Capítulo 17
Mortales
JiHoon está de frente a mí ofreciéndome un pañuelo, en sus ojos negros se nota que no sabe quién soy, no me reconoce. Acepto el pañuelo colocándolo en mi nariz, Jade muy preocupada toca mi hombro.
— ¿Necesitas que te llevemos al hospital?
—No, estaré bien.
— ¿Estás segura? —JiHoon se dirige a mí por primera vez— ¿Pasa seguido?
—No mucho—responde JungKook por mí. Me mira como si supiera lo que estoy pensando.
Jade va hacia su bolso en el suelo junto a las propinas, saca una botella de agua ofreciéndomela. Por cortesía la acepto bebiendo un poco, me está inquietando el hecho de tener esta reacción cada vez que recuerdo algo, JiHoon se coloca de pie y la chica nos presenta.
—MinJi, él es mi tutor Joon JiHoon, ella es Jang MinJi y su novio Jeon JungKook.
JungKook hace una pequeña reverencia. Después de tantos años estoy frente a mi padre y él no me reconoce, ¿Debo sentirme decepcionada o aliviada?, quiero preguntarle muchas cosas, quiero saber lo necesario de mi historia, sé que él es quien puede responder a mis dudas, pero también quisiera saber si realmente fue el vampiro que lastimó a SeokJin.
JiHoon mira a JungKook de pies a cabeza, fuerza una sonrisa y sé que lo hace porque es la misma mueca que suelo hacer.
—Gusto conocerlos.
—Jade me contó de usted, señor Joon—me coloco de pie cuando me siento capaz de hacerlo. JiHoon es alto, unos centímetros más que JungKook—Jade es una increíble cantante.
—Lo sé—asiente. La chica se sonroja— ¿La he visto en algún lugar antes, señorita Jang?, me resulta familiar.
"¿Y si sólo finge no conocerme?"
—Usted también me resulta familiar—miento, pero no del todo.
—Debo prepararme para otra canción, ¿Se quedarán? —pregunta Jade—Oh, ¿Jin no ha llegado?
— ¿Jin? —JiHoon voltea a verla.
—Kim SeokJin, el chico que he estado viendo—el rostro del hombre cambia. ¡Si reconoce a Jin! —Es muy lindo conmigo, quería que lo conocieras.
—Quizás se le presentó algún inconveniente—JungKook también lo ha notado.
—Creo que debo irme.
— ¿Qué? —Jade toma su brazo—Dijiste que te quedarías.
—Debo hacer unas cosas, te veo en casa.
—Pero...
—Tus amigos te acompañarán—es lo último que dice antes de alejarse. Jade debe prepararse para la siguiente canción, JungKook no duda en susurrar cuando ella se aleja.
— ¿Lo notaste?
—Reconoció a Jin, pero no me reconoce.
...
Cuando logro tener una noche sin sueños o pesadillas siento que realmente descanso, primero quería confirmar mis teorías y lo hice, confirmé que el JiHoon que creía es el mismo que torturó a SeokJin tiempo atrás, ahora resulta ser una buena figura paterna para Jade quien a mi parecer sigue ajena de lo que realmente ocurre. ¿Cómo le diré la verdad al chico si apenas escucha el nombre tiembla de miedo?, sé que tarde o temprano lo descubrirá, aun así no me siento lista, no quiero que Jin se aleje, no quiero que piense en mí como la hija del culpable de su transformación.
También está la pregunta principal, ¿Qué haré con JiHoon?, ¿Debo decirle que soy su hija?, ¿Aquella a la cual le asesinó su madre?, ambos problemas sólo traen migraña a mi cabeza, necesito un descanso.
—Buenos días—JungKook entra a la habitación acercándose a mi cama. Se recuesta a mi lado y apoyo mi mejilla en su pecho— ¿Cómo te sientes?
—Pediré las vacaciones en mi trabajo, mentiré un poco sobre mi salud.
— ¿Debo deducir que la sangre en tu nariz ya ha pasado anteriormente y no sólo en la sesión con Hye?
—HyeLin dijo que debería evitar estar bajo presión o estrés, tanta manipulación a mi mente no ha sido buena.
Acaricia mi espalda besando mi frente. JungKook me abraza y aprecio eso, lo necesito mucho.
—Esto es demasiado para ti.
—No sé qué hacer ni por dónde empezar—susurro— ¿Debo decirle a Jin la verdad o hablar con JiHoon sobre quien soy en realidad?
—Creo que debes hacer una cosa a la vez—levanto mi cabeza encontrándome con sus ojos oscuros—Al contrario de lo que piensas, no creo que Jin te odie, no has hecho nada y los errores de tu padre no deben caer sobre ti—acaricia mi mejilla—Sobre JiHoon... ¿Esperas que algo cambie entre ustedes?
—No será el padre del año, eso te lo puedo asegurar—dejo salir un suspiro cansado— ¿Por qué mi familia no pudo ser normal como la tuya?
—Tú misma lo dijiste, lo normal nunca va contigo.
...
He venido al hospital para visitar a HanNa, le había dicho que tenía en mente pedir unas vacaciones y ella misma se ofreció a conseguirme un falso permiso médico. La chica de cabello negro sonríe al verme, me acerco a su camilla notándola mucho mejor.
— ¿Cómo te sientes?
—Puedo caminar por mí misma sin ayuda.
— ¿Qué te han dicho de tu salud?
—Sólo necesito hidratarme, comer bien y descansar un poco más—me mira con atención—Conseguí tu permiso médico, una de mis compañeras me lo trajo—señala la mesa de noche a su lado— ¿Cuánto tiempo pedirás de vacaciones?
—No pienso tomar mucho.
—El permiso especifica que necesitas dos meses de descanso absoluto.
—Ya, ¿Dos meses? —tomo el permiso de una carpeta pálida—HanNa...
—De nada—sonríe. Niego con la cabeza guardando la carpeta en mi bolso, su sonrisa va disminuyendo y sé por qué. La veo tomar el control remoto encendiendo la televisión de su cuarto, acerco una silla tomando asiento en ella.
— ¿Nadie te ha preguntado por las cicatrices de tus muñecas?
—Y tampoco por la de mi hombro.
—Hye me contó lo que pasó esa noche—la miro—Creo que ambos se excedieron un poco...
— ¿También vas a darme un sermón?
—No, no pretendo hacerlo.
—Tú también has hecho lo mismo con JungKook—acusa volteando a verme—Jimin sólo...tomó sangre de más, me pondré bien y todo seguirá normal, por Dios, todos exageran.
Me preocupa que lo tome despreocupadamente.
— ¿Sabes el dolor que le provocaría a Jimin si hubiera bebido hasta la última gota?, todos lamentaríamos tu muerte, pero él sería el más afectado y lo harías sentir como un verdadero monstruo...
—Jimin no es un monstruo.
—Y tú no eres inmortal—contraataco—El cuerpo tiene su límite, HanNa. Te volviste adicta a la sensación que provoca ser mordida y apuesto que extrañas a Jimin más por esto que por tus sentimientos.
— ¿Te parece que no amo a Jimin? —en su voz se siente el dolor. Creo que me he pasado un poco— ¿Te parece que no me preocupa saber dónde está? —sus ojos contienen las lágrimas no por mucho—No quería que esto pasara, tienes razón, quizás no quiera verme porque lo hice sentir como un monstruo—solloza. La abrazo sintiéndome terrible de haberla hecho llorar—Lo siento.
—No, yo lo siento—doy palmaditas a su espalda—No debí decir eso, es sólo que...debes tomar este asunto seriamente, no somos inmortales, ser la novia de un vampiro no es sencillo, que ellos sean invencibles y fuertes no significa que somos iguales.
— ¿Y si Jimin no regresa?
—Volverá, ya verás que sí—vuelve a abrazarme.
O eso espero.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro