Adhara

Una jodida semana en la enfermería, juro que ya estoy cansada.

Le e estado rogando a Poppy que me dejara salir, que ya estaba bien, pero no, no cedía.

Lo único bueno de esta semana es que e estado acercándome más a los Merodeadoritos, y con frecuencia venían a visitarme. Nos llevábamos bien, siempre haciendo bromas y molestando a Poppy.

Sirius también venía, aunque se comportaba frío. Era un idiota. ¡Se comió todos mis chocolates! ¡MIS Chocolates! ¡Mis bebes! James tuvo que sostenerme para que no lo golpeara... ¡Pero igual le deje el labio partido! Nadie se mete con mi chocolates, nadie. Todos se rieron cuando se enteraron del porque golpee a Sirius, excepto Remus, él me comprende, con los chocolates no se juegan.

Escucho como Poppy entra, asi que me paro de mi camilla y me acerco a ella. Al instante le agarró de las piernas, haciendo que de un salto del susto.

— No voy a dejarte a menos que me dejes irme de aquí, Poppy – le digo, y ella bufa.

Esta es una de las tantas ideas que e tenido para salir de acá, primero empeze a gritar todo el día, después no dejaba de saltar de una camilla a otra, y así los 5 días restantes.

¡Me aburría! Estaba a punto de morir por eso. Y Poppy no lo entendía, no lo hacía.

— Entonces estaras asi todo el santo día – contestó.

Creo que ya se acostumbro a que le diga Poppy...

Pasamos todo el día viendo como Poppy hacía su trabajo, y dije pasamos porque Pau me acompañó en mi aventura, como buena gemela que es.

En realidad, era divertido estar en las piernas de Poppy junto a Pau, ya que, no se como, pero nos poniamos a jugar a las palmaditas mientras que cantábamos.

— Debajo de Hogwarts había un basilisco, ¿verdad que si? Tirin tirin, ¿verdad que no?, toron toron, si te ríes o te mueves un calvario te caerá o un expulsó, y tu lo lamentarás

Si, ¿Hermosa canción para jugar a las palmadas, no? Me enorgullece decir que Pau y yo lo inventamos. Es que... ¿Cómo no iba a ser hermosa si las gemelas Slyffindor la habíamos creado?

Ok, demasiada arrogancia por hoy.

Y recien te das cuenta.

¡Ya te extrañaba! ¿Como a sido de tu vida Emiliet?

Después de ir a esa convención de conciencias, ya no me sorprende que siempre me cambies el nombre, y que estos sean horribles.

Yo se que me amas.

¿Quien te a dicho esa cruel mentira?

Me ofendes.

— ¡ADHARA! – oí la dulce y melodiosa voz de Paula llamándome

— ¡PAULA! – le grité de la misma manera. Aunque un poco más fuerte.

Ella junto con Poppy se taparon los oídos.

¡Ja! Sufran, pero con amor.

— ¡JAMES! – Y recién me dí cuenta que James estaba ahí.

Yo lo mire.

El me miro.

Paula lo miró.

El...

— ¿¡Cómo diablos puedes ponerte bizco?! ¡A mi no me sale! – grite de la nada.

Ellos me miraron.

Yo los mire.

Poppy me miró.

Todos nos miramos.

Y empeze a reir. Ellos me vieron como si fuera una loca sirena retardada o como si fuera un centauro riendo, tal vez me parecía a uno. Pero al final cedieron y se rieron junto conmigo, ¡Hasta Poppy empezó a reír!

— Yo.. Yo... Ajakdkclglgñ – creo que puedo confirmar que ya me estaba volviendo una loca.

Ellos me seguían mirando raro, había pasado cinco minutos y no paraba de reír, aunque ellos si. ¡Es que daba demasiada risa sus caras! Me revolqué en el suelo mientras que seguía riendo.

— No... No... ¡No puedo respirar! – y seguí riendo. Ellos me miraron un tanto alarmados, llevaba diez minutos, sin exagerar, riendo.

De repente me acordé de las miradas, y empeze a reir con más fuerza. Creo que vi como mi vida pasaba por mis ojos pero no paraba de reir.

— ¡ADHARA RESPIRA! – grito Paula, pero yo seguía riendo. ¡Es que... Era gracioso!

A pasado solo 31 días...

¿Desde que me a dado un ataque de risa como ahora? Si.

No se porque me toco a alguien tan... Rara

Y con orgullo, Florentina.

— ¡ADHARA CASSIOPEA MIA JONE SMITH! ¡CALMATE! – Y sentí como me tiraban una cachetada.

Pare de reír y le permití a mi organismo respirar, si que lo necesitaba

— Gracias Sirius

— ¿Estamos a mano?

— Si

— Genial, ahora... – pero lo interrumpí

— Eso no quiere decir que no tomaré venganza, por haberme golpeado y... Por diversión – sonreí de manera inocente.

Él palideció, y creo que ya todos sabemos el porqué. Cuando sonrió inocente quiere decir que acá, correrá pintura.

¿No querrás decir sangre?

Yo sé lo que digo, Lucindad, yo sé lo que digo.

Sentí como sonreía de manera traviesa y un tanto malvada... Sirius palideció aún más, mientras que James miraba a su amigo como si fueran sus últimos días de vida, Paula me miraba a mi con una sonrisa cómplice y Poppy... Poppy solo seguía haciendo su trabajo, pero nos miraba de reojo con una sonrisa.

¡Esperen un momento!

— ¡POPPY! ¡YA SE PORQUE NO QUIERES DARME DE ALTA! – grite haciendo que todos se sobresaltaran

— ¿Y cual es esa razón?

