119
Medio mes después.
Un día antes del aniversario.
TaeHyun estaba en su oficina, había vuelto a comprar un escritorio, tenía de nuevo el tablero de ajedrez de decoración, sólo que ésta vez la únicas piezas que estaban en el centro era el rey negro y la reina blanca, una al lado de la otra.
Tras él estaba el cuadro de ambos, estaba en silencio, revisando los reportes de la frontera de todo el territorio, además de tener un par de carpetas a un lado que tenía que leer y firmar para aprobar ciertos proyectos del territorio.
Alzó la mirada a la puerta antes de que le abrieran, BeomGyu le sonrió manteniendo una mano atrás.
—Cierra los ojos —pidió el humano cerrando la puerta a sus espaldas, el vampiro arqueó una ceja.
—¿Para qué?
—Sólo cierra los ojos —pidió de nuevo el humano, TaeHyun suspiró apoyando su codo en la mesa, dejó su cabeza reposar en su puño mientras cerraba los ojos, solamente escuchando que el otro avanzaba y dejaba algo en el escritorio, frunció el ceño al sentirlo acercarse, sintió un beso en la punta de su nariz.
Ya no se quejaba ni le molestaba que hiciera eso.
—Ya, abre los ojos —indicó el otro, TaeHyun lo obedeció, mirando una bolsa azul rey con un lazo gris, BeomGyu le besó la mejilla de nuevo, tomando asiento en su regazo.
—¿Y esto por qué? —preguntó metiendo la mano en la bolsa para sacar una la caja, mirándola por todos lados antes de deshacer el lazo y abrirla. BeomGyu pasó un brazo por sus hombros, peinando su cabello con distracción.
—Bueno, mañana es nuestro aniversario, quería darte algo antes... Y además, tu siempre me das cosas a mi, ¿No puedo darte cosas a ti? —preguntó mirando la caja, TaeHyun observó un collar plateado, era algo grueso, sin algún colgante, por otro lado, también había un anillo plateado que hacía juego con el collar, se colocó el anillo en silencio, BeomGyu tomó el collar para colocarlo él mismo, mirando como quedaba en el vampiro que observó la bolsa, había otra caja más grande y rectangular dentro.
La abrió en silencio, quitando el envoltorio, alzó las cejas, BeomGyu sonrió ante la reacción.
Al fin una expresión diferente.
—¿Te gusta? —preguntó, TaeHyun detalló el regalo. Era un arma de fuego, de color plateado y con sus propias iniciales grabadas, además de que tenía más detalles, venía con un forro de terciopelo bajo ella, era hermosa y personalizada.
¿Qué mejor regalo que ese?
—Si, me gusta, precioso —afirmó volteando a verlo para besarlo, pero BeomGyu dejó un dedo sobre sus labios.
—¿Cómo se dice? —preguntó, TaeHyun suspiró.
—Gracias...
—Muy bien —felicitó antes de besarlo, acariciando su nuca con sus dedos. Rió sintiendo las manos ajenas en su muslos, lo siguió besando provocando chasquidos en la oficina, lo tomó de las mejillas para profundizar, jadeando al sentir sus lenguas tocarse, sus labios húmedos, se separó en un chasquido, un hilo de saliva uniendo sus labios— ¿No estabas trabajando? —preguntó, TaeHyun asintió mirando los documentos con algo de fastidio.
—Lee esto —pidió entregándole los documentos al otro, BeomGyu limpió sus labios con sus dedos, leyendo la hojas.
Inevitablemente, se recostó del hombro del vampiro, leyendo con calma mientras el vampiro leía otra carpeta con concentración.
Estaban en silencio, solamente el pasar de las hojas, BeomGyu estaba tranquilo, leyendo lo que le había dado el vampiro, apoyado en su hombro, oliendo su perfume.
—Espero hayas aclarado que mañana tu día está ocupado... —murmuró pasando a la siguiente hoja, TaeHyun firmó un papel con su mano derecha, la otra estaba ocupada abrazando a su esposo y si bien, la mayoría de cosas las hacía con la izquierda, tenía la habilidad de usar ambas manos.
Así que firmó sin problemas, pasando papel por papel.
—Claro, mañana nadie nos va a molestar —afirmó, tomando otra carpeta, BeomGyu suspiró al terminar de leer.
Semanalmente, TaeHyun lo había obligado a leer los reportes de las fronteras al igual que él, ya no le molestaba, y de hecho, era para su propio conocimiento, no podía estar desactualizado del territorio donde vivía.
—Eso espero... Quiero estar todo el día contigo —habló cerrando los ojos, quedándose en su lugar esperando a que el vampiro terminara su trabajo.
En ellos, no todo era pelea y sexo.
Había momentos de calma, momentos tranquilos que compartían en silencio, las cenas de lo domingo, siempre comían juntos y a pesar de que el vampiro no tenía necesidad de dormir, todas las noches se acostaba con su pareja, y despertaban juntos.
Justo ahora, estaban calmados, BeomGyu estaba en su regazo, con la cabeza acostada en su hombro, TaeHyun lo abrazaba con la mano izquierda, pasando su dedo por el brazo ajeno en cortas caricias, mientras leía un documento con seriedad.
Aunque no era sorprendente que la calma durara tan poco entre ellos.
Cuando fue de noche, ya BeomGyu tenía su pijama, se había duchado y lavado los dientes, TaeHyun estaba en el borde de la cama, leyendo un libro de anatomía.
—¿Por qué nunca sueltas ese libro? —preguntó BeomGyu subiendo a la cama, se acostó con cuidado sobre una almohada en específico. TaeHyun solamente pasó la página.
—Es diferente.
—¿Ujum? ¿Y de qué es? —preguntó mirando sus uñas con tranquilidad.
—Anatomía neurológica —contestó el vampiro leyendo con concentración, BeomGyu arqueó una ceja, TaeHyun desde que lo conocía había tenido un libro de anatomía en manos, sea cual sea la edición y el tamaño, el vampiro los leía con suma concentración.
—¿Tu sueño frustrado es ser doctor? —preguntó mirando la espalda del vampiro que negó con la cabeza.
¿Kang TaeHyun como un doctor? ¿Quién se dejaría operar por semejante psicópata?
—Si sabes anatomía es más probable que tú víctima siga viva más tiempo... Porque sabes qué puntos tocar —explicó, BeomGyu sonrió mirando al techo.
—Que marido tan inteligente tengo... —halagó antes de cruzar los brazos— ¿Qué es más interesante? ¿Anatomía neurológica o yo? —preguntó, ampliando su sonrisa cuando el otro cerró el libro de inmediato, volteando a verlo por sobre su hombro.
—Tu.
—Entonces ven... —pidió mirando al vampiro dejar el libro de lado para ir con él, colocando una mano a cada lado de su cabeza, BeomGyu sonrió pasando sus brazos sobre sus hombros— Estaba pensando... Y creo que debería enseñarte a ser más... Cariñoso —habló haciendo al otro fruncir el ceño, TaeHyun se acomodó entre las piernas ajenas, BeomGyu lo abrazó con sus piernas.
—¿Para qué?
—Bueno... Para qué me abraces más... Me des besos suaves... —murmuró alzando su cabeza para besar su nariz— Y tengas más delicadeza... Aprender a dar una caricia...
—¿Me está hablando un experto? —preguntó el otro arqueando una ceja, BeomGyu chasqueó la lengua.
—Sólo inténtalo —pidió, TaeHyun bufó con fastidio.
—¿Qué mierda quieres que haga, BeomGyu? —preguntó, el otro lo soltó de los hombros con ceño fruncido.
—Vuelve a decirme BeomGyu —amenazó con un dedo, se acomodó en la almohada, metiendo una mano bajo ella para más comodidad— Dame besos... Suaves... Por toda la cara —pidió cerrando los ojos, imaginó al vampiro rodando los ojos antes de hacerlo.
Sintió el primer beso, en la punta de su nariz, con algo de presión.
—Más suave, cabrón —regañó sintiendo un beso más suave en la misma zona, asintió sintiendo otro en su pómulo, con la misma suavidad.
Fue a sus mejillas, su barbilla, sus comisuras, sus párpados cerrados, de último su frente.
—¿Ya? —preguntó el otro con fastidio, BeomGyu negó con la cabeza.
—Otra vez —pidió, sonriendo cuando recibió otro beso en la punta de la nariz.
TaeHyun besó su barbilla, siguió repartiendo los besos, bajó a su cuello, siguiendo con besos suaves y puntuales, sin lengua, sin morder, solamente un beso que era lo único que se escuchaba en la habitación.
—Eres como un perrito... Tan obediente... —rió a gusto, recibiendo otro beso suave.
BeomGyu abrió los ojos con suavidad, TaeHyun estaba besando el centro de sus clavículas, su nuca estaba expuesta para él.
Era el momento.
Sacó la mano que tenía bajo la almohada, sosteniendo la jeringa con Damolfén, la encajó en la nuca ajena, haciendo al vampiro tensarse en su lugar.
TaeHyun apretó los dientes, abrió los ojos de más sintiendo ardor en su nuca, alzó la mirada, BeomGyu arrojó la jeringa vacía al suelo.
—¿¡QUÉ HICISTE!? —preguntó el vampiro sujetándolo del cuello con fuerza, BeomGyu sólo lo observó con una sonrisa— ¿¡QUÉ HICISTE, BEOMGYU!?
—Te dije que no me dijeras BeomGyu —señaló sintiendo las manos del vampiro temblar, observó los ojos rojos ajenos llenarse de lágrimas que cayeron de los ojos del vampiro a su cara.
—N-no te vas a ir otra vez...—murmuró el otro apretando más su cuello, BeomGyu solamente lo tomó de las muñecas, aguantando la presión, debía esperar a que el Damolfén hiciera efecto para que sus fuerzas disminuyeran— No m-me vas a abandonar otra vez... —negó el vampiro con una risa, aún llorando, BeomGyu sintió su cara mojarse por las lágrimas ajenas, TaeHyun sintió como sus fuerzas se iban, aflojando el agarre de sus manos.
En ese momento, BeomGyu aprovechó y se zafó de sus manos, les dió la vuelta, empujando a TaeHyun al colchón, se colocó sobre él a horcajadas.
—No, no, no llores —negó acunando las mejillas ajenas para secar con su pulgar las lágrimas del vampiro, tocó una con su índice, sonriendo— Es nuevo verte llorar... —susurró, el otro trataba de agarrarlo con fuerza, de zafarse de ahí pero era imposible, menos con el Damolfén haciendo efecto poco a poco.
—No... Me vas a abandonar...
—No me voy a ir, TaeHyun —negó con suavidad, peinando el cabello del vampiro hacia atrás con cariño— No te voy a abandonar —prometió besando su mejilla.
—¿¡En-entonces por qué!?
—Me debes una... No, tal vez dos o tres... Aún no he saldado mi cuenta contigo —explicó escuchando al vampiro sorber su nariz, BeomGyu mordió su labio inferior— Que sexy te ves llorando... —murmuró pasando la punta de su lengua por la hilera de lágrimas que recorrían la cara del vampiro.
TaeHyun sintió sus ojos pesar, la debilidad en su cuerpo.
—Quédate tranquilo... Cuando despiertes yo voy a estar aquí —prometió palmeando la cabeza del vampiro con suavidad, tal como haría con un cachorro, TaeHyun lo observó, el cuerpo ya no le respondía, sus ojos seguían llorando y mostraba desespero en su mirada. BeomGyu besó su frente expuesta— Te amo, Kang TaeHyun... —susurró cerca de él, pasó su índice por los pómulos ajenos, llenos de lágrimas— Pero aún tengo cosas que hacerte... —explicó mirando al vampiro luchar en vano para que sus ojos no se cerraran, pero fue imposible.
TaeHyun quedó inconsciente, bajo los efectos del Damolfén.
BeomGyu sonrió, abrazando al vampiro con una risa. Observó su cara, relajada y con restos de llanto.
—Que lindo... —murmuró besando su pómulo, limpiando con sus manos lo húmedo de sus lágrimas— Hasta inconsciente te ves tan sexy... —-habló cruzando los brazos mientras tomaba asiento en el regazo ajeno, se movió de adelante hacia atrás, arqueando una ceja— ¿No funciona si tienes Damolfén? —se preguntó apoyándose del pecho ajeno, curioso, mientras seguía moviéndose de adelante para atrás sobre el regazo ajeno, sin recibir ninguna reacción. Chasqueó la lengua— Que aburrido —chistó antes de peinar el cabello ajeno, suave y bien peinado, sonrió emocionado por lo que pasaría—Va a ser divertido, te lo prometo —habló al líder antes de bajar de la cama y tomarlo de los tobillos, lo jaló hacia el borde, soltando un jadeo por el esfuerzo.
Él le iba a dar el mejor regalo de aniversario a su esposo, se lo merecía después de todo.
Debía cerrar con broche de oro toda la historia que habían construido por un año entero.
—Carajo, sí recuperó peso —jadeó cargando al vampiro inconsciente en su espalda, caminando por el pasillo hasta el sótano, había hecho el suficiente ejercicio para poder cargar al vampiro, y a pesar de eso, seguía siendo algo pesado. Sintió la respiración de TaeHyun en su cuello, lenta— Sólo sedado estás tan calmado... —murmuró empujando con un pié la puerta del sótano, entró con cuidado, sintiendo sus piernas doler un poco por el peso.
Aún así, dejó a su esposo justo en dónde quería, le quitó la camisa con cuidado, también los pantalones, solamente dejando la ropa interior.
Era de noche, el servicio estaba durmiendo, todos los guardias en sus puntos, caminando de un lado a otro, vigilando las afueras sin ser concientes que en ese mismo momento su líder fue dejado en sótano, sin ropa, encadenado de brazos y pies, y con una cadena en el cuello que lo aferraba a una pared.
Todo, obra del inofensivo Kang BeomGyu.
Ya no habrá más actualización hasta dentro de dos semanas que salga de un par de exámenes importantes que tengo :D
Sabía que iban a elegir el aniversario JAJAJAJA Así que, he aquí la primera parte
Si este TaeHyun fuera doctor, ¿Se dejarían atender por él?
Nos vemos!
The_Dark_Diamond04
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