Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

-𝒍𝒆 𝒎𝒂𝒓𝒄𝒉𝒆𝒖𝒓 𝒂𝒖-𝒅𝒆𝒔𝒔𝒖𝒔 𝒅𝒆 𝒍𝒂 𝒎𝒆𝒓 𝒅𝒆 𝒏𝒖𝒂𝒈𝒆𝒔-


| 9 |

Después de los hermanos Kim tratar de recuperar todo ese tiempo qué ambos estuvieron separados, Taehyung dejó de reír a carcajadas para comenzar a susurrar con una sonrisa, cerrándose sus párpados poco a poco, somnoliento.

—Kookie, tengo sueño... —El artista se colocó entre los fuertes y cálidos brazos de su novio, sin tomar en cuenta el par de ojos frente a él del sueño qué tenía encima—. Llévame a la cama

Jeongguk, enfocándose por completo en su amado, acarició con su mano una de sus mejillas, enternecido.

—Iré de inmediato, mi ángel. Solo deja qué nos despidamos de tu hermano y de Jiminie. ¿Está bien?

—Okay —Contestó el pelinegro ya con la voz apagada del sueño, quedándose rendido en su pecho al instante.

—Jeongguk —Llamó Namjoon al novio de su hermano, obteniendo la atención de este de inmediato.

— ¿Sí, cuñado? —Preguntó inocente el castaño, sin un atisbo de sorpresa de qué Kim supiera su nombre, cosa que hizo a Jimin alzar una ceja, curioso.

— ¿cuñado, dices? —La mandíbula del mayor de los Kim se endureció y Park al verlo juraba se le iba a zafar una de las venas del cuello. Pero incluso así el hombre sonrió, asintiendo al menor—. Escucha... Te agradezco que hayas sido un apoyo para Taehyung, con solo oírle unas cuántas horas puedo notar como ha cambiado para bien.

—Gracias, Kim. Espero podamos estar juntos más segui-...

—Por otro lado, eso no significa qué yo te acepté cómo pareja de mi hermano. Así qué por hoy retírate y déjame a mí hacerme cargo de Taehyung.

— ¿Disculpa?

—Lo qué oíste, Jeon —Afirmó Namjoon con un tono de voz firme y brusco—. No me hagas hablar más porque sé no te gustará el resultado.

Ambos hombres se miraron con enojo en sus pupilas, enfrentándose. Jeon se veía capaz de hacerle frente al mayor de los Kim, incluso sabiendo los tres años de diferencia qué le llevaba.

Jimin entre ambos, siendo testigo de la tensión en el aire, decidió acabar con ello de una vez, aplaudiendo para así llamar la atención de los dos.

—Ya me cansé de escucharlos discutir cómo perros rabiosos así qué ambos se van y yo me quedo a dormir con TeTe.  Se me van largando de una vez.

—P-Pero Jimin, quería quedarme con mi hermano —Se quejó el mayor, casi cómo un niño.

—Park, no me puedes hacer esto, yo le prometí a mi ángel dormir juntos hoy, adema-...

—Qué ángel ni que nada, ya dije que se me salen de aquí. Los vi yéndose —Al no moverse ninguno de los dos chicos, el rubio se sacó el zapato del pie para apuntarlo hacia ellos cómo arma—. ¿A qué me hacen caso? Voy a contar hasta tres. ¡Uno!

—Ya, está bien, Jiminie. Nos iremos, pero baja el zapato. ¿Sí? —Namjoon se levantó rápidamente, alzando las manos a modo de rendición, girando la cabeza en torno al menor, qué aún se encontraba sentado en el sofá con el pintor en brazos—. Levántate y deja a mi hermano tranquilo, "cuñado".

Al escuchar el sarcasmo en la voz del mayor, Jeongguk frunció el entrecejo, acurrucando aún más al pelinegro, qué yacía dormido en sus brazos, realmente cómodo.

—Haz caso, Jeon —Ordenó ahora Park, alzando el zapato de nuevo hacía él—. Ten muy en cuenta qué me debes una paliza, así qué no me incites.

El castaño no quería ni se encontraba dispuesto a hacerle caso a ninguno. La única opinión qué le importaba era la de su novio, acariciando un poco su melena negra para despertarle y así poder despedirse, sí, este así lo quería.

—Precioso —Susurró al oído del pintor, con extrema delicadeza—. Ya vamos a dormir, cariño. ¿Quieres ir con Jimin a descansar?

Aún medio dormido, Taehyung asintió cómo pudo, sacándole un suspiro al menor de lo tierno qué se veía. Este de inmediato dejó un beso en su frente, sintiendo un vacío en la boca de su estómago por dejarlo ir.

—Lo verás mañana. Lo prometo —Dijo Jimin, notando lo difícil qué le estaba resultando al menor irse dejando a Taehyung en el apartamento.

—Te amo... —Susurró Jeon, embelesado y hechizado, Taehyung era lo único que le hacía olvidarse de todo lo demás. Su única luz—. Incluso sí me lo permiten o no vendré a abrazarte, mi ángel. Tenlo por seguro —Concluyó el menor con su mirada posada en la de Namjoon. A modo de desafío.

