"No todas las personas son lo que parecen. En cualquier momento pueden pasar de ser un ángel a un demonio."
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~18 de Febrero/12:12pm~

Shido se encontraba en una zona alejada a la que los alumnos se encontraban normalmente. No sé encontraba solo, sino que estaba con Lon, Chris y Logan. Quienes lo habían traído a un salón vacío, y al entrar, pudo ver cómo habían otros chicos ahí dentro. Dos adolecentes, uno más pequeño que él; y dos niños, de la edad de Yoshino y Natsumi.

Shido miró desconfiado a los chicos, quiénes lo miraban de manera sería.

Shido: ¿para qué me necesitaban?

Chris: Itsuka-san. Te agradeceríamos si dejaras de entrometerte en nuestras relaciones.*serio*

Shido: ¿de qué hablas?

Logan: ayer antes de salir, invitamos a las chicas a pasar la noche...

~Flash back~

Se podía ver a los tres estadounidenses yendo al salón de clases de sus novias. Al llegar al salón de Tohka y Origami, pudieron ver qué también estaban Kaguya y Yuzuru.

Lon: hola, chicas.*saludó* ¿Cómo estás, preciosa?*besando a Origami*

Chris: esperé mucho tiempo para besarte, Tohka.*besándola*

Logan: Kaguya, Yuzuru.*besándolas*

Lon: oigan, ¿quisieran ir a una cita múltiple hoy? ¡Vamos a divertirnos como ante ayer!*recordando esa noche*

Chris: podemos divertirnos, Tohka.*acercándose a sus labios*

Logan: ¿qué dicen?

Las cuatro Espíritus quedaron en un silencio, mientras agachaban su mirada. Pensaban en las palabras que Shido les dijo, pensaban en la consecuencia de esta decisión; ellas amaban a sus novios, pero sentían que la manera en la que se estaba llevando a cabo su relación, no era la mejor. A parte, no querían volver a lastimar a Shido.

Así que tomaron una decisión...

Origami: lo siento, Lon. Pero no podemos ir a la cita.

Tohka: ni yo.

Kaguya: ni nosotras.

La respuesta sorprendió a los chicos, quiénes intentaron buscar una explicación a su cambio de planes. Antes ellas aceptaban al instante, ¿por qué ahora no?

Lon: ¿por qué?*sorprendido*

Origami: lo que hicimos esa noche estuvo mal.

Yuzuru: razón. No debimos hacer eso, llegar ebrias, no.

Tohka: y por culpa de ello, herimos a Shido.*cabizbaja*

Kaguya: no queremos que suceda.*igual que la pelipúrpura*

Logan: bueno, entonces, podríamos ir otro día. ¿Sí?

Kaguya: no. Ya no volveremos a tomar.

Yuzuru: decisión. Si tomar significa que vamos a herir y maltratar a nuestro amigo, entonces nunca más lo haremos.*determinada*

Tohka: ninguna de nosotras quiere hacerle daño a Shido. Ayer nos dimos cuenta... Nosotras queremos a Shido.

Chris: ¡¿estás diciendo que lo amas?!*enojado y celoso*

Tohka: no. Yo te amo a ti, Chris. Pero no quiero hacerle daño a Shido.

Lon: pero quién dice que le harán daño. Sólo dejen de hablarle y ya, asunto solucionado.*algo desesperado*

Origami: ¿qué te sucede, Lon? Así no eres tú.*extrañada*

Logan: Kaguya, Yuzuru. Ustedes pueden venir conmigo. Divirtámonos. Qué importa Itsuka, sólo no se acerquen a él.

Kaguya: eso nunca. Shido es nuestro amigo y nunca le haremos daño.

Yuzuru: aporte. A parte, estamos en deuda con él.

Origami: chicas, vámonos. Shido ya debió haber llegado, hay que ayudarlo en la cena.

Las demás chicas estuvieron de acuerdo a lo que dijo la albina y se marcharon del lugar. Los estadounidenses intentaron detenerlo pero fue inútil, al parecer esa leve pelea había hecho enojar a las Espíritus.

Y así, los tres quedaron enojados con el peliazul por haber arruinado la noche loca que estaba planeando tener.

~Fin del flash back~

Logan: eso fue lo que pasó.

