHyung cuando JiEun llegó con Ara, ésta fue directo a su madre abrazándola, su cabeza se recostó de su abdomen. SoHyun acarició su cabello besando su frente.

—Hola, cielo. ¿Todo bien en la escuela?

Ara no respondió, sólo suspiró sin soltarla. SoHyun miró a su hermana y ésta no supo que decirle.

—Creo que Ara debería acompañarte a tu habitación, iré con JiEun a la cafetería—propuso Tae— ¿Quieres algo de allí, Ara?

La niña se encogió de hombros. Madre e hija quedaron a solas, SoHyun la alejó un poco de su cuerpo tomando su mano caminando despacio, le habían quitado la intravenosa haciéndola sentir más cómoda.

— ¿Te ayudo con tu bolso?

—No puedes cargar peso.

—No me importa cargarlo si es por ti.

—Omma, quiero que vuelvas a casa conmigo, podemos turnarnos con el tío Tae o la tía JiEun—evaluó su reacción. SoHyun se detuvo recogiendo su cabello liso en una trenza—Omma, no cambiemos el tema.

—No lo estoy cambiando.

—Deja a appa.

—Ara.

— ¿Por qué te niegas a hacerlo?—se alejó—Estoy sufriendo con él allí...

—Ara, baja la voz.

— ¡No quiero!—los que estaban cerca miraron la escena— ¡Quieres vivir con un monstruo y esperas que yo lo haga!

— ¡Ara!

Ambas se miraron fijamente, Ara contenía las lágrimas y SoHyun intentaba explicarle sin éxito alguno, aunque no había nada que explicar.

— ¡Estoy sufriendo, omma!, ¡Quiero ser normal de nuevo y no sentirme asfixiada!, tengo miedo de que mueras como la madre del doctor Jung.

—No digas eso, cielo, no voy a morir...

—Morirás si no te alejas de DaeHyung—usó su nombre de manera fría— ¡Ya no sé cómo decírtelo!—le dio la espalda caminando hacia la habitación de su madre.

SoHyun tragó con dificultad sintiendo un ligero dolor en sus costillas, caminó despacio sintiéndose la peor madre de todas...y dolía más que un golpe.

▪︎▪︎▪︎

Hoseok había ido al hospital casi al anochecer, poco antes del anochecer para ser exactos, le extrañó llegar a la habitación de SoHyun y no encontrarla en su camilla. En su lugar, JiEun estaba doblando una de las cobijas.

— ¿Dónde está SoHyun?

—En la azotea.

— ¿Por qué está allí?, ¿Por qué la dejaste ir sola?

— ¿TaeHyung no te ha contado?

— ¿Contarme qué?

Hoseok estaba totalmente perdido, suponía que nada bueno había pasado.

—Vine con Ara luego de que saliera de la escuela, ella y SoHyun discutieron en el pasillo, Ara le gritó, SoHyun se sintió o se siente miserable y...el ambiente sigue tenso—suspiró sentándose en la camilla—Ara quiere que ella deje a DaeHyung, explotó por primera vez.

Hoseok recordó lo hablado en la escuela sobre su sueño. Respiró profundo con cierto cansancio, ¿Por qué todo debía ser tan complicado?, dejó el maletín en la silla para luego preguntar:

— ¿Dónde está Ara?

—Con TaeHyung, se quedaría con él esta noche.

— ¿SoHyun tiene mucho rato en la azotea?

—Más o menos. Me dijo que quería estar sola, ¿Hablarás con ella?

—Lo intentaré.

▪︎▪︎▪︎

El sol estaba descendiendo y Moon SoHyun lo veía ocultarse desde la azotea del hospital. La brisa era fuerte allí revolviendo su cabello castaño, algunos mechones se habían escapado de la coleta rozando su rostro, la joven de veintinueve años tenía sus brazos apoyados del barandal, en su mente se repetía la escena tan dolorosa con Ara, desde el cambio de DaeHyung se preocupó que estuviera tan callada y distanciada, debía sacarle las palabras con una cuchara, ahora Ara le había gritado lo que quería no sólo para ella, sino para ambas.

Se sentía como una terrible madre.

¿Por qué te niegas a hacerlo? Estoy sufriendo con él allí.

