Prólogo

¿LA LIGA?
¿QUÉ?

Buenas, me llamo Blue y junto con muchos niños y adultos, vivimos en algo así como un orfanato. Papá dice que el mundo ahí fuera ya no existe, que se fue, que se disipó, pero eso no es todo, que va. Todos y todas aquí tenemos superpoderes.

¿Mola no? Pues no. Estamos divididos en 3 categorías:

Los principiantes; como su nombre indica, son los que apenas comienzan con sus entrenos y poderes. En su mayoría niños pequeños.

Los avanzados: adolescentes primerizos  y así hasta los diecinueve.

Y luego están los súper, los hijos de puta que son la releche. Tienen un dominio de sus poderes de un noventa y nueve coma nueve por ciento. Se pasan todos los días entrenando y luchando entre ellos, suelen ser gente de diecinueve, dieciocho si eres muy bueno, son La liga.

Yo los observo siempre desde lo más alto de la cuadra del coliseo, porque no puedo estar ahí. Papá dice que yo no encajo en ninguna categoría y que por eso debo quedarme en mi cuarto todo el día. Tengo poderes por supuesto, veinte de los doscientos que me quedan por descubrir. Parckson me llama su máquina de destruir guerrillas. Por favor, ni que esto fuera Frankenstein.

Todos aquí nacemos con poderes y, los que no, van como comida a los perros. No literalmente pero sí los matan, son una amenaza para el resto, ya descubriréis el porqué. Todo el mundo, es decir mi padre, me dice que no.

Pero algún día estaré ahí abajo, con los grandes.

4 años más tarde ...

—Algún día Blue, tú estarás sentado en esta silla —Se recostó sobre ella y levantó la cabeza para exhalar todo el humo de su cigarro, dejando que mechones de su pelo negro con una mecha fucsia se deslizaran por su frente. —. Hijo mío...

Levanté la mirada y clavé mis ojos azules en él. Hundiendo mis oscuras cejas.

—No soy tu hijo. —mascullé.

Llevó sus dedos a su entrecejo volviendo la cabeza a su posición normal, dejando escapar un soplido sonriendo con malicia.

—Tienes diecinueve años Blue, es hora de que aprendas a gobernar.

Apagué mis oídos, literalmente, despertando mi aura de color azul, de ahí mi nombre. Puse mis ojos azules en blanco desviando mi mirada.

En medio de mi campo visual apareció él. Diciendo algo que no podía escuchar. Y él lo sabía.

Mi poder de apagar mis sentidos, solo por unos minutos y no podía hacerlo con el tacto.

Él cogió mi mandíbula y alzó mi cabeza.

—¿Qué? —De nuevo sonido, dejé escapar mi aura aún más intensa y arrugué mis cejas.

Me soltó a mala gana al ver mi poco interés en la conversación. Dio media vuelta de nuevo a la silla acompañado de una nube de humo.

—Vete a tu cuarto. Ya mandaré a alguien para que te recoja y puedas empezar tus entrenamientos del día.

Me levanté mirándolo con ira. Salí de ahí en dirección a mi cuarto. Caminé por el pasillo pasado mi mano por mi pelo y este volvió a su color negro de siempre.

Estampé la puerta de mi cuarto y acerqué mis auriculares inalámbricos con mi telequinesis, me encerré en mi baño y la canción "Don't Stop Me Now" de Queen empezó a sonar mientras yo empezaba a prepararme.

Yo lo llamaba mi aura pero en realidad era algo más complicado. Cuando hacía uso de mis poderes o cambiaba de humor bruscamente mi pelo se volvía azul, y este parecía estar moviéndose por el viento. Mis ojos tornaban a un azul brillante y alrededor de mí se creaba algo así como una fina capa de niebla azul.

Pero yo lo resumía en mi aura. Parckson no era el padre biológico de ninguno, ni mío. Todos estábamos ahí porque somos supervivientes de un apocalipsis. Yo soy así como el único distinto a los demás y por eso estaba aislado del resto.

Se podría decir que el más poderoso ahí, era como su trofeo que no dejaban relucir. El tema del apocalipsis ya lo tocaremos en otro momento. No os quiero aburrir la primera vez que hablamos.

Sonreí con el cepillo de dientes en la boca, al terminar de enjuagarme me dirigí a la zona del dormitorio, a por algo de ropa. Empecé a rebuscar en la montaña de ropa sucia algo que me sirviera, agarré una camisa gris pero enseguida descarté esta opción. Al final opté por una camiseta negra y unos pantalones de deporte al igual negros. Me quité la ropa que llevaba y me puse la nueva.