Luego de separarse de él y dejarlo con sumo cuidado en un sillón, Jeongguk se levantó hastiado, haciendo una corta y casi forzada reverencia a los mayores para así retirarse del apartamento.

Al Park notar que por fin el menor se había ido, volteó rápidamente hacía Kim, con el ceño fruncido.

—Voy a pasar por alto que el mocoso de Jeon y tú se conocen.

— ¿Cómo lo-...

—Pero lo qué nunca dejaré ir son mis palabras de advertencia —Rápidamente Park tomó de la camisa al mayor, empujándolo contra la pared para mirarle con frialdad—. Cuidado con lastimar a mi mejor amigo, Kim.

» Taehyung es cómo un hermano para mí y lo sabes. Yo solo quiero qué sea feliz, incluso si es con el descerebrado de Jeon así qué escúchame bien lo qué te voy a decir, porque no lo repetiré. Sí Taehyung quiere a su novio, tú lo vas a respetar.

—Jimin, tú no lo entiendes. Jeongguk, él es-...

—No me interesa ni quién es el qué te hace el café los sábados, ahora me va a interesar quién es Jeongguk. Lo único que me importa es qué trate bien a mi amigo y ya vimos que el idiota lo ama con locura. Así que vas a dejar de jugar a los perros y gatos con él. ¿Entendiste?

Al notar cómo el mayor se quedaba en silencio, Jimin se enfadó aún más.

— ¿No me entendiste, Kim? ¿Te hago un dibujo?

—Tú... —Susurró el mayor, subiendo su mano izquierda hasta posicionarla en la mejilla del rubio, explorando la piel ajena con la yema de los dedos—... ¿Te has hecho aún más hermoso mientras no estoy?

Rápidamente, el contrario quitó la mano de su rostro, sintiendo cómo fácilmente se le calentaban las mejillas.

—Taehyung está frente a nosotros, no seas imbécil, Namjoon. Sabes qué te estoy hablando de algo totalmente distinto.

—Y tu sabes que no puedo evitarlo, quisiste quedarte con Taehyungnie y respete tu decisión, pero en estos seis meses jamás recibí una llamada tuya.

— ¿Y? Sabías que nos veríamos de todos modos —señaló el rubio, tratando de restarle importancia, incluso si sentía su corazón latir en su pecho sin descanso.

—Qué te extrañé cómo un loco. ¿No me vas a permitir ni un beso de bienvenida, Park?

Lentamente, el mayor acercaba sus labios a los ajenos, con la intención de saciar esa sed, qué lo atormentaba desde hace meses por esos labios que quería fueran suyos cuánto antes.

—Oh, Namjoon... —Susurró el menor, pasando sus lengua suavemente por el belfo inferior, sintiendo su respiración agitarse—. ¿Será qué puedes hacerme un favor, cariño?

—Lo qué tú desees, mi niño.

— ¿Podrías-... —De forma abrupta, el rubio se separó, dándole un rodillazo al mayor en el abdomen que le hizo sacar todo el aire—... dejar de interrumpirme mientras te hablo? ¿No tienes modales o qué?

—P-Perdón —Dijo cómo pudo Namjoon, buscando aire en sus pulmones.

— ¿Te dije o no te dije qué Taehyung está frente a nosotros? No sé qué pasa por tu cabeza. Tanto tinte plateado te está comiendo el cerebro.

—Estaba e-equivocado, me arrepiento.

—De lo único qué quiero te arrepientas ahora es de la escenita con el novio de Tae. Así que estás advertido. Ahora ya vete, qué a mi TeTe le dará frío si sigue en el sofá.

Y sin esperar una respuesta alguna del mayor, el rubio lo arrastró a la salida, cerrando la puerta rápidamente para apoyarse en esta.

Alzó ambas manos y las masajeo contra sus mejillas. Estaban calientes.

—Dios, eso estuvo cerca —Susurró, lentamente bajando hasta sentarse en el suelo. Miró el apartamento con una pequeña sonrisa, notando a su amigo a punto de caerse del sofá—. Ah, parece qué no tengo tiempo para pensar en romance. ¡Tae, espera, te vas a caer!

[...]

Al Namjoon salir del edificio, aun algo melancólico por el rechazo que Jimin claramente le había demostrado, vio a lo lejos a alguien postrado en su auto.

Sin embargo, este no se alarmó. Dando varios pasos hasta llegar al vehículo—. ¿Esperaste mucho?

La persona qué lo esperaba chasqueo la lengua, ya exasperado.

— ¿Por qué tardaste tanto, Namjoon?

— ¿Te tengo que decir cuánto me voy a tardar en llegar a Mi auto? —Inquirió el de cabellos plateados ya harto.

—... ¿Tae se despertó, se sintió mal?

Namjoon al escuchar aquello suspiró a la par qué recordaba las palabras de su Jimin, finalmente negando a lo que la persona le había preguntado.

—No, Jeongguk. Todo está bien, nunca se despertó.

—Qué alivio —Dijo simplemente el menor, suavizando sus facciones de solo pensar en su novio—. Me alegra este durmiendo bien.