— ¡PORQUE ME QUIERES Y NO SOPORTARIAS NO ESTAR SIN MI! ¡YO TAMBIEN TE QUIERO POPPY! ¡PERO TIENES QUE DEJARME IR!

Ok... Sin duda alguna has perdido la poca cordura que tenías.

Eso, no lo puedo discutir.

Poppy simplemente me miró y dijo lo que yo había esperado que dijera por una eternidad.

— ¡Listo! Me harte, ya te puedes ir pero si después te arrepientes de haber dejado la enfermería ¡No me vengas a buscar!

— ¡No seas tan cruel! ¡Te voy a venir a visitar! ¡Es una promesa! — grite aun tirada en el suelo.

Esto parece una telenovela

¡Sabía que no era la única que pensaba así! Ya sabía que me amabas, Florentina.

Y ahí está la misma Adhara de siempre. No se como tu hija te soportara...

Me puse seria de repente, y vi como los demás me miraban algo extrañados, aunque me parecía obvio que  vieran así, digo... Siempre tengo una sonrisa en mi cara, asi que rápidamente sonreí de nuevo, aunque esta vez era un falsa.

— ¡Bueno pues yo me voy a buscar a mis amigos! ¡Me refiero a los de mi casa! ¡Bye leones! ¡Poppy! ¡Regresare, no lo olvides, regresare!

Y me fui corriendo hacia mi sala común, saludaba a todos lo que me saludaban, y les sacaba el dedo medio a las arrozes que me mataban con la mirada.

¿Por qué te miraran así?

Tengo la ligera sospecha de saber el porqué...

Seguí corriendo hasta la sala común, donde dije la contraseña y entre. La sala común estaba casi vacía, era obvio ya que aún están en clases, pero para mis suerte las serpientes que más quería estaban ahí.

— ¡SEVI! ¡REGI! ¡CARIÑO! ¡RUBIO! ¡RUBIA! – grite mientras los apapachaba.

— ¡Adha!/¡Cariño!/¡Cass!/¡Pelinegra! – gritaron los ya nombrados

— ¡Los extrañe estúpidos! – y fingí llorar.

¡En mi defensa! No los veía desde ayer... ¡Y eso es mucho! Para mí.

Los seguía abrazando hasta que escuchamos como alguien entraba en la sala común y nos separamos. Hicimos como si nada hubiera pasado, era más porque ellos eran "personas sin sentimiento".

Después de ello, salimos a pasear por ahí, ya que ya se habían acabado las clases en ese día.

(...)

— Orejas lista y en posición, ¿Gemela preparada?

— Gemela lista y en posición, can se está acercando. ¿Ahora?

— Ahora.

Lo siguiente que oí fue el grito de Sirius, y como el pasadizo secreto se habría para poder salir de aquel lugar. Me dirigí donde siempre nos reunimos para hablar de nuestros planes.

— ¡Eso. Fue. Increible! – grite mientras chocaba las manos con Paula.

— Sin duda alguna lo fué.

— ¡Y SU CARA! – me empeze a reir y Pau me siguió, su cara era épica.

Al final de reirnos unos cinco minutos por la broma que habíamos hecho, decidimos ir a cenar, sin duda alguna esta iba a ser la cena más graciosa de la vida.

Entramos y me despedí de ella, me fui hacia mi mesa y ella a la suya, me senté en medio de Regi y Sevi, mientras que Pau se sentaba al costado de Lils. Todo estaba normal, demasiado normal, presentía que ya se acercaba la hora de que los merodeadores llegarán, puesto que no se encontraban ahí.

Primero se abrieron las puertas, dejando ver a un Remus muy sonriente, un James que intentaba aguantarse las carcajadas para luego ver a un Peter de la misma manera que James, Luego que estos tres entraran y se sentaran apareció el merodeador pródigo, al instante todos estallaron en carcajadas, los de Slytherins también se reían. 

¡Toma esa Evelinantina! ¡Te dije que aquí iba a correr pintura!

Ya me dí cuenta Adha, ya me dí cuenta

Empecé a carcajearme y creo que mis risas eran las que más resonaban. Minnie estaba con una sonrisa en la cara e intentaba no reírse, mientras que Dumby si reía y los demás profesores se mordían la lengua para no reírse, ¡Pero es que era algo casi imposible!

Sirius, o querré decir, la "gatita" mutante que parecía como si un pandicornio lo hubiera vomitado fulminaba a todos con la mirada. Y lo que pasa es que la broma que Pau y yo habíamos planeado era vestirlo de gatita y que un montón de pinturas de los colores del arcoíris le cayera y cuando se metiera a bañar no podría quitarse nada de eso, y para darles una mejor descripción: imaginense a una persona vestida de Gata, y que esta esté bañada en todos los colores del arcoíris, creo que ya se dieron una idea.

Sirius dirigió su mirada a mi mientras que yo sin hablar movía mi boca diciendo venganza, este simplemente gruño y se dirigio a la mesa de los leones mientras que los demas seguian riendo y no me equivoqué, esta cena fue una de las más graciosas que Hogwarts había presenciado.

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Sale de su escondite Hello(?

¡Se que me e demorado en actualizar! ¡Pero en mi defensa...! Em... no tengo excusas así que... ¿Sorry? Se esconde de la muchedumbre 

Bueno... aca hay otro caps mis queridos... amm... ¿Adharianos? no... suena horrendo... mmm... Ñe, los llamo... mm... mis... merodeadoritos y ya :3 

¡Haré todo lo posible para no demorarme un mes en actualizar! Se los juro solemnemente.

Bueno eso seria todo, ¡Hasta cuando me digne a actualizar!

Ale fuera