Había días en los que no tenía ni fuerza para levantarme de la cama .

Dejé de oír la música y del susto mi aura dio la cara, haciendo que la cara de la pobre Evangeline se iluminara de azul.

—¡Evangeline! Casi me matas del susto diablos. Por favor, toca la puerta antes de entrar —Llevé mi mano a mi pecho sintiendo mi corazón latir veloz y solté todo el aire que mis pulmones me permitieron.

Evangeline era una señora de avanzada edad, muy alta y que siempre recogía su cabello gris en un moño alto. Creo que es suficiente información. Ella no me trataba en nada específico. Por ejemplo, Beatrix era mi entrenadora y supervisora de que todos mis poderes fueran bien. Mi padre, además de tocarme las narices, se ocupaba de ser mi entrenador privado en lo que a boxeo y gimnasio respectaba. Y bueno, Evangeline no hacía nada. Solo venía cada año bisiesto, es decir, casi nunca; cuando Beatrix no podía acudir.

—Señor Blue, es la hora de su entrenamiento. —se mantenía firme con los brazos cruzados por debajo de su pecho y me miraba fijamente.

Conque a ella había mandado mi padre para que me llevara. Ya le valía, en las comidas de superiores no hacían más que llamarla Bruja amargada. Que yo no niego ni justifico nada, pero las cosas como son.

—Vale, vale. Ya voy, gracias —Recuperé los cascos y apagué la música, pero unos hombres de negro entraron y cerraron la puerta haciendo tapón en ella.

Los miré desconcertado.

—Eh, eh ¿De qué se trata esto? —pregunté muy nervioso y asustado, no era para nada lo común.

Evangeline inclinó la cabeza y los hombres se empezaron a acercar a mí, con un objeto puntiagudo.

—¡Eh, alejaos de mí! —exclamé, ahora sí que sí. Levanté la mano izquierda empezando a crear una bola de energía para estar a la defensiva por si había que llegar a la fuerza. Mi pecho comenzaba a subir y a bajar muy rápido. No entendía nada.

—Blue, eso no te conviene. Créeme —Se descruzó de brazos y se incorporó quitándose del medio. —. Señores.

—¡Ni se os ocurra hijos de puta os puedo hacer mucho daño! —Mi aura se estaba enfadando mucho y yo a entrar en pánico.

Uno de los hombres se adelantó y me inmovilizó por detrás poniendo su brazo sobre mi clavícula.

—No, no, no. ¡Espera por favor! —rogué y di una patada al aire pero eso no me sirvió de nada, porque el hombre inclinó mi cabeza y mi pelo negro por encima de las orejas no me dejaba ver nada.

Seguía intentando liberarme pero ese hombre era más fuerte que yo, y el miedo comenzó a aturdirme.

—Blue, te vas a hacer daño. No luches contra mis muchachos. —Evangeline seguía con su tono sereno, cruzó los brazos por debajo del pecho y se mantuvo observadora.

Ya era tarde. Sentí la aguja clavarse en mi cuello.

¿Qué coño me habían insertando? Me comenzaba a marear mucho.

—¡No ganarás esto! —grité. Evangeline, como si tuviera la culpa. Se puso delante de mí con su pose de antes, yo le escupí con mis últimas fuerzas —. Podéis drogarme pero no ganaréis esta guerra —Mis ojos se acabaron cerrando y ese hijo de puta me dejó caer al suelo, como si no valiese nada. Mi mente se apagó por unos momentos.

Que en realidad fueron horas .

—¿Dónde estoy? —Fui abriendo los ojos poco a poco, y mi voz fue recuperando fuerzas.

—Estás en tu sala de entrenamientos de siempre, Blue.

¿Qué demonios era todo esto?

Giré la cabeza y vi a Evangeline pasar por mi lado para luego sentarse enfrente de mí.

—¿Qué coño me habéis hecho? —No conseguía vocalizar bien por la anestesia, o lo que fuera que me hubiesen clavado. Además, tenía que entornar los ojos por la cantidad de luz que había ahí.

—Nada Blue. Lo que a todos los de La Liga. Un simple tatuaje en el cuello para indicar que habéis ascendido a La Liga.

¿La liga? ¿Había pasado a La Liga? Significaba eso que podría estar con el resto de gente de mi edad. ¿De verdad que había logrado mi propósito tan pronto?

Debéis de estar flipando tanto como yo.

—¿Qué?

....

Hola , espero que os haya gustado este primer capítulo y que sigáis con la historia .

De todas formas aquí os dejo un esquema de cómo son los tatuajes de cada facción ;)

Meme time 🥁🥁