Los habitantes de Fire Land marcharon al palacio mientras pedían la cabeza del traidor, pedían la cabeza del que se supone seria su líder en el futuro, y al no obtener lo que pedían, cambiaron su protesta de gritos a una protesta de violencia; ocultándose dentro de estos actos vandálicos un grupo de personas realizaron asesinatos, debilitaron las defensas del palacio y produjeron daños al muro y a la barrera que protegía el lugar. Solo fue cuestión de tiempo para que las personas entraran, solo fue cuestión de tiempo para que la verdadera guerra por el poder estallara.
Xian por fin hizo acto de presencia, viendo como la multitud se aglomeraba y gritaba exigiendo su cabeza, confundido y algo temeroso entro por una puerta secreta, dirigiéndose al salón principal, en su trayecto recibió muchos tipos de mirada de parte de los sirvientes y guardias. Cuando entro al salón las personas dentro dejaron de hablar, un silencio algo incómodo que fue roto por el impacto de una palma en la mejilla de Xian.
—¿P-papá? —podría esperarse un golpe de su madre pero no de su padre, quien había demostrado ser más pacífico que la Señora Dark.
—¡Tienes el descaro de aparecerte al fin! ¿Dónde anduviste todos estos días? ¿Te divertiste mientras nosotros moríamos de preocupación? ¡Eres una vergüenza para nosotros Xian! ¡No mereces ser un cultivador! ¡No mereces ser nuestro futuro líder! Ten por seguro que cuando esto acabe, revocare tu título de heredero y podrás irte a jugar libremente con el Joven Maestro Hao, y renunciar a tu núcleo oscuro por uno dorado.
—Papá...
—Tal vez lo que deba de hacer es entregarte a ellos, dejarlos que te condenen, que te cuelguen y decapiten, es lo que mereces por tu traición. Jamás pensé que harías esto Xian. El propósito era crear acuerdos de paz con ellos ¡No que dejaras de lado tu hogar para convertirte en uno de ellos! Creí tontamente que estabas preocupado por tu gente, que estabas sentando cabeza ¡Pero no! cuando se trata de ti toda esperanza es absurda. Mientras jugabas a la pareja feliz la guerra nos era declarada y la isla se sumía en caos, quizás tu vida sirva de ofrenda de paz, deberíamos entregarte, encerrarnos una vez más, tu vida por la de miles de inocentes.
La puerta se abrió, interrumpiendo los reclamos del patriarca de Fire Land, una pequeña pelinegra entraba, siendo ayudada por un cultivador, ya que por sí sola no podía permanecer de pie, su ropa estaba hecha jirones con manchas de sangre, su rostro sucio de lodo y sangre
—X-Xian... papá... mamá, ellos... Xian... ellos —Emei se soltó a llorar, y Xian cayo de rodillas con el pequeño cuerpo en sus brazos, haciéndose una idea pero sin querer creerlo, no podía ser cierto, debía ser una broma, una horrible pesadilla, tenía que verlo él mismo para confirmarlo, para confirmar que solo estaba teniendo un pensamiento equivocado, que el llanto de Emei y su apariencia era por otra razón, pero después de ir a la casa de la familia, de ver el escenario él mismo, deseo no haberlo hecho.
La pareja Sotus yacía en un charco de sangre, sus rostros desfigurados por arañazos, sus ojos abiertos revelando iris sin vida, su caja torácica abierta, sus corazones fueron colocados en medio de un corazón que se dibujó con su propia sangre, y sus intestinos regados por la sala como si de ornamentos se trataran. Xian no pudo evitar vomitar mientras lloraba.
—¿E-Emei-i vio esto? ¿Ella...? —le confirmaron que fue ella quien los encontró, pero para la perdición de su cordura le informaron que ella también fue atacada no solo a golpes, sino que intentaron abusarla, estando a punto de lograrlo.
Entonces la furia tomo lugar en él, sus ojos tomaron el color de la sangre regada en el suelo, Ikari fue invocada, se la llevó a los labios, entornando una melodía triste pero mortal.
Las personas cercanas estaban consternadas y asustadas, la pareja Sotus era querida por la zona, y se sabía de su relación con el heredero, por lo que empezaron a cuestionarse si este estaba realmente involucrado.
La ira, el enojo, la desesperación, el dolor, y en mayor medida el remordimiento, dominaban la mente de Xian. Aquella melodía sembró terror en quien la escucho, oscuras sombras se cernieron sobre el lugar, las personas empezaron a ser torturadas con alucinaciones que no se sentían como tal, sus gritos se escuchaban hasta el cielo, sus lamentos solo aumentaban la ira de Xian y el gozo de Ikari.
Una flecha fue interceptada por Liu, su objetivo era Xian, quien seguía tocando sin darle importancia a su alrededor, varios discípulos leales al Clan Dark se colocaron alrededor del pelinegro, evitando que alguna de estas flechas le diera, algunos cultivadores y personas normales le gritaban y abucheaban, deseándole la muerte, lanzándoles diversos objetos y al mismo tiempo procurando no entrar en los límites de la sombra siniestra que desprendía. Mientras que otros seguían con sus preguntas internas, si él era un traidor ¿Por qué la familia que él estimaba tanto había muerto? ¿Por qué se veía tan afectado por sus muertes? Aunque bien podía fingir todo, y que esto fuera una manera de deshacerse de ellos.
Al percatarse de los abucheos, Xian detuvo su melodía, miro con odio a su alrededor y les grito a todos, llamándolos malo agradecidos, les aseguro que esto era entre ellos, que no había nadie de fuera causando estragos, que él era inocente y juro vengarse y darle una muerte dolorosa al responsable.
Pensaba volver a tocar y torturarlos a todos hasta que el asesino de los Sotus se manifestara, pero entonces el sonido de la citara lo hipnotizo, calmando su ira y conduciéndolo de regreso al palacio.
Luego de aquello el pueblo comenzó a cálmense y a dividirse, un grupo empezó a atar los cabos sueltos, llegando a la conclusión de que fueron engañados, veían imposible que Xian tuviera que ver en los asesinatos, aunque no descartaban a los cultivadores divinos, y otro grupo que seguía viendo al heredero como responsable.
Que algunas personas empezaran a abrir los ojos causo molestia en alguien, quien decidió mover sus otras cartas.
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