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AU diferente. Juimonos.

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Yoongi nunca fue del tipo que se enamoraba fácil, pero era inevitable si era Kim Seokjin.

La escuela era enorme y había tantas personas como habían hormigas en el agujero que hizo Namjoon junto al árbol del patio interior, así que era imposible que conocieras a todos, que recordaras la mayoría de los rostros.

En el caso particular de Yoongi, recordaba el rostro de Namjoon, porque era su mejor amigo y hablaban diariamente desde que estaban en pre-kinder; también recordaba el rostro de Jimin, porque era su hermano adoptivo y vivían en la misma casa.

Y, entonces, recordaba el rostro de Kim Seokjin, porque era su compañero de asiento, uno de sus amigos más cercanos, y su crush de toda la escuela. Y lo había sido desde que habían entrado a la secundaria.

Yoongi había hecho las pases con el hecho de que le gustaba otro chico hacía mucho tiempo, lo que quizá era demasiado problemático porque aceptar sus sentimientos los hacía más reales de lo que le gustaría. Y entonces Kim Seokjin era la persona que le gustaba y Yoongi estaba muy jodido al respecto.

Seokjin no era popular como lo era, quizá, Kim Taehyung, su hermano mayor, apuesto, presidente del consejo estudiantil, yada, yada, yada; pero era bastante conocido porque era 1). Muy guapo también, 2). Muy inteligente, también, 3). El hermano de Kim Taehyung, básicamente, y 4). (Pero no menos importante), era el editor principal del periódico estudiantil.

Y aunque pensarías que nadie lee el periódico estudiantil, y para años anteriores, tendrías razón, desde que Seokjin había entrado como parte del equipo, era principalmente la cosa más vendida en la escuela después de la pizza que parecía hecha de caucho, pero que todo el mundo amaba, de la cafetería.

Porque Seokjin sabía cosas y el periódico estudiantil era un nido de chismes.

Así que, si querías saber algo, solo lo consultadas con el periódico estudiantil.

La cosa era que el periódico nunca se desarrolló en una trama dramática como Mean Girls o Confesiones de una típica adolescente (o sea, no se desarrolló a lo Lindsay Lohan), porque Seokjin era muy meticuloso, era extremadamente cauteloso con sus fuentes y sabía guardar secretos.

Entonces aparecerían chismes en la portada pero nunca sabrías quién era quien, solo sabrías que era cierto porque alguien te lo confirmaría (porque alguien siempre sabría), y pasarías la hora de almuerzo intentando descifrar de qué persona o personas se estaba hablando.

Iba desde alguien que fue descubierto besándose con otro alguien en las escaleras del ala B, hasta tal maestro y tal maestra que se quedaban en horario extra para fumar marihuana en el estacionamiento.

A estas alturas ya se habían dejado de preguntar cómo era que Seokjin sabía y cómo era que se salía con la suya. Entonces dudarías de su veracidad hasta que te enteraras de que el maestro de biología y la maestra de inglés habían sido despedidos por conducta inapropiada y de repente todo tenía sentido.

Sin embargo, a pesar de toda su fama en la escuela, Seokjin no era popular porque, básicamente, nadie sabía que era Seokjin.

Y aquí está el detalle que Yoongi estuvo evadiendo mucho tiempo. En realidad, nadie notaba la existencia de Kim Seokjin y realmente nadie a demás del equipo de redacción sabía que el famoso editor era el hermano menor de Kim Taehyung y que no tenía sentido de presencia.

Nadie, excepto Min Yoongi, que se había enamorado tontamente de Seokjin desde la primera vez que entró al aula y tartamudeó su nombre en presentación; que había visto sin querer sus notas de redacción y que se sentaba junto a él todos los días durante los últimos dos años y le sonreía de la manera más brillante cuando decía buenos días.

Habían sido compañeros de asiento un largo tiempo y eran algo así como amigos ocasionales. Solo que Seokjin no tenía amigos o eso parecía y entonces Yoongi se sentía un poco especial porque a veces almorzaban juntos en el aula y a veces caminaban juntos hacia la salida mientras hablaban del próximo trabajo que tendrían que hacer. 

Yoongi estaba bien.

Estaba bien con el hecho de saber el secreto de Seokjin y estaba bien con que Seokjin fuese la persona que le gustase. Estaba bien con ser la persona a la que Seokjin acudía para pedir ayuda de vez en cuando porque no sabía a quién más acercarse y estaba bien con ser solo su amigo.

Estuvo bien hasta que un día vio de casualidad a Seokjin salir enojado del pequeño cuarto de edición del periódico estudiantil que estaba junto a los baños del primer piso, lo vio correr tan rápido que no podría alcanzarlo incluso si lo intentara y luego estuvo bien hasta que se enteró de que el nombre de Seokjin había salido en el periódico.

Habría estado bien si hubiese sido solo la revelación de ese pequeño secreto. Quizá perdería el anonimato y algunos privilegios que venían con ello, pero pasaría y seguiría siendo el editor. Sin embargo, la noticia que aparecía con su nombre no era la revelación de su identidad sino la revelación de que "Kim Seokjin de la clase 2, hermano menor del presidente del consejo estudiantil, es homosexual".

