━ CHAPTER II
(Disculpen si aparecen guiones cortos, Wattpad muchas veces me cambia los guiones largos)
Y vuelvo a publicar esto.
Le di en: “anular la publicación” por accidente.
•────────CAPÍTULO II────────•
⊰⋞ El jardín de Deméter y el Reino medieval ⋟⊱
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Olympus,
Deméter Gardens.
LOS CÁNTICOS DE LAS NINFAS ADORNABAN EL DULCE E IMPRESIONANTE LUGAR
los antílopes caminaban por todo el lugar comiendo algunas moras azules, mientras otras de las ninfas de orejas puntiagudas y vestidas de flores y colores regaban las plantas con la gran felicidad que siempre conservaban, el dios Apolo tocaba su lira escondido de la dueña de los jardines mientras esta gritaba porque las vacas de este se comían sus cultivos y el palacio resplandeciente tenía lugar a un lado de tan hermosos jardines.
A todo lugar que fueras, las mariposas habitaban adornando el lugar de diferentes colores y absorbiendo el polen de cada una de las vivas flores que crecían ahí, los pájaros cantaban y volaban en dirección a una pequeña ruina griega que había en el lugar rodeado de rosas y espinas. En este, una joven cantaba una hermosa melodía particular y era acompañada por un joven y musculoso joven que tocaba el arpa de una manera espectacular.
❝Y la sangre caerá hasta que no quede más. Por duro que pensarás, con el precio de sangre no jugarás❞ Cantó la chica en griego. La canción por más tenebrosa y perturbadora que parezca, era especial en el Olimpo, porque representaba una gran enseñanza en una de sus costumbres.
La joven alargó una palabra cantando en una nota alta, su hermano finalizó con la lira para después sonreír y dejar el hermoso y pesado instrumento de lado para poder descansar.
—¿Que les parece?— la dulce voz de la joven castaña se escuchó en la pequeña ruina haciendo que muchos pájaros cantaban para ella, si, como en un hermoso cuento de Hadas.— Me alegra mucho— Sonrió haciendo volar a la paloma blanca que se había posado en su mano.
—A veces creo que eres como un hada de los animales— habló el chico por primera vez, levantándose y acomodando su túnica blanca que dejaba su hombro descubierto.
—¡Herkie!—Lo regañó ella— No soy nada de eso, ahora tampoco somos inmortales.
El suspiró profundamente antes de agarrar suavemente la barbilla de su hermana y dijo:— Deja de culparte por eso, ¿Si?, Sólo fue un accidente— la castaña asintió bajando su cabeza— Tengo que ir con nuestro amado padre, tengo que hablar con él y empacar para regresar a Auradon.
Ella arrugó su frente y sus ojos reflejaban tristeza, no quería que su hermano se fuera y ella se quedara ahí sola, con sus padres que se habían vuelto locos.
—Quiero ir— admitió ella— Quiero ver a mis amigos como cuando mi padre me llevaba a Auradon con él.
—Emily, mi pequeña y dulce hermana, eso no me corresponde a mí. Perséfone te buscaba desde ayer y te dirá algo importante— abrazó a la chica fuertemente antes de darse la vuelta y desaparecer en los arbustos de los alrededores.
«¿Que será tan importante?»
Se preguntó la chica antes de sentir cierto olor a muerte y gritos de desgracia como si sus pensamientos fueron escuchados. Un portal proveniente del inframundo había aparecido a escasos metros de Emily dejando ver a un caballo negro con los ojos rojos que llevaba una carroza fúnebre dejando cenizas a su paso, de esta salió una mujer vestida de blanco con algunas calaveras de adorno, su cabello tan rojo cuál lava de los volcanes y adornado con rosas tan rojas como la sangre.
La mujer acarició el caballo antes de acercarse a la más joven con una sonrisa cálida.
— Perséfone, diosa de la primavera y reina del inframundo— declaró uno de los fuertes demonios del inframundo antes de cerrar la puerta de la carroza y volver a su lugar.
—Gracias, Baröthryl— agradeció Perséfone y miró a la contraria— Pequeña Emily, me da gusto poder encontrarte, ¿Que es lo que te entristece?— preguntó mirando la triste cara que tenía la contraria.
—Nada de mucha importancia, ya sabés, problemas con mis padres— Dijo Emily—¿Por qué me buscabas?
