—"Después de tantos años, el museo más exitoso de Corea ha anunciado una nueva exhibición de impresionismo."

Lienzos en el suelo, pequeñas gotas de todo el suave olio recién hecho y unas tasa llenas de café. Un café tan oscuro, como el de los ojos de aquel joven que con sólo escuchar la palabra museo, se levantó casi eufórico hacía el televisor.

—¿Una nueva exhibición luego de tanto tiempo? Debes estar bromeando. ¿Y de impresionismo?

Y como si el aparato hubiera escuchado lo que pensó, al poco tiempo respondío a su pregunta.

—“Así es, 'de impresionismo en todo los sentidos'. De esa forma lo describió cada uno de los empleados, gerentes e incluso el dueño del museo Kim Namjoon.”

El televisor seguía dando noticias sobre la exhibición pero el joven ya de por si sentía interés.

—Debo ir a esa exhibición como sea, un centro de exhibición de impresionismo es algo que no me puedo perder.

Y con eso el de cabellos marrones dejó la habitación, sin darse el tiempo para apagar la televisión que dijo algo más acerca de la noticia.

—“A pesar de las enormes expectativas y deseos de contemplar las pinturas, todos en el mundo del arte se han emocionado aún más al saber sobre el pintor, ya que éste hombre, ha logrado ser un famoso y aclamado pintor, siendo incapaz de ver.”