Era la primera vez que el nombre real de la persona aparecía en el periódico y era la primera vez que se hacía una acusación de ese tipo porque, honestamente, ¿A quien le importaba?. No obstante, parecía que a la gente sí le importaba.

Yoongi comenzó a escuchar las voces en el pasillo. Algunos eran curiosos, preguntándose quien era el chico del que Kim Seokjin gustaba. Algunos estaban desconcertados, ¿Alguien estaría enojado con Seokjin como para vengarse a través del periódico? Porque era, claramente, una campaña de desprestigio. Algunos otros, por su parte, creían que era una broma que se salió de control o creían que era cierto y que era asqueroso.

Yoongi estaba enojado.

Enojado porque a ninguna de estas personas debería importarle. Enojado porque no creía que fuese asqueroso que te gustase alguien, incluso si alguien en la clase de biología dijo que no era natural. Enojado porque le gustaba Kim Seokjin que era, posiblemente, la persona más sincera y dulce que había conocido alguna vez, y esa misma persona ahora estaba en la boca sucia de otras personas y seguramente estaba escondido en algún lugar de la escuela, con miedo a salir.

Yoongi sabía que era bastante probable que fuese una mentira, también sabía que incluso si fuese verdad, no tendría importancia. En ese momento, sin embargo, no pudo pensar en nada. Lo único que podía pensar era en que necesitaba encontrar a Seokjin y hacerle saber que, de verdad, de verdad, no importaba.

La cosa era que sí importaba. Importaba mucho. Y eso hacía que le doliera el corazón por Seokjin.

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Encontró a Seokjin encerrado en un cuarto de conserje que podría medir 1,5 metros cuadrados como mucho. Sabía que estaba ahí porque podía escuchar los hipidos ligeros en el silencio del pasillo y estaba lo suficientemente loco como para poder reconocer que eran de Seokjin.

Se sentó del otro lado de la puerta, sobre sus rodillas y miró hacia todas partes, esperando que no hubiese nadie cerca antes de tocar ligeramente con los nudillos.

Los hipidos se detuvieron abruptamente.

—Hey, soy yo, Yoongi.

—¿Gichi? —El corazón de Yoongi dio algunos saltos mortales dentro de su pecho. No era solo porque el apodo era demasiado tierno para su cochino corazón sino porque la voz que lo pronunció se escuchaba rota y distante a través de la puerta.

—Mm. Soy yo. ¿Cómo te sientes? ¿Quieres que te ayude a patear algunos traseros por ahí?

Los hipidos comenzaron de nuevo y Yoongi pudo escuchar un golpe sordo que, posiblemente, fue la cabeza de Seokjin contra la puerta.

—Debiste enterarte de lo que pasó ¿No? No tienes que estar aquí.

—¿Por qué no?

—¿No escuchaste lo que dicen? Se te pagará la peste si te acercas a mí. Es...asqueroso.

Yoongi sintió que sus tripas se revolvían y no era solo rabia sino una especie de dolor que no sanaría en mucho tiempo. Y le dolió por Seokjin, le dolió por él mismo.

Apoyó su frente contra la puerta y cerró los ojos, imaginándose que quizá, en algún mundo, podrían decirse cualquier cosa sin necesidad de una barrera.

—No es asqueroso—susurró.

Allá dentro se quedó en silencio un rato hasta que la diminuta voz de Seokjin se escuchó de nuevo, unos segundos después.

—¿Pensarás eso...incluso si te digo que eres la persona que me gusta?

Yoongi se quedó congelado en su lugar, aún con los ojos cerrados y el corazón latiendo tan rápido en su caja torácica que podía escuchar la sangre tapando sus oídos.

Sintió que podía llorar y no sabía por qué.

Murmuró con los dientes apretados —No es asqueroso. Y si lo fuera, Seokjin, eso no haría que dejaras de gustarme.

Los minutos de silencio que pasaron fueron la cosa más dolorosa que Yoongi hubiese experimentado alguna vez en su corta vida. Y quizá su cuerpo estaba temblando, quizá sus ojos se habían humedecido.

Yoongi no se dio cuenta.

No se dio cuenta porque escuchó el cerrojo de la puerta y tuvo que separar su frente de la superficie fría cuando comenzó a abrirse lentamente.

Lentamente, aún sin abrir los ojos, sintió a Seokjin arrastrarse por las rodillas a través del pequeño espacio de baldosas blancas que los separaban.

Lentamente, sintió a Seokjin respirar cerca suyo. Y cuando Yoongi abrió sus brazos, lo sintió envolverse a sí mismo en su abrazo. Lo sintió apretar tan fuerte que podría romperse las costillas.

Yoongi las rompería incluso si doliera porque ya lo hacía y porque no importaba si eso significaba abrazar a Seokjin.

Ninguno de los dos dijo nada y a ninguno de los dos les importó.

El mundo era enorme y estaba lleno de lugares para estar, pero ambos solo podían pensar en este pequeño lugar seguro que crearon para los dos, entre los brazos del otro.

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N/A: el mundo es duro y frío, el yoonjin es suave y cálido.

Nuevamente, escribo esto medianamente despierta así que si hay un error, sepan perdonar.

Qué decir. I'm sick and tire y me estoy aferrando al sentido de mi vida, pero todo lo demás está bien siempre y cuando tenga este pequeño lugar seguro.

Nos leemos mañana.