--- ¡Hey! Pau - la llamaban los merodeadores.

Las clases habian terminado.Paula y Adhara se habian sentado juntas hablando y riendo en las clases que tenían juntas, por aquello es que los merodeadores la buscaban.

--- Ah, Hola James, Sirius, Peter y Remus - saludó y sus mejillas se tornaron rosadas por la presencia de uno de los merodeadores. James le paso el brazo sobre sus hombros, provocando miradas furiosas dirigidas a la castaña. Ella ya estaba acostumbrada a eso,  ser la unica amiga de los merodeadores traian tantas ventajas como desventajas, una de ellas es acostumbrarte a las miradas que la mayoria de la poblacion femenina te daba.

--- ¿Y... Comó... Qué... Esto...? - intento preguntar James.

Una de las cuantas leyes de ser un Potter, es que cuando se trata de mentir a un amigo o fingir se te da de lo peor.

Sus amigos se dieron un golpe en la frente con la palma de su mano.

Potter tenía que ser - pensarón

— ¿Que quieren chicos? - preguntó, con el ceño fruncido, mientras, cierto merodeador no paraba de observarla con ternura puesto que Paula, siempre arugaba un poco su nariz cuando intentaba adivinar algo, sin embargo solo este merodeador se percataba de aquellas pequeñeces que caracterizaban a su querida Amiga, como el ligero rubor que adquiere cuando está muy feliz, o los muy pequeños huecos que tiene al sonreír, o el brillo al hablar de las cosas que ama.

Al parecer un merodeador estaba plasmado por la belleza que veía en ella. Y sin dudar, podríamos decir que le profesaba más que una amistad.

Volviendo al tema, Sirius al escuchar la pregunta de su amiga se hace el indignado junto con los demas

— ¿Comó puedes pensar eso de nosotros? Nosotros que te queremos, protegemos, amamos... - y hubieran seguido hablando, de no ser que Paula ya sabia todo ese discurso.

--- Sí, sí, sí. Ya les e dicho que esa actuación ya no sirve conmigo. Ahora... ¿Que quieren hacer con ella? - preguntó. Aunque recien se habian conocido, Pau le habia cogido un gran aprecio a Adhara,  se podria decir qué, si se daba la ocacion, elllas serian las mejores amigas que pudieran existir. Cosa que ambas pensaban, puesto que en muy poco tiempo habían congeniado muy bien, aparte de agarrar una gran confianza y cariño.

E de admitir que Paula, cuando se trata de sus amigos o personas a las cual les tiene mucho aprecio, defendería y mataría por ellos. Por lo que, si los merodeadores, más conocidos por hacer bromas a cada uno de las serpiente sin excepciónbalguna y por jugar, o almenos dos de ellos, con las chicas, se interesarán en Adha, no iva a traer nada bueno.

Sabiendo esto, Paula no iba a dejar que ellos le hicieran algo a Adha, por más que sean sus amigos.

--- ¿Ella? ¿A quien te refieres? - preguntarón

--- ¿Ustedes creen que soy idiota o que? Los conosco desde primer año... Bueno a fines de este. Sé muy bien que es lo que quieren. Y la respuesta es no – a estas alturas Paula ya estaba un poco enfadada. Era, en aquel momento, una bomba a punto de estallar. Los merodeadores, en especial uno, se dieron cuenta de ello, pero no sabían a que se refería su castaña amiga.

--- Pau... No te enojes, pero no sabemos a que te refieres. Si nos podrías explicar... - había comenzaso Remus, sin embargo, fue cortado por Paula

--- ¿Son o se hacen? Sé perfectamente que ustedes se quieren acercar a Adha. Y no sé qué es lo que estan planeando, pero no les voy a decir nada - habló seca, como si ellos no fueran sus amigos.

Los merodeadores vieron que los habían descubierto, pero esta vez era diferente, ellos no querían hacerle nada a Adhara aunque entendían a Paula,bla mayoria de las veces habían jugado o les hacian bromas a las amigas de esta y ¿Comó probarle que en está ocasiónacion no era así?

--- Ok, ok nos descubristes. Pero te doy palabra de merodeador que solo quiero hablar con Adha, hace como 3 años que no hablo con ella desde que se fue a Beaxbatons y al parecer, después a Durmstrang - Dijo Sirius. En verdad quería hablar con ella pero no era lo sufieciente valiente como para que él la buscara, tenía miedo de que ella ha no quisieran hablar con él, que su amistad se haya extinguiendo después de todos estos años en los que no habían hablado. En ese entonces Sirius no se comportaba como un gryffindor.

Pero es que, de una manera u otra, Adhara ocacionaba algo dentro de él que lo hacía comportarse de una manera totalmente distinta a como es con los demas.

--- ¿Comó me puedo asegurar que no mienten? - preguntó Paula. Aun desconfiaba de ellos.

--- Te damos palabras de merodeador - dijeron los 4 a la vez, mientras que dibujaban como una cruz en el lugar donde iba el corazón con la mano izquierda. Al ver esta acción de parte de los merodeadores, Paula suspiro y empezó a contestar las preguntas que ellos le hacían, la mayoría eran de Sirius, sabía muy bien que si no lo hacía, un interrogatorio le caería encima.

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— ¡Vamos Darling! ¡No seas así! ¡Acompáñame! ¡Porfavor! - Adhara llevaba buen rato intentando convencer a Bellatrix que la acompañará a la biblioteca. Como Adhara era nueva en la mayoria de los casos se había perdido, o aparentaba hacerlo, y pedia ayuda a los estudiantes que estaban cerca de ella, ganándose a varios amigos. Esta vez quería que Bella la acompañará, pues como ella era mayor no se podían ver gran parte del dia, es por eso que Adhara quería que la acompañará a la biblioteca.

— ¡Ya te dije que no me llamaras Darling! – gritó exasperada Bella - Eso le puedes pedir a tu amiga... Esa leona a que te lleve – ahí estaba la respuesta del porque Bella no quería acompañarla, estaba demasiado celosa con que Adha tuviera otra amiga, más de otra casa.

--- ¡Bella, amor mío, no estes celosa! Que yo te quiero mucho. Ok, cariño - habló Adha, un poco enternecida por la actitud de su hermana de otra madre.

— Solo si me dices ¿porque me llamas Darling? ¡Por las barbas de merlin! ¡Eso es exasperante! - gruño

— Porque te tengo mucho Cariño, y eso es lo que viene a ser Darling – sonrió – ¡Aparte te quiero como una hermana! ¡Vamos Bella! ¡Que quiero ser única! Admite que nadie te a puesto otro apodo que no sea Bella - respondió Adha

— tienes razon, pero... - comenzo aunque la interrumpieron

— ¡Ves! ¡Tenía razon! ¡en tu cara Cissy! - dijo y le saco la lengua a la hermana de Bella, que se encontraba sentada en uno de los muebles de la sala comun, esta solo la miro y volvio a su lectura. Aunque detras de ese libro estaba sonriendo – Ñe, se que has sonreido ¡A mi no me engañas! ¡Ahora vamos Darling! ¡Que quiero ir a buscar libros! - le dijo a Bellatrix, aunque esta estaba pensando.

— Entonces... ¿Darling? - preguntó

— Sí amor mío, Darling - afirmó Adha, para despues jalar a Bella para dirigirse a la biblioteca.

Editado el
14/01/18