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two

louis tenía dos hijos adolescentes.

harry suspiró un poco triste.

le había gustado el omega.

se veía dulce y se notaba que le gustaban los niños.

sería hipócrita de parte de harry juzgarlo, nunca lo haría.

harry tenía él mismo dos hijos y un matrimonio pasado, pero ¿adolescentes?

los adolescentes son sucios, molestos y les gusta masturbarse.

¡además de que son alfas!

harry sabe que él no fue un terrón de azúcar durante su adolescencia y especialmente cuando se consideraba de cuidar a su madre omega y su hermana menor.

el punto es que harry estaba un poco desanimado.

su mejor opción fue ir al supermercado para poder distraerse, además de que le hacían falta jugos en su casa porque riley decidió que quería llevarle jugos a su esposa, jugos que claramente ella no compró.

harry puso el paquete de jugos en su carrito.

no sabía si él era muy negativo pero las luces del supermercado hacían ver todo opaco, todo se veía frío y se sentía sin sentido de orientación.

se había separado hace tres años, sus hijos se veían bastante felices pero él se sentía un poco vacío.

no es que amara a riley y quisiera regresar con ella.

pero él quiere vivir esa experiencia de amar a alguien.

—auch... —un golpe en seco y después el sonido de unas cajas de cereal cayendo llamó la atención de harry.

al ver al frente se encontró con ese lindo omega en el suelo y unas cajas de cereal a su alrededor.

louis se levantó y empezó a juntar las cajas de cereal en sus brazos.

harry rápido se acercó a ayudarle.

—hola, louis. —el alfa sonrió.

louis se sonrojó por la cercanía del alfa que le estaba ayudando a recoger las cajas y después le ayudó a levantarse.

—hola, señor styles. —louis sonrió.

el alfa sonrió dulce. —dime harry por favor, me haces sentir como un anciano.

louis rió dulce.

—bien... harry.

oh dios, se escuchaba tan bien salir de sus labios.

—veo que tuviste una pelea con las cajas de cereal.

louis rió y harry pudo sentir como su corazón latió un poco más rápido.

—estaban en el anaquel más alto y no soy diminuto pero de verdad esos anaqueles no son muy prácticos.

harry rió al ver la diferencia de altura entre los dos, no era tanta pero si era notable.

—¿a tu grupo si les gusto la excursión? —harry buscaba cualquier forma de que su conversación siguiese, de una forma u otra sintió que se sentía más feliz al estar hablando con louis.

louis sonrió feliz.

—les encanto. —louis dijo emocionado. —a mi también, hace mucho he querido tomar clases de pintura o arte y creo que esta visita me hizo darme cuenta que si lo haré.

harry sonrió emocionado.

—yo podría darte clases.

—¿también pintas?

—por eso estudie historia del arte. —harry rasco su nuca nervioso. —soy pintor y todo eso.

louis lo vio impresionado.

—eso es asombroso. —el omega mordió su labio nervioso por la forma en que el alfa guapo lo veía.

harry le dio una sonrisa coqueta.

—puedo darte mi tarjeta y ya sabes... podemos ir a cenar y hablar más de arte. —harry se acercó un poco más a louis.

—¿cómo una cita?

—si tú estás dispuesto puede ser una cita. —harry le guiñó un ojo y el omega se sonrojó.

—m-me gustaría...

—¿este hombre te está molestando, mamá? —un chico alto se puso entre harry y louis y le gruñó un poco a harry.

el chico de ojos azules, cabello castaño claro y muy alto veía con amenaza al alfa que estaba cerca de su madre.

no dejaría que cualquier otro imbécil tratara como basura a su madre.

harry se separó un poco y recordó.

dos hijos adolescentes.

—no, solo conversábamos, nate. —louis dijo dulce y le sonrió a harry.

harry sonrió.

louis es muy bonito.

—¿qué necesita? —nate preguntó tosco. —¿necesitas algo o qué le ves a mi madre?

el muchacho de ojos azules vio desconfiado a harry y se quedó junto a su madre.

—no hay ningún problema, nate. —louis calmó a su hijo. —nos vemos luego, harry.

louis le entregó un papelito con su número a harry se alejó con el alfa viendo desconfiado a harry.

harry sonrió.

tal vez fue un muy mal primer encuentro con el hijo de louis, pero tenía el número de louis y ahora podría llamarlo y acordar una cita.

tal vez riley tenía razón y es una buena idea volver a las citas.

🧺🧺🧺

louis entró a su casa.

hacia dos años que la compró y todo se veía bien.

louis dejó las compras en la mesa de la cocina y nate estaba con él.

a nate no le gustaba dejar a su madre solo, claro que le daba su espacio, pero él sabe que muchos alfas se acercan a él con intenciones que no son exactamente de una amistad y se rehusa a ver que traten mal a su madre como lo hacía su padre.

—hola, lou. —jake estaba en la cocina con un ramo de flores.

louis vio extraño las flores y se paro un poco más lejos.

a veces a jake se le ocurría que quería volver a ser una familia, pero al final siempre todo terminaba como una pelea y con ellos dos dejándose de hablar por meses.

—jake. —nate vio a su padre.

—hola, campeón, ¿qué tal el juego de alexander?

—sabrías como fue si hubieses ido. —nate contestó enojado.

jake vio como su hijo se sentó en la mesa de la cocina para darle privacidad a su madre, pero para estar cerca por si es que su padre empezaba a gritarle.

louis empezó a guardar las compras.

—¿necesitas algo, jake? —louis le pregunto al alfa que se veía bastante feliz.

—acabo de depositarte el dinero de la manutención.

—gracias.

jake rodó los ojos y se acercó a louis.

—¿podrías dejar de ser tan seco conmigo? —el alfa se acercó a louis y lo tomó por la cintura pero este se alejó.

—no.

—¿qué puedo hacer para que volvamos a ser esa hermosa familia que éramos?

—volver en el tiempo y no haberme engañado o maltratado.

jake gruñó.

—ya cambie.

—te creí muchas veces eso, jake. —louis dijo molesto. —justo ahora te estoy dando una oportunidad de que seas un buen padre para nate y alex, así que toma eso o te juro que no volverás a verlos.

—¿crees que ganas suficiente dinero con tu trabajo de maestro para mantener esta casa y a dos hijos? no seas ingenuo, louis. —el alfa gruñó.

como siempre tenía que hablar de dinero.

louis inhaló y exhaló intentando mantenerse tranquilo.

—solamente se un buen padre para ellos.

—también soy tu alfa.

—ex alfa. —interrumpió louis. —no quiero discutir más.

—louis...

alexander entró a la cocina.

—hola, mami. —el chico le dio un abrazo a su madre. —hola, papá. —el alfa le dio un abrazo a su hijo y le sonrió.

—¿listo para irnos al partido?

alexander asintió y nate entro a la cocina con su cara amargada.

—estoy listo. —su tono frío hizo a louis querer reír.

louis le dio una sonrisa dulce a su hijo pues sabía que él se estaba esforzando por mejorar la relación con su padre y además que quería que alexander creciera en un ambiente más sano.

—nos vemos luego, chicos. —louis les sonrió y les dio un beso a sus dos hijos.

—¿no hay beso para mi?

—no. —louis le cerró la puerta en la cara.

después de unos minutos vio su celular encontrando dos mensajes.

número desconocido:

hola :)

soy harry.

¿quieres ir a cenar y hablar de arte? ;)

🧺🧺🧺

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