—Por favor deja de hacer esa cara, sé que estás babeando por mi hermano y me molesta cómo no tienes idea.

—A ti te molesta mi cara sin importar  qué tenga en mente, Namjoon.

—Exacto —Afirmó el mayor, sin ganas —. Así qué dime qué haces aquí y luego lárgate para por fin irme a mi casa. Son las tres de la madrugada.

—¿Jimin preguntó algo?

— ¿Y qué te importa que lo haga? —Le preguntó rápidamente, frívolo—. Estoy seguro, él ya debe saber todo por Tae-...

—Aún no le he contado a Taehyung mi pasado o a qué me dedico.

— ¿Qué?

—Iba a hacerlo hoy, pero llegaron Jimin y tú de repente. No podía soltar algo así cuando teníamos visitas.

— ¿Teníamos? —Señaló Namjoon, lleno de una repentina ira, qué se reflejaba al instante en su mirada, incluso a altas horas de la noche—. ¿Acaso ya te pintas siendo el único hombre qué quiere mi hermano? ¿Piensas en la boda, en qué ya son una pareja casada?

—Namjoon... —Advirtió el castaño con voz demandante, para qué este dejará de hablar.

—No me mandes a callar qué en estos momentos no eres mi jefe —Confesó, tomando bruscamente a Jeon de ambos extremos del cuello de su camisa—. En este instante solo eres el malnacido que grita a los cuatro vientos que ama a mi hermano, pero no se ha puesto nunca los pantalones para decirle quién es en realidad.

» ¿Tanto quieres jugar a la casita? Para eso mejor ve a comprarte dos Barbies y deja a mi hermano menor, que lo único que ha hecho es darte su cariño, en paz. Porque si no te atreves a decirle toda la verdad, temeroso de que Taehyung no te perdone, yo lo haré.

Aun cuando Namjoon lo agarraba con fuerza y gritaba sus palabras llenas de ira hacia él, Jeongguk no se quejó.

Tiene toda la razón. Se dijo a sí mismo.

— ¿Terminaste? —Preguntó sombrío el castaño.

—... Sí, ya terminé.

Ambos se soltaron del agarre, con una mirada cansada—y en el caso de Jeon—, llena de dolor.

— ¿Sabes? Te lo agradezco.

— ¿El qué? ¿Qué casi te diera un puñetazo?

—Qué seas tan buen hermano para mi-... Para Taehyung. Incluso si llegara a irme de su lado sé qué estaría en muy buenas manos.

—Yo no te estoy diciendo qué te vayas, Jeon. No soy capaz, incluso si eso deseo, ¿Crees qué no noté la felicidad con la que Tae hablaba? Si el no fuera ciego, te juraría vi un brillo indescriptible en su mirada. Te adora.

—Sí, pero tal vez ya no lo haga cuando sepa lo que he estado ocultando desde el principio —Concluyó, apretando ambos puños, sin importarle lo blancos qué estaban, por la fuerza con la que apretaba—. Nadie podría separarme de él. Nadie excepto él mismo.

— ¿Y la idea?...

—Es lo único qué siempre me hará sentir miserable.

[ESCENA ADICIONAL]

A la mañana siguiente, tranquilamente en el apartamento, dormían los amigos en la cama del artista, sintiendo el frío del aire acondicionado.

Los rayos del sol se asomaban a través del gran ventanal de Taehyung, dando calidez a la habitación. Cómo una suave alarma natural, despertando así al peli negro.

— ¿Qué hora es?

El pintor, al sentir el calor en su cuerpo, se estiró un poco, buscando el pecho de su novio para acurrucarse en él y darle los buenos días.

Buscó con sus dedos, encontrando una cabellera que afectuosamente comenzó a acariciar, mientras sonreía sereno.

—Buenos días, Kookie —Saludó en voz baja, con cariño—. ¿Dormiste bien?

—No soy Jeongguk, pero dormí bien.

Rápidamente, el menor quitó la mano, sorprendido—. ¡¿Jimin?!

El rubio cómo si nada, se acurrucó otra vez contra las sedosas sábanas, dando un quejido por el repentino del pintor.

—TeTe, ¿por qué te alarmas? He estado durmiendo contigo desde qué teníamos siete años. Ahora vuélveme a sobar mi cabellito, me lo merezco.

—Pero... —En un instante, registró con las manos la cama, dándose cuenta de qué el castaño no estaba—. ¿Y Kookie?

—Él... —Pronunció Jimin, aún tratando de seguir durmiendo—... Se murió.

— ¡¿Qué?!

.

.

.

NA: Les agradezco mucho el cariño que le han dado a BLIND. <3 quería decirles que a partir de este capítulo mi forma de redactar será distinta porqué todos los anteriores capítulos los hice hace ya dos años. 🤧<3.

Sin embargo, espero que les guste y que sigan disfrutando de esta historia. Por otro lado, Namjoon reveló algo extraño, ¿Qué significa la confesión de que Kook era su jefe? ¿A que se dedica Jeongguk?

Pueden dejar sus teorías en este mismo comentario. Los leo. 👀<3

¡Nos vemos en el próximo capítulo, bye! 🌙.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro