Comer mientras era observado no era un problema para él, nunca lo había sido, y menos con el esposo que tenía.

—¿Quieres más? —preguntó ofreciéndole de su comida al vampiro que ya había terminado, TaeHyun negó con la cabeza, mirando a su esposo terminar de comer con gusto, disfrutando de la comida. BeomGyu masticó su último bocado, pasando la vista por el lugar casualmente, notando que el vampiro de camisa naranja caminaba en dirección al baño.

Primer paso. Pensó tragando su bocado.

Por otro lado, el vampiro ladeó la cabeza, aún observándolo.

—¿Vas a querer postre después de esto, precioso? —preguntó enseñando una pequeña sonrisa luego, BeomGyu asintió mirando al mesonero recoger los platos vacíos.

—Si, pero-...

—¿A dónde vas? —preguntó TaeHyun borrando la sonrisa, BeomGyu se levantó de la mesa, enseñando sus manos al vampiro, con algunas salpicaduras de salsa.

—A lavar mis manos.

—Tenga un pañuelo, señorito —extendió el mesonero, BeomGyu tomó la tela en manos, odiando el gesto.

—De todas maneras las voy a lavar —afirmó, TaeHyun lo observó fijamente, frunciendo cada vez más su ceño.

—Treinta segundos o te voy a buscar —fue lo único que le dijo antes de que se fuera en dirección a los baños, BeomGyu caminó con confianza hacia ellos, entrando.

Justo cuando entró, TaeHyun empezó a contar los treinta segundos.

Por otro lado, BeomGyu cerró la puerta, apoyado en la pared estaba quien trabajaría para él.

—Un gusto conocerlo, señor —saludó el hombre dando una reverencia educada, él no era una persona educada ni mucho menos. Pero tenía en mente ser educado y servicial con el esposo del líder para que más adelante considerase contratarlo para trabajar para él.

Tan solo imaginarse las cantidades de dinero, lo hacían volverse educado.

BeomGyu sacó la llaves de su bolsillo, arrojándolas, se volteó a la lavabos metiendo sus manos en el agua, empezando a lavarlas.

Después de todo, sí era verdad que  tenía las manos sucias.

—El auto está en todo el frente del restaurante, tu señal será cuando yo vuelva al baño —ordenó con una expresión seria, el otro asintió.

—Sobre mi pago...

—Concéntrate en salir vivo primero, no le puedo pagar a un muerto después de todo  —señaló secando sus manos con un papel, mirándose en el espejo— Si quedas vivo después de esto, te pagaré, y consideraré darte algo extra por eso.

—Me pude escabullir de los Kim, además, he logrado escapar de la muerte varias veces, señor, ésta vez no será la excepción —prometió, muy seguro de sus habilidades. BeomGyu sonrió arrojando el papel al cesto de basura.

—Bueno, tal vez no has conocido la verdadera muerte... Pero no importa, concéntrate y cumple tu parte —ordenó dejando su mano en la manilla de la puerta. El vampiro asintió.

Y así, BeomGyu salió del baño, pasando sus manos por su cabello, caminó a la mesa en donde estaban, TaeHyun ya lo estaba viendo.

—¿Y qué? ¿Cuánto tiempo duré? —preguntó volviendo a tomar asiento en su lugar, TaeHyun se enderezó con una aspiración.

—Veintitrés segundos —contestó, BeomGyu rió.

Pero qué maniático...

—Supongo que me diste treinta segundos porque quieres estar más tiempo conmigo... Y no porque estés teniendo sospechas falsas de mi —habló dejando su mano sobre la del vampiro, BeomGyu pasó su índice por el dorso ajeno, acariciando con suavidad las venas que sobresalían, le parecía atractivo.

—¿Qué pasa si sospecho de ti? —preguntó Kang arqueando una ceja.

—Me sentiría... Triste... Algo decepcionado de que no puedas en verdad confiar en mí cuando yo sí lo hago, además, ¿Qué puedes sospechar de mi? ¿Te he dado razones, TaeHyun? —preguntó en un tono suave, TaeHyun lo observó a los ojos— Estás muy paranoico y no entiendo por qué... —murmuró agachando la mirada al dorso ajeno, BeomGyu relamió sus labios— Si necesito ir al baño de nuevo, no quiero que me cuentes el tiempo, TaeHyun y no vas a ir conmigo —negó antes de que el vampiro lo dijera— Yo dejo que tú salgas de la mansión por horas a la corte vampiro, a hacer inspecciones de madrugada... Pero no me preocupa porque confío en ti... Además, siempre sabes en dónde estoy —finalizó dándole una sonrisa al vampiro, mostrando su mano con el anillo de rastreo.

TaeHyun solamente entrelazó sus manos, soltando un suspiro.

—¿Si, Tae? —preguntó, el vampiro asintió con seriedad, BeomGyu sonrió haciendo una seña con su mano libre, TaeHyun se inclinó hasta él, frunciendo el ceño cuando obtuvo un beso en la punta de su nariz.

—Pero que tierno... —escuchó a lo lejos, una voz femenina, volteó en esa dirección, una mujer con su amiga desviaron la mirada ante la del líder.

TaeHyun recostó su espalda a la mesa, mirando el postre ir hacia ellos, lo había pedido conociendo los gustos de su esposo, además, basándose en los postres que había pedido en los anteriores restaurantes.

BeomGyu miró el mousse de fresa, bien decorado, y con una porción considerable, agradeciendo.

—Se ve muy delicioso... —murmuró empezando a comer con gusto, sintiendo nervios, pero tratando de controlarlos.

Cuando terminara ese postre, esperaría unos minutos, e iría al baño.

Pero ésta vez no volvería con TaeHyun.

—¿Quieres ir a otro lugar luego de esto? —preguntó TaeHyun bebiendo un copa de vino, él no había pedido postre.

—Uhm... No, mejor vamos a casa —contestó tomando el pañuelo para pasarlo por sus labios, quitando el sirope de fresa.

Comió de su postre, dejando los últimos pedazos.

—Prueba, es muy dulce —animó, en verdad saciado de dulce, era mucho para él ya.

TaeHyun no se opuso a recibir la cucharada de su esposo, frunciendo el ceño al sentir lo dulce que era. Negó con la cabeza, no terminaría de comerse eso, era mucho para su gusto.

Por eso, dejaron que el resto se lo llevara el mesonero.

La mesa quedó impecable, solamente un copa de vino de su esposo.

Ya era hora.

—¿Nos vamos? —preguntó BeomGyu mirando a su esposo terminar la copa, TaeHyun asintió con la cabeza.

—Claro, vé al baño para irnos... Te esperaré aquí —prometió el vampiro mirándolo directamente a los ojos, BeomGyu sonrió en grande levantándose.

—¿Me vas a esperar aquí? —preguntó rodeando la mesa, TaeHyun asintió controlando su paranoia, y dejándose llevar por las palabras que le había dicho su esposo, así que confiaría una vez más. BeomGyu lo tomó de la barbilla con una mano, se inclinó besando su mejilla, dejando un suave beso en la piel fría.

El último...

—Ya vengo entonces —fue lo único que dijo, dándose la vuelta para caminar al baño, el vampiro que trabajaba para él ya se había movido de su mesa.

El verdadero plan y la verdadera acción empezaba ahora.

BeomGyu entró al baño, agradeciendo que estaba vacío, se apresuró a sacar el arma de su pantalón, sacó la camisa de sus pantalones para más comodidad y movimiento.

Miró su manos, sudando.

Quitó el anillo de rastreo con rapidez, dejándolo en la encimera del baño.

Caminó a la puerta, apoyando su oreja cuando escuchó disturbio.

—¿Hay un robo? —preguntó alguien muy a lo lejos. Trató de agudizar su oído lo más que podía.

—¡Líder Kang se están llevando su auto! —gritó un mesero. BeomGyu abrió la puerta, soltando el aire de sus pulmones antes de asomar su cabeza.

Miró la espalda de TaeHyun, el vampiro saliendo del restaurante por el aviso y el obvio robo de su auto.

Es la hora. Pensó, saliendo del baño con rapidez, pasando desapercibido gracias al acontecimiento del robo, personas atentas y dando la espalda a su posición actual.

Caminó con rapidez hasta la cocina, pateó la puerta antes de pasar con paso apresurado, apuntando a todos los que lo vieron de inmediato.

—Es el esposo de-...

—Se callan la boca todos y van a fingir que no me vieron pasar por aquí —amenazó con firmeza siguiendo con su caminata apresurada, pasó a un pasillo vacío empezando a correr hacia la puerta trasera, haciendo memoria de su ubicación.

Cuando estuvo frente a ella, la empujó con fuerza, quejándose cuando no abrió.

—Carajo —bufó, colocando la boca  del arma en el pestillo, disparó dos veces y la puerta cedió, su cerradura destrozada con los disparos.

Miró la motocicleta con el casco en una esquina esperando por él, tal y como el plan decía, de inmediato se colocó el casco, abrochando con manos temblorosas.

Lo estaba haciendo. Y lo estaba logrando.

Dejó el arma en su pantalón, se subió al vehículo escuchando a lo lejos un par de disparos.

Si me atrapa, me mata. Pensó cuando la motocicleta no quiso encender la primera vez, escuchó más disparos a lo lejos.

Volvió a girar la llave, escuchando el rugido del vehículo, quitó el seguro.

Y sencilla y llanamente...

Arrancó.

Condujo primero a un velocidad normal, pero al entrar en la vía, aumentó la velocidad, debía alejarse con rapidez.

No podía dejar rastro de nada.

Soltó su mano derecha, buscando su teléfono entre sus pantalones, este también le mostraba la ubicación a TaeHyun, lo arrojó hacia un lado mientras iba en movimiento. El aparato cayendo con dureza entre algunas plantas, encendido.

Había dejado y arrojado todo aquello que delatara su ubicación.

Era... Libre.

Soltó una pequeña risa mientras conducía. Acelerando la motocicleta aún más, esquivando un par de autos cuando se acercaba más al lado humano.

No contuvo su sonrisa, soltó una carcajada, pasando de largo una luz en rojo.

¿Qué tal fácil había sido su escape?

Fue al baño, distrajo a TaeHyun y salió por la puerta trasera.

No había sido fácil. Él lo había hecho fácil.

Usó a Kang TaeHyun, lo manipuló, le hizo creer muchas cosas, le tapó los ojos con una venda y lo volvió lo más dócil posible ante su petición y presencia.

Su mejor ayuda había sido, el enamoramiento y la obsesión.

Carcajeó de nuevo, desviando su recorrido a la derecha, ya estaba en territorio humano y lo suficientemente lejos de Kang TaeHyun.

Por otro lado, ese mismo vampiro había bajado las escaleras del restaurante con rapidez, su auto estaba siendo robado, y no le importaba perderlo, tenía lo suficiente para otro, pero si lo estaban robando a él mismo como lider, eso podría hablar de las medidas de seguridad que estaba teniendo el territorio. Podía ser un problema grave, además de alerta para la corte.

No había dudado en disparar en dirección hacia el auto, para mínimo atravesar una rueda y detenerlo, más no lo logró por la rapidez.

Tiene rastreador. Recordó guardando el arma, debía ir a la mansión y mandar a los guardias con rapidez.

Pero para eso, necesitaba a su esposo.

Volteó a la mesa de ambos, estaba vacía.

BeomGyu aún no había salido del baño.

—Señor Kang, su auto-...

—Iré a la mansión a solucionarlo, no tienen porqué preocuparse —le habló al recepcionista del lugar que asintió, preocupado.

TaeHyun avanzó con rapidez, empujando la puerta del baño.

—Nos vamos, precioso —llamó apenas entró, lo único que hubo fue silencio.

Frunció el ceño mirando todas las puertas de los cubículos. Nadie le contestó.

Un vacío se instaló en la boca de su estómago casi de inmediato, caminó con rapidez hacia los cubículos.

—Kang BeomGyu —llamó de nuevo pateando la primera puerta, estaba vacío.

El ritmo cardíaco se le aceleró, empezó a hiperventilar.

Pateó las siguientes puertas, todos los cubículos vacios, frunció el ceño tomando su teléfono para ver la ubicación de su esposo, le indicaba que estaba allí, con él, en el mismo lugar.

TaeHyun alzó la mirada, inspeccionando con rapidez, notó algo en la encimera de los lavabos, brillante.

—Lider Kang, escuchamos ruido, ¿Se encuentra... Bien? —preguntó el mismo de antes, asomando su cabeza por el baño, retrocedió casi de inmediato cuando TaeHyun se le abalanzó encima, sujetándolo del cuello hasta sacarlo del baño.

—¿¡EN DÓNDE ESTÁ Y POR QUÉ CARAJO LO DEJARON SALIR!? —le gritó estampando el cuerpo del recepcionista contra la pared, quitándole el aire— ¿¡NO TIENEN UNA MALDITA SEGURIDAD ACASO!? —preguntó antes de arrojarlo a un lado, estampando el cuerpo contra la pared, TaeHyun retrocedió a pasos rápidos, casi corriendo a la salida del restaurante.

Sus manos que siempre estaban frías, estaban sudando.

Su expresión que siempre estaba seria, estaba descontrolada, parecía furioso pero a la vez preocupado.

Su respiración no era normal, su corazón retumbaba una y otra vez en su pecho.

No estaba, no lo tenía, no lo podía rastrear, no sabía en dónde estaba.

Y eso, lo desesperó y descontroló.

Bueno.... Ya llegamos al escapeee!  Se Lee algo "sencillo" pero en realidad no lo es, y no lo fue para BeomGyu... Tal vez vean un poco sencillo o fácil l manera de escapar, pero recuerden que no es fácil, el mismo BeomGyu lo hizo fácil ;)

Espero les haya gustado y haya logrado transmitir lo que quería! Los quiero!

Mientras otros se van, otros se vienen (referencia a ASH)

The_Dark_Diamond