Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Espiando

Dahyun era observaba cuando se despedía de su esposa, tenía que ir a trabajar a su restaurante y siempre iba sola por que Momo era periodista y se iba muy temprano a su canal.

Dahyun caminaba tranquilamente sin percatarse que un auto la venia siguiendo. Giró en una esquina y notó que el auto también hacía lo mismo y fue cuando al fin lo percibió, comenzó a ponerse nerviosa cuando caminaba más deprisa y el auto aumentaba la velocidad. Giró a mirar al auto y fue cuando alguien bajo de este.

_¿Tú eres Dahyun?

_¿Quien lo pregunta? - preguntó atemorizada, dando muchos pasos temblorosos hacia atrás.

La persona sonrió con malicia y camino directo a ella. Colocándose muy de cerca.

_Soy Jennie Kim.

Lisa esperaba paciente a su amiga, ya había tardado mucho y no podía abrir ella el local por que solo Dahyun tenía la llave. Miraba a las esquinas para ver si llegaba pero no aparecía y se comenzó a preocupar, tomó su celular y decidió llamar a su amiga Momo.

_Hola Lisa - contestó Momo.

_Hola Momo ¿Dahyun no va a venir a trabajar?

La japonesa dejo los papeles que estaba leyendo.

_¿Por que lo dices?

_Es que estoy esperando hace media hora y no llega ¿Ocurrió algo?

_Pero si ella se fue desde muy temprano, como siempre lo hace - se levantó de su asiento - debió llegar justo hace una hora.

_¿Que? Pero...

_Voy para allá - colgó la llamada y tomó sus cosas sin responder las preguntas de su jefe.

Dos horas despues Dahyun no aparecía, Momo estaba desesperada y Lisa intentaba calmarla. No respondía a su celular y eso ella jamas lo hacía. Siempre decia donde estaba y avisaba si iba a tardar. Era muy extraño.

_Lisa...- la tailandesa giró al escuchar su nombre y frente a ella estaba Jennie, habían vuelto al local para verificar si Dahyun estaba allí - ¿Que ocurre? Te veo preocupada.

_Jennie...- no sabía si contarle, no llevaba más de dos días de conocerla, pero no le parecía algo malo contarle - una amiga no aparece, es mi compañera de trabajo y siempre llega puntual, no contesta sus llamadas y estamos muy preocupadas.

_Que pena...- comentó - ¿Y ella quien es? - interrogó a Lisa, señalando con la mirada a la chica de cabello negro que se encontraba a unos metros de distancia intentando llamar nuevamente a su esposa.

_Ella es su espo-

El sonido de un celular comenzó a sonar, llamando la atención de Lisa y Momo, viendo en dirección de Jennie ya que el sonido provenía de su bolsillo.

Jennie tragó nerviosa al sentirse descubierta y por ser tan idiota por traer aquel celular.

_Tú...- Momo miraba a Jennie con duda para luego mirarla con odio, se acercó a ella con rabia y la sujeto del cuello de su abrigo - ¿¡Que haces con el celular de mi esposa!? ¿¡Donde está!?

_¿Momo?...- la japonesa giró en sus espaldas y allí estaba ella, su esposa, su compañera de vida - ¿Que le haces a Jennie?

_Amor...- Momo corrió y abrazó a Dahyun con fuerza, llorando en su hombro, se sentía aliviada de que estaba bien - ¿Donde estabas? - tomó sus mejillas - ¿Estas bien?

_Estoy bien - no comprendía - ¿Que ocurre? - miró a sus amigas.

_¿Que ocurre? - preguntó Momo con molestia - ocurre que no llegas a tu trabajo, te desapareces por tres horas sin dejar o avisar a alguien donde estabas ¡Y para colmo no contestas tú celular! - la regañaba - ¿¡y quien es esa mujer y por qué tiene tú móvil!? - los celos salían a frote.

_Amor, tranquila, sólo es una amiga, esta mañana cuando venia me habló, al principio no la reconocí por que pasaron muchos años - Jennie sonrió - así que me invitó a dar una vuelta en su coche y me encargó un pequeño trabajo, eso es todo.

_¿Y no pudiste haber llamado? - el enojo no se le iba a ir así de fácil - y no me respondiste ¿por que tiene tu celular?

_Iba a llamarte pero la bateria estaba muerta, no lo había cargado la noche anterior y mientras iba a hacer el trabajo ella me hizo el favor de cargarlo en su auto - limpió las lágrimas que recorrían las mejillas de su esposa - amor, perdoname por preocuparte, en serio lo siento, no volverá a pasar.

Momo asintió y fue abrazada por Dahyun quien la beso delicadamente.

_¿No son lindas? - preguntó Lisa a Jennie, viendo ambas la escena - en momentos como éste es que me gustaría tener a alguien. 

Jennie alzó una ceja.

_¿Me estas pidiendo permiso para besarme?

_¿Que? ¡Claro que no!

_¿Entonces yo te beso?

_Si- ¡Digo no! - se alteró - ¡tus palabras me confunden! ¡Dahyun, abre de una maldita vez la puerta! - le dio la espalda a Jennie.

Jennie sonrió de una manera tan dulce al estar viendo a Lisa, pero nadie lo notó.

"Es muy divertida" pensó la castaña "se enoja por todo y aún así me parece adorable"

Jennie llegaba a su casa y se quitaba su abrigo al entrar, tirándolo al sillón. Fue a su cocina y se sirvió un té frío, encaminándose al sótano y bajando las escaleras con paciencia.

Caminó a una esquina y se puso en cuclillas, dejando su té a un lado y mirando con una sonrisa a alguien en especial.

