Es la madrugada y no puedo dormir. Estoy paranoica. Desde que mataron a Howard y a Lea, me siento bastante insegura. Miro a todas partes a cada segundo. Es imposible dormir por más de dos horas. Me pregunto ¿quién querría matar a James y a Lea?

James, era un buen hombre. Aunque algo terrible fue la violación de Amelie, su propia hija. Ahora bien, es un muerto y no hablaré mal de él.

Por otro lado está Howard, mi querido exesposo. No es el mejor hombre y nunca lo será, no obstante me derretía cada vez que lo veía. Creo que una excepción fue cuando lo vi en esa cama con Vicky. Me partió el alma. Él era mi esposo, se suponía que me era fiel. ¡Por qué tuvo que engañarme!  Yo lo amaba con todo mi corazón y alma. Yo daba todo por él. Le di 2 años de mi vida a ese hombre. ¿Cómo pude haberlos desperdiciado?

Me dispongo a tomar café y voy por él. Hace bastante frío. Al voltear al reloj ya son las 2:30am. Mis ojos no descansan, siento su peso a cada parpadear. Camino alrededor de la casa, se encuentra completamente a oscuras. Al parecer cada noche de esta semana se ha estado yendo la luz. En todo el silencio escucho a alguien llamar a la puerta, al principio me asusto, pero decido ir a ver quién es por la ventana. ¡Por Dios! Son apenas las 2:30am. 

Veo por la ventana a un hombre que se confunde entre la niebla y viene acompañando de una mujer. Levanta su cara. ¿Qué hace Daniel a esta hora en mi casa? Abro la puerta y él entra con rapidez.

—Daniel, ¿qué haces aquí? —pregunto al detective.

Amelie se encuentra junto a él. ¡Genial! Con lo mucho que me la soporto. 

—Venimos a hacerte unas preguntas sobre Howard —responde Daniel.

— ¿Cómo supieron que estoy despierta? —pregunto firme. 

—Howard me habló de tus problemas de insomnio —contesta Amelie con una cara un tanto desagradable. Se quita la capucha. 

—Vengan al sofá —ofrezco de buena manera. 

Daniel luce cansado y sus ojeras se ven a kilómetros de distancia. Por su lado, Amelie luce igual que siempre, perfecta.

— ¿Hay algún motivo por el cual Howard quisiera matar a Harrison? 

—No, la última vez que vi a James fue en el divorcio y Howard igual. Recuerdo que acordamos dividir todo a la mitad. Sin embargo, Howard se fue de la casa esa misma tarde. Harrison era el único que sabía de nuestro divorcio, eso pasó 3 días antes de la muerte de James. 

— ¿Algún comportamiento extraño de parte de Howard o Harrison que recuerde? —cuestiona Daniel. 

—Pues sí, recuerdo que el día del divorcio volví a la oficina de James por mi bolso y escuché que hablaba solo. Era algo sobre...conquistar a Amelie, por eso mandó a hacer la prueba de ADN, quería darte un detalle romántico. 

—Y ¿Howard alguna vez dijo algo sobre Lea? —pregunta Amelie. Daniel desvía la mirada. 

—Deberías saber esto Amelie. Howard odiaba a Lea por tu culpa. Howard aún te amaba y odiaba a Lea por haber intentado, ya sabes, matarte —digo y mis palabras parecen revelar algo a Amelie. 

—Claro —contesta Daniel—, incluso coincide con las fechas.

— ¿Crees que Howard fuera capaz de asesinarlos? —pregunta Amelie. Su voz es dudosa y sus ojos desprenden tristeza.   

  —Creo que Howard es capaz de cualquier cosa.