Respiró profundo llevando sus manos a su cabeza.

¡Quieres vivir con un monstruo y esperas que yo lo haga!

El nudo en su garganta se hizo más fuerte. La forma en que su hija la miró era como la de un animal sufriendo pidiendo clemencia, nadie entendería lo doloroso de la situación, quizás una madre podría comprenderlo.

¡Estoy sufriendo, omma!, ¡Quiero ser normal de nuevo y no sentirme asfixiada!, tengo miedo de que mueras como la madre del doctor Jung.

Sus costillas dolieron, no por los golpes, era su respiración pesada que lo hacía doler. Se agachó quedando de rodillas con sus manos aún en el barandal, ¿Qué demonios estaba esperando?, debía ser honesta consigo misma, el trastorno de DaeHyung había dañado terriblemente el matrimonio, la familia, la relación, ¡Todo!

Morirás si no te alejas de DaeHyung, ¡Ya no sé cómo decírtelo!

Jung Hoseok había llegado a la azotea. Veía a SoHyun agachada allí pero no podía ver su rostro ya que sus brazos levantados lo cubrían, ella estaba sufriendo.

—Omma, ¿Estás bien?

La mujer de cabello oscuro se encontraba de rodillas frente al barandal de las escaleras, sus manos estaban apoyadas allí y se aferraban con fuerza. El niño acarició su cabello con preocupación.

—No estoy bien, Hobi.

Ese era un apodo que le había colocado.

— ¿Te duelen los golpes de appa de nuevo?

Ella suspiró. ¿Cómo explicarle algo tan complejo a un niño?, su madre no se movió ni un segundo, su voz era un tanto apagada, como si arrastrara las palabras, Hoseok no se percataba de que su rostro reflejaba dolor. No necesitaba golpes físicos para sentir dolor.

— ¿Puedes dejarme sola un momento?

—Omma.

—Necesito un momento a solas, Hoseok.

—Tu hermana me dijo que estabas aquí—interrumpió. SoHyun no se movió, sólo abrió sus ojos— ¿Estás bien?

—No, no lo estoy.

Al menos ella lo reconocía. Hoseok apoyó sus brazos del barandal mirando hacia abajo donde la distancia del suelo era mortal para cualquiera. Bajó la mirada hacia SoHyun, sus ojos fueron a sus manos que se aferraban al barandal. Sabía que su madre y SoHyun eran muy diferentes pero la situación era tan similar a la suya que podía entender lo que pensaba o sentía, mejor dicho, podía comprenderla.

—Supe lo que pasó con Ara, hoy la vi en la escuela, creo que a veces le incomoda que deba anotar todo lo que me dice—SoHyun tragó con dificultad—Le di un consejo para expresarse mejor...

—Soy una terrible madre, Hoseok.

—No lo eres.

— ¿Por qué siento que estoy sola incluso cuando tengo el apoyo de mi hermana y mi cuñado?—su voz flaqueó un poco—Tengo miedo, tengo mucho miedo—sollozó.

—Mi madre también lo sentía—fue imposible para él no pensar en esa mujer. SoHyun sollozaba a su lado, el chico colocó su mano sobre las suyas, ella levantó la mirada vidriosa por las lágrimas, los ojos del pelinegro mostraban comprensión, calidez y...algo parecido a seguridad, SoHyun no supo explicar ese sentimiento. ¿Qué era eso? Hoseok se agachó mirando fijamente sus ojos—Mi madre sentía mucho miedo, siempre lo sintió, no permitas que el miedo te diga como vivir, SoHyun.

La castaña no supo que decir, sus lágrimas insistían en salir, recostó su cabeza de su hombro apoyando su frente en él. Hoseok tomó el atrevimiento de rodearla con sus brazos, permitió que ella llorara lo que quisiera, pues a veces lo mejor que se podía hacer era llorar.

SoHyun correspondió el abrazo deteniendo el llanto unos minutos, su corazón no dolía y sus costillas tampoco. Suspiró de una manera que era de alivio, recostó su cabeza en su hombro sintiendo una extraña calidez que no sentía desde hace dos meses.

¿Acaso TaeHyung tenía razón?, ¿Y si Jung Hoseok le gustaba?