—Tu hermano Herkie me habló de tu deseo por ver a tus antiguos y únicos amigos— sonrió y añadió:— Por lo tanto, después de discutir con tus amargados padres, aceptaron dejarte ir a el Reino de los Estados Unidos de Auradon, solo faltaría notificar a nuestro joven Rey para que te pueda recibir— Emily saltó emocionada, no sabía si lo que estaba escuchando era cierto pero ¿Por qué Perséfone la ayudaba?—Terminarás tu año de Auradon Prep junto con la descendiente del Hada madrina mientras Herkie irá a la universidad.
—¿Por qué lo haces?— preguntó, ¿Cuál era el motivo por la cual la temida reina del inframundo la estaba ayudando.
—Será con la condición de que hagas algo por mí— La diosa se sentó en el pasto invitando a la menor a sentarse— Vigilarás los movimientos de mi esposo Hades, pues hace tiempo el contrajo matrimonio con una hermosa Hada oscura— A pesar de decirle “hermosa” se veía el enojo y rencor que sentía hacia Hades— Si acepta venir, puede que le diga a Zeus que está casado con otra y anulará mi matrimonio y mi reinado en el inframundo, para que la otra tomé el puesto de reina más yo, por comer la granada tenga que pasar la mitad del año, como una simple prisionera. Después de todo, mi padre perdió el interés en mí desde hace tiempo.
Eso era todo, ayudaba a la menor por conveniencia, por el rencor y el miedo de perder el inframundo. No sorprende, durante muchos años los dioses solo pensaban en ellos mismos y al parecer la antigua “bondadosa” Perséfone o por los mortales; Kore. Ya no tenía ni una pizca de eso.
La mayor se levantó dirigiéndose a la carroza y su temido acompañante le abrió la puerta del transporte antiguo con detalles griegos.
—Acepto—Emily sonrió haciendo que la contraria hiciera lo mismo.
—Entonces irás un día antes del aniversario de Auradon más volverás dos días después para la fiesta de los dioses— ordenó— Cuando la fiesta cúlmine, bajarás otra vez a Auradon con tu hermano.— La menor asintió repetidas veces viendo como la contraria se subía al carro griego— Te invitaría al inframundo, pero ya sabes, los mortales no pasan y tú eres una desde el... accidente.
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Mientras en el jardín cada uno se ocupaba de sus asuntos, el dios Zeus recorría la sala principal del palacio griego, de un lugar a otro aburrido.
Su ira había aumentado ya que había peleado con su hermana/esposa Hera.
Porque la diosa del matrimonio había descubierto otra de las muchas infidelidades que su esposo hacía a escondidas. Era insólito que la diosa del matrimonio viviera de esa manera.
—¡Hermes!— llamó el líder del Olimpo al mensajero de los dioses—¡Maldito Hermes! ¿No sabes que mi paciencia es poca en estos momentos?— Un humo rojo apareció en la sala dejando ver a Hermes con una piraña mordiendo su cabello.
—Dime, Zeus— dijo él despegando el animal marino de su cabello— Entregar un mensaje a Poseidón no es muy divertido.
—Te dije que fueras al mundo mortal e invitarás a Hades a la fiesta del Olimpo— recordó Zeus haciendo sonar uno truenos afuera—¡¿Por qué mierda no me dijiste más nada?!
«baja el volumen, idiota» gritó Hera desde un lugar poco visible.
—Silencio Mujer— gritó Zeus.
«Nuestro hermano es inteligente por no querer venir» se volvió a escuchar la voz de la mujer haciendo que Zeus contara rápidamente hasta diez y la ignorara olímpicamente.
—Zeus, Hades no me confirmó nada— Zeus suspiró de desesperación pues su hermano siempre evitaba las celebraciones.
—Lleva más invitaciones, entrégale al Rey Ben y a mi sobrina, necesito que mi hermano venga.— le arrojó un montón de papeles de invitación con finos sellos.—¿Por qué sigues aquí? Vete.
El dios Hermes obedeció corriendo hasta la puerta con sus manos cargadas de invitaciones y el mayor por algunos milenios observó la ventana, percatándose de la pelea de Deméter y Apolo en el jardín, mientras el otro lloraba un poco por su Lira rota. Ya era la segunda vez que esa cosa se rompía.
—Dile a Apolo que deje de ser tan estúpido y que se ponga a trabajar en la música de le celebración— ordenó sin quitar la mirada de su hermana— Lo mismo para mi hermana.
Sin más, el contrario asintió saliendo del salón dispuesto a ir a entregar las invitaciones.
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El coro de la iglesia medieval había estado practicando para su presentación en el aniversario de Auradon por órdenes de la reina Ana de Arendelle, mientras las mujeres de todo el reino tejían y construían el mapa de Auradon poco a poco.
El bosque donde Elsa ahora vivía cosían y realizaban la confección de muchos vestidos para asistir a la gran fiesta del año, la primera fiesta en donde celebrarían con villanos.
La reina Elsa se encontraba en su pequeña casa mirándose al espejo y arreglando un poco su vestido para hacer la revisión de los vestidos. Pero eso fue antes de que la esposa de la ex reina de Arendelle se acercara a darle un beso y tomarla de la cintura.
Las dos se miraron con ternura dispuestas a ir más allá, pero un llamado a Elsa las interrumpió.
Elisa, la hija adoptiva de ellas la estaba llamando.
Se separó de su esposa y fue rápido a la habitación casi vacía.
—¿Para qué me llamas, Cariño?— vio como su hija estaba en la cama de madera abrazando sus piernas.
La menor tenía una mirada triste y parecía preocupada por algo. Aunque probablemente era por las molestias que ella debía soportar en su preparatoria por solo tener dos mamás.
—¿Segura que tengo que ir? ¿No puedo quedarme aquí para siempre?— Preguntó mirando a su madre con sus grandes ojos verdes.—Me siguen molestando aún en las vacaciones, todo porque tengo dos mamás—La rubia le pasó a Elsa, las cartas con infinidades de insultos.
La mayor suspiró, no podía esperar menos de una preparatoria que aún conservaba costumbres medievales, porque no, no era Auradon Prep.
—Elisa, seguramente en la universidad de Auroria city no será así, además podrás hablar con Mal y Ben sobre ese tema, solo si te molestan— animó la mayor— Te visitaremos y podrás encontrar tu final feliz— sonrió ampliamente haciendo que la contraria hiciera lo mismo— Con un chica.
La mayor la señaló con seriedad y la menor asintió. A Elisa nunca la dejaron tener algún amigo hombre o tener contacto con ellos si no era extremadamente necesario, al menos que fuera su tío Kristoff. Aunque fuera un poco raro y casi siempre era al revés la situación, así era.
Elsa incitó a Elisa a pararse frente al espejo que aún seguía en la habitación, para arreglar su ropa con delicadeza para luego recoger su cabello en una coleta de caballo. La rubia suspiró, a veces se cansaba de que una de sus madres siempre la tuviera en constante vigilancia con respecto a su aspecto físico o el contacto con personas del sexo masculino, por cierta parte le agradaba ir a Auradon y ser libre, pero también tenía miedo de ser atacada otra vez.
—Saldré con tu madre a ver los resultados de la fiesta de Auradon, sigue preparando tus cosas y además, ve que se encarguen de la cena— ordenó la mayor besando la frente de su hija y marcharse de la habitación.
Elisa suspiró cansada y apretó su collar de copos de nieve mirando su habitación casi vacía, su madre podría preocuparse por ella en otras cosas, pero jamás escuchó un: ¿Cómo te sientes?.
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—¡Padre!— llamó Herkie a su padre, quién había derrotado a Hades en un pasado.
El mayor lo miró esperando que hablara, sintió fastidio de que alguien interrumpiera sus asuntos y posiblemente el menor no tenía toda su atención.
—¿Es verdad que Emily irá a Auradon?— el mayor levantó la ceja.
—Si, podré tener un descanso de ella— confesó su padre, la verdad que siempre había estado en descanso, él y Megara nunca habían estado al pendiente de ellos—Para que Perséfone dejara la insistencia, también.
—Gracias padre— agradeció el chico empezando a irse, sabía que no podría quedarse tanto tiempo.
Al salir de aquella habitación sintió como alguien se le abalanzó y gritaba de Alegría, era Emily quién estaba sobre él llena de alegría. Al parecer ya había estado con Perséfone y ya sabía la noticia.
Los dos se miraron con una sonrisa, no tan fácil sería dividirlos a ellos dos, dos hermanos quiénes eran tan unidos y eran cómplices del otro a la vez. Los dos sabían que vivirían grandes aventuras al estar en Auradon, conocerían muchas personas y podrían vivir su final feliz.
—Voy a ir a Auradon—
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¡Gracias por leer!💕
Quiero aclarar que algunas cosas de la mitología griega serán cambiadas para poder adaptarlo, también, lo de Elisa quise hacer las cosas diferentes.
Siempre son padres conservadores con hijos gays, hijas lesbianas,etc. entonces pensé: ¿Por qué no hacer algo distinto? Hacer algo que casi no se vea en las demás historias :)
Y
aviso que Adam, representará una figura machista en esta historia.
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