1 mes y medio después.

—Su fractura ha sanado más rápido de lo que pensé, ha sido un buen avance —comentó el médico mirando al humano frente a él de pié, sin muleta, caminando paso por paso, había tenido el pié inmovilizado por mucho tiempo después de todo— Puede caminar con normalidad, solamente evite correr o saltar por ahora...

—¿Puedo ir a nadar? —preguntó, el médico asintió, dándole las recomendaciones mientras recogía su equipo.

En ese mes y medio su cuerpo se había recuperado de maravilla, los golpes se habían borrado, ya no había dolor, estaba casi recuperado, incluso podía caminar poco a poco, sin ayuda de la muleta tan fastidiosa.

Además, en ese mes y medio, el territorio vampiro se había recuperado mucho mejor de lo que muchos esperaban, podrían decir que ya todo había vuelto a la normalidad.

Incluso, TaeHyun pasaba más tiempo en la mansión.

—¿Qué te dijo? —preguntó el vampiro cuando lo vió entrar al lugar, BeomGyu miró la piscina, su esposo con el cabello mojado, tapando su frente, algunas gotas deslizándose por su cuerpo.

—Estoy mejor —contestó quitándose la playera, igual los pantalones, quedando sólo en ropa interior. Se acercó con cuidado al borde, tomó asiento y sólo metiendo los pies— Puedo caminar solamente... —comentó mirando al vampiro nadar hasta él, acomodándose entre sus piernas.

—Eso es bueno, precioso —asintió el vampiro besando sus muslos desnudos, tomando sus tobillos con cuidado bajo el agua.

Habían retomaron su rutina de casados, domingos de cena, regalos mensuales, además de recuperar todos los lujos que tenía, tenía un teléfono y un auto nuevo, ropa de diseñador, y demás.

—¿Viniste a nadar conmigo? —preguntó el vampiro besando su abdomen, pasando su lengua hasta llegar a uno de sus pezones, BeomGyu apretó los labios, escuchando la pieza de su piercing chocar con los dientes ajenos, provocando un tintineo.

—S-sólo a verte... Sabes que yo no nado —explicó, exhalando cuando el vampiro lo soltó, observándolo unos segundos antes de tomarlo de la cintura con fuerza para jalarlo hacia él, dentro de la piscina— ¿¡Qué haces!? —preguntó aferrándose con las piernas a la cadera del vampiro que solamente besó su frente.

—Toma aire, precioso —recomendó alejándose del borde.

—¡Ni se te ocurra ha-... —el vampiro los impulsó hasta hundirse bajo el agua, BeomGyu apretó los ojos y cerró la boca, sintiendo al vampiro nadar, se aferró a él cuando sintió que lo soltó para usar sus brazos.

Luego de unos segundos, TaeHyun salió del otro lado de la piscina, una parte más baja en dónde ambos podían tocar el suelo.

BeomGyu abrió los ojos, lo primero que hizo fue escupir el agua que entró a su boca, directo a la cara de su esposo.

—¿¡Estás demente o qué te pasa!? ¿¡No te sube el oxígeno a la cabeza, hijo de puta!? —le gritó en reclamo, pero sin soltarlo, tosió ahogado, tratando de recuperar el aire.

TaeHyun pasó su manos por su cara, limpiando el agua que el otro le había escupido en la cara, y simplemente rió.

Se rió, mostrando una sonrisa, que hizo al otro callarse.

¿Cuándo TaeHyun se había reído?

No una risa de locura, tampoco una risa de burla, mucho menos una risa falsa.

Una risa genuina, de felicidad.

—¿Vas a seguir cuestionando mi estabilidad mental, precioso? —preguntó colocándose al borde de la piscina, apoyando sus codos en ella, BeomGyu pasó sus manos por su cabello con un chasquido.

—Quiero una tarjeta de crédito —pidió, cambiando el tema de conversación y volteando a ver a su esposo que ladeó la cabeza.

—¿Una extensión de mi propia tarjeta?

—Ujum —afirmó caminando hasta el vampiro, besando su mejilla, TaeHyun se dejó hacer.

—La tendrás en una semana —prometió, BeomGyu frunció el ceño.

—¿Por qué no antes? —preguntó cruzando los brazos.

—Es un proceso largo... Y el banco tiene más cosas que hacer —excusó con una media sonrisa, impulsándose para salir del agua, quedando sentado en el borde.

—La quiero dentro de dos días —exigió, TaeHyun pasó sus manos por su cabello, quitando los mechones de su frente.

BeomGyu tocó las rodillas del vampiro, haciendo espacio para acomodarse entre ellas, el líder lo observó fijamente.

—¿Cómo quieres que la consiga en dos días, cariño mío? —preguntó recibiendo un beso en el centro del pecho, BeomGyu alzó los hombros.

—¿No eres el líder? Mueve tus influencias y si no funciona, amenaza a alguien —solucionó con una sonrisa pícara, el vampiro arqueó una ceja. BeomGyu pasó su índice por el pecho ajeno, haciendo un camino hasta tocar su manzana de Adán— ¿Lo vas a hacer o no, Tae? —preguntó en un tono bajo, alzando la vista al vampiro que no le quitaba la mirada de encima, el vampiro lo sujetó de la mano, besando su palma y luego su dorso.

—En dos días tendrás la extensión, precioso —prometió sacándole una sonrisa.

BeomGyu dejó sus manos a cada lado del vampiro, se impulsó también para salir, quedando sobre el vampiro que lo observó, sujetándolo de la cadera, dejándolo sentado en su regazo a horcajadas.

Lo abrazó por los hombros, sintiendo la lengua del vampiro pasar por su cuello, sobre su yugular.

—¿Sabes qué extrañé de tí? —preguntó en un tono bajo, TaeHyun se irguió para observarlo, esperando por la respuesta, BeomGyu relamió sus labios, bajando sus manos por el pecho hasta el abdomen ajeno, al final dejando las manos sobre la pelvis ajena— Que me escupieras... En la boca —respondió él mismo, sonriendo cuando el vampiro lo sostuvo de la barbilla con la mano entera, siendo rudo y apretando lo necesario.

—Abre la boca —ordenó el vampiro, su esposo le obedeció, sacando la lengua incluso y sintiendo su piel erizarse con la sensación cuando estuvo hecho.

—Es... Delicioso —murmuró antes de atraer al vampiro por el cuello para besarlo, ambos quedándose en el borde de la piscina.

Con ese tiempo que había pasado, BeomGyu ya había conocido al personal nuevo, se había familiarizado aún más, y ya sabía quién era el encargado de las estructuras del sótano.

Aún así, esperaría a tener la extensión de la tarjeta de su marido.

Así podría comprar por su cuenta más... Detalles.

—Eres tan adictivo... —murmuró el vampiro bajando por su pecho, quedándose por debajo de su ombligo, en dónde clavó los colmillos sin algún tipo de cuidado,  aún así, el otro soltó un gemido sin inhibiciones, sujetando el cabello de su esposo.

TaeHyun chasqueó la lengua, volteando a la puerta antes de que fuera tocada.

—Habla —ordenó, su esposo lo empujó por el pecho, subiendo su ropa interior, TaeHyun lo tomó del tobillo sano para jalarlo hacia él, BeomGyu frunció el ceño.

—Señor, hay problemas en la corte —avisó la voz de Ken, serio y sin inmutarse cuando escuchó chasquidos e intentos para guardarse los gemidos del humano.

Ya habían vuelto a lo de antes después de todo.

—¿Qué tan grave es? —preguntó sintiendo jalones en el cabello, los ignoró encajando los colmillos en uno de los muslos ajenos, succionando. BeomGyu cubrió su boca.

—Se han registrado varios terroristas en las últimas horas, la corte necesita su decisión, señor —explicó, TaeHyun soltó un sonido de fastidio, separándose de su esposo con seriedad.

—Ya vete —contestó, escuchando los pasos de Ken irse alejando. BeomGyu se levantó del suelo al igual que el vampiro.

Pasó sus manos por su cabello, caminando hacia su ropa en silencio, TaeHyun lo observó unos segundos antes de ir por una toalla.

—¿A qué hora vas a volver? —preguntó el otro colocándose por lo menos los pantalones, TaeHyun secó su cabello, calculando el tiempo que le llevaría.

—En dos horas.

—Uhm —fue lo único que le contestó, tomando el manubrio de la puerta para abrir e irse. Pero en ese momento, el vampiro lo jaló de la muñeca, haciéndolo voltearse y estampar su espalda contra la pared.

—¿En qué estás pensando? —preguntó el líder ladeando la cabeza. BeomGyu frunció el ceño.

—¿Qué te importa, TaeHyun?

—Desde que despertaste estás extraño, ¿En qué carajos estás pensando ahora? —preguntó, apretando su muñeca, BeomGyu rodó los ojos.

—Sólo estoy tranquilo, ¿No puedo estarlo? No todo el tiempo tengo que estar alerta, TaeHyun, es tu problema si tú siempre lo estás, yo estoy tranquilo, porque estoy en mí casa con mi marido, punto —finalizó, atrayendo su mano a su cuerpo con fuerza— Y suéltame que me estás lastimando —reclamó, sabiendo que TaeHyun se pondría agresivo, interrogante e intenso, cada vez que hubiera un cambio de actitud de su parte.

TaeHyun aún tenía la espina de su escape y Kwan, y con cualquier cambio de actitud de BeomGyu iba a reaccionar así.

—Tienes que confiar en mí —pidió el otro caminando por el pasillo, el líder caminando tras él con una toalla en el hombro, y la otra alrededor de su cintura.

—Me traicionaste cuando lo hice —señaló el vampiro, BeomGyu rodó los ojos, sabiendo que se refería simple y llanamente a Kwan.

Se quedó callado, caminando por los pasillos, seguirle el tema era volver a caer en lo que pasó con Kwan, y no quería eso.

—Esto es tu culpa —acusó el vampiro tomando la toalla en su hombro para seguir secando su cabello sin importar que estaba mojando el suelo, para eso tenía un servicio.

—¡Ja! Claro, todo lo que pasa es mi culpa, siempre lo dices —manoteó el aire sin interés, TaeHyun miró su espalda caminando en silencio, BeomGyu se detuvo al ver una de las mujeres del servicio limpiar un cuadro, volteó a verlos apenas los captó.

TaeHyun se detuvo tras él.

—Buenas tardes, señores Kang —saludó la mujer mirando a ambos, BeomGyu cruzó los brazos.

—Avisa a los de cocina que no voy a estar, preparen almuerzo para una sola persona —avisó TaeHyun con seriedad, la mujer observó al líder fijamente, captando la orden— Y limpia el pasillo que va a la última sala, está llena de agua —ordenó, BeomGyu arqueó una ceja al ver que la mujer solamente veía al líder.

—No tienes necesidad de verlo para escuchar las órdenes —espetó con seguridad, siguió caminando, la mujer desvió la mirada de inmediato, siguió limpiando el cuadro.

—Lo siento mucho, señor —murmuró la mujer sintiendo la respiración de otro en su nuca.

—Vuelve a verlo y te saco los ojos —susurró el otro antes de seguir caminando como si nada, TaeHyun atrás de él con una media sonrisa.

El servicio se había dado cuenta en ese mes y medio que las palabras de BeomGyu habían sido una mentira.

¿En qué parte él era inofensivo?

Ellos como servicio no habían recibido malos tratos, y de hecho, admitían que BeomGyu era mucho más cortés que el líder en el ámbito del "por favor y gracias" ninguno habían sido golpeados, tampoco les habían gritado.

Pero, BeomGyu había llegado a darles una amenaza a ciertos trabajadores, de manera pasivo agresiva.

Así que la diferencia entre el líder y su esposo, no era mucha.

—Me voy —avisó el líder cuando estuvo listo, con un traje, el cabello seco y bien peinado, los zapatos brillantes y un reloj en su muñeca.

BeomGyu sonrió mirándolo fijamente, moviendo sus ojos por todos lados.

—Adiós —despidió levantándose del sillón en dónde estaba, TaeHyun solamente lo observó acercarse a él, recibiendo sin problemas el beso suave que le dió su esposo— Abrázame —pidió rodeando los hombros del vampiro en un abrazo.

—¿Para qué?

—Hazlo antes de que te rompa un brazo —pidió con un tono suave, el vampiro apoyó su barbilla en el hombro ajeno y lo abrazó por la cintura, pegando sus cuerpos.

BeomGyu sonrió, cerrando los ojos. Olió el perfume del vampiro, sintió sus cuerpos juntos.

—Cada vez que te vayas a algún lado, me tienes que abrazar —habló, TaeHyun solamente se quedó en su lugar, escuchando a su esposo— ¿Si, TaeHyun? —preguntó al no recibir respuesta, el vampiro le murmuró una afirmación antes de apretarlo una última vez y separarse.

Las veces que TaeHyun lo había abrazado, recordaba que había sido circunstancias de vida o muerte, en medio del desespero, pero fuera de ello, el vampiro no lo hacía voluntariamente.

—Nos vemos, señor Kang —despidió con una sonrisa al vampiro que salió de la mansión luego de darle una última mirada.

Se arrojó a la cama de ambos, suspirando y sintiéndose cómodo. Miró el techo, perdiéndose en sus pensamientos, poco a poco llegando a el sueño que había tenido la noche pasada.

—Es una estupidez... —murmuró él mismo, acomodándose en la cama, había tenido un sueño lo suficientemente lúcido que podía recordarlo una y otra vez, sin olvidar cada detalle.

Chasqueó la lengua al encontrarse pensando en ello de nuevo, volviendo a recordar su sueño.

—Carajo —refunfuñó abriendo el cajón del buró, tomando su teléfono, a un lado había una caja de joyería, la observó unos segundos antes de abrirla con cautela para revisar su interior.

Sonrió mirando una jeringa ahí, estaba completamente llena, con la protección en la aguja, el líquido era azul, un azul muy claro.

La volvió a cubrir, cerrando la gaveta.

De tantas cajas de joyería que tenía, TaeHyun jamás sospecharía que una de ellas no tenía joyas.

Si no más bien, una jeringa con Damolfén.

¿Recuerdan qué es el Damolfén? ;D

Nos vemos en el siguiente! Veremos el sueño de Beom, qué creen que sea?

The_Dark_Diamond04