Shido: (así que por eso me ayudaron ayer, eh)*pensó* ¿Y eso que tiene que ver conmigo?

Chris: arruinaste nuestra cita, Itsuka-san. Tohka y yo nos íbamos a divertir mucho.

Shido: ¿tomando? ¿Emborrachándolas?

Lon: eso a ti no te importa.

Shido: claro que sí me importan. Son mis amigas y mi hermana. Además de que habían dos niñas pequeñas, ¡¿cómo se les ocurre ofrecerles alcohol?!

???: ¡cállate!*dijo uno de los niños de ojos amarillos* Natsumi no quiso ir conmigo por lo mismo. Es nuestra relación, ¡no la tuya, imbécil!

Shido: ¿relación? Mírate, eres un niño. Además, no me estoy metiendo en su relación con ellas. Lo único que hago es decirles lo que está bien o mal, lo hago porque soy su amigo.

Logan: te lo advierto, Itsuka. Esto a ti no importa.*apretando con fuerza sus puños*

Shido: sí me importa.

Chris: ¡ya me tienes harto!

Sin previo aviso, el albino le dió un fuerte golpe en la cara al peliazul, dejándolo desconcertado.

Chris: ¡aléjate de Tohka! ¡No me la quitarás!

El albino volvió a atacar, pero fue esquivado por el peliazul, que a duras penas lo pudo hacer. Shido le devolvió el golpe, dándole de lleno en la boca, rompiéndosela.

Justo en ese momento, vió como una silla iba en dirección a él, tomándolo desprevenido y golpeándolo. Rápidamente los demás chicos vinieron hacia donde el peliazul y lo empezaron a golpear. Shido aún seguía aturdido por el golpe de la silla, pero intentaba defenderse como se le fuera posible; pero fue inútil...

La ventaja numérica no estaba a su favor y en cuestión de segundos Shido se vió envuelto en una lluvia de golpes y patadas de las que él no podía defenderse. Logan tomó a Shido del cuello, mientras que este desesperadamente trataba de zafarse, pero le era muy difícil.

Lon: escuché que el profesor de educación física dijo que tenías un golpe que te impedía hacer ejercicio.*alzando su camisa* Vaya... Eso se ve mal, ¿dolerá?

Y sin darle tiempo a Shido a responder, Lon le dió un puñetazo con todas sus fuerzas en el estómago, justo en el lugar del golpe.

Shido: ¡¡¡ahhhhh!!!*gritó de dolor*

En ese momento, Logan le tapó la boca impidiendo que gritara.

Logan: cállate, idiota.

Lon persiguió a seguir golpearlo por un buen rato, mientras que los demás chicos sólo miraban con gracia la escena.

Chris: ¿ves, Itsuka-san? Si no te hubieras metido en esto, nada malo te hubiera pasado. Amatsuyu, ¿qué opinas de esto?

Amatsuyu: en verdad es un debilucho. No entiendo cómo Muku lo pudo amar a él. Ahora sé porque gritaba tanto mi nombre, mientras estábamos juntos, en la cama.*mirando al peliazul con superioridad* Aún recuerdo lo suave que son sus pechos.

Chris: ¿qué opinan de él, Hamura, Jin, Shisui?

Hamura: es un idiota. Kotori tenía razón, en verdad es un inútil... Ahora entiendo por qué lo cambió por mí.*dijo el castaño*

Jin: Yoshino me dijo que la pasa bien conmigo, y que se siente más segura a mi lado. No hay duda, es un estúpido.*dijo el albino de ojos azules*

Shisui: siempre pensé que el gran Shido Itsuka sería lo suficientemente bueno para Natsumi. Pero ahora veo que es un completo idiota, quizás sea por eso que eligió a un niño como yo.

(Reproducir)

Lon dejó de atacar al peliazul, ya que se encontraba exhausto. Shido por su parte estaba en el suelo sosteniendo su estómago, mientras que un hilo de sangre salía de su boca y su nariz...
No sentía su cuerpo, estaba muy adolorido como para tan siquiera levantarse...

Chris: Itsuka-san, ¿te ves mal necesitas una mano?*sonriéndole* ¿O quizás... ¡una pierna?!*patentado a Shido*

Shido ya no se sentía con la voz suficiente como para gritar. Lo único que deseaba era que el dolor acabara... Los chicos sólo veían con aire de superioridad al joven peliazul que yacía tirado en el suelo sin poder defenderse.

Lon: bueno, Itsuka. Espera que esta conversación te haya servido. No quiero que te acerques a ninguna de ellas, nunca más.

Sin más, los chicos se fueron del lugar; dejando al peliazul a su suerte.

Shido sólo tenía la mirada perdida, no sabía que hacer. Su mente estaba pensando en un sola cosa: las palabras que los demás chicos dijeron sobre su "aventura" con las chicas. ¿En verdad habían dicho eso? Se preguntó en su mente.

El dolor en su pecho comenzaba a crecer; del mismo modo, la vista se empezó a nublar hasta que... quedó inconsciente.

~Time skip/ 6:04pm~

Shido comenzaba a abrir sus ojos, viendo hacia una esquina por unos momentos. Parpadeó un par de veces, para luego intentar levantarse. Le era difícil. Por los golpes, le costaba mantenerse en pie y la herida que le hizo toca había empeorado. Le dolía mucho, demasiado. Era un dolor insoportable, pero aún así... Shido se mantenía en pie.

Con ayuda de una pared, el peliazul se puso de pie como pudo. Sus manos temblaban al igual que sus piernas; no obstante, quería salir de aquí e irse a su hogar a descansar. Tenía que hablarse a las Espíritus sobre lo que hicieron sus novios, no podía permitir que personas como ellos anduvieran con ellas.

Shido iba por los pasillos desolados de la escuela, viendo con impresión como ya estaba anocheciendo. Debía darse prisa, tenía que hacer la cena y contarles todo.

~Time skip~

Ya había caído la noche. Las personas regresaban de sus trabajos e iban con su familia, sonrisas, alegría y felicidad, eran los sentimientos que se podían ver en los rostros de la mayoría de las personas. Todos parecían haber tenido un excelente día.

Pero desafortunadamente... no era el caso del peliazul. Parecíera como si el universo conspirara contra él. Cada vez que él estaba feliz, había algo que lo arruinaba. Hoy, había tenido otro mal día; algo que esperaba solucionar cuanto antes.

Shido, golpeado y jadean, caminaba por las calles uliminadas por las farolas con dificultad. Sostenía con fuerza su estómago, en la parte del golpe de Tohka y arrastraba su pierna derecha... En su boca había algo de sangre, que este iba limpiando poco a poco.

Shido venía pensando todo el camino la forma en la que le diría lo que había pasado a las chicas. Se lo diría después de cenar.

~Time skip/ Residencia Itsuka~

Shido se encontraba parado detrás de la puerta de entrada. Este suspiró, se enderezó, limpió la sangre que tenía y se puso una sonrisa natural, y luego abrió la puerta. 

Shido: estoy en...

No pudo terminar de hablar, ya que recibió un fuerte golpe en el estómago, haciendo que escupa una gran cantidad de sangre y caía al suelo sosteniendo su estómago. Shido levantó con dificultad la cabeza, viendo quién había sido su atacante.

Sus ojos se abrieron como platos al ver quién era. Otra vez... Tohka lo había hecho otra vez. Shido miraba como tenía puestos sus ojos en él, ojos que reflejaban odio absoluto.

Shido sintió terror al verlos, sentía que no era la misma Tohka de siempre.

Tohka: ¡maldito! ¡¿Qué te hicieron ellos?!*gritó con odio*

Justo en ese momento, las demás Espíritus llegaron a la entrada, todas con el mismo rostro que la pelipúrpura. Shido, quién apenas se había puesto de rodillas, recibió una patada en su mandíbula, rompiendo su boca al instante.
La responsable fue cierta albina que lo miraba con desprecio y furia.

Origami: pensé que eras otra persona. No pensé que serías capaz de esto.

Shido: ¿de qué... hablan?*confundido, sosteniendo su boca*

Tohka:*tomándolo del cuello y alzándolo* ¡no mientas, maldito! ¡¿Por qué le hiciste eso a Chris?!*apretando con fuerza el cuello del peliazul*

Shido intentaba zafarse del agarre, pero le era imposible por la fuerza de Tohka. Pero en ese momento, vino la "salvación" de Shido. Kotori tomó la mano de Tohka, lo cual está entendió y de mala gana, lo soltó.

Shido quiso agradecerle a su hermana, pero en ese momento recibió una fuerte cachetada de ella.

Kotori: Shido, la próxima vez que le hagas algo a nuestros novios... no responderemos.*seria* Ahora, vete a tu habitación. No te queremos ver.

Sin más, las Espíritus se aguantaron la ira contra el peliazul, y volvieron a sus asuntos. Shido estaba confundido por todo lo que había pasado, pero se le vino una explicación a la mente.

Shido: (ellos... me inculparon... Las engañaron)

Shido, como pudo, fue a su habitación. Y al llegar, cayó sobre sus rodillas y vomitó una gran cantidad de sangre. Él debía ir al doctor para saber si todo estaba bien, pero estaba cansado... Exhausto... Sólo quería descansar.

Shido se recostó en su cama, viendo el techo mientras espera caer dormido. Pero su celular vibró, dándole una sonrisa, esperando de que fuera Kotonoha. Pero al ver mejor, era un número desconocido le habían mandado un vídeo.

Shido abrió el vídeo y lo que vió, lo dejó en shock...

Tohka: ¡oh, sí, Chris! ¡Más duro, más fuerte!

Mukuro: Amatsuyu-sama, dele a Muku su leche. Muku la necesita...

Kotori: Shitaru... ¡Más, necesitó más!

Todas las Espíritus, exceptuando a Miku y Nia, estaban en el vídeo... desnudas... y teniendo sexo con sus novios...
Shido quedó con la mirada perdida... La forma en la que ellas suplicaban que les dieran más... La forma en la que lo hacían...

Shido sentía como su corazón dolía, más que las veces anteriores; había quedado totalmente destrozado. Su mirada perdió el rumbo, y no sabía exactamente a quien estaba mirando.

Nuevamente el celular de Shido vibró, el mismo contacto que le había mandado el vídeo, le había escrito...

"Espero que estés disfrutando el vídeo, Itsuka-san."

Shido supo inmediatamente quién era y justo en ese momento dejó caer su celular... El peliazul quedó mirando el techo nuevamente, pero esta vez parecía no tener ganas de nada... ni siquiera de vivir. Pero lo que él quería, no era lo mismo que su cuerpo quería; y por el cansancio se durmió.

~Al día siguiente/ 19 de Febrero/ 7:45pm~

Shido se encontraba llegando a la escuela. Con su rostro depresivo y su mirada vacía, Shido caminaba con dificultad hacia su institución. Cruzando la puerta de entrada y entrado a esta, recibió un baldazo de agua en el rostro. El peliazul se sobre saltó y miró a su alrededor, dándose cuenta de que todos los estudiantes lo miraban como si de un extraño o alguien despreciable se tratara.

Estudiante: ¡eres horrible!

Estudiante 2: ¡si no hubiera escapado, los abrías matado!

Y así, los insultos, como las bolas de papel comenzaron a llover sobre el peliazul; quién inmediatamente entendió lo que pasaba: también los habían engañado a ellos. Shido continuó con su camino, siendo seguido por los estudiantes quienes lo seguían insultando y molestando.

Llegando al salón de clases, vió como todos lo miraban. Pero este sólo miró hacia el suelo y fue a su asiento. El chico se sentó y miró su mesa, y en ese momento, vió como oyó como alguien lo llamó.

Chris: oh, Itsuka-san. Parece que recibiste tu lección.

Lon: Eso te pasa por casi matarnos, Itsuka.

Shido miró a los dos chicos con un rostro sin emoción, viendo cómo Chris tenía el brazo derecho enyesado, mientras que Lon tenía un parche en el ojo. A su lado, estaban Origami y Tohka, quiénes miraban con desprecio a Shido.

Lon: oye, ¿no vas a decir nada? ¿Ni siquiera un "lo siento"?

Shido: lo siento... Déjame en paz ahora...

Shido habló con un tono bajo y muerto, sin emociones. Sólo quería que ellos se fueran, y que pudiera dar sus clases con normalidad... Bueno... desde ahora no va a haber normalidad.

Origami: Shido, discúlpate como es debido.*seria*

En eso Shido se levantó, y ante la mirada de todos, hizo una reverencia y dijo...

Shido: lo siento mucho... Anderson, Walker.

Lon: acepto tus disculpas, Itsuka.

Chris: espero que podemos ser amigos como antes.

Shido se volvió a sentar, esperando a la profesora. Este veía al frente suyo, al puesto de Kotonoha. Ella no había venido el día de hoy, y eso le preocupaba un poco a Shido. El peliazul miró a su mejor amigo, Tonomachi; quería saber la razón, quizás él la sabía.

Shido: Tonomachi, ¿sabes qué le pasó a Katsura-san?

El pelinegro sólo se limitó a bajar la cabeza y a decir las siguientes palabras...

Tonomachi: lo siento, Itsuka. No quiero que las demás personas me odien, así que no me hables...*dijo mientras volvía a mirar al frente*

Shido bajó la cabeza en señal de depresión. Su mejor amigo preferencia lo que los demás pensaran de él, en lugar de su amigo; su compañero. En ese momento, la maestra de física, Reine Murasame. Entró por la puerta.

Todos en ese momento se preguntaron el por qué de su presencia. La peliplata sólo vino con un objetivo, su mirada se enfocó en aquel peliazul que se encontraba sufriendo. Esta se acercó a él, y con un tono de voz levemente preocupado lo llamó.

Reine: Shin, ven conmigo un momento.

Shido sólo se levantó de su puesto y la siguió...

~Time skip~

Ambos habían llegado a la enfermería. Shido se encontraba cerrando la puerta con seguro, mientras que Reine cerraba las cortinas. Luego, Shido se sentó al frente del escritorio de la peliplata, y seguido de él, la analista de Fraxinus también lo hizo.

Shido: ¿qué sucede, Reine?*vacío*

Reine: Shin, ¿cómo te sientes?

Shido: cómo basura...

Reine: ¿cómo se encuentran tus heridas?

Shido: mal...

Reine: Shin. Lo siento. Le intenté explicar la situación a las chicas, pero no quisieron oírlo. Dijeron que estaba de tu lado y me tacharon como tu alida.

Shido: no tiene sentido hablar con ellas, Reine. Están cegadas por ellos...

Reine: Shin, recuestáte en una camilla, por favor.

Shido hizo caso y fue hacia una de las camillas, y se arrecostó. Reine subió la camisa del uniforme del peliazul, viendo el golpe que tenía; quedando sorprendida por el daño. Shido tenía el estómago hundido y morado, casi llegando a negro.

Reine: ¿cómo es que sigues de pie, Shin?*sorprendida* No tienes los Ángeles, deberías estar en la cama. O en el peor de los casos, muerto.

Shido: no lo sé.

Reine: pero... puedo ver qué hay mejoría.

Shido: ¿huh?

Reine: parece ser que tu estómago se está sanando el solo. A una velocidad mínima, pero sigue sanando. Habrá una probabilidad de que haya el Reiryoku de las Espíritus...*pensativa*

Shido: no creo. Ellas aman a sus novios, ¿por qué me amarían a mí?

Reine: bueno, en todo caso...*sacando unas vendas y alcohol* deberías cuidarte esa herida, y no dejar que te golpen ahí hasta que mejore.*echándole alcohol en el golpe*

Shido: agh...*quejándose* Entendido.

Reine: ven conmigo cada día. Supongo que necesitarás alguien con quién hablar, ¿no?*vendando su herida*

Shido: tengo a Kotonoha. Pero ella no vino hoy...

Reine: listo. Ve a clases, Tamae ya debió haber llegado.*terminado de vendarlo*

Shido: sí.*acomodándose su uniforme* Gracias, Reine.

Reine: no es nada.

Y sin nada más que decir, Shido salió de la enfermería y fue a su salón de clases...

Shido: esta semana...

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...será una mierda...

(Próximo capítulo: La mejor amiga)

Lore-craft: hellouda, ¿cómo están? Espero que estén mejor que Shido :v.

Aparezco aquí para decirles que, desde este capítulo, la caída de Shido comenzó. Así es, lo que muchos de ustedes estaban esperando, por fin a comenzado.

Sayonara...