_¿Disfrutas tu estadía en mi casa? - se sentó en modo de indio - ¿Sabes? Quisiera contarte algo, hace dos días conocí a una chica - miró al suelo - creo que me está gustando...- hizo una pausa - demasiado, y es sorprendente por que ni siquiera aún puedo atreverme a invitarla a una cita y tú sabes que yo soy muy directa - sonrió - pero con ella no sé que me ocurre.

La mujer que estaba frente a ella se removía entre sollozos, tenía las manos atadas a su espalda y sus piernas de igual manera maniatadas. No podía gritar al tener una mordaza en su boca y su cabello desordenado le dificultaba la vista.

_Tal vez con ella sea diferente - miraba a la nada - tal vez después de tantas decepciones...al fin llegó la indicada - sonrió - ¿No lo crees? Si ella logra amarme, todas esa muertes habrán válido la pena, todas aquellas que no quisieron amarme y solo me rechazaron - hablaba con rabia - siempre dándome escusas - miró a la otra chica - así como Sana - la mujer gritó al escuchar su nombre, pero la mordaza no dejaba salir por completo su voz - no te pongas así, se lo merecía ¿Sabes lo que iba a hacer? - se puso de pie, abriendo uno de los cajones que se encontraba allí - esto fue lo que colmó mi paciencia - lanzó una pequeña caja de terciopelo a los pies de la mujer, quien quedó paralizaba al verlo, volviendo a soltar un grito de dolor en medio del llanto - iba a pedirte matrimonio, Tzuyu...y eso no podía permitirlo, si no me pertenecía a mí ¿entonces por que seguia convida? Era ilógico ¿no crees? ¿Que ocurre? ¿quieres decirme algo? - se burló y se arrodilló frente a ella - quiero escucharte - le quitó la mordaza confiando en que nadie la escucharía si gritaba. Pero para su sorpresa no gritó, sólo la miraba con rabia y despreció. 

_Voy a matarla - apretó los dientes - juro por mi vida que voy hacerte sufrir el mismo dolor que estoy sintiendo yo ahora - lágrimas caían por sus mejillas, sin quitar aquella expresión de ira - pagarás por lo que le hiciste a Sana - su voz se rompía a cada palabra - por acabar con el amor de mi vida, sufrirás tanto que desearás la misma muerte, pero no te lo voy a conceder, haré que grites de sufrimiento hasta que tu garganta se desgarre y sangres por dentro - la ira le recorría el cuerpo y dominada su corazón - acabaré con ella y la mataré frente a tus ojos...- sollozó con rabia - así como tú lo hiciste conmigo.

Jennie apretó los dientes y ninguna quitaba la mirada de la otra otra.

_¿Crees que lo harás? - río con ironía - mirate, no puedes escapar siquiera, eres una perdedora que no vale ni una puta mierda, tú no lograrías nada, ni mucho menos si te enfrentas a mí - tomó su mandíbula con brusquedad y susurró en su oído - y sólo por que soy buena , te perdonaré ese atrevimiento de amenazarme y te diré lo que Sana susurró antes morir - sonrió con malicia - ¿sabes lo que dijo? - hizo una pausa - estaba embarazada...- soltó a Tzuyu y se puso de pie, esperando su reacción.

_¿Que? - decía con dolor - ¿estaba...embarazada? - su corazón se aceleraba nuevamente al recordar que Sana y ella habían ido por años a un centro especializado en tratamiento de fecundación, habían tomado uno de los óvulos de Tzuyu ya fecundados y lo habían colocado dentro de Sana, al parecer habia funcionado.

Tzuyu comenzó a llorar al recordar a su amada. Lanzaba maldiciones a Jennie y ella sólo reía por lo que habia provocado.

_Lo lamento tanto Tzuyu...en serio no lo sabía - se encogió de hombros y se acercó nuevamente a los cajones aún sin abrirlo - pero no te preocupes, ahora mismo haré que se reúnan, te concederé lo que tú no harías por mí, voy a matarte - comenzó a buscar en un cajón - aunque es lamentable que me odies tanto - chasqueo la lengua - aún así, me dio tanta gracia tu amenaza - rebuscó en el otro cajón - por que ni siquiera conoces a la mujer que me atrae y aún así me amenazas, es ridículo - comenzó a reír.

Pero Tzuyu sonrió mirándola.

_Lisa Manoban...- lo pronunció fuerte y claro, logrando que Jennie se paralizara en su lugar - la conozco perfectamente.

Jennie gruñó con rabia y rebuscó con desesperación en los cajones, tenia que acabar con ella de una vez.

_¿Buscas algo? - nuevamente se paralizó al darse cuenta que el arma no estaba, giró con temor a ver Tzuyu y ella se encontraba con una sonrisa de burla e ironía, tenia las manos y los pies desatados, y el arma colgaba de su mano ensangrentada. Respiraba con dificultad por culpa de todas sus heridas y se puso de pie entre tambaleos - te dije que te arrepentirías.

Jennie retrocedió pero no por temor, si no por vergüenza, vergüenza de que una miserable haya sido más lista que ella.

Tzuyu levantó lentamente el arma y apuntó a aquella chica que le había arrebatado lo que más amaba.

_Adelante , matame - comentó Jennie - ¡dispara de una puta vez!

Tzuyu negó con lentitud con una sonrisa en los labios.

_Iré por ella y luego vendre por ti - Jennie la miraba con rabia - pero antes...

Disparó.

El eco del disparo retumbando por aquellas cuatro paredes, dejando a una Jennie Kim mal herida en una pierna, cayendo de espaldas sobre demás objetos.

Tzuyu subió corriendo las escaleras entre tropezones, sus piernas aún estaban muy débiles pero necesitaba escapar.

Y lo logró. Iba por Lisa Manoban.          

   
 

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro